El apelativo Dominica palmarum que en el uso litúrgico este domingo recibió desde tiempos de San Isidoro de Sevilla (+636) parece haya hecho olvidar aquel otro más antiguo y originario De passione Domini recordado en los sermones de los Padres Latinos de los siglos IV y V.
La liturgia de este día es la resultante de la unión de dos ritos de origen y carácter bien diverso: la bendición y procesión de los ramos de una parte y la conmemoración solemne de la Pasión de Cristo por otra, ritos que en el trascurso de los siglos se han desarrollado de manera varia si bien permaneciendo netamente distintos.
El origen de la Procesión de Ramos ha suscitado muchas discusiones, pero parece ser haya que encontrarla en las costumbres de la Iglesia Madre de Jerusalén del siglo IV. La entrada triunfal de Cristo en la Ciudad Santa desde el siglo II había sido considerada una de las mayores afirmaciones de mesianismo, motivo por el cual su conmemoración histórica implicaba una dimensión apologética singular. Egeria refiere en su Peregrinatio que el domingo antes de Pascua hacia la hora séptima (13h) el pueblo con el obispo se reunía en el Monte de los Olivos entre la Basílica del Eleona y la del Imbomon (Ascensión). Se empezaban a cantar himnos y antífonas, intercalados de lecturas y oraciones, hasta que a la hora undécima (17h) leído el evangelio que describe la entrada de Jesús en Jerusalén, todos salían y llevando ramos de olivo y palmas, entre el canto de himnos y salmos intercalados con el Benedictus qui venit in nomine Domini, bajaban procesionalmente con el obispo a la ciudad dirigiéndose a la iglesia del Anástasis (Santo Sepulcro) donde la función acababa con el oficio vespertino (lucernario de vísperas). Ninguna referencia a bendición de ramos. Con el tiempo el pintoresco rito adquirió mayor relieve y solemnidad ya que en el siglo VI las estaciones del recorrido eran ya cinco, y otras Iglesias orientales (Edesa y Constantinopla) la habían introducido en sus rituales. Se desconoce cuando pasó este uso a Occidente pero los primeros trazos los encontramos en España, ya que San Isidoro en su Liber Ordinum lo menciona, así como el Misal de Bobbio cuyas fórmulas muestran evidentes puntos de contacto con la liturgia hispánica y con la bizantina.
Beda el Venerable (+735) en la homilía para el domingo de Ramos, conoce no sólo la fiesta sino una ceremonia litúrgica de las palmas. El versus de Teodolfo de Orleans (760-821) “Gloria, laus et honor tibi sit” que gozó de tanta popularidad en la Edad Media y que fue recogido en parte en el misal, dan testimonio de un gran y rápida difusión del rito. En Roma los sacramentarios Gelasiano y Gregoriano hacen expresa mención de la fiesta y del rito, este último incluye una bendición a los portadores de las palmas. En el ritual Romano-germánico del siglo X encontramos el más antiguo ritual de la procesión de Ramos y numerosas fórmulas de bendición.
El deseo de reproducir litúrgicamente las circunstancias de la triunfal entrada de Jesús en Jerusalén, otorgó a la procesión de ramos en la Edad Media un carácter dramático, vivo y profundo, que no encuentra parangón en otras solemnidades del año: todo el pueblo, con el obispo a la cabeza y el clero, se reunía en una iglesia fuera de la ciudad o en un exterior elevado, como representando el Monte de los Olivos. Después de la lectura del Éxodo 15,27 Venerunt filii Israël in Elim (Y llegaron los hijos de Israel a Elim, donde había doce fuentes de aguas, y setenta palmeras; y acamparon allí junto a las aguas), se bendecían los ramos con una larga serie de oraciones y se distribuían. Comenzaba a caminar la gran procesión en la que la persona de Jesucristo era presentada o bien por el Evangeliario, envuelto en un paño púrpura, colocado en una peana, ricamente adornado y llevado por cuatro diáconos, o bien por un gran Crucifijo sin velar adornado de ramas verdes. Durante el cortejo se alternaban antífonas y los niños lanzaban flores al paso de los diáconos.
