El impresentable obispo que cobijó a la Casa de Santiago

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Pere Cané y el arzobispo de Milwaukee, Rembert Weakland
     
El pasado 22 de agosto falleció con 95 años el obispo Rembert Weakland, benedictino, arzobispo emérito de Milwaukee de 1977 a 2002. Su muerte ha traído a la memoria no solo a quien fue un icono del sector más progresista del episcopado estadounidense, sino a quien fue acusado en 2002 de abuso sexual de menores y relaciones homosexuales. Ese año, un ex seminarista llamado Paul Marcoux, reveló que había sido el amante del obispo Weakland y que había recibido la suma de 450.000 dólares por guardar silencio. Detrás de este hecho se destapó un espectro aterrador: el abuso generalizado y sistemático de niños por parte del clero de la arquidiócesis de Milwaukee bajo el mandato de Weakland. El propio arzobispo, ya emérito, reconoció que sabía de su homosexualidad desde la adolescencia y que había tenido relaciones sexuales con varios hombres. Llegó a declarar que: “Todos considerábamos el abuso sexual de menores como un mal moral, pero no entendíamos su naturaleza criminal”.
      
Si grave es lo anterior, todavía más lacerante es el hecho de que Weakland obligaba a las víctimas a firmar acuerdos de conciliación con sus abusadores, con lo cual es casi imposible, hoy en día, dirigir una acción judicial contra la Iglesia en Milwaukee. Actualmente, el fiscal general del estado de Wisconsin ha obtenido parte del material del archivo secreto diocesano, en el que se revela que el arzobispo había recogido en la diócesis a varios clérigos acusados de abusos sexuales en sus demarcaciones de origen, teniendo pleno conocimiento, cuando no complicidad, en la facilitación del abuso sexual infantil.
 
¿Qué tienen que ver estos hechos lejanos con nuestras latitudes? Recordarán nuestros lectores el llamado caso de la Casa de Santiago. En especial, los abusos sexuales de los diáconos Pere Cané Gombau y Albert Salvans Giralt a un grupo de menores de la parroquia de San Pio X de Barcelona. También recordarán que el cardenal Jubany convino con los padres de una de las víctimas que retirasen la denuncia, prometiéndoles que tanto Cané como Salvans iban a ser reducidos al estado laical.
 
Albert Salvans, sacerdote en Kenia
 
La promesa de Jubany no solo no se cumplió, sino que los dos diáconos fueron ordenados sacerdotes. ¿Y dónde fue ordenado uno de ellos, concretamente Pere Cané? En la diócesis de Milwaukee, donde el arzobispo Weakland acogía a clérigos de todo el orbe con antecedentes de abuso sexual. Pero la “hospitalidad” del arzobispo de Milwaukee no se limitó a la sola persona de Pere Cané. Tanto este como Salvans y el ya ordenado sacerdote Francisco Andreo habían creado una asociación llamada Nous Camins, la cual, tras el éxodo de los diáconos de Barcelona, pasó a denominarse Comunidad Misionera de San Pablo Apóstol (MCSPA). ¿Adivinen de qué diócesis dependía? De la de Milwaukee del arzobispo Weakland. 
 
Según reportaje publicado en 2015 por Religión Digital, existe un dossier en poder del papa Francisco sobre dicha Comunidad, en la que se relata como en la casa de Milwaukee se obligaba a los chicos a estar desnudos en las habitaciones, debiendo compartir cama el recién llegado con otro sacerdote o seminarista. Era la corrupción sexual institucionalizada, acabando muchos jóvenes explotados laboral y sexualmente. Otra denuncia apareció en Infovaticana, en este caso acusando directamente a Pere Cané como abusador sexual de una niña de once años y se reiteran los desnudos obligatorios, los lechos compartidos y la explotación laboral y sexual. 
 
