Me impresionó el escrito de la semana pasada sobre los cincuenta años del Camino Neocatecumenal en la parroquia de Santa
Joaquina de Vedruna. Entre los comentarios, me dio que pensar el de dfdfsv de
19 de octubre a las 0:56 que dice: Triste
situación de la parroquia, siempre cerrada y sin vida alguna más allá del sábado
por la tarde. Atentamente: un vecino. Si damos por cierto lo que declara el
vecino, ocurre que en esa parroquia convergen la decadencia de esa antiquísima
institución eclesiástica (la jurisdicción eclesiástica de la población dividida
territorialmente en parroquias), y los nuevos movimientos religiosos al margen
de esa estructura territorial. Y creo que vale la pena examinar a partir de
ahí, hacia dónde soplan los vientos de la Iglesia.
En primer lugar, estamos ante la evidencia de que fuera de las parroquias, e incluso sin ellas, la Iglesia puede seguir viva. No sólo eso, sino que hasta puede desarrollar nuevas formas de vida religiosa que nos recuerdan en cierto modo a la vida monástica, que nada tiene ni tuvo que ver con la estructura parroquial. Como nos recuerda la referida carta, en la parroquia de Santa Joaquina de Vedruna están en cierto modo domiciliadas 19 de las que los neocatecumenales llaman comunidades llenas de vida, algunas con 60 o 70 hermanos. Este movimiento de fieles no tiene que ver con la parroquia nada más que el ser la iglesia y sus dependencias, el lugar de encuentro de esas comunidades, cuyos miembros no pertenecen territorialmente a esa parroquia. Y fuera de este uso concreto sin nada de parroquial, la parroquia sigue en su triste situación, siempre cerrada y sin vida alguna. Exceptuado el sábado por la tarde que es cuando llenan la parroquia los neocatecumenales.
Es llamativa también la vitalidad de esas comunidades a la que hace referencia la carta aludida: de ellas han surgido vocaciones sacerdotales y monásticas, familias misioneras, familias numerosas… en fin, esa mezcla de vida en el mundo y vida comprometida en la Iglesia, vida de evangelización activa. Todo ello perfectamente compatible con la agonía de la parroquia como tal. Y no es ésta la única parroquia en que se produce este fenómeno. Otras parroquias de esta diócesis con una lánguida vida parroquial, alojan vigorosos movimientos cristianos (además del de los kicos -por su fundador Kico Argüello-; nada que ver con el obispo secretario de la Conferencia Episcopal) que les dan momentos de esplendor y de vitalidad. Pero los fieles que forman parte de esos movimientos siempre son, en su mayoría, extraterritoriales. El caso de la parroquia de San Gregorio Taumaturgo, recientemente comentado en estas páginas, es bastante asimilable a estos fenómenos: la mayoría de los asistentes no son parroquianos de esa parroquia, sino que vienen de fuera. Es decir que la territorialidad en que se basan la diócesis y la parroquia, es un fenómeno al que le queda ya muy poca vida, sin que eso implique lo mismo para otras fórmulas de evangelización.
Y es ahí donde surge la pregunta: ¿Es
compatible esa situación de decadencia de la parroquia como institución, con el
surgimiento de potentes movimientos eclesiásticos (mejor eclesiales, ¿no?) capaces
de darse vida por sí mismos?
Y otra pregunta derivada: si la Iglesia es capaz de encontrar fórmulas de evangelización y de asistencia a los fieles al margen de la institución parroquial, ¿a qué viene tanto empeño en mantener y reforzar con nuevos cargos la estructura territorializada de las diócesis en que se sostienen las parroquias? Nos encontramos con que los efectivos y las energías que emplea la Iglesia en esa decrépita estructura, son tremendamente desproporcionados con los resultados. Pero lo más grave es que a los párrocos que van quedando, y que constituyen el último eslabón, se les exige un sacrificio ímprobo, como el de atender cada párroco un número creciente de parroquias: sin otro objetivo que el de mantener contra viento y marea una estructura territorial (parroquial y diocesana) que se derrumba. Nos está quedando la cáscara cada vez más seca, pura fachada, de la que ha desaparecido la mayor parte del fruto por desecación. Y en eso andan los mayores pesos pesados de la Iglesia.