Llegados a la entrada de la ciudad, los pueri cantores cubrían el paso de la Cruz con sus capas y mantos, adorándola de rodillas, mientras el clero cantaba Kyrie eleison y Pueri Hebraeorum. Acabado este canto comenzaba el himno de Teodolfo “Gloria Laus et Honor tibi sit.” Comenzaba el homenaje del pueblo que pasaba delante ofreciendo sus flores y adorándola mientras se cantaba la antífona Omnes collaudent nomen tuum (Todos alabarán tu nombre) y el salmo Lauda Jerusalem. El último en adorar era el obispo con el clero mientras el coro cantaba Percutiam pastorem (Herirán al pastor y las ovejas se dispersarán). A estas palabras un clérigo con la mano o con una palma golpeaba ligeramente la espalda del obispo. A partir de ese momento el cortejo procesional entraba en la ciudad cantando Ingrediente Domino in sanctam civitatem (Entrando el Señor en la ciudad santa) hasta la puerta de la catedral donde después de cantar el Benedictus qui venit (Bendito el que viene en nombre del Señor) el obispo concluía la procesión con una oración. En Roma el lugar de partida era Santa María la Mayor y el destino San Juan de Letrán, estación de aquel día. A representar a Cristo, el Evangeliario recubierto de un lienzo púrpura.
En Inglaterra y en Normandía, parece que Lanfranco de Canterbury (+1089) introdujo la costumbre de llevar la Eucaristía. En los pequeños pueblos de esas tierras la meta era la cruz del cementerio que por esa razón era llamada Cruz de la Palma (Palm Cross). En Alemania desde el tiempo de San Ulrico de Augsburgo en Baviera (+973) se solía llevar una borriquita (Palmesel) de madera con una estatua de Jesucristo sentado sobre ella, que después se colocaba en la iglesia hasta la noche del miércoles santo para veneración de los fieles. En Milán la bendición de ramos tenía lugar en la basílica de San Lorenzo desde donde el Arzobispo, montado sobre un caballo guarnecido con ricos arneses, se dirigía hacia la basílica de San Ambrosio donde se cantaba la Misa.
Procesión de la borriquita |
Hasta la reforma litúrgica de la Semana Santa de Pío XII de 1956 (el Decreto de Reforma está fechado el 16 de noviembre del 55) las puertas de la iglesia no se abrían hasta que el subdiácono crucífero no golpeaba tres veces la puerta con la cruz procesional. Esta característica ceremonia se encuentra ya en el Pontificale Romano del siglo XII pero no fue introducida en el misal hasta 1604: simboliza la entrada en el cielo de los justos con Cristo a la cabeza en virtud de su Cruz, al tercer día de su muerte. La Cruz permanecía velada, como permanece velada a los ojos humanos su divinidad en medio de sus sufrimientos.
Canto de la Pasión en el Sacrato de S. Pedro |
La misa de este domingo está consagrada por completo a la memoria de la Pasión del Señor. La epístola recuerda la humillación heroica de “Jesús hasta la muerte y una muerte de Cruz”. Se lee o se canta la Pasión según San Mateo de manera solemne por tres cantores: uno representa el cronista, otro Jesucristo y otro las diversas personas que intervienen (Turba). Posteriormente se introdujo la rúbrica de que los tres fuesen diáconos y llevar estola. Hasta el siglo XV en Italia y para acentuar el dramatismo, las palabras de la Turba eran cantadas por un coro de cantores.
Emisit spiritum |
Cuando el diácono-cronista llega al emisit spiritum (…y entregó el espíritu) todos se arrodillan reverencialmente. Esta piadosa costumbre no es muy antigua: Godofredo de Beaulieu narra que San Luis, rey de Francia (+1270), lo observó en algunos monasterios benedictinos y lo introdujo en su capilla privada y lo hizo adoptar por los frailes dominicos. En Roma fue adoptado a finales del siglo XIV.
Mn. Francesc M. Espinar Comas
Párroco del Fondo de Santa Coloma de G.
La desaparición de todas esas ceremonias no sacramentales -en este caso la de colpear las puertas del templo con la cruz para abrirlo- son uno de esos dramas etnologicos que tanto ha contribuido a descatolizar las sociedades católicas y a vaciar la civilización católica.
ResponderEliminarTípico de los intelectuales.
Cuando estos supremacistas se lían la manta a la cabeza, son como un elefante en una cristalería...!no dejan piedra sobre piedra!
Naturalmente en nombre de la Ciencia, de la Filosofía y de la lógica.