       
Se ha dicho, ya que el llamado caso de la Casa de Santiago, con sus posteriores ramificaciones en Nous Camins y la MCSPA, es uno de los casos más graves y que afectan a mayor número de víctimas de la pederastia eclesial. Un caso que pudo evitarse en su extensión si se hubiese obedecido al cardenal Jubany y no se hubiesen ordenado sacerdotes a los diáconos Pere Cané y Albert Salvans. ¿Quién facilitó su traslado a Milwaukee y Westminster? La pregunta que jamás se ha atrevido a desvelar la archidiócesis de Barcelona. El expediente obra en el archivo diocesano. Si facilitasen la verdad de los hechos, dos (o los tres) obispos vivos que aparecen en la lista de obispos encubridores de pederastia que publicó el diario El País podrían respirar tranquilos. Esos tres obispos son el cardenal Martínez Sistach, el arzobispo-obispo de Urgel, Joan Enric Vives y el obispo emérito de Gerona, Soler Perdigó. Omella es quien puede revelar el secreto.
 
Oriolt 

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19 comentarios

  1. Omella no revelarà nada porque Roma no quiere abrir ese melón. Y anda como loco buscando silencio sobre el caso Casa Santigo.
    Un joven acudió recientemente a Omella a explicarle las tropelías sexuales y abusadoras de un clérigo barcelones. Y Omella responde que sin pruebas es palabra contra palabra. Por fin le llevan pruebas gràficas, y entonces Omella dice que va a actuar, però no lo hace.
    Dejo aquí este testimonio, para que lo lea Omella, a ver si se le cae la cara de vergüenza. Omella encubridor.

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  2. La Revolución de 1968 (1)6 de septiembre de 2022, 5:33

    “Todos considerábamos el abuso sexual de menores como un mal moral, pero no entendíamos su naturaleza criminal”.

    Esto puedo creérmelo, porque en la cultura anglosajona, la pederastia homosexual está más extendida e intensificada en dicho mundo anglosajón.

    Los actos sexuales homosexuales estuvieron penado en la ley de sodomía de 1553, y siguieron siendo un delito pero ya dentro del ámbito civil desde 1885 hasta 1967 en ese país; en el Ejército, la pena de muerte por sodomía estuvo implantada en el siglo XIX; socialmente, las denominadas "Casas Molly" eran el lugar de encuentro de sodomitas, casados o no.

    Las dos grandes preocupaciones victorianas fueron la prostitución y la homosexualidad, por razones morales (relación de dependencia de la parte más débil, como el alumno de la escuela privada y pública, LYTTLETON, Edward. 1887. Las causas y la prevención de la inmoralidad en las escuelas. Londres: Spottiswoode and Company), pero también económica, social, criminal, religiosa y sobre todo sanitaria: en aquella época, la enfermedad venérea dejaba infértil, se transmitía entre los esposos, afectaba a los recién nacidos si la madre estaba enferma y la sífilis era mortal o gravemente incapacitante. Los antibióticos eran inexistentes y las medicinas aplicables a veces tenían más efectos yatrogénicos-secundarios tan graves como la enfermedad misma.

    De hecho, es a partir de mediados de los 1960 cuando en Gran Bretaña y en los EEUU se volvieron permisivos en materia de homosexualidad y sobre todo, en pederastia homosexual: con el tiempo, la extensión y la intensificación de la homosexualidad pederástica fue generalizada en Occidente, y con ella, la impunidad fomentada por la culpable y dolosa inacción legislativa de los políticos durante muchos años y de muchos dirigentes eclesiales, pero también de otras religiones: ¿o es que sólo se circunscribe a la Iglesia Católica? ¡No, es falso!

    Por mi profesión y estudios, pude ver revistas de guías gay de lengua inglesa donde habían fotos explícitas entre menores y mayores, fuente muy probable de donde estos pervertidos de la Casa de Santiago de que habla el artículo de hoy, y aledaños, encontraron sus inspiraciones malvadas, pues estas guías eran de sobras conocidas en Gran Bretaña y en EEUU, y por tanto, por los clérigos y laicos sodomitas de estos países y exportadas por todo el mundo, siendo California y algunos países africanos y asiáticos el paraíso de estos depravados.

    Por ejemplo, en una de estas guías se lee una sección sobre pederastia como "Publishers of fiction and scientific books about friendship, love and sexual relationships between men and boys..." (boy en inglés es técnicamente un niño que, obviamente, no es un adulto).

