Una república laica y montserratina

Ahora todos los medios coinciden en señalar que este desconocido Torra es un descarado títere de Puigdemont. Este Puigdemont era un desconocido hace un par de años. Lo que olvidan los medios es que Puigdemont es otro descarado títere. No vaya a ser que se descubra que los medios son títeres de los mismos, aunque algo más disfrazados.

Lo que importa de verdad es saber quienes son los titiriteros que manejan a esta pandilla de títeres. Estos titiriteros sí que tiene poder y son peligrosos por su maldad. Y está claro que son los oligarcas negreros de siempre, que tienen todo tipo de organizaciones títeres. La abyección de utilizar símbolos religiosos para sus fines negreros no es nueva sino vieja y consentida. Ya avisaban al Vaticano el cardenal Gomá y el obispo mártir Cruz Laplana que financieros nacionalistas, liderados por Cambó y por Valls Taberner, se infiltraban en la Iglesia para ponerla al servicio de sus fines de poder. En esa época especialmente infiltrados en los jesuitas, en la abadía de Montserrat y en los capuchinos. Han seguido haciendo lo mismo, incluso creando ellos nuevas organizaciones de mucho poder.

Corresponde al Vaticano acabar con este uso perverso de la religión, que ha consentido durante décadas y décadas, incluso alentado. Acaba de hacer mucho para terminar con esta herejía la exhortación apostólica Gaudete et Exsultate al denunciar la herejía pelagiana o semi pelagiana. Pero se ve que no es suficiente, que estos diablos están dispuestos a cualquier mal. Reparar el mal causado también es obligación del Vaticano. Por favor, sin flatus vocis tipo Omella que muy pronto se ve que son la misma flatulencia.

Anónimo de las 23:44, creo totalmente todo lo suscrito por Ud, y ademas son momentos de cuando se publican parte de la Historia de la Iglesia, en adelante tendremos que escondernos en anónimatos por la COBARDIA DE ALGUNOS PASTORES DE LA IGLESIA CATOLICA, en no defendernos y dar ejemplo de ser VERDADEROS PASTORES, solo nos queda al ser avandonados, HUMILDAD, RESIGNACIÓN, ETC.

Lo peor del caso, Oriolt, no es que los políticos sean racistas obtusos en un momento en que la ciencia ha avanzado más suficiente para demostrar ad nauseam que ese prejuicio nazi carece de toda base. Sólo puede seguir subyugando a gentes del Principado, sector curil y monjil. Es la secularización del “poble elegit”, como llamó a los catalanes el prior de Montserrat. Lo quitaron de la web donde aparecía el sermón, pero pasa como con los tuits del ignaro ese que ha sido aupado por otro más ignorante, el bachiller Puigdemont.
Lo peor del caso, Oriolt, es que obispos y abades pongan la estelada secesionista en el templo, tapando el sagrario y venerándola como objeto de culto. La estelada con todo lo que significa. Un todo lo que significa que les lleva a prostituirse a obispos y abades. Jamás hubo tanta prostitución episcopal y abacial. Demos un ejemplo de nuestros días, de ayer mismo. Dos son los momentos que el nacionalismo etnicista, como todo movimiento nazi, quiere dominar: el anterior al nacimiento y los últimos días. No es que el intervalo entre ambos extremos no le interese y subyugue, pero su especial maldad se plasma en esos instantes. Acorde con esa ideología, el aborto de los embriones con limitaciones genéticas y la muerte programada. Enb su depravación, el nacionalismo se apunta gustoso a la destrucción moral de la sociedad con la degradación del matrimonio.
Andaba el obispo de Solsona con dudas sobre su misión pastorl y escribió una carta dominical timorata sobre el último aspecto. Le llovieron críticas y chillidos. Novell se arrugó. Ahora, los partidos montserratinos –el de Puigdemont y el de Junqueras—han instado la eutanasia activa, no sólo en el Principado, sino en toda España. Ningún obispo --¿dónde estás, Pujol, guapete, acicalándote para ir presto a rendir pleitesía a Torra, como “President dels bisbes catalans”, igual que hiciste con el fugado de la justicia en Berlín? ¿dónde estás Vives, preparando otra carta de los 300 curas levantiscos? ¿dónde estas Pardo, guaperas, codeándote con los promotores del odio a quienes les has cedido paredes de la catedral, escalinata de la catedral y sagrario si fuera requerido, porque el sagrario de la verdad ya se lo diste, verdad, majete? ¿donde están los abades, los curas, las monjas, dejando espacio para las próximas urnas prohubidas?
Han tenido que venir Blázquez y Cañizares para declarar que la propuesta de los separatistas catalanes sobre la muerte --¿qué otra cosa cabe esperar de estos racistas exaltados?—es inmoral. Però, es clar, d´aixo no es parla. Son dels nostres, N monseñores, no son de los suyos. Ustedes son los de ellos.
Anda uno estos días entre Am J Bioeth, Ethics, J Med Ethics, J Clin Ethics, Am J Bioethics, Bioethics, trabajando sobre la moral de la intervención del no nacido en sus diversos aspectos. No tardaremos en ver otros días de gloria, con estos lacayos del poder de las tinieblas. Eso si, con mucha unción y amaneramiento. Con unos ojos, algunos, del Hospital de Inocentes que pintara el Greco.

