DILEXI TE, FRANCISCO

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Me ocupé, en el artículo anterior, de la forma de la exhortación apostólica Dilexi te, por tratarse del primer documento oficial de nuestro nuevo papa. Y atendí básicamente a las citas bíblicas, empezando por el propio título, sacado del Apocalipsis, en las que se hace evidente el esfuerzo por hacerle decir a la Biblia todo lo que conviene a la intención del documento. Y no, no causa buena impresión ver cómo se fuerza el sentido de los textos bíblicos. Así no hay manera de estar seguro de que uno entiende algo tan sencillo como el Evangelio. Y que éste haya acabado siendo el nuevo estilo exegético del Vaticano, no nos inspira la menor confianza. Bien, eso en cuanto a la forma, de la que me ocupé en el artículo anterior.
Pero en cuanto al contenido del documento, al leerlo y releerlo, he tenido la impresión desagradable de que estaba ante una justificación intencionalmente discreta y moderada de la extinta Teología de la Liberación en la que estuvo sumergido el papa Francisco; en menor medida el actual papa, y en general todo el clero de Hispanoamérica, además de la Compañía de Jesús llevando la batuta. Con lo que no se me quita de la cabeza lo de que en realidad, el Dilexi te está dirigido al papa anterior, a Francisco.
¿Por qué he tenido esa impresión? Pues sencillamente porque ese discurso asistencial de la asistencia a los pobres, está ya totalmente quemado; y no es, evidentemente, el frente en el que ha de luchar la Iglesia para difundir el Evangelio. El mero servicio asistencial de la Iglesia desde su fundación, tuvo su plena razón de ser cuando no había nadie más que atendiese a las necesidades de los pobres. En ese contexto, la mera asistencia material tenía una función que resultaba de por sí sublime, aunque estuviese desprovista del alma de la caridad con que tenía que ser vivificada.
Incluso en tiempos más modernos, el estilo “asistencial” de la Iglesia, aún tenía algún sentido cuando era la palanca para la evangelización. Pero desde que la Iglesia católica se enfrentó a la competencia de los protestantes, los anglicanos y demás; y sobre todo desde que se enfrentó la Iglesia con la competencia del Estado Asistencial, conocido con el elegante nombre de Estado del Bienestar, la función meramente asistencial de la Iglesia, sobre todo despojada de su sentido de “caridad” entre hermanos, emanada del Amor de Dios y del Amor a Dios, perdió totalmente su razón de ser. A mayor razón, a partir de la postura tajante del papa Francisco, de que los miembros de la Iglesia tenían que huir del proselitismo, ¡es decir de la evangelización!, negándoles a los pobres el mayor don que puede ofrecerles la Iglesia, que es el Evangelio con todos sus dones. Y claro, es pertinente recordar ese detalle, teniendo en cuenta que supuestamente es el papa Francisco el autor del documento; y lo que ha hecho en él su sucesor León XIV ha sido retocarlo y ratificarlo estampándole su firma. Suena a clara opción por Francisco.
 