    También obras de ficción sobre sexualidad con niños y técnicas de seducción: Crowstone: the chronicles of Qamar (1983), de Hakim Bey; The Asbestos Diary (1966), de Casimir Dukahz; Kit (1983), de Alan Edward...

    Uno se quedaría sorprendido de la permisividad pederástica, tanto prostitucional como pornográfica, que había en los años 1970 y 1980 en los países anglosajones y por el resto de la Europa Occidental... pero que luego se extendió rápidamente por toda Europa, sobre todo por los países germanos, escandinavos y luego por España, pero sin la intensidad de los energúmenos de la anglosajonía... no hay color... si España hubiera tenido la intensidad y extensión de GB-EEUU, las Casas de Santiago estarían por la mayoría de las diócesis, a tal grado de corrupción social-eclesial se llegó en GB-EEUU...

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  3. La Revolución de 1968 (2)6 de septiembre de 2022, 5:34

    En Francia, Daniel Cohn-Bendit, el Dany el Rojo de la mitología progresista de Mayo del 68, fue acusado de relaciones pederásticas. Esta ideología depravada nace de las burguesía bo-bo o Bourgeois Bohemian (burgués bohemio) de Saint Germain des Prés, la Rive Gauche, el Barrio Latino... profesionales e intelectuales sin un pelo de tontos pero viciosos, prestos a justificar lo que sea para su placer...

    Además, en Francia el libro "El Consentimiento", cuya autora y directora de la editorial Julliard, Vanessa Springora, relata la relación de abuso que vivió con el escritor Gabriel Matzneff y analiza la complacencia de los círculos intelectuales y literarios franceses, frente a escritos que -en la década del 1970 - promovieron la criminalidad pederástica. Matzneff lo justificó según una visión romántica y casanovesca del abuso de menores, presentándose a sí mismo como un anticonformista inclasificable y como el defensor de una exquisita libertad opuesta a los mediocres placeres de la burguesía bien pensante y de la clase popular, donde se pavoneaba de su libertad de “dandy libertino” que le permitía tener relaciones abusivas con niñas y adolescentes vírgenes, que a menudo esperaba a la salida del colegio, o consumir a niños de entre 9 y 13 años durante sus viajes a las Filipinas. En 1974, Matzneff publicó "Les moins de seize ans" (Los menores de dieciséis años), un panfleto donde exalta el amor por los adolescentes y en cierto casos los niños prepúberes y donde llega a rememorar relaciones amorosas con chicos y chicas de doce años.

    Dos tribunas publicadas en los diarios Le Monde y Libération en 1977: una del 26 de enero, redactada por Matzneff y firmada por 69 intelectuales (entre ellos, Sartre, Barthes, Simone de Beauvoir, Gilles et Fanny Deleuze, Félix Guattari, Francis Ponge, Philippe Sollers…), pedía la liberación de tres hombres que habían sido encarcelados por tener relaciones sexuales con menores de 15 años; otra del 23 de mayo de 1977, en la que 80 intelectuales franceses, incluidos Foucault, Derrida o Françoise Dolto, pedían la despenalización de las relaciones sexuales entre adultos y menores de 15 años. Estas dos peticiones las inscribieron en las "luchas por la liberación sexual y la ampliación de derechos y contra la discriminación de la homosexualidad (masculina)" o la pedofilia como una causa más en la defensa de la libertad sexual y del derecho de les niños a decidir sobre su sexualidad, así como acabar con la moral judeocristiana represora y bla-bla-blé.


    En Alemania, un cabeza de lista de los Verdes, Jürgen Trittin, firmó en 1981 un manifiesto a favor de legalizar la pedofilia, pero durante los años 1970, fueron muchos los ecologistas que coquetearon con el asunto de la pedofilia y pederastia. Trittin había pedido reducir las penas a las relaciones sexuales entre adultos y niños "en determinadas ocasiones", es decir, aquellas consentidas y sin violencia.

    Para Alemania, se calculó en 2014 que había unos 250.000 pedófilos que consumen material pornográfico infantil, según el experto de Medicina Sexual de la Clínica Universitaria de Schleswig Holstein, Jorge Posenti, que calcula que "el 0,7% de la población alemana masculina se siente sexualmente atraído hacia los niños". Efectos de la revolución de 1960...