Apelan al sustrato católico catalanista. No es casualidad. La matriz del nacionalismo es eclesial.

Si los españoles hacen ostentación de la Virgen del Pilar y del Apostol Santiago.
¿Porqué los catalanes no podemos aparecer con una imagen de la Virgen de Montserrat, patrona de Catalunya?

Sr. Oriol, algunos ya hace tiempo que nos sentimos así: entre el abandono y la extranjería. Pobre Cataluña.

Absolutamente de acuerdo con la reflexión del Sr.Valderas Gallardo. En lo de CURIL Y MONJIL se ha dejado usted lo de FRAYLÍN y MITRALÍN. Dejan mucho que desear esta GENTUZA,que de Católicos tienen lo mismo que Josip Stalin y POL POT juntitos!!!

Por si faltaba algo, está el dilema del Rey, que apareció en televisión justo cuando, por la deserción bipartidista, ganaba el golpismo y sacó a la calle a la nación española, mostrando la inmensa fuerza que atesora y los partidos desprecian. Afrentado institucionalmente por Torra, que además participó en un escrche contra él, debe firmar (o no firmar) su nombramiento como representante en Cataluña del Estado que quiere violentamente destruir. Porque cuando Arrimadas dijo que Torra no venía a presidir la generalidad sino los CDR dijo exactamente lo que va a hacer: la máxima violencia contra los catalanes no nacionalistas y el máximo desafío al Estado.

¿Y puede el Rey hacerlo como si estuviera respaldando cualquier nombramiento del Gobierno en el ejercicio de su papel constitucional? Dicho de otro modo: ¿es constitucional colaborar con el golpe anticonstitucional? No me extrañaría que, por prudencia y previendo violencias futuras, el Rey retrasara la firma del decreto de nombramiento de Torra como representante del Estado hasta tener un informe del Consejo de Estado sobre la legitimidad de ese nombramiento. Sólo entonces, si fuera positivo, debería firmarlo. En mi opinión, por las razones dadas al principio -o sea, tomadas de Fernández-Viagas- no debería hacerlo. En todo caso, y respetando la difícil decisión que tome, un gesto formal de reprobación sería necesario.

No debe FIRMAR EN NINGÚN CASO y tiene potestad de mandarlos a todos a CARABANCHEL O A ESTAMBUL, si no lo hace, DIOS se lo DEMANDARÁ.

