En uno de mis últimos escritos hacía referencia a la beatificación del Sr. Antoni Tort, que escondió en su casa al obispo Irurita, que fue arrestado con él, y que compartieron estancia en la checa de San Elías y finalmente martirio en el cementerio de Montcada. Como ya me imaginaba, después de esta noticia iba a salir alguien inmediatamente a volver a poner en duda su martirio, y no me equivoqué, la semana pasada aparecía en La Vanguardia un escrito del periodista Lluís Permanyer, titulado "La misteriosa muerte del obispo Irurita", levantando una vez más todos los fantasmas de las dudas sobre su entrega martirial.
Y es que la beatificación del Sr. Tort provoca la rápida pregunta, una vez más, de por qué no se beatifica también al obispo mártir, una causa rodeada de polémica, porque alguien orquestó una teoría fantasiosa, plagada de incongruencias, de que el entonces prelado barcelonés no había sido asesinado. El nacional-progresismo eclesial siempre ha intentado evitar esa beatificación por no ser un santo de su cuerda, no era catalán y tenía simpatías carlistas, a la vez que ponían todo su empeño en favorecer la del cardenal Vidal i Barraquer, que pactó su salida de Cataluña con la Generalitat de Companys, sin importarle que su propio obispo auxiliar, este sí que beatificado, Manuel Borrás, sufriera martirio.
Y el principal escollo para que Irurita sea beatificado está en la declaración del sacerdote Josep Maria Aragonés, ya fallecido, que afirmó ver con vida al obispo mártir saliendo del obispado en 1939, cuando ya las tropas nacionales habían tomado Barcelona. Esa teoría no tiene ningún sentido, ¿por qué se escondía? ¿Por qué andaba de paisano? ¿A dónde iba? ¿Por qué no recuperaba con todos los honores sus funciones episcopales?
Estamos hablando de alguien que en aquel momento tenía solo diez años, y que él mismo afirmaba solo haber visto al obispo en una ocasión, a esa edad y con tan poco conocimiento del prelado es muy probable que se confundiera, si es que no había ya de antemano mala idea, y mentira premeditada. Posteriormente, este mismo sacerdote protagonizó diversos episodios en la línea de aquel clero antifranquista, como presidir la Misa en la parroquia de Sant Ildefons, que ocasionó el caso Galinsoga y que provocó la dimisión del entonces director de La Vanguardia.
Por ese testimonio se paraliza la beatificación cuando hay pruebas de mucho más peso que confirman todo lo contrario, como el caso de la hija del sacristán de Sant Sever, Antonio Ponti, que declaró: "Fui con mi madre a Montcada. Los restos estaban sobre unas mesas de mármol y los cuerpos procedían de un descampado donde estaban enterrados en cal. Junto al cadáver de mi padre estaba el del obispo". O las pruebas que se hicieron de la dentadura del cadáver, que coincidían con las de Irurita, o la declaración del vicario general de la diócesis de Barcelona, Josep Morera.
Durante el pontificado del cardenal Jubany se paraliza el proceso, debe aclararse que el entonces arzobispo y el sacerdote Aragonés eran íntimos amigos, e incluso hay quien dice que le escribía sermones y cartas que luego pasaban como si fueran del obispo. Con la llegada del cardenal Carles, todo cambia, sin ataduras con el nacional-progresismo, el arzobispo valenciano decide reemprender el proceso y pide una prueba comparativa de ADN de los restos de Irurita enterrados en la catedral con los de una hermana suya, lo que provoca un resultado del 99,9% de posibilidad de que sea el obispo mártir.
A pesar de ello, nos van a seguir hablando de "misteriosa muerte" mientras queden personas con interés para que Irurita no sea beatificado. Por suerte ya quedan menos y el mismo Permanyer ya tiene 84 años.
Francesco Della Rovere
El artículo de Permanyer es vago, impreciso, no aporta pruebas ni datos concretos, todo son insinuaciones para las que no aporta ningún fundamento y que acaban con la afirmación de que el Vaticano posee la clave del supuesto enigma, pero sin demostrar en qué se basa para sostener tal cosa. Desde el punto de vista periodístico es una chapuza totalmente falta de profesionalidad, una habladuría de comadre. Da vergüenza ajena.
ResponderEliminarD. Jorge López Teulón ha contestado debidamente a Permanyer:
ResponderEliminarhttps://www.religionenlibertad.com/blog/61051802/Permanyer-El-Dr-Irurita-esta-en-Lepanto.html
Un verdaderamente muy interesante artículo.
ResponderEliminarLa historiografía nacionalista política, y nacional-progresista eclesial, nunca jamás ha querido integrar al carlismo dentro sus fuentes políticas.
El carlismo fue una compleja reacción fundamentada en la defensa no sólo de la religión católica y las ideas del Trono y Altar, si no en también sobre una serie de cuestiones jurídicas, sociales, económicas y culturales muy importantes.
