El fallecido P. Jaume Sidera y la provincia no española claretiana

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Estos días me enteré de la muerte del claretiano P. Jaume Sidera, quizá para muchos sea desconocido, pero para mí, sin haberlo tratado nunca personalmente era alguien familiar. Cuando recibí el sacramento de la confirmación nos regalaron a cada uno, un Nuevo Testamento en catalán, era de la editorial Claret, y la traducción la había hecho el religioso ahora fallecido, por lo que su nombre aparecía visiblemente en la primera página. Tenía otros ejemplares del Nuevo Testamento, pero este me gustaba especialmente porque su lenguaje era popular, no utilizaba palabras complejas o incomprensibles para un joven como yo en aquellos tiempos. Lo leía con frecuencia y cuando me iba a algunas convivencias o retiros espirituales, siempre le decía a mi madre: "ponme en la mochila el Nuevo Testamento del Sidera".
 
Leo en algunos medios que falleció el pasado 3 de enero a los 94 años y que el entierro se hizo en Lérida, en la parroquia de Sant Antoni Maria Claret de Balàfia, que fue el último destino del claretiano, presidido por el obispo diocesano Mons. Salvador Giménez, con la lógica presencia de los principales representantes de la comunidad claretiana, especialmente catalanes. Se da la circunstancia, que de los tres hermanos que fueron claretianos, todavía queda uno con vida, Vicenç, que está en misiones en Panamá y que no pudo venir al funeral.
 
Entre estos representantes estaba el provincial, el vasco de San Sebastián P. Juan Martín Askaiturrieta, recordemos que los claretianos, como la mayoría de Órdenes y Congregaciones religiosas, han perdido la provincia catalana propia y se han tenido que unificar con otros territorios, normalmente con el resto de España, pero en algunos casos, como el que nos ocupa, buscando fórmulas complejas e incomprensibles. El P. Askaiturrieta es un religioso que ronda los cincuenta años, una fórmula habitual en el nombramiento de provinciales, que es elegir alguno de sus pocos miembros jóvenes para dar una falsa imagen de tener miembros en buena edad, porque es evidente que la mayoría son muy ancianos.
 
Claretianos de la Provincia de San Pablo, a la que pertenece Cataluña

 
Pues la provincia a la que pertenecen los claretianos catalanes, llamada de San Pablo, no es la española, sino que es la unión de Cataluña, País Vasco, Francia e Italia. Eso significa que los claretianos vascos y catalanes han preferido unirse a territorios extranjeros antes de asociarse con sus hermanos del resto de España. Algo que no me sorprende para nada, viendo el nacionalismo militante de los claretianos de aquí, doce de los cuales firmaron el famoso manifiesto a favor del referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017. El P. Jaume Sidera, no estaba entre ellos.

Mucha autoafirmación nacionalista, como la del P. Pere Codina, al frente de ese panfleto nacional-progresista que es "El Pregó", pero la situación de los claretianos en Cataluña es verdaderamente dramática. Con una avanzadísima edad media, sin vocaciones, y teniendo que cubrir sus necesidades con refuerzos de otros continentes, pero no latinoamericanos, que esos no se adaptan al "tarannà català" y acaban hablando en su lengua materna. Son religiosos procedentes, por ejemplo, de la India, a los que tanto les da aprender el castellano como el catalán, ya que ninguna de las dos es su lengua propia.

Un ejemplo más de como van las cosas en estas históricas Congregaciones Religiosas, de las que actualmente queda el nombre y bien poca cosa más, además de un inmenso patrimonio, y los que quedan seguirán erre que erre hasta la muerte, sin reconocer los errores, ni cambiar un ápice de la manera de funcionar que han tenido y que les ha llevado hasta donde están.

Francesco Della Rovere

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10 comentarios

  1. O renovación o devastación en la Viña del Señor10 de enero de 2024, 3:16

    "Un ejemplo más de como van las cosas en estas históricas Congregaciones Religiosas, de las que actualmente queda el nombre y bien poca cosa más, además de un inmenso patrimonio, y los que quedan seguirán erre que erre hasta la muerte, sin reconocer los errores, ni cambiar un ápice de la manera de funcionar que han tenido y que les ha llevado hasta donde están."

    Dentro de lo triste, es una excelente noticia que no cambien para nada.

    En efecto, para el próximo y más cercano cónclave, habrán diversos temas insoslayables para el nuevo pontífice, una vez que ya está amortizado Bergoglio, hoy con el nuevo ridículo escándalo del Fernández ese de la doctrina de la no Fé, que hizo un libro "de las sábanas al cielo"... para partirse de risa y no parar en tres días...

