Hace un par de años por estas fechas escribí un artículo sobre la resolución del Vaticano en que se apartaba al sacerdote de la diócesis de Gerona Josep Planas Planas de sus funciones, por los abusos sexuales que cometió contra la entonces niña de 10 años Esther Pujol, cuando el sacerdote tenía 54 y ambos coincidieron en unas colonias de verano en 1989 en Puigpardines, la niña estaba sola porque no se encontraba bien y sus compañeros habían salido de excursión. El entonces párroco de Bellcaire d'Empordà aprovechó la circunstancia y amenazó a la niña con matarla si decía algo de lo que había pasado.
La niña calló durante muchos años, pero al destaparse recientemente diferentes casos de pederastia decidió denunciarlo, el problema es que el caso había prescrito civilmente y por tanto no hubo condena, pero para la Iglesia no hay prescripción así que el caso llegó a Roma y hubo una condena aunque prácticamente sin consecuencias, porque la suspensión de las funciones sacerdotales, le llega cuando Mn. Planas ya tiene más de 80 años y por tanto le cae una jubilación en medio de su propia jubilación.
La víctima quiso saber la resolución de la sentencia, y por eso escribió al Vaticano para que le enviaran copia, siendo la persona que había sufrido los abusos sería lógico que supiera de primera mano los pormenores de la sentencia y las penas que había sufrido su abusador, pero según ha explicado a la emisora RAC1, lleva dos años esperando respuesta y solo ha encontrado silencio absoluto a su petición, lógicamente a estas alturas ya da por hecho que no va a recibir ningún tipo de comunicación.
No se entiende esta actitud, se supone que en los tiempos actuales la Iglesia quiere dar una imagen de transparencia en casos de tanta gravedad como los de pederastia de sus sacerdotes, y que las víctimas de esos abusos tienen que ser tratadas con el máximo de delicadeza y atención, pero parece que no siempre se actúa de esta manera. Se vende mucho humo de forma populista en algún caso concreto que asume el mismo Papa Francisco, pero hay muchos casos que siguen sin aclararse y sin tener en consideración a las víctimas, como en el tema barcelonés de la Casa de Santiago, que ayer explicaba Antoninus Pius.
También parece que en este tema hay una doble velocidad, en algunos casos se publicita al máximo la actitud vaticana de llegar hasta el fondo y en otros casos parece que no interesa demasiado. Tiene que ser duro enfrentarse a personajes que ocupan los más altos cargos de la Iglesia, o a colectivos con tantas influencias políticas y eclesiales como la Casa de Santiago, pero en el caso que nos ocupa se trata de un simple párroco de pueblo ya jubilado, aparentemente sin demasiadas conexiones e influencias. Quizá por eso no ha interesado demasiado, mediáticamente es un caso que no vende.
La víctima ha explicado su malestar y decepción de la Iglesia ante su caso, y es muy triste que una persona que ha recibido abusos de uno de sus ministros, tenga que decir cosas como esta: "Me hubiera gustado recibir respuesta, pero ahora, después de dos años ya no lo espero. Cuando lo denuncié me fui mentalizando en el sentido de no esperar nada de la Iglesia".
Narcís Feliu
La niña calló durante muchos años, pero al destaparse recientemente diferentes casos de pederastia decidió denunciarlo, el problema es que el caso había prescrito civilmente y por tanto no hubo condena, pero para la Iglesia no hay prescripción así que el caso llegó a Roma y hubo una condena aunque prácticamente sin consecuencias, porque la suspensión de las funciones sacerdotales, le llega cuando Mn. Planas ya tiene más de 80 años y por tanto le cae una jubilación en medio de su propia jubilación.
Esther Pujol junto a James Rhodes en RAC1 |
No se entiende esta actitud, se supone que en los tiempos actuales la Iglesia quiere dar una imagen de transparencia en casos de tanta gravedad como los de pederastia de sus sacerdotes, y que las víctimas de esos abusos tienen que ser tratadas con el máximo de delicadeza y atención, pero parece que no siempre se actúa de esta manera. Se vende mucho humo de forma populista en algún caso concreto que asume el mismo Papa Francisco, pero hay muchos casos que siguen sin aclararse y sin tener en consideración a las víctimas, como en el tema barcelonés de la Casa de Santiago, que ayer explicaba Antoninus Pius.
