Mn Javier Vilanova Pellissa y el edificio del Seminario de Tortosa |
A raíz del nombramiento de Don Javier Vilanova, sacerdote diocesano de Tortosa, como obispo auxiliar de Barcelona, me han venido a la memoria los cuatro cursos transcurridos en el Seminario Diocesano de Tortosa desde septiembre de 1983 hasta junio del 87. Y es por eso que quisiera destacar la fecundidad de aquella institución diocesana en aquellos años, que tantos sacerdotes y al menos un par de obispos de los actuales ha dado a la Iglesia.
En el inmenso edificio construido e inaugurado en 1952 por el que desde 1945 hasta 1969 fuera obispo diocesano don Manuel Moll y Salord tenían su sede diversos centros docentes. Por una parte el Colegio Obispo Moll, que impartía la entonces denominada EGB (hoy Educación Primaria) y por otra el Colegio de la Inmaculada (hoy Secundaria y Bachillerato) que funcionaban a modo de internado para chicos. Hoy ambos centros educativos se han unido y funcionan como una única institución llamada Colegio Diocesano de la Sagrada Familia. En el bloque central superior del edificio se encontraba el Seminario Menor (fachada) y el Seminario Mayor (parte posterior trasera) de la diócesis dertosense. En el transcurso de la década de los 80 la media de estudiantes era entre 8 y 12 en el Menor y 12 y 18 en el Mayor, que hacían vida completamente autónoma y separada salvo en contadas excepciones. El Menor se nutría de jóvenes entre 12 y 18 años, la mayoría monaguillos de las diferentes parroquias del territorio diocesano, que llegaban presentados y acompañados por sus párrocos, celosos por las vocaciones al sacerdocio. Javier Vilanova, el preconizado obispo auxiliar de Barcelona, es un ejemplo paradigmático de aquella labor vocacional. De una familia de trabajadores payeses de La Fatarella, un hermoso pueblo de la comarca de la Terra Alta, llegó un día al Seminario. El clima del Menor era un ambiente ideal para el estudio y el discernimiento vocacional. Su rector en aquellos años era Mn. Josep Fontanet, un sacerdote con excelente formación y una total dedicación a los chicos. Formaba parte de la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz (Opus Dei) como bastantes sacerdotes diocesanos del momento. La celebración eucarística cotidiana, la dirección espiritual, la vida de piedad estaban más que aseguradas. Así como el acompañamiento en el estudio, a veces con el voluntariado de algunos seminaristas mayores. Las clases las desarrollaban con los cursos que les correspondían en los dos colegios adjuntos, con chicos de su misma edad y procedencia. Muchos, al llegar experimentaban dificultades para asumir el nivel impartido en los cursos, pues viniendo de escuelas públicas de un menor nivel académico en sus pueblos de origen, tenían que hacer un mayor esfuerzo personal. El pequeño Javier también tuvo que hacer frente a ese obstáculo, como muchos de sus condiscípulos.
Tanto el Seminario Menor como el Mayor gozaban de un seguimiento muy personal de don Ricardo Carles. Con mucha frecuencia impartía charlas de formación espiritual con los seminaristas. Y gustaba de acompañarles en excursiones montañeras que él mismo planificaba y disponía. Tiempos de asueto que le servían para departir personalmente con los jóvenes conociéndoles así de manera directa y personal. Como todo buen obispo, nombraba y seguía personalmente el iter de formación del Seminario, que gozó de excelentes profesores entre los que cabe destacar a Mn. Enrique Aymerich, a Mn. Xavier Ciuraneta, Mn. Garcia Sancho, Mn. Arín, Mn. Beltran, Mn. Simón Romero, Mn. Domingo Escuder, Mn. Isaías Riba, Mn. Tomás, Mn. Ayet, Mn. Adell, Mn. Salvador Ballester, junto a otros tantos que ya no acierto a recordar.