Al final, como para ellos lo único importante es leer libros, todo lo que no sea un libro o no este dentro de un libro, o no vale o no existe.
Como la realidad es terca, tarde o temprano les pone a estos engreidos firmes y a nosotros, papanatas sufridores, a recoger los vidrios rotos... (los que sobrevivamos a estas ocurrencias)
Revolución Francesa, Republica masonica, socialismo, comunismo, concilio...
No dan ni una.
Y nosotros tampoco, por creerles y obedecerles con los ojos cerrados, sabiendo que son unos necios y unos inútiles.
Espero que Mn Espinar recupere (y explique ) esta ceremonia prohibida a su grey.
Si después de toda la sesión lo único que se llevan a casa es esta ceremonia y su participación en ella (si; con un selfis, también; y si lo comparten por las redes sociales, mucho mejor -evangelización cibernetica-), pues ese domingo ya habrán cumplido la casilla de salvación.
"Hasta la reforma litúrgica de la Semana Santa de Pío XII de 1956 (el Decreto de Reforma está fechado el 16 de noviembre del 55) las puertas de la iglesia no se abrían hasta que el subdiácono crucífero no golpeaba tres veces la puerta con la cruz procesional"
ResponderEliminarCon ánimo de dar más información sobre la liturgia, la Semana Santa y la presente crisis católica, me gustaría dar unas opiniones personales, que en gran parte están fundamentadas en otros documentos.
A. La reforma litúrgica:
1. El primer antecedente de la "reforma litúrgica modernista", lista para barrer el misal de 1570, se dio mediante la Reforma del Breviario Romano por el Papa Pío X, en la constitución apostólica Divino afflatu del (1 noviembre 1911), que suprimió el Salterio romano.
Se entiende como "modernista" a lo que aquellas generaciones de liturgistas de 1911 y 1970 (Concilio Vaticano II) entendía que debía ser una Nueva Liturgia puesta al servicio de la "nueva mentalidad generacional", sobre todo surgida de la Europa de la postguerra de 1945 y del inicio de la Guerra Fría en 1947 contra la URSS, y que dio lugar a la división bipolar del mundo entre capitalismo (EEUU) contra comunismo (URSS), iniciándose ya una incipiente sociedad mediotecnológica (radio y televisión), del bienestar, del estrés y de los estilos de vida, que en una mayor parte, ya nada tiene que ver con nuestra sociedad altotecnológica de China, la genética, la nanotecnología, la informática e internet, pero sí en el estrés y los estilos de vida. La red telegráfica atlántica de 1901 fue la primera globalización de las comunicaciones, y conectó informativamente EEUU con Europa y ésta con sus colonias, por eso, en 1911 ya existía una ekumene modernista-cientifista en EEUU y Europa.
Pasó la I y II guerras mundiales para llegar a la postguerra:
2. Pío XII, en Mediator dei, sobre la Sagrada Liturgia, en el numeral 10, ya tenía in mente una nueva gran reforma litúrgica bajo el monopolio de la potestad pontificia:
10º Sin embargo, mientras que, por los saludables frutos que de él se derivan [una nueva traducción de los Salmos], el apostolado litúrgico es para Nos de no poco consuelo, nuestro deber nos impone seguir con atención esta «renovación», como algunos la llaman, y procurar diligentemente que estas iniciativas no se conviertan ni en excesivas ni en defectuosas.
B) Sobre la liturgia de la Semana Santa:
1. El Missale Romanum de 1945, que contiene, para todos los efectos prácticos, la liturgia de la Semana Santa del Misal tridentino de 1570, Pío XII en 1948 ya intentó reformarla creando una comisión de unos 6 consagrados, con Bugnini en segunda línea. Su misión fue reformar la liturgia de la Semana Santa y después, la Liturgia en su conjunto.
2. En 1950, también bajo Pío XII, se modificaron los ritos de ordenación diaconal, presbiteral, y pontifical, para adaptarlos a la mentalidad del Papa.
3. En 1952, el Decreto de la Sagrada Congregación de Ritos instauró ad experimentum La Vigilia Pascual Restaurada, Ordo Sabbati Sancti, vigente sólo para 3 años. En 1955, al promulgarse la reforma integral de la Semana Santa, se deroga este libro, que se integraría en el nuevo Ordo Hebdomadae Sanctae.