El candidato a la presidencia de la Generalitat fue editor a lo largo de algunos años. Muchos de los análisis acerca de su persona son, como poco, superficiales y omiten aspectos básicos de su carácter. Les invito a dejar de lado los brochazos de trazo grueso y entrar en la delgada línea de Torra. Hay mucho que decir.
A Quim Torra tiene pasión por los escritores y periodistas catalanes de la época republicana como Eugeni Xammar, Paco Madrid, Jaume Passarell y otros muchos que recuperó en su editorial A Contravent.
Torra es, antes que nada, independentista a machamartillo. Y católico a ultranza, una mezcla que, unida a su ideología de señor de derechas de toda la vida, le da un perfil político mucho más cercano al de Jordi Pujol que al de Carles Puigdemont. A través de Kim Dorca – descendiente de los propietarios de la famosa Banca Dorca que compró Fulgenci Pujol, padre del que fue President, para convertirla en la base de la que sería Banca Catalana – tuvo acceso a Reagrupament, formación que aglutinaba por aquellos tiempos a los que estaban cansados tanto del tacticismo convergente como de Esquerra. Aquello acabaría por sumarse – como la ANC, Ómnium y demás parafernalia – a la estrategia de Convergencia. A lo mejor, el origen de todo fue su trabajo como abogado de la compañía Winterthur, donde Torra se aburría soberanamente, de ahí su aventura personal como editor, político y activista. Ahora bien, aquellos que hacen análisis de urgencia sobre su persona obvian quizás el dato más importante: es un intelectual. Fanático, sí, pero un intelectual. Torra ha sabido dar cada paso cuando tocaba. Con el pacto entre Reagrupament y Convergencia, se aseguraron él y un puñado de militantes de la formación radical independentista un puesto de trabajo en el Ayuntamiento de Trías. A Torra le tocó primero el de responsable de Las Ramblas, fuese lo que fuera aquello; después llegó el espaldarazo: le nombraron Comisionado de El Born, la Meca del independentismo. Amigo de Muriel Casals, por entonces presidenta de Ómnium, se pasaba las tardes conspirando con ella en el café del Hotel Colón, intentando darle forma al proyecto separatista.

Que todo eso acabase en su presidencia de Ómnium, para terminar yendo en la lista de Puigdemont, desembocando en su designación como candidato, no es anormal, de hecho, es un tipo que sabe caer bien a los suyos, tranquilo, erudito, con cara de sabio despistado y buenas lecturas. Ahora bien, ¿va a ser el títere que ansía el cesado? Pues miren, más allá de los gestos y la ceremonia, lo dudo mucho.
Que haya aceptado la imposición de Puigdemont de no ocupar ni su despacho ni los lugares emblemáticos del Palau no hace a Torra un mero títere como se apunta por ahí. Qué poco lo conocen. Por su carácter, por su trayectoria, por su entorno tanto familiar como social, piensa ir mucho más lejos que sus predecesores. El conflicto catalán no tan solo no va a disminuir, sino que se acrecentará y muchísimo en los próximos meses. Los del PDECAT van a dejar claro en los próximos días que ni están de acuerdo en cómo se ha llevado a cabo su designación ni en los planes de futuro que tiene el candidato a President. Pero a Torra eso le da igual. Cree que su misión es traer la república a Cataluña, separar el grano de la paja, apartar a los españolistas, a los malos catalanes, a los tibios, a los traidores – imagino que debe considerarme entre estos últimos – y hacer una sociedad ex novo basada en la patria, Dios, y la cultura catalana. Si fuera de izquierdas, les pasaría la mano por la cara a los CDR y las CUP con quienes, por cierto, mantiene excelentes relaciones.