Capilla Mayor del Seminario |
El ambiente de convivencia en el Seminario era fraterno y familiar. Aunque como en todas las familias se presentasen asperezas y algún que otro malentendido en el día a día de la rutina de la casa. El modelo de la institución en aquellos años, era muy parecido al del Seminario de Valencia o al de Segorbe-Castellón. El origen valenciano de Mons. Carles y sus parámetros de formación lo hacían comprensible. Muy lejos quedaba el esquema de Barcelona de aquellos años, donde los seminaristas estaban repartidos por tres residencias en diversos barrios de la ciudad y acudían a la Facultad de Teología entonces llamada de San Paciano. En Tortosa los seminaristas residían en el edificio tradicional del Seminario durante toda la semana, y los fines de semana volvían a sus parroquias de origen con sus familias, prestando diversos servicios y presencia en sus parroquias. Una tarde a la semana bajábamos a las diferentes parroquias de la ciudad para impartir catequesis de confirmación. Y mensualmente participábamos en una Plegaria Juvenil en la Catedral, presidida por el mismísimo don Ricardo, junto con novicias de las Teresianas y la Consolación, ambas congregaciones femeninas cuyos noviciados tenían origen y sede en Tortosa.
Momentos hermosos en la vida del Seminario eran los encuentros sacerdotales en la sede del Seminario. Había dos establecidos con periodicidad anual y muy tradicionales y muy añorados entre el clero. La Fiesta del Reservado en noviembre y la fiesta de Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote, que celebrábamos junto a San Juan de Ávila en mayo. Especialmente solemne la celebración de la Santa Misa que gracias a la fecundísima tradición musical de la diócesis, se convertía en una exaltación litúrgica de singular calidad. Tanto para la misa como para el almuerzo fraterno, al que acudía la totalidad del presbiterio, se ponían todas las ilusiones y se empeñaban todos los esfuerzos. No era extraña la presencia de algún destacado invitado de honor como algún miembro de la Hermandad de Sacerdotes Operarios, o la frecuente de Don Vicente Enrique y Tarancón también originario del seminario diocesano dertosense, o el ilustre mariólogo Don Juan Esquerda Bifet. De un carácter más interno era la fiesta de Santo Tomás de Aquino en el mes de enero, a la que seguían un par de días de fiesta y convivencia antes de los exámenes cuatrimestrales de febrero.
En ese clima se formó sacerdotalmente don Javier Vilanova, del que recuerdo características de su joven carácter que después se han convertido en señales identificativas de su temperamento sacerdotal. Trabajador de empeño denodado, de simpatía desbordante, de prudencia en las decisiones, de profunda espiritualidad y vida de piedad. Es el clásico acompañante espiritual, pero también en el que nunca encontrarás un no por pereza o negligencia. Se ha subrayado en estos días su admiración y devoción al Padre Pío. Yo desearía subrayar también su entrega a la obra apostólica de “El Cenáculo” para la reinserción y formación de jóvenes tóxico-dependientes que en la tarraconense localidad de Cornudella de Montsant posee una comunidad. Muy habitual, junto a su presencia y colaboración sacerdotal, era verle acarreando cajas de fruta y verduras de la explotación familiar para los chicos. Por cierto, al menos dos chicos ligados a esa comunidad están estudiando en etapa pastoral en la Facultad y Seminario de Valencia, confiados por don Enrique Benavent, el actual ordinario diocesano. Estoy convencido que todos los que se que hoy recordamos aquel que fuera nuestro Seminario en aquel periodo, compartimos las mismas sensaciones e impresiones con respecto a lo vivido y compartido por todos. También sobre Javier y con Javier.
Quisiera subrayar la encomiable tarea que ha ejercido como rector del Seminario Inter-diocesano de Cataluña, en este breve periodo de dos años al frente del la institución. Su carácter afable y comunicativo, su sereno sosiego que no muestra nunca enfado ni alteración, lo han presentado como singular a la consideración de los seminaristas.
Personalmente mi más sincera felicitación y apoyo en la ingente pero hermosa tarea que se le presenta al nuevo auxiliar, convencido de que pondrá todas sus capacidades al servicio del bien de Barcelona, de sus sacerdotes y de sus fieles.
Mn. Francesc M. Espinar Comas
Párroco del Fondo de Santa Coloma de Gramenet
Me parece msén que toca usted demasiadas teclas.
ResponderEliminarMosén Adell, que Dios le haya perdonado, tenía un caracter irascible y colérico cuando no le dabas la razón a sus postulados. Increible para un formador de seminaristas.
ResponderEliminarEste obispo no tiene ni una miserable licenciatura, que ya es decir... pero si es un santo beatificable, no le hará falta
ResponderEliminarBuen hombre, las licenciaturas nunca son miserables.