También parece que en este tema hay una doble velocidad, en algunos casos se publicita al máximo la actitud vaticana de llegar hasta el fondo y en otros casos parece que no interesa demasiado. Tiene que ser duro enfrentarse a personajes que ocupan los más altos cargos de la Iglesia, o a colectivos con tantas influencias políticas y eclesiales como la Casa de Santiago, pero en el caso que nos ocupa se trata de un simple párroco de pueblo ya jubilado, aparentemente sin demasiadas conexiones e influencias. Quizá por eso no ha interesado demasiado, mediáticamente es un caso que no vende.
La víctima ha explicado su malestar y decepción de la Iglesia ante su caso, y es muy triste que una persona que ha recibido abusos de uno de sus ministros, tenga que decir cosas como esta: "Me hubiera gustado recibir respuesta, pero ahora, después de dos años ya no lo espero. Cuando lo denuncié me fui mentalizando en el sentido de no esperar nada de la Iglesia".
Narcís Feliu
Lamentablemente, la justicia diocesana y vaticana, en algunos casos, como se ha visto, aprovecha todo tipo de argucias para escurrir el bulto.
ResponderEliminarDejar pasar la prescripción, esperar la jubilación, trasladarlo... y en algunos, prevaricación directa.
Para estas víctimas, esto es, simplemente, un insulto.
Es lógico que, de entre los seminaristas y curas, existan graves errores inevitables in eligendo e in vigilando, pasa incluso en el Ejército, que se supone que vigila más a su personal por su peligrosidad, cuando en el 2009, nada más y nada menos que todo un psiquiatra y comandante militar estadounidense, mató 13 (y un no nacido) e hirió a 32 soldados en su base. Este hombre era un psiquiatra y trabajaba con otros psiquiatras todos los días, y no se dieron cuenta de lo profundamente perturbado que estaba alguien entre ellos. Incluso violó el privilegio de secreto médico-paciente (como el de abogado-cliente o el confesor-penitente), por el cual lo que diga el paciente no puede ser usado en juicio.
Pero otra cosa es la indiferencia del Estado de la Santa Sede: ni una simple remisión al ordinario diocesano. Es sencillamente, un escupitajo inaceptable, excepto que exista una razón, que tampoco lo dicen.
Sería interesante, no obstante, volver a insistir de nuevo, y ponerlo en manos de un abogado, pues hay algo llamado "en honor a la justicia", es decir, quien está en entredicho ya no es ninguna persona, sino todos, pues es ya una cuestión de "justicia", que con la verdad y el amor, son los tres ejes de actuación de la Iglesia, la cual es Esposa de Cristo.
Eso no puede quedar así. Si es necesario, y si quisiera hacer un fondo de financiación para ejecutar las acciones debidas, yo le haría una aportación con sumo gusto.
Me sangran los ojos de leer que "Me hubiera gustado recibir respuesta, pero ahora, después de dos años ya no lo espero. Cuando lo denuncié me fui mentalizando en el sentido de no esperar nada de la Iglesia". Eso es de justicia.
Cuando cada vez somos más las personas que llegamos a esta misma conclusión: "No esperar nada de la iglesia"; deberíamos los que amamos de verdad a Jesús, plantearnos a quien, a qué estamos siendo fieles...? Nuestra fidelidad es para el Señor o para una institución que ya no le sirve? Qué intereses ocultos tenemos, nos hemos vendido por un poco de seguridad, bienes materiales o qué nos den la oportunidad de ser alguien?. A quien servimos?
ResponderEliminarAl anónimo de las 2:14.
EliminarLeyendo su escrito breve y claro, me pregunto: ¿Qué esperaba de la iglesia? Quizás sus expectativas no eran las que corresponden a la iglesia y a su misión como cristiano.
Sería mejor decir "no esperar nada de la Jerarquía".
EliminarCiertamente del clero como mínimo hay que esperar que sirvan al Señor a pesar de sus debilidades. Engañando, ocultando y defendiendo a delincuentes sirven al príncipe de la mentira y lo que es peor piden a los laicos que les imiten dando un ejemplo deleznable. Por supuesto, demos gracias al Señor por el clero que aún le intenta ser fiel. Pero a estos la jerarquía hace lo posible por tenerlos callados y subyugados.
EliminarA esos prelados que salieron hijos tenebrosos de Babilonia, este capítulo 47 del profeta mayor Isaías, en conexión con el otro profeta mayor Jeremías 50 y la lectura profética de hoy jueves, Apocalipsis 18:
ResponderEliminarBaja, siéntate en el polvo, virgen, hija de Babel!
¡Siéntate en tierra, destronada, hija de los caldeos!
Ya no se te volverá a llamar la dulce, la exquisita.
Te sentías segura en tu maldad, te decías:
--- Nadie me ve.