    Hay una serie de temas a tratar inmediatamente, como es el tratado secreto con China, la eliminación de las heréticas Amoris laetitia y Fiducia supplicans, y luego muchas cuestiones: lavatorio de pies el Jueves Santo no a 12 hombres sino a una "representación" parroquial, acólitas, lectoras, rito maya-azteca mejicano, Pachamama, Querida Amazonía (misas y espiritualidad indigenista), sinodalismo "Made in Bergogliolandia", derogar la Declaración de Abu Dabi (Dios quiere a todas las religiones), derogar Traditionis custodes contra la Misa Tradicional, pena de muerte, relanzamiento del Opus dei (derogar cánones 295-296 sobre las prelaturas personales), cisma alemán...

    Todo ello se hace con una Constitución Apostólica omnibus, que recoja todo lo que hay que derogar de Bergoglio: "se deroga el tratado con China, Amoris laetitia, Fiducia supplicans, Traditionis custodes, Querida Amazonía, Declaración Abu Dabi, las resoluciones del Camino Sinodal Alemán, las acólitas y lectoras, el lavatorio inclusivo de Jueves Santo... se restaura la legislación de San Juan Pablo II y Benedicto XVI..."

    Pero un tema en que deberá de actuar de forma totalmente dura será en las vocaciones sacerdotales y religiosas, que es el segundo gran tema de naturaleza vital y existencial (el anterior era normativo), junto con la educación religiosa.

    Sin sacerdotes que celebren los sacramentos básicos para la Iglesia Doméstica, y sin los religiosos que interceden por el Pueblo de Dios y tienen una relación mística con Dios, estamos totalmente perdidos. Y la dureza es proporcional a la actual eclesiocatástrofe bergogliana, que ya se arrastra desde el Concilio Vaticano II, desde el 1965.

    El próximo papa deberá de realizar no sólo la reafirmación doctrinal de la Fé, moral, liturgia, disciplina y eclesiología, sino la revitalización de la vida espiritual de sacerdotes y religiosos.

    Las órdenes religiosas tradicionales están en proceso de extinción, así como la misma existencia de muchas diócesis europeas, como el caso de Gerona como el más grave de todos, por falta de vocaciones presbiteriales y consagradas.

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    1. No se puede derogar un tratado más que siguiendo el procedimiento previsto en el mismo.

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  2. Renovarse o morir (ii)10 de enero de 2024, 3:27

    Las estadísticas que van a tener en las manos todos los cardenales en el próximo cónclave son desgarradoras, despiadadas, amargas, crueles, trágicas y terroríficas:

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    1. La primera verdad de las estadísticas es la realidad fáctica de la extensión e intensificación sangrante de sus pérdidas y su fin extintivo en breve: todas las grandes órdenes religiosas grandes y establecidas de siglos como los jesuitas, benedictinos, franciscanos, agustinos, etc. han caído un 44% desde el fin del Concilio Vaticano II (1965); estos grandes institutos de vida religiosa están en severo y extrema declinación, es decir, su tendencia permite demostrar su extinción para 20-30 años (2040-2050), pero en pocos años estarán en general ya muy reducidas y menguadas, y en particular en algunas regiones, ya desaparecidas del todo

    ---

    2. La segunda verdad estadística es mística, la pérdida de la Fé en la región afectada por la devastación vocacional. Además, incluso se observan los efectos sociales de la pérdida de sacerdotes y religiosos intercesores ante Dios del Pueblo de Dios de una Iglesia Particular que les ha sido asignado, como pueden ser más suicidios, más malestar social, más crimen, más inmoralidad, más degradación social, más divorcios, más pecados... regreso a la barbarie

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    3. La tercera verdad estadística es la temporalidad: todo empezó a desmoronarse a partir del Concilio Vaticano II, entre 1965 y 1975 a más tardar

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    4. La cuarta verdad estadística es la estricta relación de causalidad entre extinción y herejía, y con una evidencia incontestablemente innegable: a mayor heterodoxia y herejía de una Orden o Congregación religiosa, más devastadora es su disolución: jesuitas, salesianos, capuchinos, benedictinos