Y otra pregunta derivada: si la Iglesia es capaz de encontrar fórmulas de evangelización y de asistencia a los fieles al margen de la institución parroquial, ¿a qué viene tanto empeño en mantener y reforzar con nuevos cargos la estructura territorializada de las diócesis en que se sostienen las parroquias? Nos encontramos con que los efectivos y las energías que emplea la Iglesia en esa decrépita estructura, son tremendamente desproporcionados con los resultados. Pero lo más grave es que a los párrocos que van quedando, y que constituyen el último eslabón, se les exige un sacrificio ímprobo, como el de atender cada párroco un número creciente de parroquias: sin otro objetivo que el de mantener contra viento y marea una estructura territorial (parroquial y diocesana) que se derrumba. Nos está quedando la cáscara cada vez más seca, pura fachada, de la que ha desaparecido la mayor parte del fruto por desecación. Y en eso andan los mayores pesos pesados de la Iglesia.
Es innegable el enorme potencial que está desplegando el Camino Neocatecumenal. Y no se necesitan demasiadas dotes teológicas para entender que este camino ha de ser mucho más agradable a los ojos de Dios, que decidirá encauzarlo conforme a su santa voluntad; mucho más conforme a la voluntad de Dios, que el fatídico Camino Sinodal que ha extendido su influencia en el inciertísimo Sínodo de la Sinodalidad y que, para alargar esta agonía se ha prorrogado por un año más. ¡Tanto camino para descarriarnos! Bien venido, pues, el Camino Neocatecumenal, que gracias a Dios, tampoco es el único, por más que unos y otros despierten recelos entre los más conservadores. Recordemos que en su día, también las órdenes religiosas que eligieron la calle como su campo de evangelización (¡uy, las órdenes mendicantes!) despertaron muchos recelos. Estaban fuera de la jurisdicción de los obispos.
Está claro que los movimientos eclesiásticos seglares de última ola como el Camino Neocatecumenal (ahí entra también el tan denostado Opus Dei) no son del agrado de todos; y algunos cuentan con muchos enemigos y detractores. Pero parece igual de claro que el futuro de la Iglesia no pasa ya por las parroquias, sino por estos movimientos y por lo que Dios nos vaya deparando en adelante. Se alojan obviamente en las iglesias y dependencias de las parroquias, pero no son movimientos parroquiales, ni alcanzan a frenar el declive de las parroquias en que se alojan.
No sólo eso, sino que al constituir por sí
mismos una prueba patente de que la estructura diocesano-parroquial (estructura
administrativa de carácter territorial al fin y al cabo) no es capaz de
mantener la presencia de la Iglesia en la sociedad, son ignorados, cuando no
aviesamente torpedeados por la mayoría de los obispos, que ven en estos
movimientos una grave desviación de la pastoral tradicional confiada al báculo
episcopal.
Y si a eso añadimos el obsceno Camino Episcopal (que cosa de obispos ha sido) a que se ha dedicado la jerarquía católica alemana, que no tenía otra cosa que hacer, tenemos configurado totalmente el panorama de los caminos de la Iglesia: los vigorosos caminos que roturan los laicos, el camino empantanado en que están la inmensa mayoría de nuestros obispos, y el camino (Sínodo de la Sinodalidad, que es como decir camino de la caminalidad) por el que se están decantando cada vez más obispos, guiados por el gran conductor de los obispos, nuestro cardenal Omella, para converger con el camino alemán, arrastrando así al resto de obispos de la cristiandad.
A la vista de todo ello, se alza con fuerza una pregunta realmente inquietante: así, ¿a qué se dedican los obispos con su pesada organización curial, y a qué se dedican los órganos en que se agrupan todos los obispos de cada país, y las estructuras superiores a ellos, con el imponente edificio curial en que todos ellos se sostienen?