4. Los cambios de la reforma de la Semana Santa del 30 de noviembre de 1955, en el decreto Maxima redemptionis nostrae mysteria de Pio XII, bajo Montini (futuro Pablo VI) y Bugnini, fueron importantes, de estilo "modernista", precursoras del misal "modernista" de Pablo VI de 1969.
5. El rito tradicional sufrió la última "reforma" con el misal de Juan XXIII de 1962 (y el 2020 con Francisco), el cual incluyó las reformas de la Semana Santa de Pío XII de 1955. El misal de Pablo VI de 1969 asume la reforma de la Semana Santa de 1955, pero pertenece ya a otro tipo diferente de liturgia latina, la liturgia vaticanosegunda.
Conclusión: el "reformismo" litúrgico ya estaba preparado in mente en 1948 de manos del tardotridentismo, con antecedentes en 1911. (Ver Nota final)
Semana Santa 3:14
EliminarYo no sé de tantas "reformas"
Pero sí sé que las religiones verdaderas son "eternas", "divinas", no creadas por mano humana.
No necesitan ser ni modernizadas ni reformadas.
Si hay que modernizar o reformar, por lo tanto no valen o están estropeadas.
Y si no valen, están estropeadas o están "viejas" es que no son divinas. Son falsas.
Si son falsas, los que siguen estas religiosas humanas son idiotas, necios o tontos.
Su comentario me recuerdan algunos gupos religiosos de América del Norte o grupos religiosos del Este de Europa que evolucionaron hasta principios del siglos XIX pero a partir de este momento fijaron su indumentaria y modos de vida de aquellos momentos.
EliminarTodo cambia y evoluciona. Debemos acomodarnos a los nuevos tiempos. Recordemos el primer mantdato bíblico "Creced y multiplicaros y dominad la Tierra " Genesis 1:28
22:22
EliminarNo hace falta acudir a sectas protestantes (comunidades que se han conservado justamente porque han decidido no cambiar, lo cual es una decisión a la que tienen derecho).
No tiene más que acudir a las Iglesias apostólicas: a las ortodoxas, a la Armenia, a la Caldea, a la Siria, a la Copta, a la Etiope...
Y si no le gusta el cristianismo, a las sectas budistas, a los cultos animistas...
No todo cambia y evoluciona.
Y lo que ha de cambiar y evolucionar es para ir a mejor, nunca a peor.
Cuando se va a peor NO es un cambio ni una evolución, sino un SUICIDIO y una DESTRUCCION.
Si usted no lo ve, es porque o es muy joven y no ha conocido otra cosa o porque no lo quiere ver y es un malvado.
Que Dios le ilumine y le perdone.
C) El asombroso invento del lavatorio de los pies de Francisco el 2016
ResponderEliminarEl Decreto "IN MISSA IN CENA DOMINI", con el "Comentario" posterior, de Francisco de 2016, introduce un verdadero invento de la nada para el lavatorio de pies de la misa de Jueves Santo: en lugar de efectuar el lavatorio de los pies a doce varones durante la Misa en la Cena del Señor, después de la lectura del Evangelio según san Juan, sobre la humildad y amor hacia el grupo de apóstoles-sacerdotes, "el grupo... compuesto de hombres y mujeres, y es conveniente que formen parte de él jóvenes y ancianos, sanos y enfermos, clérigos, consagrados, laicos."
En mi estricta opinión, el lavatorio de pies válido y lícito debe de hacerse con 12 sacerdotes u hombres adultos de fe probada, según el depósito de la fe. No es válido alegar antecedentes históricos, precedentes en los EEUU, a que es una simple paraliturgia o que no hay que tener en cuenta el contexto teológico del lavatorio.
La reforma de Francisco tiene graves repercusiones, a mi parecer: el lavatorio de pies por representación sociológica del Pueblo de Dios no es ni lícito ni válido, así como el lavatorio de pies de libre elección universal como símbolo de simple servicio u amor.