EliminarA vces, pero, se encuentran algunos "doctores" que sí lo son!
Touché
EliminarFalconeti ha caído
Lo que es necesario es que sea un ejemplo de prudencia y santidad.
EliminarEl diablo puede encargarse del resto.
En mi opinión:
ResponderEliminar1. Por fin parece que Omella y otros han leído a Germinans, después de 13 años... ya era hora. El pseudo-catolicismo nacional-progresista, de base teológica modernista, nacido por los 1960 bajo el Concilio Vaticano II, está definitivamente carcomido y podrido, muerto y putrefacto, y ha destruido hasta la agonía y muerte a todas las diócesis catalanas, sobre todo a muy corto plazo Gerona, Vic y Solsona, pero Barcelona a medio plazo, pues no han ni vocaciones ni nuevas ordenaciones presbiteriales ni profesiones religiosas, y con las familias, parroquias, escuelas y universidades católicas colapsadas, desvanecidas, prostradas, desplomadas y arruinadas por completo.
Omella, ya con 74 años (n. 21 abril 1946), está a 6 meses de la jubilación, con una prórroga máxima de 3 años, en concreto, hasta los 78 años, 6 meses, y 6 días, como Sistach.
2. Pero hay que ver qué hace y le dejan hacer al obispo auxiliar Mn. Javier Vilanova: por sus frutos los juzgaremos. Parece que hay un nuevo enfoque doctrinal (Fé, moral, culto y eclesiología) y quizás una futura renovación del seminario y de las facultades de teología y afines. No obstante, hay que esperar a los hechos reales:
a) la vertiente doctrinal necesita de las obras efectivas de la disciplina (excomunión, suspensión, traslado, entredicho), sino es doctrina muerta;
b) la reconstrucción de la vida sacerdotal y religiosa necesita de la elección de buenos profesores en el seminario y las facultades, además de la disciplina de las sanciones, visitadores y tribunales;
c) la revitalización de las parroquias, escuelas, universidades y hospitales católicos necesita de la doctrina y, como no, de la disciplina, el control, la transparencia, la fiscalización y las no represalias frente a los denunciantes.
3. De otro lado, no hay que ocultar la actual deriva desnortada en materia de fe, moral y eclesiología que sufre el Vaticano: la aprobación en el 2016 de Amoris laetitia, que aprueba la comunión y absolución de los adúlteros, junto con el rescripto de 5 de julio del 2017; la cuestión de la Pachamama; los actuales escándalos financieros con Becciu; el pacto secreto con la gran dictadura china; la extrañísima encíclica Fratelli tutti -dicha tutti frutti- donde hay un alejamiento de la tradición.
4. La situación parece buena para Barcelona, pero aún con grandes nubarrones negros azabache en el futuro, y no hace falta ser católico, lo dicen los economistas, psicólogos, médicos, sociólogos: la crisis del 2008 hizo bajar el PIB un 2%, pero el 2020 es un 18%... ¿somos el Titanic, ya herido de muerte irreversiblemente, pero aún a flote?... recemos a María, que aplasta a la cabeza de la serpiente.
Goyo
EliminarEstoy de acuerdo con Ud. y el Sr. Prats. Lo que la Iglesia católica
necesita urgentemente son presbíteros beatificables. Aunque no tengan licenciaturas ni doctorados, si son - o al menos lo intenta- unos seguidores de nuestro Maestro Jesucristo, harán una gran labor en sus destinos. ¿Para qué sirven tantos conocimientos si no los ponen en práctica?. Pienso en los santos: Cura de Art, Juan Bosco, la madre Teresa de Calcuta.....Han de ser humildes y serviciales. Para orgullosos y prepotentes, ya tenemos suficientes. La humildad es imprescindible. Iluminados que van a su bola, hay muchos. Que la Virgen del Pilar ayude y proteja a los nuevos rectores, vicarios y diáconos en sus nuevas parroquias. Que encuentren católicos humildes que les ayuden en su importantísima labor. Aleluya, Jesucristo está con nosotros.
Amén.
Caramba Ud. debe tener información que los demás no tenemos, porqué Ud. pontifica, pero creo en mi humilde opinión que se equivoca.
EliminarHay parroquias que estan muy vivas y funcionan muy bien, porqué todavia buenos y sacrificados sacerdotes. Y laicos que hablamos poco, pero ayudemos mucho a la parroquia y a sus sacerdotes.