Cualquiera diría que todos ellos, cual
ocurre con las instituciones mundanas, tienen como principal (y a veces único
objetivo) su propia conservación y perpetuación; que con ese quehacer ya tienen
ocupados su tiempo y sus afanes. Porque realmente cuesta muchísimo ver que de
ahí se derive algo tan básico como el sostenimiento del servicio religioso a
los fieles. Lo que sí es fácil ver, en cambio, que ese servicio va declinando,
van declinando los fieles y los sacerdotes (disminuciones drásticas), pero que no
hay manera de que disminuyan las jerarquías territoriales ni las curiales en la
misma proporción. Ni el inmenso patrimonio inmobiliario (¡ay, ay, ay, la burda
trampa de las inmatriculaciones! ¿Tanto, tanto, tantísimo patrimonio?) que
supuestamente está, en última instancia, al servicio de los fieles, cada vez
más menguados, ya que la gloria de Dios (ni siquiera la que fue blasón de los
jesuitas, AMDG) ha decaído totalmente.
Y claro, a la vista del espectáculo estremecedor de la práctica totalidad de los dirigentes europeos trabajando arduamente por hundir a Europa y a sus habitantes, en beneficio de unas ideas tan estrambóticas políticamente, como estrambóticas son las del Camino Sinodal para la Iglesia, uno se pregunta si no estará haciendo algo parecido la jerarquía católica embarcada en esa fatídica confusión de los caminos, algunos de los cuales nos llevan de cabeza a la perdición.
Virtelius Temerarius
Me ha resultado mucho más interesante y clarificador el video que viene tras la firma, que el artículo. Buena visión del Sínodo.
ResponderEliminarEn la Pontificia academia para la vida, fundada por San Juan Pablo ll , cambian a los PRO VIDA por globalistas PRO ABORTO.
ResponderEliminarÉste el camino Sinodal que quiere la Iglesia Católica???
Ésto que es?!?!?!
ESO NO PUEDE SER IGLESIA, OCCURRE BAJO LA TUTELA DE "LAS AUTORIDADES ECLESIASTICAS", PERO CLARAMENTE ES DOCTRINA ANTICRISTIANA DESARROLLADA POR EL VATICANO. PARA MI ESTA NO ES EL ESPIRITU SANTO EL QUE ILUMINA A ESTOS ADEPTOS LA ROTARI Y SU INSPIRADOR , CON HUMO O SIN EL.
EliminarHe estado tanto en los kikos y opusinos, y otros movimientos minoritarios, el de Montslegre y Vedruna, y un beneficio-problema que causan estos movimientos es que fagocitan, y absorben y fusionan los feligreses de la parroquia a su movimiento, vaciando así la parroquia... Y eso es lo que pasa...
ResponderEliminarEsto sucede, a su vez, porque el Obispado y el Vaticano de Bergoglio no ha uniformado a sus curas diocesanos, sino que estos se han uniformado con el jersey churrito-tomatito del nacional-progresismo, lo cual ocasiona la espantá de la feligresía.
También por los frecuentes cambios de párrocos que realiza el Obispado, por las causas que sean, dando lugar ahora a curas sobrecargados de trabajo o ideologizados, de calidad muy irregular, sin estabilidad alguna.
Soy testigo del descalabro y extinción del clero diocesano y religioso de las órdenes clásicas y tradicionales desde los 1970, que aquí en Cataluña y País Vasco han decidido autoaniquilarse lanzándose por el barranco del Concilio Vaticano II.
Dos órdenes locas, chifladas y desquiciadas como ejemplo actual de hoy, junto con la omisión de Bergoglio y Omella y el obispo que regente Guipúzcoa, que lo saben de siglos:
"Hoy, 22 de octubre, en España: dos centros regentados por importantes órdenes religiosas acogen actividades organizadas por sendos gurús de la Nueva Era (New Age). Se trata del Centro de Espiritualidad de Loyola, que tiene la Compañía de Jesús en Azpeitia (Guipúzcoa), y de la Residencia Salesiana Martí Codolar, en la ciudad de Barcelona."