    En Cataluña hemos tenido los casos de la gincana sexual de Vilassar de Mar con niños, el escultor Bjorn Norgaard desnudo en la entrada de la Cova de Manresa, o la Generalidad anima a las mujeres a hacer topless, sean menores o mayores... más depravación de la revolución de 1968...

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  4. La Revolución de 1968 (3)6 de septiembre de 2022, 5:34

    Para refrendar esto, está la carta de Benedicto XVI:

    aciprensa.com/noticias/el-diagnostico-de-benedicto-xvi-sobre-la-iglesia-y-los-abusos-sexuales-35201

    Benedicto XVI habla sobre problemas antiguos pero actuales:

    "(1) Intento mostrar [en la 1ª parte] que en la década de 1960 ocurrió un gran evento, en una escala sin precedentes en la historia. Se puede decir que en los 20 años entre 1960 y 1980, los estándares vinculantes hasta entonces respecto a la sexualidad colapsaron completamente, y surgió una nueva normalidad que hasta ahora ha sido sujeta de varios laboriosos intentos de disrupción.

    (2) En la 2ª parte, busco precisar los efectos de esta situación en la formación de los sacerdotes y en sus vidas.

    (3) Finalmente, en la 3ª parte, me gustaría desarrollar algunas perspectivas para una adecuada respuesta por parte de la Iglesia.

    ---

    (1) El asunto comienza con la introducción de los niños y jóvenes en la naturaleza de la sexualidad, algo prescrita y apoyado por el Estado. En Alemania, la entonces ministra de salud, (Käte) Strobel, tenía una cinta en la que todo lo que antes no se permitía enseñar públicamente, incluidas las relaciones sexuales, se mostraba ahora con el propósito de educar. Lo que al principio se buscaba que fuera solo para la educación sexual de los jóvenes, se aceptó luego como una opción factible.

    Efectos similares se lograron con el "Sexkoffer" publicado por el gobierno de Austria (Materiales sexuales usados en los colegios austríacos a fines de la década de 1980). Las películas pornográficas y con contenido sexual se convirtieron entonces en algo común, hasta el punto que se transmitían en pequeños cines (Bahnhofskinos) (cines baratos en Alemania que proyectaban pequeñas cintas cerca a las estaciones de tren).

    Todavía recuerdo haber visto, mientras caminaba en la ciudad de Ratisbona un día, multitudes haciendo cola ante un gran cine, algo que habíamos visto antes solo en tiempos de guerra, cuando se esperaba una asignación especial. También recuerdo haber llegado a la ciudad el Viernes Santo de 1970 y ver en las vallas publicitarias un gran afiche de dos personas completamente desnudas y abrazadas.

    Entre las libertades por las que la Revolución de 1968 peleó estaba la libertad sexual total, una que ya no tuviera normas. La voluntad de usar la violencia, que caracterizó esos años, está fuertemente relacionada con este colapso mental. De hecho, las cintas sexuales ya no se permitían en los aviones porque podían generar violencia en la pequeña comunidad de pasajeros. Y dado que los excesos en la vestimenta también provocaban agresiones, los directores de los colegios hicieron varios intentos para introducir una vestimenta escolar que facilitara un clima para el aprendizaje.

    Parte de la fisionomía de la Revolución del 68 fue que la pedofilia también se diagnosticó como permitida y apropiada.

    Para los jóvenes en la Iglesia, pero no solo para ellos, esto fue en muchas formas un tiempo muy difícil. Siempre me he preguntado cómo los jóvenes en esta situación se podían acercar al sacerdocio y aceptarlo con todas sus ramificaciones. El extenso colapso de las siguientes generaciones de sacerdotes en aquellos años y el gran número de laicizaciones fueron una consecuencia de todos estos desarrollos.

    (2) Al mismo tiempo, independientemente de este desarrollo, la teología moral católica sufrió un colapso que dejó a la Iglesia indefensa ante estos cambios en la sociedad. Trataré de delinear brevemente la trayectoria que siguió este desarrollo.