En 1812 se aprobó una constitución, la Pepa, en sentido jacobino y centralista. No hay nada de malo en ello, pero se hacía destruyendo todos los derechos forales e históricos preexistentes a la constitución de 1812, y que nacieron del tardoimperio romano y sobre todo, de la Edad Media: los territorios forales y el comunal o la agrupación de vecinos en el municipio, que ha tenido como enemigos tanto al liberalismo, monarquía, republicanismo, socialismo, anarquismo, falangismo... de todas las ideologías y concepciones del Estado que implique la concentración de la soberanía en una capital, regentada por una casta de élites de funcionarios y políticos palatinos de los tres poderes (gobierno, diputados y jueces) [David Algarra: El comú català]
El nacionalismo catalán ha hecho un borrado completo del carlismo como corriente principal del catalanismo. Incluso niega la existencia de los dos presidentes de la Generalidad:
Tercera Guerra Carlista - Segundo restablecimiento de la Diputació del General a Guerra (1874-1875):
- Presidente General Rafael Tristany
- Presidente General Francesc Savalls
--- Vicepresidente Joan Mestre i Tudela
O el borrado del Tercio de Montserrat en la Guerra Civil, con la retirada de Montserrat del monumento a la estatua yacente, un soldado requeté malherido, que sostenía la bandera de España con la mano izquierda, con una placa y su inscripción: «Recuerda su ejemplo y sacrificio. Tercio de Requetés Nuestra Señora de Montserrat. 1936-1939». Se salvó la cripta –donde reposan 319 catalanes, la mayoría carlistas, que formaron parte de la unidad del Tercio– frente a la que yacía la figura de bronce.
También el borrado de los reyes y pretendientes carlistas en la historia de Cataluña: Carlos V, Carlos VI, Juan III, Carlos VII, JAime III, Alfonso Carlos I, Javier I, Carlos Hugo, Carlos Javier I (y sus divisiones: Domingo I, Juan IV...)
O el borrado de la intelectualidad carlista catalana y española, tanto en oposición como de apoyo: Carlismo en la literatura (Wikipedia), o la novela sobre la guerra civil que acaece en Gerona, Los cipreses creen en Dios, de Gironella; o Verdaguer, quien redactó un himno carlista que obviamente, para nada gusta a la actual casta barcelonina:
Aixecau-vos pla i muntanya que D. Carlos
ja ha arribat, braç de Déu que l’acompanya ferirà la llibertat.
Foc i avant!
Carlos, pàtria i Déu davant!
Bandera aixeca Espanya i els regnes seguiran.
Visca Alfons, visca el Sant Pare, fora el fill de son
butxí; pobre Espanya nostra mare
Foc i avant!
Carlos, pàtria i Déu davant!
Als d’Espanya una abraçada,
sos botxins a foc i sang.
(Una nota sobre Verdaguer i el carlisme, Ramon Pinyol i Torrents)
O el caso del proceso de santificación del obispo mártir carlista barcelonés Irurita, van en la misma línea: el carlismo, ni un santo.
Tampoco no quieren bajo ningún concepto que el carlismo tenga relevancia a través de sus reyes: Carlos V, Carlos VI, Juan III, Carlos VII, JAime III, Alfonso Carlos I, Javier I, Carlos Hugo, Carlos Javier I (y sus divisiones: Domingo I, Juan IV...)
Y es que el carlismo ha sido sistemáticamente excluido de la historia oficial y que su papel y legado han sido subestimados o ignorados y ocultados por distintas corrientes políticas e ideológicas en Cataluña y España.
El catalanismo político quiere presentarse falsa y fantasiosamente como un movimiento europeísta y democrático sin tacha alguna desde se creó el condado de Barcelona como parte de la Marca Hispánica, constituida por diversos condados dependientes del imperio carolingio (Francia), con los condes Bera y Wifredo el Velloso...
Realmente, a Permanyer y a sus aliados les molesta enormemente que existiera gente de valía que diera su vida por "Dios, Patria, Rey y Fueros"... y que así quede en la historia para siempre...
ResponderEliminarEl más reciente artículo en catalunyareligió.cat sobre Irurita está en este enlace
ResponderEliminarhttps://www.catalunyareligio.cat/ca/recull/vanguardia/misteriosa-mort-bisbe-irurita-lluis-permanyer-312803 y nos lleva a un artículo de lavanguardiadigital.
Con el buscador propio de catalunyareligió.cat se encuentran dos páginas de artículos sobre Irurita aquí
ResponderEliminarhttps://www.catalunyareligio.cat/ca/search/irurita?page=0 . Por varios factores dudosos y por la presión separatista, no fué beatificado, queda claro.
Gracias, buena información. Alguien olvidó que podía ganar dinero si lo hubiera llevado a la novela como best seller y en lugar de Irurita hubiese puesto a Martín Lutero King (mataron a un doble, al verdadero el KKK lo secuestró para llevárselo a Luisiana y...)
EliminarTerraplanistas a la catalana
ResponderEliminarEn su tiempo, de memoria, recuerdo que leí un libro donde se hacía un periplo:
Eliminar1. Los anarquistas de la CNT-FAI lo secuestran para sacar una morterada de millones
2. Hay unas negociaciones entre anarcas, vaticanos, fachas y fascistas de Mussolini, con conocimiento de Azaña, Negrín y Companys
3. Es enviado en barco a Roma en condiciones de clandestinidad, pues todo se hizo bajo condición de secreto
4. El Vaticano lo escondió
5. El 1939, acabada la guerra civil, es devuelto a Barcelona
6. Mientras había todo este movimiento de millones y secuestrado, se cuela la noticia de que ha sido asesinado, por lo que no se puede decir que ha habido una negociación a cuatro bandas: anarcas, Companys, Azaña, Negrín, vaticas, fachas de Franco y fascistas italianos.
7. Su vida en Barcelona y España se realizó en condiciones de segunda identidad, ocultada su verdadera condición, de forma vitalicia, para evitar esta vergüenza de la negociación del secuestro
En fin... no está el Kraken ni el Golem porque no caben...
Monseñor Irurita ya fue Mártir en vida, aguantando a los Masonazos de Maciá,Companys y demás ralea.
ResponderEliminarHay una foto del Obispo con el Arzobispo de Tarragona, el valiente Vidal Barraquero, muy sonriente al lado de sus futuros salvadores.
Pero Irurita poniendo cara de circunstancias.
YA LO VENÍA VENIR.