Y creo que este documento llega muy fuera de tiempo, cuando la asistencia a los pobres es administrada por los Estados, con cargo a los impuestos, y por Oenegés nada fiables, como las de los filántropos Soros, Bill Gates, Rockefeller, y algunos más de parecidas intenciones. Mi visión personal es que la Iglesia no pinta nada en esa competición (nada transparente, por decir lo menos) entre esos actores de la solidaridad. Sólo tiene sentido la concurrencia de la Iglesia si su distintivo es la caridad. Una caridad que debe atender tanto a las necesidades materiales como a las espirituales: entre ellas, ofrecerles Dios a los pobres. Nuestro Dios Redentor hecho hombre. Si no es así, es una pérdida de tiempo que sobre todo los sacerdotes se dediquen a esa función material (mucho mejor cubierta por el Estado), cuando es tanta, tantísima la labor espiritual que tienen a su cargo. En la Iglesia primitiva, la atención a los pobres se puso a cargo del diaconado. ¿Lo hemos olvidado ya? Por eso el documento suena gravemente desenfocado e inapropiado para el momento actual de la Iglesia. No son los pobres materiales lo que le falta hoy.
Pero no va por ahí la cosa. Resulta que una institución originalmente caritativa, tan de marca católica como Cáritas, se está dedicando a la mera asistencia; está ejerciendo de intermediaria de las aportaciones de la Unión Europea; tanto, que los ayuntamientos se han propuesto expulsar de ella a la Iglesia. Es que el grueso de lo que distribuye Cáritas tiene esa procedencia. Y para no molestar a los receptores de la ayuda, minoritariamente católicos, la mayoría de locales de Cáritas, por no ofender a los no católicos, han sacado las cruces y cualquier otro símbolo religioso. Y por supuesto, nada de evangelización ni proselitismo, por no contrariar la voluntad del papa que escribió la mayor parte de esta exhortación apostólica. La pregunta obvia a partir de esa realidad, es: ¿qué pinta ahí la Iglesia católica, si ya se ocupan de esa actividad laicos y laicistas? ¿Qué hacen ahí los curas, siendo ya tan pocos que no alcanzan a cubrir su función estrictamente religiosa?
Claro que la Iglesia fue la iniciadora de la asistencia social, y claro que mantuvo las más efectivas instituciones con personal católico, especialmente monjas. Pero también fue la iniciadora de los hospitales; y sin embargo, no se empeña en liderarlos (le quedan los de San Juan de Dios, cada vez menos católicos). También fue la Iglesia, la iniciadora de los Montes de Piedad, en los que tuvo un papel importantísimo hasta hace menos de un siglo. Pero nadie reivindicará el lugar de la Iglesia en esa área. Y fue también un gran puntal de la enseñanza cuando las instituciones públicas eran incapaces de atender este servicio. Y evangelizaron intensamente desde sus colegios. Religiosos y religiosas eran todos los maestros y maestras que atendían esos colegios. Pero hoy sería absurdo reivindicar el papel de la Iglesia en la enseñanza, que ha quedado como mero negocio de las órdenes religiosas que se dedicaron a él, sin el menor gesto evangelizador, ni intención ni capacidad evangelizadora. Y, por cierto, todas ellas en vía de extinción. ¿Qué sentido tendría en esas condiciones reivindicar la enseñanza para la Iglesia?
 
Por eso, reivindicar hoy el papel de la Iglesia como distribuidora de ayuda a los pobres, sin insistir en la condición sine qua non de la caridad cristiana, caridad evangelizadora, para dedicarse a esos quehaceres, es situarse totalmente fuera de la realidad. Pues como sería reivindicar su ya extinguido papel en la enseñanza. Puro anacronismo.
Y es a eso a lo que me suena la exhortación “Dilexi te” de los papas Francisco y León, a anacronismo. Con el agravante de que ese texto suena al formato, ya caduco por lo que respecta a la Iglesia, de justicia social como única forma de caridad de la Iglesia para con los pobres. No socorrer a los pobres en sus necesidades, sino ayudarles a darle el vuelco al sistema social. Éste fue el caballo de batalla de la Teología de la Liberación. Liderada por los jesuitas, ¡claro! Con lo que ese empeño comportó de enfrentamiento con las instituciones políticas; un enfrentamiento que llegó a las armas. Sí, imponer con las armas (empuñadas en algunos casos por fervorosísimos clérigos) la caridad cristiana de la “opción preferencial por los pobres”. ¡Menudo engendro!
Al margen del contenido doctrinal del documento, es la más clara proclamación urbi et orbi de León XIV, de que hoy por hoy (del mañana dispondrá Dios) León XIV es una clara continuidad de Francisco (Dilexi te, te he elegido, Francisco), que no se distinguió precisamente por trabajar en pro de la unidad en el seno de la Iglesia y que se pronunció contra la misión, que proclama el papa León como uno de los ejes de su pontificado. Esto, al menos, se trasluce de la brillante operación del nuevo papa, de suscribir un documento del anterior pontífice con una carga doctrinal que, con esa fuerte marca de continuidad, dificulta la unidad de la Iglesia. En cualquier caso, hemos de reconocer que él sabe mejor que nosotros cómo está la Iglesia; y quizá sea ésa, a pesar de todo, y de momento, la única posibilidad a su alcance. No la mejor, sino la única. Dios sabrá.
Es muy aleccionador escuchar de nuevo, después de la lectura atenta de Dilexi te, las primeras palabras pronunciadas por León XIV tras el Habemus papam. Continuidad y coherencia de León XIV consigo mismo y con Francisco. Así es difícil mantener la paz (primeras palabras del nuevo papa), de la que era tan poco amante su predecesor. 
Virtelius Temerarius    