    Hasta el Concilio Vaticano II, la teología moral católica estaba ampliamente fundada en la ley natural, mientras que las Sagradas Escrituras se citaban solamente para tener contexto o justificación. En la lucha del Concilio [Vaticano II] por un nuevo entendimiento de la Revelación, la opción por la ley natural fue ampliamente abandonada, y se exigió una teología moral basada enteramente en la Biblia.

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  5. La Revolución de 1968 (y 4)6 de septiembre de 2022, 5:34

    Al final, prevaleció principalmente la hipótesis de que la moralidad debía ser exclusivamente determinada por los propósitos de la acción humana. Si bien la antigua frase “el fin justifica los medios” no fue confirmada en esta forma cruda, su modo de pensar si se había convertido en definitivo.

    En consecuencia, ya no podía haber nada que constituya un bien absoluto [intrinsece bonum per se], ni nada que fuera fundamentalmente malo [intrinsece malum per se semper et pro semper in omnibus locis]; (podía haber) solo juicios de valor relativos. Ya no había bien (absoluto), sino solo lo relativamente mejor o contingente en el momento y en circunstancias [bonum imperfectum et incompletum] (nota personal: es lo que hace Amoris laetitia al permitir la comunión y absolución de adúlteros impenitentes si hay una moral de circunstancias]

    La crisis de la justificación y la presentación de la moralidad católica llegaron a proporciones dramáticas al final de la década de 1980 y en la de 1990. El 5 de enero de 1989 se publicó la “Declaración de Colonia”, firmada por 15 profesores católicos de teología. Se centró en varios puntos de la crisis en la relación entre el magisterio episcopal y la tarea de la teología. (Las reacciones a) este texto, que al principio no fue más allá del nivel usual de protestas, creció muy rápidamente y se convirtió en un grito contra el magisterio de la Iglesia y reunió, clara y visiblemente, el potencial de protesta global contra los esperados textos doctrinales de Juan Pablo II. (D. Mieth, Kölner Erklärung, LThK, VI3, p. 196) (LThK: Lexikon für Theologie und Kirche o Lexicon de Teología y la Iglesia, presentes Karl Rahner y Walter Kasper)

    El Papa Juan Pablo II, que conocía muy bien y que seguía de cerca la situación en la que estaba la teología moral, comisionó el trabajo de una encíclica para poner las cosas en claro nuevamente. Se publicó con el título de Veritatis splendor el 6 de agosto de 1993 y generó diversas reacciones vehementes por parte de los teólogos morales. Antes de eso, el Catecismo de la Iglesia Católica (1992) ya había presentado persuasivamente y de modo sistemático la moralidad como es proclamada por la Iglesia.

    Nunca olvidaré cómo el entonces líder teólogo moral de lengua alemana, Franz Böckle, habiendo regresado a su natal Suiza tras su retiro, anunció con respecto a la Veritatis splendor que si la encíclica determinaba que había acciones que siempre y en todas circunstancias podían clasificarse como malas, entonces él la rebatiría con todos los recursos a su disposición.

    Fue Dios, el Misericordioso, quien evitó que pusiera en práctica su resolución ya que Böckle murió el 8 de julio de 1991. La encíclica fue publicada el 6 de agosto de 1993 y efectivamente incluía la determinación de que había acciones que nunca pueden ser buenas.

    El Papa era totalmente consciente de la importancia de esta decisión en ese momento y para esta parte del texto consultó nuevamente a los mejores especialistas que no tomaron parte en la edición de la encíclica. Él sabía que no debía dejar duda sobre el hecho que la moralidad de balancear los bienes debe tener siempre un límite último. Hay bienes que nunca están sujetos a concesiones.

    Hay valores que nunca deben ser abandonados por un valor mayor e incluso sobrepasar la preservación de la vida física. Existe el martirio. Dios es más, incluida la sobrevivencia física. Una vida comprada por la negación de Dios, una vida que se base en una mentira final, no es vida.

    El martirio es la categoría básica de la existencia cristiana. El hecho que ya no sea moralmente necesario en la teoría que defiende Böckle y muchos otros demuestra que la misma esencia del cristianismo está en juego aquí.