Tu sabiduría y tu misma ciencia te han desviado.
Dijiste en tu corazón:
--- ¡Yo, y nadie más!
Pero ahora, voluptuosa, escucha esto, tú que te sientas en seguro y te dices en tu corazón:
--- ¡Yo, y nadie más! No seré viuda, ni sabré lo que es carecer de hijos."
Pues yo digo, venid desde todos los confines, destruidla por completo, arrojadla al mar.
--- ¡Cayó, cayó la Gran Babilonia!
Este artículo sobra, es repetitivo sobre un sacerdote en el que no se ha demostrado nada y más bién la chica acusadora pretende sacar una buena tajada de indemnización. Parece que Germinans está obsesionado en los abusos como si no tuviera otros intringulis de que tratar. Por ejemplo en los estudios bíblicos los protestantes nos llevan delantera de muchos años y en la Iglesia Católica solo se habla de la Confesión como tema dominante. SG.
ResponderEliminar"Sacar tajada de indemnización". No sé. Eso sí que es un juicio de intenciones...
EliminarEn qué se ha mostrado misericordia con esta joven que ni siquiera ha recibido respuesta? Donde no hay compasión huelga decir que no hay cristianismo.
Ya vuelve a desbarrar el amigo Garrell.
EliminarOiga, majo, usted siempre habla bien de los protestantes para criticar nuestra Iglesia, ¿por qué no se hace protestante de una vez? Dejenos en paz a los católicos de verdad.
Mensaje para Anónimo29 de noviembre de 2018, 4:54 SG:
EliminarOye anónimo oculto, te voy a responder yo misma (víctima con nombre y apellidos).
Punto número 1) De dónde carajo te crees que saco indemnización? Que solemne estupidez!!! Defender lo indefendible y además leo muchas absurdidades sin conocerme ni saber nada de nada de mi. Te has perdido en algún punto... Yo ya sabía cuando denuncié que el delito había prescrito y mi pretensión era única y exclusivamente reparar un daño interno y poder sanarlo (cada uno puede hacer con sus heridas lo que le venga en gana, sólo faltaría). Y eso lo busqué más en mi interior que en el exterior (justicia, iglesia). Mi pretensión era sacarme una mochila de dolor cargada durante mucho años, ni tansolo buscaba venganza ni causar mal a mi agresor. Si me conocieras lo sabrías. Hablar así sin conocer y gratuitamente es muy fácil.
Punto número 2) Si conocieras los hechos no habrías obviado que el cura en cuestión, cuando fui a verlo, reconoció los hechos. HECHOS RECONOCIDOS Y PROBADOS. Y si conocieras los hechos y no hablaras por hablar (haciendo daño durant el camino) también sabrías que después de hacerlo público he podido hablar (se han dirigido a mí) numerosas víctimas del mismo cura (que no se han atrevido a denunciar pero han podido hablar de ello con alguien). O sea que no fui la única.
Si no puedes mejorar el silencio, haznos el favor y cállate!
Es verdad que resulta muy fácil dar consejos. Se corre el riesgo de caer en aquello de consejos vendo que para mí no tengo. Pero, cuando tan fáciles de palabra, tan proclives a entrar en jardines que no les pertencecen, son algunos prelados, el de Gerona uno de ellos, ¿qué le costaba acudir un domingo a la iglesia de Bellcaire y ante toda la feligresía exponer la situación del clérigo y el punto de vista de la Iglesia, al tiempo que pedía perdón en particular a la víctima? No parece que costara mucho escribirle una carta a la chica avisándole de que, puesto que la Iglesia se siente solidaria y dolida con ella, lo haría público el obispo en nombre de Roma. Y aunque el daño no se remediara, la voluntad de la Iglesia quedara clara. Lo aconseja incluso la prudencia humana, que nos avisa que más vale ponerse rojo una vez que amarillo toda la vida. Se pierde toda autoridad cuando hablamos desde el púlpito y con báculo en ristre de una injusticia y de una prisión por intentar romper las cuadernas de un estado centenario --algo plenamente acorde con el derecho y, por supuesto, con la moral--, y nos callamos como mediavirtud por rastrojo cuando hemos escandalizado a los más pequeños. No es coherente. No es cristiano.
ResponderEliminarNo veo qué sentido tiene hacer público el hecho en cuestión.
Eliminar¿La publicidad perdon, purifica, satisface por el daño hecho? Me temo que lo único que se persigue (y no se consigue) es dar buena imagen de la Iglesia. Era entones cuandohabía que haber actuado.