"Son las dos muestras más recientes de una realidad cada vez más frecuente: el uso de espacios católicos por parte de sectas y grupos esotéricos y de la Nueva Era. En ambos casos, con una dimensión pseudoterapéutica importante, tal como se ha alertado a las respectivas congregaciones desde la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas (RIES), sin lograr que se cancelen las actividades."
infocatolica.com/blog/infories.php/2210220852-jesuitas-y-salesianos-acogen
Por eso Dios ha enviado a los movimientos eclesiásticos seglares de última ola como el Camino Neocatecumenal y Opus Dei, encargados a modo de suplencia de la salvación de las almas, que es la única ley preferente de la Iglesia, a pesar de los inconvenientes que tengan.
Todos estos movimientos no son de fiar, no son evangélicos, excluyen...
EliminarNo es cierto lo que dice el anónimo de las 6:30. ¿No será usted de los que lo abrazan todo, incluso el pecado?
EliminarHabrán movimientos mejores que muchas parroquias? Segurísimo. Es esto bueno? No. Esta bicefalia de la iglesia diocesana y las órdenes (y, tras las últimas décadas, los movimientos) genera una constelación de grupos con "carismas" tan distintos que podría ser incluso peligroso.
ResponderEliminarSin ir más lejos, cómo es posible que un católico se pueda casar con una mujer de otra confesión cristiana pero no con una Kika (siendo el ajeno a este movimiento)? Y sí, habrá alguno que me dirá que no hay ningún impedimento normativo, però la realidad es que es casi imposible conocer matrimonios "mixtos" entre latinos (iglesia de Roma) y kikos.
Por otro lado, desde un punto de vista eclesiología o, para un obispo tener en su diócesis a fieles de órdenes y movimientos tan diferentes que van "por libre" no es de los mejores escenarios tal cómo está el patio.
Los movimientos se crearon como respuesta al hundimiento de las parroquias. Ahora estas últimas siguen vacías y los movimientos neocon muchos de ellos agonizan (la Obra, por ejemplo).
Es momento ahora de volver a la estructura bimilenaria?
El calificativo "neocon" que Ustedes emplean recurrentemente para aplicarlo a San JP II, B XVI, Opus Dei, Camino Catecumenal y un largo etcétera, les descalifica de entrada. Es una manera de actuar similar a los que emplean el calificativo de "fascista" contra aquellos que les incomodan políticamente. Además, ignoran Ustedes que el movimiento neoconservador tiene sus orígenes en la izquierda americana más progresista, gente que se pasó del "anti-Vietnam" a la derecha más belicista en lo geopolítico, pero sin renunciar al aborto, ideología de género, etc.... (American Enterprise Institue). Hoy en día los neocon de verdad apoyan a los demócratas belicistas tipo Obama, Biden, etc... Dejen de mentir.
EliminarAquí se habla de "neocones" en sentido eclesiástico, no en sentido político. Los "neocones" eclesiásticos son los conservadores, que quieren conservar la revolución realizada, pero dentro de un orden. Algo así como Napoleón Bonaparte, salvando las distancias.
EliminarPues lo dicho, don Hermenegildo. Como si yo a usted le tildó de " fascista" (en sentido eclesiástico "bien entendu") por defender a Mons. Lefevre. Un cordial.saludo
EliminarRelalacionar a Monseñor Lefebvre con el fascismo no tiene pies ni cabeza, ya que, precisamente, el padre este Arzobispo, René Lefebvre, murió en 1944 en el campo de concentración nazi de Sonnenburg (en el este de Brandeburgo), donde había sido encarcelado por la Gestapo porque de su trabajo para la Resistencia francesa y la Inteligencia británica.
EliminarEl pues eso don Hermenegilfo; relacionar a San Juan Pablo II con los Neocons no tiene ni pies ni cabeza. A ver si entienden de una vez.