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22 comentarios

  1. Cierto que en el primer Mundo a los pobres ya los cuida el Estado, que por cierto el mismo Estado está muy interesado en cuidarlos invirtiendo dinero para que luego estos pobres en las elecciones voten al partido del Estado, queda claro. Hago propaganda de El Corrent Social Cristiá del que soy socio pagador, aquí https://elcorrent.org/

    Pero tampoco se meten en Ciencia y en Creacionismo de los 6 dias y la Tierra Jóven, han dejado estos temas para los señores científicos oficiales, es lo que les critico. Cuando la Iglesia ya no puede dedicarse a la caridad para los pobres debe buscar el trabajo en otros ámbitos de lo contrario la institución eclesial quedará reducida a una munión de clérigos que solo hablan de Aborto y Eutanasia, como si no existiera ningún otro Diablo aún mayor que engaña a los intelectuales en otros ámbitos. Antes eran los pobres ahora en el tercer milenio el objetivo deben ser los intelectuales, que estos señores listos al fin y al cabo son los que suben a las tribunas y hacen discursos hipnotizantes sobre ideologías desviadas.

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  2. ¿La Caridad es extemporánea? Por el amor de Dios!

    Recomiendo a los indecisos o confusos que visiten cualquier Cottolengo para comprobarlo. Venid a verlo (Jn 1,39).

    (https://cottolengopalegre.org/)




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  3. En mi parroquia hay un pobre que pide ayuda para un tratamiento médico y su consiguiente medicación, la caridad recibida en realidad se la gasta en el súper en vino Don Simón

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  4. Un destrozo semejante, que duró doce años, no se puede arreglar en meses.

    Paciencia y confianza con el Buen Dios 🙏.

    Por cierto, el Cardenal Burke, hombre de Dios auténtico, ha podido oficiar la Santa Misa inmemorial en San Pedro del Vaticano.

    Vamos bien ❤️‍🩹

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  5. Contexto de León XIV (1)27 de octubre de 2025 a las 4:04

    Está muy bien descrito. El problema de Dilexi te es multidimensional, a mi parecer personal:

    1. Procede de Francisco, el peor papa de la historia. Dos han sido las encíclicas escritas a 4 manos con influencia de Francisco: Lumen Fidei (2013, Benedicto XVI-Francisco) y ésta Dilexi te (2025, León XIV-Francisco): no han dado ningún buen resultado, lo mejor es que cada Papa escriba lo suyo, es ficción continuista inútil y perjudicial.

    2. Se olvida de los nuevos pobres: niños no nacidos muertos en aborto, eutanasia de ancianos y enfermos, gestación subrogada, reproducción asistida, obstáculos para la educación de los hijos por los padres. Eso no habría pasado con San Juan Pablo II y Benedicto XVI: Evangelium vitae debía de haberse mencionado así como los nuevos pobres, los niños que se les quita la vida, fundamento de todos los derechos humanos.

    3. Se olvida de los pobres espirituales, los humildes: (Mateo 5:3): "Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos"

    4. Se centra sólo en los pobres económicos, y además, centrándolo sospechosamente en la marxista teología de la liberación

    5. Es totalmente obsoleta y arcaica en Europa, que tiene el mejor estado del Bienestar del mundo, y desconoce que la Iglesia ha eliminado todo sus aparato de justicia social, quedándo sólo Caritas, religiosamente descafeinada, que practicamente sólo maneja dinero.

    Como dice muy bien, observo que la Iglesia, desde 1977 con la transición, se ha desprendido totalmente de todo el aparato social que tenía: escuelas, colegios, reformatorios, orfanatos, hospitales, casas de acogida, comedores sociales, centros de formación, roperos, albergues, centros de rehabilitación...

    Hasta los mismos religiosos se sacan de encima conventos y monasterios. Y los obispos pierden sacerdotes, fieles y parroquias, así como seminarios. Realmente, a la Iglesia Jeráquica parece que le molesta la misma institución (miembros y edificios), como si quisiera vivir ya de rentas de los bienes vendidos y alquilados.

    ...

    Calificaciones teológicas aplicables a documentos defectuosos

    La tradición escolástica, desarrollada por teólogos como Melchor Cano, Francisco Suárez, Charles-René Billuart, Johann Baptist Franzelin y Réginald Garrigou-Lagrange, ofrece una escala de calificaciones teológicas para evaluar proposiciones doctrinales.

    Aplicadas a un documento pontificio defectuoso, como Dilexi te, leo y consulto las categorías relevantes son diversas, implicaciones específicas para el asentimiento y la recepción.