    ...

    El resto de la Carta es de transcendental interés para entender la grave crisis fideística y moral de la Iglesia bajo Bergoglio, pues es la expresión final del progresismo modernista hecha actualidad y presente en marcha.

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  6. Mucha porquería en la diócesis de Barcelona. Sigan tapando las ollas, que mientras más se tapan, más hierven y llegará el momento que las tapas saldrán por los aires. Por mi parte espero el momento más oportuno para hablar del tema públicamente, tema de abuso grave en el que está involucrado un párroco diocesano que aún está en activo y que de los hechos son consientes en el palacio arzobispal y no han hecho absolutamente nada.

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    1. Hombre, si es así tendrá usted que hablar en seguida, no ir dejando de ir pueda haber otras víctimas… Lo que dice usted no es muy cabal

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  7. Es gravísimo todo el tema de la pederastia eclesial, no solo por los abusos en si mismos, sino porque supone la muerte de la fe de jóvenes adolescentes, que después de abusados, nunca podrán ver a un clérigo como un padre, sino como un abusador, y por tanto, tendrán muy difícil, entender a la Iglesia como madre.
    Pero no hemos de olvidar que este tema es sólo un pretexto de algunos ámbitos de la sociedad civil para atacar a la Iglesia, y que en cuanto pase el vendaval, se va a legalizar la pederastia. Porque al rebajar la edad de consentimiento sexual a 14 años, como ha tenido España y otros países, de hecho muchos de estos abusos, han sido y son totalmente legales.
    Y otro tema escandaloso, es que siendo la pederastia un problema de toda la sociedad, y que el 99 % de los abusos se dan en ámbitos escolares, deportivos, familiares, a nadie le interesa investigar estos ámbitos. Es más, en los centros civiles de menores donde se han dado muchos casos de prostitución, son tapados por los mismos políticos que luego claman contra la Iglesia.

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  8. No entenc què pretén el Sr. Oriol i el que han escrit comentaris a aquest escrit.

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  9. El código de derecho canónico tendría que incorporar la pena de muerte para los pedófilos, 15 azotes a los clérigos fornicarios y 40 azotes a los clérigos sodomitas. Otro gallo cantaria

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    1. Pues me parece a mi que el verdugo tendría la muñeca hecha polvo si fuera por dar cada vez que tuviese que dar 40 azotes porque el clero está que se sale!

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  10. No entiendo como Germinans permite que repetidamente se mencione la pederastia clerical la cual sólo es un 0,2 por ciento del total social. Nos estamos haciendo un mal gravísimo entre nosotros los católicos al ventilar repetidamente y públicamente este tema, ya se encargan los ateos y anticlericales de clavar las críticas contra los curas y no hace ninguna falta que nos infrinjamos nosotros mismos esta escandalosa penitencia. Las criticas eclesiales deben ser positivas no negativas. Desde el momento que se ridiculiza a un obispo nos hacemos cómplices destructivos de la comunidad.

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    1. Completamente de acuerdo, Silveri.

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    2. El Sr. Garrell es un gran devoto de la segunda lectura. Estoy totalmente de acuerdo con lo que dice. Pero hay que hacer limpieza y el sabe que es muy necesario también en su diócesis.

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  11. ¡¡Castración química!! Y se acabó ABSOLUTAMENTE el problema.Que cambien el C.D.C y lo implanten. Se presupone que NO van a hacer uso del sexo ¿no?.Pues ya está, asunto arreglado.Si no lo hacen... ¿Porqué será?....Pues porque hacen uso del mismo,ergo...
    Al margen de que se acabarían estos problemas.¡¡es ABSOLUTAMENTE Bíblico!!.Lo dijo el mismo Jesús: "hay algunos que se hacen EUNUCOS por el Reino de los Cielos".Ya pueden empezar a tomar nota.

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  12. Todo esto es fácil de entender... Esta gentuza hicieron una iglesia propia... La de Santanas

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    1. Querrá usted decir SATANÁS no Santanas, verdad???

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  13. Raymond Leo Burke, próximo Papa!!!

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