EliminarAl final los números cantan. El futuro está en los que tienen familias con hijos donde además se transmite la fe. Todo lo que no sea esto en dos décadas, máximo tres, desaparecerá del mapa... mirad las realidades que tienen esto y sabréis lo que va a quedar.
ResponderEliminarUn buen termómetro para saber cuál es el grado de religiosidad católica es comprobar cuánta gente comulga y su percentaje.
ResponderEliminarDijo religiosidad católica, porque la gente, casi toda, tiene una inclinación religiosa, como es propio del homo religiosus, aunque sea hacia idolos: prusés, la República, la nasió, la el poder, la la fama, el dinero, la Nueva Era, una ideología, una moda...
Demasiados generales (obispos), pocos oficiales (sacerdotes) y poquísimos más soldados de Cristo (laicos). Con esta tropa no vamos a ninguna parte. Conviene reformar el Ejército especialmente los soldados y los oficiales con más entrenamiento y formación. Es más bien un ejército que emplea armas muy potentes (confesionario) para matar intranquilidades de problemas sexuales leves que muy bien se aviene a matar moscas a cañonazos. Se apunta al Enemigo confundiendo al General Jefe (Satanás) con los subordinados que le merodean de menos categoría, y al final la Iglesia pierde la guerra por su mala punteria. Se parece a la guerra del Putin bendecida por el Patriarca Ruso, que merecería ganar solo por combatir al demoníaco Legetebex. El Dios Ciencia sigue ganando la batalla que se parece a la Ucrania de separatismo hijo del Diablo ganando terreno a la hoy día convertida Rusia (profetizado por Maria). Conviene apuntar con los cañones a los generales enemigos estos llamados Adulterio, Evolución, Ignorancia, Falsedad, Heliocentrismo, Nacionalismo, Incultura Histórica Religiosa, etc. Dejémonos de una vez de juegos de tronos episcopales, para esto ya existen las revistas de papel. Por cierto que Germinans le gana la partida a Cataluña Cristiana, el Cigoña la cita frecuente poniendo el enlace. Ya sólo falta el padre Apeles metido aquí por su fama, se le puede encontrar en el Face y siempre publica temas interesantes.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo con la reflexión del Sr. Garrell.
EliminarEn oriente son más auténticos y valientes.
Aquí nos quieren convertir en nenazas a todos.
Conmigo no lo conseguirán!!!
Coja el Catecismo y estudiélo. Allí adquirirá toda la formación necesaria y acabará de una vez con su persistente y recurrente obsesión por lo que usted califica de "problemas sexuales leves".
EliminarCon estos "problemas", no se puede / debe comulgar, por lo que debe pasar igualmente por el confesionario, previo arrepentimiento y propósito de enmienda. Si usted está en la Iglesia, debe acatar lo que ésta regula y dispone, no sólo para poder permanecer en ella, sino porque es Madre y es Santa y es Sabia.
Totalmente de acuerdo con Mn. Jordi de las 17:40.
EliminarPara confesarme, recurro a sacerdotes del Opus Dei, en Bonaigua y/o Montealegre. Allí se conserva la dignidad del Sacramento y se respeta el Derecho canónico. En la Catedral de Barcelona, en la Capilla del Santísimo, también, con el inconveniente de que allí sólo hay ese confesionario y los de la nave central del Templo suelen estar inoperantes desde el post-covid. En todo caso, el único que ha funcionado siempre con rejilla es el de la Capilla que he comentado.
En cuanto al Camino Neocatecumenal, en una peregrinación a Montserrat, tuve una conversación muy interesante con una señora ya mayor, que explicó cómo en los "kikos" había tomado conciencia de sus pecados, iniciando un auténtico proceso de conversión (antes, ya estaba en la Iglesia). Con sus palabras y su comportamiento, esta señora me pareció un testimonio incuestionable de la bondad del referido movimiento, o como quiera que deba llamársele. Quizás deberíamos, por una parte, fijarnos menos en las "rarezas" o en lo que simplemente nos parece tal, cuando quizás somos nosotros las víctimas ignorantes de malas prácticas. Por otra parte, respetar las distintas formas de piedad.