    3.1 Doctrina Errónea

    Cuando contradice una conclusión teológica cierta, aunque no definida como dogma, si el texto implica una negación de una verdad próxima a la fe (proxima fidei), como ciertos principios sobre la gracia, la moral o la eclesiología. Aunque no equivale a herejía, una doctrina errónea requiere cautela en su recepción y puede justificar reservas teológicas legítimas. Amoris laetitia caía entre estas dos categorías: herejía y doctrina errónea (legitima la herética moral de situación).

    3.2 Doctrina Temeraria

    Se aparta sin causa grave de la enseñanza común y segura de la Iglesia, de los Padres o del consenso teológico universal, o sea, si introduce innovaciones doctrinales sin una justificación teológica sólida o si contradice la communis sententia de los teólogos sin fundamentos claros. Esta calificación implica que el documento se desvía de la Tradición sin un motivo proporcionado, lo que afecta su autoridad moral.

    3.3 Doctrina ofensiva a los oídos piadosos

    Una doctrina se considera ofensiva a los oídos piadosos (pia aurium offensiva) cuando utiliza expresiones o conceptos inadecuados que pueden inducir a error o causar escándalo entre los fieles.

    En un documento pontificio, esto ocurre si el lenguaje es ambiguo, provocador o poco claro, generando confusión incluso sin intención explícita.

    Esta calificación subraya la importancia de la precisión en la comunicación magisterial para evitar malentendidos. Eso se da en algunos sacerdotes progresistas

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  6. 3.4 Doctrina ambigua

    Expone la doctrina con tal falta de precisión que permite interpretaciones opuestas, incluidas lecturas heterodoxas, si sus formulaciones carecen de claridad, dejando espacio para interpretaciones que se aparten de la fe ortodoxa. Esta ambigüedad no implica necesariamente error, pero exige una recepción crítica para clarificar su intención.

    3.5 Doctrina incompleta o insuficiente

    Omite elementos esenciales de la fe, dando una verdad parcial que desequilibra la enseñanza, si el texto pasa por alto aspectos cruciales de la doctrina, generando un vacío teológico que puede distorsionar su aplicación pastoral o doctrinal. Estas omisiones requieren complementación por parte de la recepción eclesial. Esto parece ser Dilexi te: no reconoce a los pobres en espíritu y a los nuevos pobres.

    3.6 Doctrina imprudente

    Una proposición imprudente formula juicios pastorales o doctrinales desconectados de la realidad o con efectos negativos previsibles. Un documento pontificio puede considerarse imprudente si se basa en diagnósticos sociológicos, morales o culturales desfasados, o si sus orientaciones prácticas no anticipan consecuencias adversas. Esta calificación destaca la necesidad de un juicio prudencial en la aplicación del magisterio. También se ve en Dilexi te: desconoce la realidad de Europa.


    Por lo pronto, 3 graves defectos tiene Dilexi te:


    1. Doctrina incompleta, imperfecta e insuficiente: se olvida de los pobres en espíritu y los nuevos pobres

    2. Doctrina imprudente: desconoce la realidad de Europa.

    3. Doctrina temeraria: sospechosamente parece rehabilitar a la marxista teología de la liberación; sigue un texto redactado por el peor papa de la historia, Francisco.

    ......

    Prevost o León XIV se le nota muy connotado por su biografía, s.e.u.o:

    I. Infancia y Juventud en Chicago (1955-1978)

    1.1 Chicago 1960-1970

    Robert Francis Prevost nació en una familia católica de clase media de ascendencia francesa, italiana y española. Su padre, Louis Prevost, superintendente escolar, y su madre, Mildred, bibliotecaria parroquial, criaron a Robert y sus 3 hermanos en el barrio de Hyde Park, Chicago, cerca de la Universidad de Chicago.

    En 1962, con 7 años, Robert comenzó a percibir la realidad de una ciudad y un país. Chicago era un microcosmos de las tensiones en EEUU: segregación racial, pobreza urbana y el impacto de la Guerra Fría.

    La Crisis de los Misiles de Cuba (1962) marcó su infancia con el temor nuclear, mientras el asesinato de John F. Kennedy (1963), seguido por los de Martin Luther King Jr. y Robert Kennedy (1968), profundizaron su conciencia de fragilidad social.

    Chicago fue escenario de disturbios raciales en 1966 y de la campaña de King por la vivienda justa, el "problema de los negros": pobreza (15% de negros bajo la línea de pobreza), analfabetismo (20% en South Side), inseguridad (800 homicidios anuales en los 70) y, tras Roe v. Wade (1973), el aborto (tasas del 30% en comunidades pobres).