El conflicto catalán no tan solo no va a disminuir, sino que se acrecentará y muchísimo en los próximos meses. El panorama que se abre a partir de ahora es mucho más inquietante que el vivido hasta el momento. Puigdemont solo ha sido un chico de pueblo más bien tonto al que le venía muy grande el cargo, pero Torra está hecho de otra pasta. Su vocación lo lleva a hacer todo lo que el de Bruselas no hizo. Cuando Torra proclame la república catalana, y esto será así, que nadie lo dude, no será para dejarla en suspenso a los pocos segundos. Cuando Torra haga que se aprueben las leyes de transitoriedad hacia la república, las mantendrá hasta sus últimas consecuencias. Cuando Torra salga al balcón de la plaza de Sant Jaume, que lo hará, para llamar a la resistencia a los separatistas, lo hará plenamente consciente de lo que eso supone. No estamos ante un chisgarabís cualquiera, un atolondrado o un simple comisionista. Todo eso le importa un pito. Se cree con una misión histórica y hará lo que sea, al precio que sea, con tal de llevarla a cabo. Con él, el independentismo ha llegado a la última estación, la de un movimiento de extrema derecha como el de la Lega veneciana.
Hay que estar atentos a esto, porque desde el gobierno se suele pensar en el independentismo como algo que se acabará por desactivar a cambio de más dinero o algunas concesiones, y eso se ha terminado. Sepan, además, que Torra es un devoto admirador de Jordi Pujol y que este, a su vez, le tiene en gran aprecio y lo valora muchísimo. Resumiendo, con Joaquim Torra como President el conflicto no tan solo no habrá terminado, sino que solo habrá comenzado su andadura.

Añadamos el desprecio intelectual que siente hacia Arrimadas y Albiol, a los que considera poco menos que unos ágrafos. Ese desprecio, esa arrogancia, es otra de sus características. Para este hombre, todo aquel que no conozca la historia de la peña del Ateneu, los avatares de la formación política Acció Catalana o la vida y milagros de gente como Josep Carner no tienen ni puñetera idea de lo que es Cataluña. Ese es su error, el mismo que cometen los integristas del separatismo. Todo eso ha sido parte de la historia de Cataluña, pero conocerla no te hace ni mejor ni peor político. Al contrario, esa permanente idealización de un pasado que no fue, ni de lejos, como Torra imagina, puede llevarte a confundirlo todo. Cataluña es mucho más compleja que las disquisiciones entre intelectuales de uno u otro signo.
Torra va a perseguir su sueño pese a quien pese, aunque nos lleve a la peor de las pesadillas. Que no es otra que un enfrentamiento civil
De ahí que, va a perseguir su sueño pese a quien pese, aunque nos lleve a la peor de las pesadillas. Que no es otra que un enfrentamiento civil. El mismo que destrozó las carreras y las vidas de todos aquellos periodistas y escritores a los que tanto admira.
Ese es el hombre que puede presidir la Generalitat. Avisados están todos.

En el siglo XV llego el Rey Fernando a su Condado de Barcelona y al pasar por Montserrat quiere saludar a la Mare de Deu y se encuentra que no hay monjes en su Monasterio, están con sus fulanas fijas o temporales en los pueblos cercanos, otros viviendo su vida lejos y nadie rezando ni en clausura. Entonces su amigo y consejero el franciscano Cardenal Cisneros acudió en su ayuda y colocó a Montserrat bajo el poder del Monasterio de Valladolid llamando a su sobrino el Abad Cisneros para que lo ordenase y limpiase, este vino con algunos monjes de Valladolid, echo a muchos seudomonjes instauro la norma de San Benito que debían cumplir y que obviaban, empezó los trabajos editoriales que tanta fama han dado al Monasterio y todos hablaban latín y español reistaurando la Fe Católica que no existía en dicho lugar.
Ahora esta en la misma situación que cuando vino el Rey Fernando agravada porque el representante del Rey en Cataluña (el presidente de la Generalitat) se cisca en su monarca.
Pronto desaparecerá este Monasterio y se convertirá en Parque de Atracciones ya se usa la imagen de la Moreneta para actos ludico festivos y astracanadas en Berlin.
Gracias obispillos, no esperen que ningún católico ponga la X en su declaracion de IRPF, POR TANTOS desprecios y ninguneos que nos dedicáis, que la pongan los de la CUP