Falta mucha visión sobrenatural.
En los años 50 habían más de 300 aspirantes a Sacerdote.
EliminarDespués del Concilio, LA DEBACLE.
Porqué seraaa!???
Culpar de la falta de vocaciones al Concilio indica una miopía total y absoluta.
Eliminar"LA DEBACLE" viene por otras muchas causas.
y de estos 300 cuántos llegaron a ordenarse y cuántos perseveraron?
Eliminar299!!!
Eliminar8:20, cierto grado de munusvalía se puede comprender, ahora bien tanta, es este su caso, resulta patético!
EliminarNo cante victoria tan pronto.
EliminarNo es exactamente que Omella se haya caído del caballo y haya visto la luz.
Es que los frutos del Concilio son tan nimios que simplemente no hay de donde coger.
Entonces, si no hay de unos, habrá que tirar de otros.
¡Qué le vamos a hacer!
Más se perdió en Cuba.
Nunca había reparado en lo enorme que es el seminario de Tortosa.
ResponderEliminarMe imagino que se construyó para poder albergar vocaciones.
¿Qué ha pasado entonces para que ya no haya?
El seminario de Tortosa como el de Vic se deben a la megalomanía de los obispos de la época!
Eliminar15:32... es usted muy agudo cuando dice: "me imagino que se construyó para poder albergar vocaciones". Pues sí, aunque creo que dada la diáspora que hubo en él y en todos allí entraban "Bocaciones"... cuánta gente con quténtica hambre entró en ellos... y al tener la barriguita llena, con la música a otra parte! así se hace la historia!
EliminarAnónimo de las 21:38
EliminarCreo que usted confunde.
Una cosa es que en aquella época ser sacerdote era una profesión liberal digna para los chicos inteligentes; efectivamente la estructura económica agrícola no daba para más;
Y otra cosa muy distinta que cuando el Concilio cambia la Santa misa católica por el banquete eucaristico luterano desacralizando la misa, al ministro y la espiritualidad de ambos, los jóvenes que se metieron por una cosa se saliesen cuando se sintieron engañados por la otra.
Porque antes del Concilio había el mismo tipo de seminaristas; en general haciendo un buen trabajo; y no se salían a manadas. Bien sabían ellos de qué iba el asunto.
Incluso los habrá santos.
¿Cuántos seminaristas y sacerdotes abjuraron y colgaron la sotana, durante las terribles persecuciones contra los católicos de Companys?
Tendríamos que hablar de martires, no de "bocaciones"
Anónimo de las 21:38
EliminarEso de "Bocaciones" me parece un insulto hacia esos seminaristas.
¿No será usted un supremacista de algo?
Si usted se cree mejor que los demás, recuerde que la situación que tiene usted en la vida depende de sus padres y de Dios.
No todos tenemos las mismas oportunidades; lo que es normal es que casi ninguno sea capaz de mejorar su suerte.
Hay que ser más humilde y más agradecido.
Desde esta web pareciera que todo marchara viento en popa. Yo, sin embargo, veo a algunos Obispos y curas enseñando la patita de la ”reconversión”. Ya veremos que seguimiento se hace del modelo del Sínodo Panamazónico, donde después de 50 años, nadie ha sido bautizado. Lo que dijo aquel Vicario Episcopal: ¡Hay que sanar las heridas! ¡No más el Credo! Y desde el centro de la cristiandad se clamaba ¡Hay que adoptar el modelo tribal, el ecológico! El Pachamámico.
ResponderEliminarMucho salvar el medio ambiente, mucho luchar contra el coronavirus, sino fuera porque bajo esta máscara se esconde controlar a la sociedad y restringir/anular sus libertades individuales. El estado proveerá y pensará por nosotros lo que debemos hacer. Hemos vuelvo a la minoría de edad. Solo que ahora la Iglesia parece acompañar también.
Sigue al anterior comentario:
ResponderEliminarLa Iglesia va a acompañar también. Ya que cambió el contenido del ecumenismo, bien perfilado en “Mortalium Animos” de SS Pio XI y puso de moda el “dialogo con el mundo”, que Jesús condenó: “Por ellos ruego; no por el mundo”….Ellos no son ya del mundo, así como Yo no soy del mundo, Jn 17: 9, 16.