    El movimiento chicano en barrios como Pilsen, demandando derechos para inmigrantes mexicanos, resonó en su parroquia, St. Thomas the Apostle, donde la "túnica inconsútil" se predicaba como ideal de unidad en una sociedad dividida.

    La Guerra de Vietnam (1965-1973) polarizó a su generación. Prevost participó en vigilias católicas por la paz, influenciado por el arzobispo John Cody, quien equilibraba la doctrina social con la ortodoxia.

    1.2 Formación y vocación

    Educado en escuelas católicas arquidiocesanas, Prevost destacó por su disciplina y devoción. En 1973, ingresó a la Universidad de Villanova, institución agustina progresista, donde se graduó en matemáticas en 1977.

    El Concilio Vaticano II (1962-1965), durante su adolescencia, fue la moda de la Iglesia como "pueblo de Dios", abierta al mundo.

    En 1977, ingresó al noviciado agustino en St. Louis, profesando sus primeros votos en 1978. Esta etapa inicial lo preparó para una vida de servicio, marcada por las heridas sociales de Chicago: pobreza, racismo e inseguridad.

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  7. II. Contexto episcopal sudamericano

    Aquí podemos deducir que León XIV es más bien izquierdista por su biografía, igual que el peronista de Francisco. También se observan las limitaciones de los misioneros americanos y el contexto ambiental: débil formación intelectual propia de la generación Vaticano II, mucha acción social, populismos americanos, sociología sudamericana, vivencia en el progresismo modernismo de la teología de la liberación.

    Contrastan los dos papas americanos (peronista y teología de la liberación peruana) con sus experiencias y conocimientos totalmente diferentes y más débiles que los dos grandes, San Juan Pablo II y Benedicto XVI, que conocieron a los intelectuales europeos, luchadores contra el nazismo y el comunismo marxista de la URSS, y poseedores de un gran conocimiento intelectual teológico, filosófico y sociológico.

    ...

    A. De Medellín a Puebla

    1.1 Medellín (1968): La semilla de la opción por los pobres

    La II Conferencia General del Episcopado Latinoamericano en Medellín (1968) marcó un punto de inflexión para la Iglesia en Hispanomérica, al aplicar el Concilio Vaticano II (1962-1965) a un continente marcado por la desigualdad y la opresión política.

    Medellín reconoció la pobreza como una "injusticia estructural" y promovió las Comunidades Eclesiales de Base (CEB), que empoderaron a los laicos en zonas marginales.

    Este documento influyó profundamente en la Teología de la Liberación, articulada por el peruano Gustavo Gutiérrez en 1971, que veía la liberación integral (espiritual y material) como mandato evangélico. Gustavo Gutiérrez Merino (Lima, 1928-2024) fue sacerdote dominico y teólogo peruano, considerado el padre de la Teología de la Liberación (TdL). Su obra Teología de la Liberación (1971) creó la TdL e influyó profundamente en las Conferencias de Medellín (1968) y Puebla (1979).

    Cuando Prevost llegó a Perú en 1985, Medellín seguía siendo la brújula pastoral, especialmente en regiones como Chulucanas, donde las CEB eran el núcleo de la evangelización.

    ...

    1.2 Puebla (1979): Consolidación de la Opción Preferencial por los Pobres

    La III Conferencia de Puebla, inaugurada por Juan Pablo II en 1979, reafirmó y matizó Medellín. Puebla enfatizó la "opción preferencial por los pobres" como eje pastoral, pero advirtió contra interpretaciones marxistas de la Teología de la Liberación, promoviendo una evangelización que integrara fe y justicia sin ideologías.

    El documento final de Puebla (n. 1134-1165) llamó a la Iglesia a ser "voz de los sin voz", priorizando a los indígenas, campesinos y marginados urbanos. En Perú, donde el 60% de la población vivía en pobreza en 1985, Puebla inspiró iniciativas como las escuelas misioneras y los comedores populares, que Prevost adoptaría en Chulucanas.

    La conferencia también reforzó la unidad eclesial —un eco de la "túnica inconsútil"— frente a las divisiones entre progresistas y conservadores.

    ...

    1.3 Otros eventos eclesiales: hacia Aparecida (2007)

    El contexto episcopal sudamericano evolucionó con eventos posteriores. La IV Conferencia de Santo Domingo (1992), bajo el lema "Nueva Evangelización", celebró los 500 años de la llegada del cristianismo a América, pero enfrentó críticas por minimizar las heridas coloniales.