1./ El Decreto In missa in Cena Domini, de 6 de enero del 2016, junto con el "Comentario" posterior, por el que se modifica el sacramental del lavatorio de pies, Liturgia de la Misa in Coena Domini, mediante la reforma de la norma de las rúbricas del Missale Romanum, estableciendo que "los pastores puedan designar un pequeño grupo de fieles que represente la variedad y la unidad de cada porción del pueblo de Dios. Este pequeño grupo puede estar compuesto de hombres y mujeres, y es conveniente que formen parte de él jóvenes y ancianos, sanos y enfermos, clérigos, consagrados, laicos", contradice la Sagrada Escritura y la Sagrada Tradición, y por tanto, no puede llevarse a cabo, por las siguientes razones. Es decir, hay un abuso litúrgico objetivo desde el Papado, aún siendo de buena fe (elemento subjetivo), sin culpa, ni responsabilidad o imputabilidad.
2./ En los actos litúrgicos de la Iglesia Católica, no pueden participar ni no-católicos (luteranos, anglicanos, budistas, nuevaeranos...) ni tampoco católicos en pecado grave intrinsece malum no arrepentido (adulterio, aborto, eutanasia, homosexualidad...)
3./ Los actos litúrgicos no pueden ir contra la Sagrada Escritura ni la Sagrada Tradición.
4./ La reforma del lavatorio de pies, va contra la verdad divina contenida en la Revelación Pública, que se compone de la Sagrada Escritura, practicada por la Sagrada Tradición, que conforman el depósito de la fe.
a) Sagradas Escrituras: el sacramental del lavatorio de pies está contenido en el Evangelio según San Juan, Capítulo 13.
b) Sagrada Tradición de la Iglesia: de forma inveterada, siempre se ha lavado los pies de 12 hombres sanos de fe probada o de 12 presbíteros en la Misa in Coena Domini.
c) El Papa ha lavado los pies de 12 sacerdotes en la catedral de Roma, la basílica de San Juan de Letrán.
d) A pesar de su norma, durante los lavatorios del 2016 y 2017, Francisco ha incumplido su propia norma, pues lo ha efectuado en dos prisiones, ante 6 mujeres, un niño, jóvenes, ortodoxos, musulmanes, hindúes, ateos. Francisco dice que no cumple con sus propias normas, alegando que lo hace por necesidad y de corazón.
5./ No corresponde al sacramental del lavatorio el poner como principio único superior, el visibilizar en un acto litúrgico a una representación sociológica estadística del Pueblo de Dios de la parroquia o diócesis, pues puede poner a católicos que estén en pecado grave objetivo (adulterio, aborto) o sean inidóneos (mujeres, niños, jóvenes sin edad para ser sacerdotes).
6./ Las mujeres no pueden recibir el sacramento del Orden: no pueden ser diáconos, presbíteros y obispos, ni cardenales ni Papa. Lo mismo para los niños y los jóvenes y otros católicos que por edad, enfermedad y estado de gracia, tampoco pueden acceder. Y sobre todo, los creyentes de otras religiones y ateos, pues los no católicos no pueden intervenir en actos litúrgicos.
ResponderEliminar7./ El lavatorio de pies se realiza sobre hombres y sólo hombres católicos de fe probada o presbíteros, por si son llamados como Aarón al diaconado o al presbiterado del Orden de Melquisedec.
8./ Jesús lavó los pies de sus 12 Apóstoles, no de sus 72 discípulos y del resto de seguidores.
9./ Jesús tampoco no lavó los pies de los pobres de las periferias del Pueblo de Israel, publicanos, mendigos, marginados, ancianos, enfermos, discapacitados, emigrantes, esclavos, ni tampoco a otros creyentes, como romanos, griegos, partos o egipcios, ni a su madre María, ni a María Magdalena, ni a las discípulas, ni a publicanos y prostitutas. Sólo a sus 12 Apóstoles.
10./ Tampoco Jesús dijo que los pies de los Apóstoles fueran limpiados por todos los anteriores (lavatorio inverso).
11./ Jesús sólo lavó los pies, no otras partes del cuerpo, como las manos o los cabellos, y que en algún sitio se añaden indebidamente.
12./ El significado del lavatorio de los pies tiene tres momentos transcendentales:
a) acto de humildad y de servicio como figura de servicio gratuito hasta el martirio primero de Jesús Único Sacerdote a su Esposa la Iglesia, luego de Jesús a sus Apóstoles, y de los sucesores de los Apóstoles a los fieles para la única finalidad propia del sacerdocio: la salvación de las almas, pues por eso son elegidos como Aarón para pertenecer al Orden de Melquisedec "lavaros los pies unos a otros (Juan 13, 14"), "Os he dado ejemplo, para que lo que yo he hecho con vosotros, también lo hagáis vosotros” (Jn 13, 15), "siendo vuestro Señor y Maestro, os he lavado los pies, vosotros también debéis lavaros los pies unos a otros" (Jn 13, 13-14)
b) baño del agua: símbolo del Bautismo, que purifica y lava a la Iglesia;
c) levantarse, llenar y llevar la jofaina, ceñirse la toalla: son gestos que junto con la Palabra, representan a la Liturgia (gestos y palabras).