En el momento actual Pachamámico hay que recordar a Isaías: “Dejando de lado el precepto de Dios os aferráis a la tradición humana… su corazón está lejos de mí, pues me dais un culto vano, enseñando doctrinas que son preceptos humanos”, Mt 7, 6-8.
Totalmente de acuerdo con la Sra Laura S.
EliminarMagistral comentario!
Cuando la Iglesia de Cristo se adapta al mundo, se mundaniza.
EliminarCuando el mundo se convierte a la Iglesia de Cristo, se santifica.
No se cuando los Siervos de los Siervos de Dios han perdido el guión y han mezclado quien es quien y para que estan.
Tampoco creo que sepan para que están aqui: si hubiera sido para mundanizarse y mundanizar a los demas, Cristo no se hubiera tomado la molestia de fundarla ni, evidentemente, de morir en la cruz.
Malestar de los sacerdotes de Barcelona con Omella:
ResponderEliminarhttps://www.elpuntavui.cat/societat/article/5-societat/1862586-malestar-dels-capellans-de-barcelona-amb-omella.html
Será más bien de UNOS sacerdotes de Barcelona con Omella.
EliminarHay cierta difetencia.
Especialmente en estos casos donde desde hace demasiado los políticos ejercen una presión muy grande para tener obispos que obedezcan.
Por tanto la noticia puede ser buena o mala.
Pero advierta que cuando sacan esta noticia es para algo (que no tiene nada que ver con la Iglesia)
Sigue al anterior comentario:
ResponderEliminarLa misión de Satanás es hacer que la Iglesia confunda lo sobrenatural con lo natural. Ya no ruega por la conversión de las almas. Ahora ruega por los que no tuvieron vacaciones de verano. Parece que la Iglesia ahora es un pilar de ese Nuevo Orden Mundial ANTICRISTIANO. Parece que va avanzando Satanás y la otrora Cristiandad va camino de su total destrucción.
Pediría al comentarista que afirma que en la Amazonia hace 50 años que no hay ningún bautizo que explique de dónde lo saca, ya que es una afirmación muy grave.
ResponderEliminarEfectivamente es muy grave.
EliminarDe ser cierta, hay que echar a ese mal obispo que ni bautiza ni deja bautizar.
Los obispos no son ordenados para que sean Principes del renacimiento.
Son ordenados para ser sucesores de los Apóstoles y cumplir con una orden expresa y directa del Salvador.
El Santo cura de ARS y Teresa de Calcuta. De acuerdo. Su testimonio y su fuerza vital diaria. Perfecto.
ResponderEliminarPero en los tiempos que corren se necesitan sacerdotes y obispos bien formados, que tengan incluso después de ser ordenados un margen diario para el estudio. Está en juego el entendimiento recto del Evangelio y dar de lado a los intérpretes interesados y partidistas; está en juego la formación adecuada de los seminaristas y de las monjas y monjes de clausura. No nos confundamos. Una pregunta clave para saber a qué atenerse es si sigue vigente el Catecismo que conocemos. Pastores como el cura de Ars que además estén doctrinalmente bien amueblados, o sea, con el discernimiento suficiente como para no caer en el emotivismo secular.
"El modelo de evangelización del Sínodo Pan-Amazónico: una misión dónde después de 53 años de presencia nadie fue bautizado"
ResponderEliminar….el cardenal Baldisseri esclareció: “Es el Papa Francisco quien nos indica el camino para entender la expresión ‘rostro amazónico’. De hecho, afirma en Puerto Maldonado: ‘Quienes no habitamos estas tierras necesitamos de vuestra sabiduría y conocimiento para poder adentrarnos, sin destruir, el tesoro que encierra esta región, y se hacen eco las palabras del Señor a Moisés: «Quítate las sandalias, porque el suelo que estás pisando es una tierra santa» (Éxodo 3: 5)’ ”.
…O sea, “como ha dicho el Papa Francisco, la tarea de la nueva evangelización de las culturas tradicionales que viven en el territorio amazónico y en otros territorios exige prestar a los pobres ‘nuestra voz en sus causas, pero también a ser sus amigos, a escucharlos, a interpretarlos y a recoger la misteriosa sabiduría que Dios quiere comunicarnos a través de ellos’ (Evangeli Gaudium, n° 198)”.