    Prevost, entonces en Trujillo, integró sus directrices al promover catequesis accesibles para indígenas. La V Conferencia de Aparecida (2007), presidida por el cardenal Jorge Bergoglio (futuro Francisco), marcó un hito al proponer una "misión continental" y una Iglesia en "salida misionera".

    Aparecida influyó en Prevost como obispo de Chiclayo (2001-2014), donde priorizó la pastoral juvenil y la inclusión de comunidades andinas, alineándose con el énfasis en la sinodalidad y la periferia.

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  8. B. Misión en Chulucanas: enfrentando la pobreza y el analfabetismo (1985-1988)

    2.1 Contexto social y eclesial en Chulucanas

    Según leo, Prevost llegó a Chulucanas, diócesis rural en Piura, en 1985, a los 30 años, como misionero agustino. Perú enfrentaba una crisis económica (hiperinflación del 500% en 1988) y social: el 60% de la población vivía bajo la línea de pobreza, con ingresos medios de 50 dólares mensuales en zonas rurales, y el analfabetismo alcanzaba el 40% entre indígenas y campesinos.

    Chulucanas, con comunidades quechuas y aymaras, sufría desnutrición infantil (30%) y falta de acceso a salud y educación. La diócesis, influida por Puebla, estaba organizada en torno a las CEB, que combinaban oración, catequesis y acción social y pastoral de conjunto rural.

    Prevost fundó escuelas parroquiales y comedores comunitarios, alfabetizando a 300 niños en tres años. Su enfoque reflejaba Puebla: evangelizar desde la realidad de los pobres, promoviendo la dignidad humana.

    Inspirado por la "túnica inconsútil", trabajó para unir comunidades divididas por castas sociales y conflictos agrarios, promoviendo cooperativas inspiradas en la doctrina social de la Iglesia.

    ...

    2.2 Teología de la Liberación: equilibrio y prudencia

    La Teología de la Liberación era omnipresente en Chulucanas, donde sacerdotes como Gustavo Gutiérrez (residente en Lima) inspiraban a las CEB.

    Prevost apoyó el núcleo evangélico de esta teología —la opción por los pobres—, pero, formado en Roma, se alineó con las críticas vaticanas (Libertatis Nuntius, 1984) a sus tendencias marxistas.

    En sermones, enfatizaba: "La liberación comienza en Cristo, no en ideologías". Su pastoral integraba la caridad con la ortodoxia, evitando polarizaciones entre progresistas (pro-liberación) y conservadores (alineados con el Vaticano).

    ...


    C. Servicio en Trujillo:

    La Amenaza de Sendero Luminoso (1988-2001)

    3.1 Sendero Luminoso

    En 1988, Prevost fue trasladado a Trujillo, un centro urbano y eclesial en el norte peruano. Allí enfrentó el auge de Sendero Luminoso (1980-1992), un grupo maoísta que desató un conflicto con 70.000 muertos.

    Trujillo no era inmune: bombas en iglesias, secuestros de religiosos y masacres en zonas cercanas como Ayacucho marcaron la década. La inseguridad —toques de queda, desplazados internos— recordaba a Prevost las pandillas de Chicago, pero con una violencia más letal.

    Como superior provincial de los Agustinos en Perú (1999-2001), medió entre comunidades indígenas y autoridades, defendiendo la no violencia evangélica. En un informe al Vaticano (2000), escribió: "La pobreza engendra violencia; solo la esperanza restaura la paz".

    ...

    3.2 Labor pastoral en un contexto de crisis

    En Trujillo, Prevost amplió su trabajo educativo, alfabetizando a 500 adultos y creando centros de formación técnica para jóvenes. Inspirado por Puebla y Santo Domingo, promovió la "nueva evangelización" a través de catequesis accesibles y liturgias inculturadas, usando quechua en zonas rurales.

    Su experiencia con la inseguridad —que incluía proteger iglesias de atentados— reforzó su visión de la Iglesia como refugio, un eco de la "túnica inconsútil" que une a los fieles en tiempos de crisis.

    ...

    D. Episcopado en Chiclayo: liderazgo y desafíos (2001-2014)

    4.1 Nombramiento y contexto post-Fujimori

    En 2001, Prevost fue nombrado obispo de Chiclayo por Juan Pablo II. Chiclayo, una diócesis costera, enfrentaba las secuelas del régimen de Alberto Fujimori (1990-2000), marcado por corrupción y desigualdad. La pobreza urbana (40%) y el analfabetismo (25% en zonas periurbanas) persistían.