Por cierto, en la única Santa Misa a que asistí del movimiento neocatecumental, en el extranjero y por casualidad -mientras andaba buscando una Iglesia católica-, los fieles comulgaban con las Dos Especies y en la boca, sin excepción. El que tenga buen criterio, diga si esto está bien, o está mal.
Y por cierto, también, esto tan de moda que es Emaús, da lugar a unas Adoraciones en las que la gente salta y brinca y cuenta en voz alta unas historias, que a mi juicio mejor se guardaran para los adentros. No es lo mío, pero dicen que a otros les funciona y pues...
No es verdad que las parroquias estén vacías.
ResponderEliminarHay parroquias que funcionan muy bien porqué al frente hay buenos sacerdotes y buenos laicos que les ayudan. Y hay pastoral parroquial y grupos diferentes por edades.
Hay otras parroquias que el sacerdote es muy mayor, a veces esta enfermo, y los laicos solo critican pero no colaboran.
Hay otras que el sacerdote es un vago, y no se puede recoger donde no se ha sembrado.
Quizás los obispos deberían plantearse ya el cierre de más parroquias, y así agrupar sacerdotes para mantener las parroquias vivas, y las que funcionan, que las hay.
No se puede generalizar.
San Juan Pablo II lo dejo claro "todo movimiento, congregación, espiritualidad, grupo, asociación,...suscitada por el Espirito Santo (y reconocida por la Iglesia) han de estar al servicio del Evangelio y servir a la Iglesia como ella quiere ser servida".
Lo de decir alegremente Mosén Jordi a un comentarista anónimo llamado Jordi es una falta de respeto brutal.
EliminarEs usted practicante de la nigromancia?
Durante años, estuvo Cataluña cerrada para los kikos. Pero, ¿quién pone puertas al campo? ¿Cómo iba a durar una resistencia numantina amasada con un sentido fariseo, de supremacismo racial obsceno? Por fin, se está cuarteando esa obstinación secesionista incluso en lo espiritual. Junto a esa espléndida noticia de la que da cuenta Virtellius, la que ofrece la diócesis de Sant Feliu sobre otra familia del Camino Neocatecumenal de Sant Vicent dels Horts y su misión en Ucrania.
ResponderEliminarHace años, invité a una joven promesa del Camino, físico y teólogo amén de padre de familia, a venir a trabajar a Barcelona. No le pareció bien venir ante la gimkana de obstáculos que preveía para su familia treinteañera.
Cuánta idiotez se ha interpuesto en la evangelización de Cataluña. La enemiga a las instituciones eclesiales nacionales, el bloqueo a los nuevos movimientos, la puerta cerrada al clero del Tercer Mundo...
Es un motivo de esperanza los cambios que pronostica Virtellius.
Totalmente de acuerdo con el Sr. Valderas Gallardo.
EliminarConozco la situacion de la parroquia mencionada de Santa Joaquina de Vedruna, llevada por carmelitas, hace años los parrocos se resistian a dejar el templo, y tenian una sala a las salas parroquiales con el nombre de un insigne carmelita, martirizado durante la segunda guerra mundial, sala Tito Brandsma, utilizada esta por las comunidades neo-catecumenales. Hace un tiempo la cosa cambio, la Iglesia parece un almacen, la distribucion del altar, sede, ambon propios de la Iglesia no se utilizan, los bancos de los fieles se dispusieron segun un anfiteatro, el altar en medio de la iglesia, el ambon y la sede tipicos de las comunidades y de como ellos celebran. No se... es preocupante que los signos de revitalizacion sean los que vemos, y me pregunto: porque las parroquias han dejado de ser-lo? porque han perdido su verdadera funcion? Hay alguien en el obispado que vigile y controle todo esto? Al parroco de Santa Joaquina, P. Gaspar Borda y Bori alguien le dice alguna cosa? le dan alguna instruccion? Sino que le quiten el titulo de parroquia y la dejen como centro de culto.