13./ También hay estos aspectos en el sacramental del lavatorio de pies:
a) Su contexto propio es la Última Cena, en la que se crea la institución del Sacerdocio ("haced esto") y de la Eucaristía ("esto es mi cuerpo", "esto es mi Sangre"), con el Mandato del Amor ("amaros los unos a los otros") y el Discurso de la Cena, con su Oración de Unidad Sacerdotal.
b) El lavatorio está en el contexto de la Última Cena orientado a la Pasión, Muerte y Resurección, y es una ascensión. Los Apóstoles ascienden para ir al cenáculo, porque los Apóstoles subieron al monte Sión donde está Jerusalén para la Última Cena.
c) El lavatorio es un rito para quienes ya están limpios por el baño: «El que se ha bañado no necesita lavarse más que los pies, porque está completamente limpio. Vosotros también estáis limpios, aunque no todos». (Juan 13, 10)
d) El lavatorio es un acto sacrificial, por el que Jesús, Dios y Hombre verdadero, Único y Santo Sacerdote, la Víctima pura y santa, indica que Cristo quiere que su Esposa, la Iglesia, sea pura y santa, que es amada por Él hasta la muerte, sirviendola perfectamente para su fin, la salvación de las almas, y que sus sacerdotes den la vida martirial por la Esposa y estén unidos en la Cruz con Cristo.
e) Es la preparación del nacimiento de la Iglesia ante la representación de los 12 Apóstoles
f) Es la pertenencia y Alianza de Cristo, Único y Santo Sacerdote, con Pedro, de Pedro con los 12 Apóstoles, y de estos con sus sucesores en el ministerio sacerdotal
g) Es la preparación para el acto supremo de dar la vida en la Cruz de los sacerdotes
h) Es la coparticipación en los sufrimientos y dolores de su Pasión, muerte y Resurrección, en el martirio por la salvación de las almas
i) La Iglesia, representada por los 12 Apóstoles, ya limpia de cuerpo por el baño del agua bautismal y la fuerza de la Palabra, sea pura, santa e inmaculada por el final lavatorio de los pies
ResponderEliminarj) Ser cristiano significa dejarse lavar los pies, o, en otras palabras, creer.
k) Es aceptar que también el cristiano, fiel y consagrado, tiene necesidad del perdón, que también sus pies están sucios.
l) Es el único lavatorio verdadero del hombre, el único lavatorio capaz de prepararle para la comunión con Dios, es decir, capaz de hacerle libre del pecado que hace esclavo
m) El lavatorio no es el amor universal entre todos los hombres, sino únicamente del amor que ha de vivirse en el interior de las pequeñas comunidades de los hermanos católicos, es decir, de los bautizados, antes de realizar estas comunidades dicho el amor universal.
n) El lavatorio implica que la estructura sacramental implica la estructura eclesial, la estructura de la fraternidad.
14./ El Sumo Pontífice tiene límites y condicionantes bien definidos y claros en relación a la reforma de la liturgia:
a) Juan Pablo II: “La suprema autoridad de la Iglesia NO puede cambiar la liturgia a su arbitrio, sino solamente en virtud del servicio de la fe y en el respeto religioso al misterio de la liturgia.” (Catecismo 1125)
b) Benedicto XVI: "Me parece muy importante que el Catecismo, mencionando los límites del poder de la suprema autoridad de la Iglesia sobre la reforma, recuerde cuál es la esencia del primado, tal como la resaltan los Concilios Vaticanos I y II: el Papa NO ES UN MONARCA ABSOLUTO CUYA VOLUNTAD ES LEY; más bien, es el custodio de la antigua Tradición (la 2ª fuente de la divina revelación), y el primer garante de la obediencia. No puede hacer lo que quiere, y precisamente por esto puede oponerse a quienes pretenden hacer lo que quieren. La ley a la que debe atenerse no es el actuar ‘ad libitum’, sino la obediencia a la fe. (Joseph Ratzinger, prólogo libro Alcuin Reid “Lo sviluppo organico della liturgia” [“El desarrollo orgánico de la liturgia”], Cantagalli, Siena, 2013)"
15./ Por tanto, este Rito del lavatorio de pies se refiere unas promesas de Cristo, Único y Santo Sacerdote del orden de Melquisedec, por el que hace una alianza de pertenencia y unión inquebrantable entre Cristo con los Apóstoles y sus sucesores en el orden sacerdotal, y les hace copartícipes de los sufrimientos salvíficos de la Pasión, Muerte y Resurrección gloriosa, que sigue con su Ascensión y el Pentecostés del Espíritu Santo para su Iglesia.
