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| El rico Epulón y Lázaro/ L. Bassano |
¡DICHOSO PROFE: SE PARECÍA A JESÚS!
Es una de las páginas evangélicas que de golpe me transporta a los bancos del colegio. Sucedía especialmente en las asignaturas de ciencias, que me resultaron antipáticas desde el primer día: apenas entregaba el examen escrito, me venía un fuerte deseo de poder recogerlo para concluir o corregir una operación en la que me había equivocado. Me hubiera bastado un momento y quizás hubiera redondeado la nota. Mirando de reojo los otros exámenes mientras entregaba el mío, percibía que los más resueltos y preparados para la materia habían resuelto el problema diferentemente. Razón por la cual deseaba situar mi examen entre los que eran mejores en mates o química. Eso jamás fue posible dada la escasa propensión a la distracción del profe en los instantes de la entrega de la prueba. Sin embargo mucho me temo que aunque hubiese tenido mejores notas en tales materias, no hubiera cambiado mi idiosincrasia hacia ellas.
He pensado todo eso cuando he sentido el eco de las palabras pronunciadas por el rico del evangelio de este domingo: “Entonces te ruego que envíes a Lázaro a casa de mi padre, porque tengo cinco hermanos, para que les advierta severamente y no vengan también ellos a este lugar de tormento”. Que es como decir: “Acepto un suspenso, pero antes deja que recomiende a mis amigos que para la próxima vez estudien”. Tajante la respuesta del Maestro:” “Tienen a Moisés y a los profetas. Que los escuchen. Parecido a mi profe de mates: haber estado atento y estudiado. Era como me decía mi profe tratando de explicarme que aunque me hubiese dado clases de repaso Arquímedes (sabía de mi pasión por los genios de la historia) yo no habría comprendido nada de las operaciones matemáticas.
Es el temor que expresa Jesucristo cuando habla del tiempo, sobre todo del tiempo desaprovechado. Dentro de las páginas del evangelio existe como una eterna lucha entre Ulises y las figuras de Abrahán y Moisés: la historia de Ulises es un círculo maravilloso cuya belleza inquietante reside en su eterno retorno a Ítaca, cerca de su Penélope. Abrahán en cambio sale de su tierra sabiendo que jamás regresará, todo dirigido hacia aquella Tierra que le ha sido prometida. El mensaje está claro: Ulises, aunque pierda la ocasión de vivir alguna experiencia, no debe temer porque la historia acabará en un retorno a lo conocido. No es como Abrahán que al salir sabe que lo que deja lo pierde: ha de firmar un cheque en blanco y debe invertir a fondo perdido por toda la eternidad. En Ítaca, tierra de Ulises, habita una repetida cotidianeidad. En el Sinaí, tierra de encuentro entre Moisés y su Dios, se abre el espacio de una insospechada y única revelación de amistad. |
| Ulises y las sirenas |
Esa obsesión estadounidense por el winner y el loser, por el ganador o el perdedor, sólo adquiere sentido para el cristiano, como usted muy bien dice, cuando se trata del reino de los cielos.
ResponderEliminarEl cristiano, a imagen del Maestro, tiene que ser comprensivo con los perdedores. Comprensivo e identificarse con ellos. Son muchos los perdedores de este mundo, los emigrantes, los perseguidos, los abusados, los esclavizados. A mediados de este año, el Instituto de Física del Reino Unido, la Regia Sociedad Astronómica Británica y la Regia Sociedad Británica de Química hicieron público un estudio sobre acoso sexual y exclusión sobre miembros de las llamadas minorías sexuales y de género en ciencias físicas. Se basaba en las respuestas emitidas por 637 investigadores y científicos que se autodefinían como lesbianas, sodomitas, bisexuales, transgénero o de otra minoría asociada al género. La discriminación había inducido a un 28 % de ellos a pensar en abandonar su puesto de trabajo; el 16 % declaraba haber sufrido exclusión, intimidación, acoso y otras ofensas en los últimos 12 meses. Entre los insultos se mencionaba expresaba el uso inapropiado de los pronombres.
El cristiano debe tener muy claro que la repulsa a cualquier desviación sexual se aleja de la doctrina evangélica, en cuanto desviación de la ley natural, imagen de la ley eterna. Pero eso no nos exime de tratar con delicadeza a las personas, cualquiera que sean su comportamiento y sus inclinaciones. Es, en mi opinión, una dimensión más, de la parábola del rico epulón y de Lázaro.
Dede sectores eclesiásticos se confunde muy a menudo la condena sin paliativos de la desviación sexual con un rechazo de las personas. Muchos católicos recibimos improperios de se sector episcopal, y más elevado, que nos llama intransigentes, intolerantes, etcétera. Lo cierto es que amicus Plato, sed magis amica veritas. La denuncia de un desvío no implica el desprecio a nada. El respeto a la persona no tiene por qué entrañar la abdicación de los principios.