ResponderEliminarEs lógico lo que usted cuenta. Para los kikos la verdadera Iglesia son ellos y lo demás debe ser arrinconado.
EliminarDios quiera que las parroquias nunca desaparezcan porque es en las parroquias donde cabemos quienes deseamos vivir nuestra fe según la universalidad de la Iglesia y no según el "carisma" particular de ningún fundador iluminado o sus acólitos.
ResponderEliminarJunto con Opus Dei y alguno más la única realidad que obedece la Humanae Vitae porque la inmensa mayoría del resto de fieles católicos (y a los números me remito) comulgan y utilizan métodos anticonceptivos sin ningún rubor. Y soy Sacerdote y se de lo que hablo...así que necesitamos menos piedras de edificios y más piedras vivas como estas
EliminarAsí es Hermenegildo. Amén.
EliminarPadre Jordi, los musulmanes también están contra los anticonceptivos y tienen muchos hijos, pero no son católicos.
EliminarMi experiencia con el trato de matrimonios del "camino" es negativo... Gente fanática que te miran por encima del hombro por tener familia númerosa, falso pietismo para que la gente les vea espirituales... Pensamiento rígido y excluyente.
ResponderEliminarTípico comentario pueril juzgón que nada tiene que ver con la verdad
Eliminar¿Qué quiere decir con lo del pensamiento rígido y excluyente?. No nos ha dicho nada del pensamiento de usted y tal vez esto aclararía las cosas. Lo demás, ¿lo supone, o se lo parece?. ¿Tal vez le parece también a usted rígido, lo que manda la Santa Iglesia, de no difamar?
EliminarHola ANONIMO YA QUE USAS MI NOMBRE VEN A HABLAR DIRECTAMENTE Y TE EXPLICO. DE ACUERDO?
ResponderEliminarGoyo
EliminarSean bienvenidos todos los movimientos eclesiales que mantengan la Luz de la Palabra. Conozco miembros de los grupos que se han mencionado en el artículo y algunas cosas las puedo aceptar, pero otras no estoy de acuerdo. Lo que, hablando con ellos, les he manifestado siempre es que no participan en la vida de la parroquia. Usan la iglesia para sus Misas, pero no se integran en las distintas actividades que puedan vivir en la parroquia. Creo que todos los responsables de estos movimientos deberían ser algo más humildes e integrar el grupo con los demás feligreses. Harían una labor extraordinaria. Que no quieran pasar por delante de los párrocos. Creo que sería muy interesante que se organizara un encuentro a nivel provincial, donde se pudieran manifestar los que no pertenecen a ninguno de estos grupos. Roguemos a María Auxiliadora que nos ayude a todos a mantener nuestra Fe e intentemos ser de verdad evangelizadores. Amén.
Conozco la situación de Santa Joaquina desde hace años. Una parroquia fea estéticamente, con una comunidad carmelita en las últimas, como toda la provincia, que debe también importar seminaristas, y con la demarcación territorial más pequeña de la diócesis, en un barrio, el del farró, envejecido y sin alma. Sin la presencia de las comunidades esta parroquia habría echado posiblemente ya el cierre, o estaría a punto (lo han escuchado mis oidos del anterior párroco, el Pare Andreu Guim). La han convertido en 50 años en una parroquia de referencia para la diócesis, con cientos de jóvenes, cientos de familias llenas de hijos, vocaciones (dos chicas que entraron el año pasado en el monasterio carmelita de Vic, otra es comboniana, otras dos hermanitas del Cordero), 2 seminaristas en dos años, misioneros (una familia que acaba de partir en misión a Chipre hace unas semanas). En los últimos 10 años han venido una veintena de veces los Obispos de Barcelona a ver el milagro: Mons. Sistach, Pere Tena (que incluso recomendó al P. Jaume Dasquens abrir el Camino en Santa Maria de Gracia) Mons. Omella, Mons. Vadell, que vino en dos años el solo una decena de veces... y ahora Mons. Sergi Gordo y Javier Vilanova, que ya ha estado también en una decena de ocasiones en su corto mandato (solo hay que entrar en la web de la parroquia y mirar las noticias) ¿Que si saben lo que hacen en Santa Joaquina? Lo saben perfectamente, y lo secundan y apoyan. Pero la envidia es muy mala, y no hay más ciego que el que no quiere ver.