    Influido por Aparecida (2007), Prevost impulsó una pastoral juvenil, creando programas de formación para 2.000 jóvenes y promoviendo la inclusión de comunidades andinas en la vida eclesial.

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  9. 4.2 Respuesta a escándalos y consolidación pastoral

    En 2012, Prevost enfrentó un escándalo de abusos sexuales, suspendiendo a un sacerdote acusado y remitiendo el caso al Vaticano. Su episcopado se centró en la familia, la educación y la lucha contra la pobreza, en línea con la "misión continental" de Aparecida.

    Criticó la corrupción sistémica peruana, abogando por una "Iglesia en salida" que fuera "hospital de campaña" para los marginados.

    ...


    4.3 Conexión con el contexto episcopal sudamericano

    El episcopado de Prevost en Chiclayo reflejó las prioridades de Puebla y Aparecida: evangelización inculturada, compromiso con los pobres y sinodalidad. Participó en asambleas de la CELAM, donde defendió una pastoral equilibrada, alejada de los extremos de la Teología de la Liberación y del conservadurismo rígido. Su experiencia en Perú consolidó su visión de la "túnica inconsútil" como una Iglesia que une tradición y periferia.

    .....


    III. Roma y el Papado: (2014-2025)

    Servicio en el Vaticano

    En 2014, Prevost retornó a Roma como consultor de la Congregación para los Obispos. En 2023, Francisco lo nombró prefecto del Dicasterio para los Obispos, donde supervisó nombramientos episcopales, priorizando candidatos sinodales y vetando a algunos ultraconservadores en EE.UU. Creado cardenal en 2024, participó en el Sínodo sobre la Sinodalidad (2023-2024), defendiendo la inclusión de laicos y mujeres en la gobernanza eclesial, aunque con reservas sobre cambios doctrinales.

    Sería un francisquista amigo de Francisco, nombrado en la curia francisquista como jefe del dicasterio de los obispos, para nombrar obispos francisquista que eligieran sacerdotes francisquistas y formar así a un pueblo al estilo francisquista, todos obedientes a Francisco.

    Por de pronto, peronalmente se observa en León XIV una falta de personalidad, pusilanimidad y carencia de parresía y martirio, y una pobre formación intelectual, que lo acerca a Francisco y aleja de los dos "Grandes", San Juan Pablo II y Benedicto XIV. Parece muy constreñido y muy influenciado y marcado por el clan Francisco (que salió electo por la Mafia de San Galo), se le observa diletante, y lo peor, los 10 años en Roma no le han servido para entender el gravísimo problema de Europa, es más, lo ignora todo sobre ella, y Dilexi te lo demuestra: es inservible del todo para Europa, desconoce el drama diocesano y religioso en Europa.

    Todavía no ha hecho "los deberes":

    - Cesar a toda la cúpula francissquista de la Curia, ya han tenido 12 años de mando, a descansar en casita; todavía sigue incomprensiblemente Tucho de los besos y amores.

    - No ha derogado muchas normas de Francisco: Amoris laetitia (y rescripto de 5 de junio del 2017), Fiducia supplicans, Traditionis custodes, Abu Dabi, Laudato si numeral 207 sobre la abortista Carta de la Tierra, Querida Amazonía numerales 81-87 sobre la pachamamización litúrgica, el lavatorio de pies universal de Jueves Santo, nombramientos en institutos de gente inadecuada...

    - Tiene el Vaticano en ruina y quiebra económica

    - Debe de cesar e intervenir al 90% de los gobiernos de las órdenes y congregaciones religiosas que están en decadencia hacia la extinción

    - Tiene en Europa más del 50% de las 1.000 diócesis en decadencia hacia la extinción

    - O consigue en el 2026 repuntar el número de postulantes religiosos y seminaristas a sacerdocio para que sean ordenados en 2032, o su pontificado será el colapso total de la Iglesia

    - Debe de disciplinar a la Iglesia francisquista (Amoris laetitia, Fiducia supplicans), a la herética Iglesia sinodal alemana, y a la separada y controlada Iglesia Patriótica China.