¿Cuántos transgeneros (!) hay en los Institutos oficiales de física, astronomía y química británicos?
EliminarSi consideramos que estos son sólo organismos profesionales y no de investigación, contemos estos últimos...
No estamos hablando de profesores de instituto de enseñanza media y de colegios, sino profesionales probados cuyo éxito o fracaso está no en aprobar exámenes, sino en descubrir algo... (y, por lo tanto, por mucha competencia que haya entre ellos, el descubrimiento y la admiración de sus pares internacionales está ahí)
¿Cuántas minorías "asociadas al genero" (???) están en esa situación?
Naturalmente que habrá lesbianas, sodomitas y bisexuales (¿los bestialistas con caballos y perros caben también aquí?)...
Pero, ¿cuantos de ellos lo proclaman públicamente?, siendo como es la sociedad inglesa muy reservada y poco inclinada a compartir intimidades?
Recuerde que son actividades privadas que se hacen en privado.
Yo creo que esas cifras son falsas y que están destinadas a hacer creer a la opinión pública que la homosexualidad es una actividad "normal" (como el falso Informe Kinsey (del pederasta público y activista para la legalización de la pederastia Alfred Kinsey) utilizado por la Fundación Rockefeller para minar el cristianismo en los campus universitarios norteamericanos de una manera "científica").
El resultado de ese estudio "científico" -la discriminación, exclusión, acoso...- demuestran que las tendencias cristianas están bien atrincherados en la sociedad y, para bien de la Ciencia y beneficio de los pobres torturados en particular y de la humanidad en general deben ser extirpados. ¡Lo antes posible, mejor!
Perdone que insista con mi duda metódica:
Los investigadores ya no trabajan solos, sino que forman equipos.
Como hay mucha competencia por los fondos y no todas las líneas de investigación dan resultados, ¿tú te crees que el jefe del equipo, cuyo puesto de trabajo, prima anual y posible cátedra universitaria depende de que su equipo funcione bien y descubra cosas se va a preocupar de las fantasías sexuales de sus empleados (porque los elige él a dedo)?
Ni siquiera las Universidades y las facultades de Fisica, que dependen de sus investigadores su ranking académico y los fondos públicos y PRIVADOS, pueden permitirse el lujo de elegir según la "orientación sexual" de los profesionales en el mercado.
Esto es como el mito de San Alan Turing Bueno y Mártir, del que incluso han hecho una película para utilizarlo mejor.
No se trague esta burda propaganda interesada.
Por último, recuerde que desde los tiempos de la Reina Doña Victoria D.F., que en Gloria esté, rige en esta sociedad la norma:
"Puedes hacer lo que quieras, siempre que no lo grites en la calle y asustes a los caballos"
Sabrá que no existen "perdedores", salvo todos menos 1 de los que hayan participado en una competición.
EliminarNormalmente aplican esa palabra a los que no hacen mucho dinero, no importa cómo; pero esto excluye a los emigrantes, los perseguidos, los abusados, los esclavizados... Porque no han entrado en esa competición...
...(salvo la competición emigrante, la de perseguidos, la competición de los "abusados" ( "¿maltratados?" ))
Olvídese de esas tonterías que no tienen base real y hacen tanto daño.
Si quiere llegar a una meta, fíjese un objetivo posible y vaya hacia él; pero asegurese que eso es lo que usted quiere y no lo que cree que le va a garantizar el aplauso de la gente (especialmente de la que usted no conoce).
Pero si llega a la meta o no, no tiene más importancia que la que usted quiera dar.
A parte de esto, si tiene un Maestro, como dice, preguntese
cómo haría Él en una circunstancia similar; y luego copiela (hablábamos de "Maestros", (¿no?)
Tratamos a los demás como nos tratamos a nosotros mismos; así que usted tiene una razón personal de importancia en obedecer en este punto a su Salvador Cristo Jesús.
Me pregunto en qué competirá un "sodomita"
Una gran realidad es que todos venimos desnudos a este mundo y todo lo dejamos aquí cuando nos vamos. Sólo cuentan nuestros actos, muy distinto del "tanto tienes, tanto vales", muy usual en nuestros días. Lo mismo da que usemos vestidos de lino o que vistamos andrajosamente.
ResponderEliminarEl creyente sabe que seremos juzgados por nuestras obras y, dentro de ellas, las que demuestren verdadero amor hacia nuestros hermanos así como hacia todo lo creado.
Una vez más, el Evangelio nos ofrece bellos ejemplos.
Gracias, Mosén Francesc, por evocarlos.