“La conversión ecológica es asumir la mística de la interconexión y la interdependencia de todo lo creado. (…) Esto es algo que las culturas occidentales pueden, y quizás deben, aprender de las culturas tradicionales Amazónicas, y de otros territorios y comunidades en el planeta. Ellos, los pueblos, ‘tienen mucho que enseñarnos’ (EG n° 198). Ellos, en su amor por su tierra y su relación con los ecosistemas, conocen al Dios Creador, fuente de vida. (…) De allí que el Papa Francisco haya señalado que ‘es necesario que todos nos dejemos evangelizar por ellos’ y por sus culturas” .
https://panamazonsynodwatch.info/es/2019/03/14/el-modelo-de-evangelizacion-del-sinodo-pan-amazonico-una-mision-donde-despues-de-53-anos-de-presencia-nadie-fue-bautizado/
El obispo Kräutler, después de decenios de «misión» en Amazonia, ha alardeado diciendo: “Nunca he bautizado a un indio, y no lo haré en el futuro”. El obispo Erwin Kräutler, fue el hombre clave del Sínodo amazónico.
https://infovaticana.com/blogs/sandro-magister/que-diria-benedicto-xvi-en-el-sinodo-de-la-amazonia/
Pues si después de 53 años no han tenido NINGÚN resultado es que no funcionan.
EliminarEso es una lección de lo que no hay que hacer.
Por tanto el experimento no se puede llevar a otros sitios.
Luego nos quejamos de que "el humo de Satanás se ha colado por las rendijas de la Iglesia" ...
Vale.
¿Pero qué humo?
Si los pueblos amazonicos conocen a Dios creador, ¿para qué necesitan misioneros?
EliminarSi la religión verdadera es su amor por la tierra, ¿para qué necesitan la falsa?
Entonces, como muy bien dice el obispo Krautler -y con toda la razón- no hay que bautizar al indio.
(¿Deberemos bautizarnos a la ekologia de la Pachamama entonces nosotros?)
Luego nos quejamos del hundimiento de la religión catolica.
Así que después de todo los de la new age tenían razon: tenemos que tener a un chamán indio (¿amazonico?) de gurú y quemar hojas de salvia sagrada en la habitación (¿podremos chutarnos con ayahuasca sintetica?)
¡Menuda tomadura de pelo más grande nos han metido por las narices estos del Concilio!
El trágala quiere decir, porque es evidente, que para estos s.j. de Satanás somos idiotas de baba y que nos la pueden dar con queso.
Hay que prohibir que en las iglesias se vuelva a mencionar una sola palabra de ecologismo.
EliminarLas misas y las misiones son para predicar el Evangelio y enseñar el catecismo.
El que quiera ecologismo, que plante un huerto urbano en su balcon.
Fuera de la Iglesia y fuera del horario de trabajo, los curas podrán hacer lo que quieran, como cualquier hijo de vecino.
Dentro, no.
¿Es de extrañar que haya curas pederastas?
¿O que hagan misas negras en un altar consagrado en una iglesia abierta al culto?
¡QUÉ TOMADURA DE PELO ES ESTA!
"Hay que prohibir"... buen hombre no sea usted tan autoritario y deje que la gente se exprese, cante, hable, diga lo que quiera con la libertad que nos otorga el ser hijos de Dios!
EliminarAnónimo de las 7:06
EliminarCuando usted va al medico, ¿le permitiría que se exprese, cante, baile y diga lo que quiera?...
Especialmente si lo paga usted de su bolsillo o si no es una visita de cortesía y si de dolor, usted exigirá que cumpla y le cure.
¿Qué tiene que ver aquí la "libertad" que nos otorga el ser hijos de Dios?
La próxima vez que su hijo traiga malas notas o entre un ladrón por su ventana, recuerdeles que hagan lo que quieran "con la libertad que nos otorga el ser hijo de Dios"
no está el horno para bollos; y su comentario no ayuda; antes bien, nos anima a continuar derechos al precipicio; a ver si nos despeñamos y termina esta farsa "ecumenica".
Lo que no entiendo es cómo pueden elegir a un hombre de estas características para el interdiocesano y a un mn juli para el diocesano
ResponderEliminarCompartí clase los tres años de bachillerato con Mn Vilanova, Javier en aquella época. Lo que me ha sorprendido es ver el autor del artículo, al cual también conozco y tengo grandes recuerdos. Saludos Francesc 🙏🏻
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