    - Debe de luchar contra la mentira de que la unidad de la Iglesia está por encima de la Verdad, debe de empezar a disciplinar a Alemania y China, aunque implique la expulsión de muchísimos. La unidad sólo es en la Verdad, no en la actual mentira de estar unidos con diferentes fes y con falsos católicos heterodoxos.

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  10. Sr. Virtelius, muy poco Temerarius. Me avergüenza leer lo que su "ideología" le impide ver en "Dilexi te". En su corazón abunda mucho más el odio que la misericordia.
    Señor, !perdónale porque no sabe lo que dice!

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    1. Otra vez el pesado de cada dia, tachando de odio cualquier critica. ¿Tiene algun trauma infantil ?

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  11. La situación que describe de los religiosos de la enseñanza y sociosanitarios es exacta. A día de hoy son empresarios. Unos pocos gestionan directamente y la mayoría a través de fundaciones y sociedades mercantiles. Los negocios son prósperos y los defienden a través de las patronales y los lobbys. Una singularidad admirable son las Hermanas del Cottolengo y desearía que alguna otra congregación que desconozco sea asimilable.

    Si los religiosos de vida activa no sirven, se sirven. Y el clero diocesano operante se ha reconvertido como pluriempleados dispensadores de sacramentos, el apostolado tal como lo habíamos conocido ya no existe. ¿Cómo reconocer el designio "por sus frutos los conoceréis" (Mt 7:16)?

    Virtelius, un día tendría que dedicar un análisis a la vida contemplativa, hoy.






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    1. Anónimo 1:23. No tengo ningún trauma infantil. Si no ve el odio en el escrito del Temerario, póngase unas gafas bien graduadas.

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    2. 9.37 Hay traumas críticos, enquistado. Mire como los que montaron el golpe del 2017 están ahora silenciosos en su decepción pero...a la espera que la tormenta de desilusiones escampe y monten un sidral de nuevo. Cosas de traumas y llevarse mal consigo mismo

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  12. Tiempos recios estos para pa barca de Pedro. Ahi tenemos el estilo de una de cal, otra de arena. Se permite en San Pedro un aquelarre Tutti-colori y, este sábado, el cardenal Burke oficia una solemne misa en latín. Se profana el altar de San Pedro 3 veces en los últimos dos años y ahi sigue el card. Gambetti. Pareciera que los alfiler que dispuso Francisco están bien asentados y a León XIV sólo le tocará gestionar el legado. ¿Papa de transición?

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  13. Sr Virtelius..¿Podría comentar la visita del "supremo gobernador " de la Iglesia Anglicana, Carlos III" al Vaticano? Es un evento histórico que no se daba desde Enrique VIII. Sentados en sus sendos tronos, Carlos y León daban una imagen inquietante, apocalíptica, aquello del falso profeta y el Anticristo pero..claro...esto deben ser desbarres de mi mente.

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  14. Si no volvemos a Trento y sus anatemas, no iremos a ningún lado.

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    1. Mire para adelante y no para atras.
      En que mundo y sociedad vive Ud.

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    2. No se puede construir nada si se desprecian los fundamentos. La Iglesia, por definicion no se dedica a inventar nada, sino a conservar y transmitir el legado de Cristo y la Tradicion.

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  15. Hacen falta Silveris Garrell! Nadie habla de ciencia, sólo él. Como resultado de que la fe ha naufragado, quieren suplir la falta de fe católica con el altruismo. Pero el hombre es un ser racional y necesita razones para creer. Nadie se apunta a una Iglesia católica que solo es caritativa. Se apuntan por lo que cree o no cree y lo demuestra. Hasta donde es posible. Por ejemplo, la Tierra es jovencísima, eso también lo dicen los protestantes y lo demuestran. Es un tema apasionante que lleva otra vez a creer en Dios Creador.

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  16. He leído estupefacto este pamfleto. No hay discusión teológica alguna, no hay substancia alguna en todo lo que se profiere y lanza. De tanto en tanto os leo para ver como vive la fe esta parte de la Iglesia que sois y me espanta que con los años hayáis perdido tanta soltura y lucidez, al menos, a la hora de exponer vuestra visión. Este artículo no tiene nada de teológico, es una falta de respeto a la tradición social de la Iglesia, a la hermenéutica, al magisterio y, obviamente, a la fidelidad al Santo Padre y los ministros de nuestra Iglesia. Supongo que no tenéis relevo generacional y os paraliza el resentimiendo. Os sigo acogiendo y rezando por vuestras almas, como hermanos en la fe que somos.
    Un saludo cordial,
    Josep M.

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