Contraponiendo mi afirmación a la de su "fan" habitual, le digo que muy raras veces estoy de acuerdo con lo que escribe el Sr. Valderas Gallardo.
Eliminar"¿qué le costaba acudir un domingo a la iglesia de Bellcaire y ante toda la feligresía exponer la situación del clérigo y el punto de vista de la Iglesia, al tiempo que pedía perdón en particular a la víctima?"
EliminarPues cuesta muchísimo:
1. Sienta un precedente y antecedente de actuación para sí, sus sucesores y todos los obispos de la Conferencia Episcopal Tarraconense, afectando a las dos starlettes del sidéreo cosmos prelatil catalano-mundial:
- el primado hispánico Mons. Pujol y
- el mega arzobispo-cardenal Mons. Omella.
El último de la fila, Mons. Pardo, dando lecciones de moral y conducta a los primeros galácticos, y encima, obligándolos a través de la costumbre (opinio iuris) a hacer lo mismo cuando pase algo parecido... no, no... imposible...
2. El prototipo típico de cardenal y obispo del Concilio Vaticano II es el de un cobarde que hace deshonor a los Doce Apóstoles:
- cobardanalea el cardenal, mientras que
- el obispo es el culmen del broche del remate de lo asustadizo, desaborido, desabrido, espantadizo, huidizo, insípido, insulso, pusilánime, soso, apocado, timorato, cagueta, calzonazos, gallina, avestruz y sardina con el mundo, con la carne y con el demonio.
Son un cero a la izquierda, pero un cero a la derecha cuando hay que defender a los golpistas.
3. La propia situación de corrupción del Vaticano. Saben de la decadencia del catolicismo desde 1965, el fin del Concilio Vaticano II, en todas sus letras y números, y conocen de las razones, causas y motivos: su propia culpa por abrazar la herejía del modernismo. Pero siguen allí, tapándose, callándose, huyendo, largando lindas palabritas...
Suscribo al 100% el comentario de don JMVG.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo con el Sr Valderas Gallardo.
ResponderEliminarLes echaba en falta, Anónimo de las 14:35 y JC.
ResponderEliminarCuando leo su escrito, me pregunto qué pretenden con ello. ¿Quieren dar mayor fuerza y relevancya a la argumentación del ionteresado?
Pues SI!!!
EliminarAhi dice que fue ya en su adultez cuando notificó el supuesto abuso y que no llegó a la justicia civil porque había prescrito. Entonces solo está el testimonio de la mujer adulta y el testimonio del sacerdote. ¿Dónde estan las pruebas? Eso es lo que entendido de lo que he leido ahora.
ResponderEliminarPensar que por tener 10 años eres toda inocencia es un error y no se ajusta a la experiencia. Los niños tambien mienten o pueden tergiversar los hechos. Nacemos con el pecado original. La prudencia puede ser lógica en esta situación.
Si te parece, te respondo yo misma (víctima), que soy quien conoce bien los hechos y no hago nunca afirmaciones ni pongo en cuestión cosas que desconozco, con todos mis respetos...
EliminarDENUNCIÉ los hechos vía judicial. No estás bien enterada del tema. Y cuando lo hice ya sabía que el delito había prescrito. Lo hice (como todos los pasos que hice) para reparar un daño, unas heridas como a mi me vino en gana (que para eso son mías).
Por otro lado: os habéis perdido parte de la historia porque yo en primer lugar fui a ver a mi agresor y mantuvimos una larga charla donde él admitió los abusos. LOS RECONOCIÓ. Y aunque no fuese así qué triste el cuestionamiento constante a las víctimas y qué solas nos encontramos cuando denunciamos. Sí, señora, cuando alguien abusa de un/a niño/a sólo se halla el agresor con el/la niño/a en cuestión (Y suele ser la palabra de uno contra la de otro). "Pensar que con 10 años eres toda incocencia es un error", madre mía que frase lapidaria!!! "Pensar que una niña de 10 años que vuelve de las colonias con dolores constantes de barriga y evitando TODO TIPO DE CONTACTO con su padre -besos, caricias, abrazos, dar la mano-, con todo tipo de secuelas (estrés postraumático) y que le cuenta los hechos a su madre (después de insistir mucho porque notaba ue les pasaba algo y a regañadientes porque la han amenazado de muerte si lo contaba) es toda inocencia?".
De verda, Laura S, para hacer comentarios de este tipo yo antes, me callo. Escasez de empatía abrumadora... Duele mucho leer comentarios de este tipo, la verdad. La prudencia de la pediría yo a ti y "es muy lógica en esta situación".