ResponderEliminarPorqué nadie dice nada en relación a dejar profanar los restos mortales de los salvadores de la Iglesia Católica Española?
ResponderEliminarEl artículo es profundamente injusto.
ResponderEliminar¿Nos dirá por qué, haciendo una crítica constructiva, si cabe, o trata sólo de sembrar cizaña?
EliminarA mi modo de ver, el problema no son las Parroquias, sino que el grueso de quienes las componen carecen de sentido eclesial. Familias e individuos que van a lo suyo, sin afán apostólico ni fraternal. Egoísmo puro y duro y ellos creen que están y van bien. Quienes superan esto y entienden lo que es nuestra religión y la vida de los bautizados, pero no están llamados a la vida religiosa, van a parar al Opus Dei, o al Camino Neocat. Como es lógico, quienes así se comprometen, no pueden hacer parte con los egoístas y aun así, el Opus Dei sirve no sólo directamente en varias Parroquias, sino que administra los Sacramentos sin distinción de personas. Quien esto escribe es testigo, sin ser del Opus Dei.
EliminarDemasiados movimientos y demasiadas guitarras.
ResponderEliminarMejor pocos, que mal acompañados.
Claro, lo importante es que usted y los suyos puedan entrar en el arca. Dónde vamos a parar, ¡¡¡pecadores y publicanos y gente de todo pelaje dentro en la Santa Madre Iglesia!!!. Modo "ironía on" (por si no lo capta).
EliminarMons. Munilla, uno de los más brillantes y ortodoxos Obispos españoles tiene en gran consideración y estima al Camino Neocatecumenal. También Mons. Juan Antonio Reig Pla, ptra joya del episcopado español, es el único Obispo del mundo que ha abierto dos seminarios misioneros Redemptoris Mater en España, el de Castellón y el de Alcalá de Henares. Con estos amigos yo si me fío: https://observatoriodelcaminoneocatecumenal.blogspot.com/2022/05/mons-jose-ignacio-munilla-dios-ha.html
ResponderEliminarÉsto del camino Sinodal acabará muy mal.
ResponderEliminarLos que se consideran Católicos de verdad tendrían que boicotear tal engendro Satánico.
Yo ya lo hago.
Esto del camino sinodal casi nadie ha entendido que es una cortina de humo, un modo de sostener lo que está a punto de reventar desde hace mucho tiempo y cuando esto ocurra no lo vamos a pasar bien. No se crean que el chaparrón sólo va a caer sobre los malvados. Ya lo tendríamos encima, si no fuera por la renuncia de nuestro querido Benedicto XVI. ¡¡¡Que el Papa Francisco lo sostiene!!!, porque entre tanto se salvan almas y se detiene la destrucción ¡¡¡y no se quieren enterar!!!! Y en lugar de apoyarle, dale que te pego, a ver si logran hacerle caer. Pues así, "los listos y supercatólicos", sacarán de en medio al katejón. El resto ya no hace falta que se lo cuente.
ResponderEliminarHermenegildo 20:32: Lo que el Padre Jordi ha querido decir es que hay mucho "católico" que cree que puede hacer de su capa un sayo en los asuntos de la fe que pretende profesar. Es por eso que largas son las colas para comulgar y tan pocos los que se confiesan. Es cierto que en el Opus Dei y en el Camino Neocatecumenal se toman en serio la fe católica y obran en consecuencia.
ResponderEliminarAnónimo de las 13:05. El comentarista Jordi dice en el comentario "Y soy Sacerdote", por lo que, por respeto, precisamente, me refiero a él como tal.
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