    Las 7 instituciones católicas más grandes, Jesuitas, Franciscanos, Salesianos, Capuchinos, Benedictinos, Dominicos y Redentoristas, fueron el 39.5% de todos los religiosos en 2014. Pues bien, el declive de estas 7 grandes instituciones es ya del 43%, y el declive de los JESUITAS y FRANCISCANOS es del 52,8% y el 48,2% respectivamente: desplome total, extinción asegurada

    Por otra parte, de las 134 órdenes católicas más importantes, 48 están en severa decadencia y extinción, encabezadas por las "7 grandes" mencionadas

    En el caso de las diócesis, sólo hay que ver el caso de Gerona, una reducida gerontocracia presbiterial de unos 30 curas que en 5 años quedará reducida a la nada por jubilaciones y defunciones, debiendo de atender a más de 300 parroquias, y aún no tiene obispo. El caso de Gerona se repite por España y por Europa

    La Iglesia sigue el proceso de extinción iniciado en 1965 por el Concilio Vaticano II, contenido por San Juan Pablo II y Benedicto XVI, pero con Francisco ya ha iniciado la degeneración espiritual, doctrinal y el declive y extinción en número de vocaciones y miembros presbiteriales y religiosos

    Sólo hay que ver el caso horroroso de estos ciegos y necios jesuitas: en 1965 alcanzaron el mayor número de jesuitas de la historia, 36.038, pero en el 2022 sólo tienen 14.439, cuando deberían de ser unos 90.000 jesuitas si consideramos el número de habitantes del mundo (3.330 mill en 1965 y 8.000 mill hoy). Las Casas Jesuíticas pasaron de 2.195 en 1966 a sólo 1.218, cuando deberían de ser 5.500 casas. Los jesuitas han perdido unos 75.000 jesuitas y 4.300 casas potenciales, todo por culpa de su obstinación herética

    Los jesuitas, en el pecado (herejía) llevan su penitencia (extinción), pues Dios no envía más labradores y pastores donde hay mentira y muerte. Y lo mismo para los malos papas, obispos, curas y religiosos: donde hay pecado no hay ni mozo ni ganado

    ..........

    Como es obvio, la situación no puede ya nunca jamás continuar como hasta ahora con Bergoglio, y sólo hay una ruta posible, la Tradicionalidad, que es seguir la recta doctrina de Fé y Moral, el carisma del fundador de la Orden o Congregación, tener vocaciones procedentes de la Iglesia Doméstica (familias) y celebrar bien la Santa Misa, los sacramentos y sacramentales y sanseacabó

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    1. Es un juicio en toda regla. Ud es el fiscal. ¿No hay abogado defensor? Me ha gustado, porque expresa su carácter y manera de resolver los problemas, "y sanseacabó". Si alguien piensa como Ud, realmente se acabó la vida en sociedad.

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    2. Lo siento querido panfleto, rollo terrible, el mundo no se ha termina do, ni el mal ha triunfado.

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    3. Expongan sus defensas lógicamente y racionalmente argumentadas

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  3. Yo creo que las órdenes religiosas hacian la función de contempletivos orantes por culpa de los mismos ministros sacerdotes que no inculcaban a las gentes de misa el ser unos orantes y contemplativos dentro del mismísimo mundo social. Esta "especialización" de orantes contemplativos existia por defecto no por causa natural, lo natural seria que gran parte de los fieles de misa practicaran en sus casas al menos una hora de plegaria diaria, al estilo de ermitaño casero, pero no, la historia se repite demasiado y para la Iglesia se requieren especialistas dedicados exclusivamente a la plegaria. En el púlpito los predicadores solo les piden a los fieles que amen, que se confiesen, y que acudan a las misas, y punto, la intelectualidad en oracion y en espiritualidad en el púlpito brilla por su ausencia.

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    1. No se equivoque Garrell, los Conventos contemplativos son queridos por Dios.

      No hay color con las plegarias individuales.

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  4. En un futuro próximo, veremos sin duda la extinción definitiva de varias órdenes y congregaciones "históricas". Algunas nuevas llegarán para tomar su lugar.
    Pero lo importante, lo esencial, es tomar cartas en la iglesia diocesana. Si falla la base, mal se aguantarán los carismas. Es allí donde habrá que poner el esfuerzo principal, si es que se piensa poner esfuerzos, claro.

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  5. El desencuentro de pareceres sobre temas territoriales están muy presentes en todas órdenes; los espacios que dejan las ideas sustanciales, son cubiertas por otras menores, como cualquier otra tentación.
    Parece dada la foto, que la provincia, tendrá que integrarse en otra, sugiero Polonia; habiendo patrimonio no faltaran
    Vocaciones.

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