CONCLUSIÓN: por ello, en el lavatorio de pies de esta Semana Santa y de las subsiguientes, no deberían de ser admitidas las mujeres, y en relación a los varones, sólo deben de ser admitidos los viri probati, es decir, hasta 12 hombres de fe católica probada y ejemplar, rite dispositus (de virtud patente y sin pecado grave).
......
NOTA FINAL
- Series I y II sobre la reforma de la Semana Santa de 1955 de Pío XII:
caminante-wanderer.blogspot.com/2018/04/la-reforma-de-la-semana-santa-i.html
caminante-wanderer.blogspot.com/2018/04/la-reforma-de-la-semana-santa-el.html
- Series I y II también sobre la referida reforma:
asociacionliturgicamagnificat.blogspot.com/2018/01/fiuv-position-paper-14-la-reforma-de-la.html
asociacionliturgicamagnificat.blogspot.com/2017/12/fiuv-position-paper-14-la-reforma-de-la.html
- La reforma de Semana Santa de 1951-1956:
adelantelafe.com/la-reforma-la-semana-santa-los-anos-1951-1956
Es un auténtico placer, mosén, la lectura de sus comentarios histórico-litúrgicos. Nos ayudan a entender mejor el sentido del rito y profundizar en la fe, esa misma fe que profesaron los que nos precedieron desde Pentecostés. Al lector le ocurre algo parecido al rezo del Rosario, que lo entiende mejor y saca más provecho cuando lee algún comentario, por corto que sea, del misterio correspondiente.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo con el Sr Valderas Gallardo.
ResponderEliminarLástima que no podamos disfrutar de Semana Santa como antes del 56 del siglo XX.
De pena.
Quizas usted 20:24 siente añoranza del ritual de "matar Judios" que había por aquellos lejanos tiempos en el ritual de la semana santa.
EliminarLa renovación del año 1956 se hizo para dar mayor relive a la realidad profunda del Triduo Pacual.
A lo mejor lo unico que se perdió con la reforma del 1956, fue que desapareció el "Sabado de Gloria" y con ello la bonita costumbre de salir a cantar caramellas.
Soy relojero, vaya esto por delante, y desde mi magnifica profesión saco una terrible conclusión o metáfora.
EliminarMuchos de los comentarios que se leen en este Blog rezuman una añoranza immensa por todos los tiempos pasados.
Mi experiencia me dice que cuando un reloj atrasa , si es de quartz se le deben cambiar las pilas, y si es mecánico seguramente debe darsele cuerda o que el muelle de la misma debe ser cambiado ya que ha perdido tensión por desgaste debido a la edad. Además tods la maquinaria necesita una buena limpieza.
¿A la Iglesia no le sucede algo parecido? Creo sin ser un gran teologo ni mucho menos que la Iglesia debe iniciar un nuevo periodo de reflexión. Iniciar un periodo de reforma profunda para adaptarse a los nuevos valores de la sociedad actual. Los tiempos corren y se avanza muchisimo.
Creo que un nuevo Concilio Vaticano III no nos vendría mal.
Anónimo 11:18
Eliminar?De qué ritual de "matar judíos" habla?
?Es usted masón?
Anónimo 20:24
EliminarLa Semana Santa no es exactamente para "disfrutar", aunque sea un acontecimiento cultural de primer orden.
La Semana Santa es una devoción.
Si usted piensa que la Semana Santa de antes de 1956 puede beneficiar a su alma y a la de otros, promuevala.
No usted solo, naturalmente; busque gente que sienta lo mismo que usted y sea activo.
Estoy seguro que su iniciativa puede salvar muchas almas.