LA CADUCIDAD DE OMELLA

15
 
Juanjo, aquí en Calanda, nos tienes preocupados. No nos gustaría que te relegasen a la condición de Cardenal Emérito. Para eso ya tenemos a tu antecesor, que no está para tirar cohetes. Tus paisanos no nos hacemos a la idea de verte envejecer lejos de tu tierra, en un geriátrico para sacerdotes. No, no nos resignamos. Lo tuyo es una resiliencia prodigiosa: das la imagen de que tienes cuerda para rato. Has sabido estar en todas las avanzadillas de manera eficaz y sin reivindicar protagonismos que te dejan totalmente expuesto.
En La Bellota hay un aire de preocupación a la vista de que te quedan sólo meses para pasar al retiro, tanto de tus cargos diocesanos en Barcelona, como de tus altas misiones en el Vaticano. A los 80, jubilación forzosa para dejarle los trastos a la siguiente generación.
La verdad es que nos encantaría tener nuestro cardenalico con su solemne sede cardenalicia, dando lustre a su tierra. Lástima que con la liturgia minimalista que se ha puesto de moda, ya no se lleven las misas pontificales. Porque alguno de estos pueblos en los que ejerciste tu joven apostolado, podría convertirse en un foco de atracción litúrgica.
Tus paisanos especulamos con un par de acontecimientos a los que podrías atraer al papa León XIV incluso una vez cumplida tu edad. Eres excepcional, y contigo se puede hacer una excepción. Si el cardenal Sistach consiguió traerse al anciano papa Benedicto XVI para consagrar la basílica de la Sagrada Familia, más fácil te ha de ser convencer a León XIV que venga a Barcelona a coronar la fachada principal de la Sagrada Familia con la gran Cruz y a coronar tu brillante carrera eclesiástica. Te lo mereces, Juanjo, siempre has sido fiel a la voluntad del papa, a pesar de que haya sufrido fuerte contestación. Tú nunca has sido un líder en las reformas de la Iglesia. Has estado al lado del papa con discreción y con eficacia.
En el tema de la sinodalidad realmente te empleaste a fondo desde tu cargo de Presidente de la Conferencia Episcopal Española, y salieron las cosas como se había propuesto el papa que saliesen. Has sido un ejemplar siervo fiel. Tus detractores, que nunca faltan, alegan que tu preocupación no fue servir a la Iglesia, sino servir al papa, y que fue esto lo que te hizo medrar.
Estuviste en una situación de privilegio con el anterior papa, que supiste gestionar con gran acierto. Y ahora, con León XIV, no eres del puñado de cardenales conflictivos con importantes parcelas de poder, por lo que el papa no tendrá ninguna prisa por jubilarte, sobre todo, quedando pendientes los dos grandes hitos de tu carrera: la culminación de la Sagrada Familia y el otro magno acontecimiento que se está celebrando en tus dominios, el milenario del monasterio de Montserrat, que puede ser un dignísimo motivo para aplazar tu jubilación.
La gran lástima, Juanjo, es que hayas emprendido en tu diócesis una especie de liquidación de la figura del párroco, diluyendo las responsabilidades pastorales en las novedosas agrupaciones de parroquias, Quizá tengas razón, Juanjo, porque la formación que dan hoy los seminarios, no son capaces ya de crear y formar párrocos; y juntándolos en una responsabilidad colectiva, no se notan las deficiencias individuales. Quizá sea eso; pero produce tristeza contemplar la extinción de párrocos y parroquias.
Con un inconveniente añadido, bastante grave: y es que al ser la hora de los laicos, serán éstos los que lleven la gestión del nuevo tinglado, serán ellos los gerentes. Con lo que los curas quedarán subordinados a los laicos, quedando en una especie de cuerpo de trabajo pastoral al servicio de los gerentes de la unidad pastoral.
Quizá sean los signos de los tiempos, Juanjo, quizá no haya otra alternativa: tú estás más arriba y estás en condiciones de ver más claro. Pero nos invade la tristeza al ver que, al jubilarte, te llevas contigo toda una época. Te llevas los párrocos, las parroquias, los seminarios y la forma que hemos tenido de entender la Iglesia a lo largo de la generación que se extingue contigo.
 
Así cavilaba reposadamente el tío Caldu en La Bellota, mientras el sonido de las fichas de dominó chasqueando sobre las mesas llenaban el espacio auditivo de la taberna. “Sí, afirmaba Cadú, Juan Jose Omella, tiene cuerda para rato. El gachó no afloja ni por un momento. Ahí tenéis al obispo de Córdoba, Demetrio Fernández o al de Alcalá, Reig Pla que fueron defenestrados en el minuto siguiente de cumplir 75 años. Otros, en cambio, prorrogados sine die. ¡Y luego hablarán del abuso de poder en la Iglesia!”.
Las reflexiones del bien baturro traían al pairo a la mayoría. Sin embargo, el Aurelio terció y dijo que los mayores abusos de poder los ha hecho Omella, destruyendo en Barcelona el tejido multisecular de la Iglesia que son las parroquias. En su lugar, unas Comunidades Pastorales, en las que la responsabilidad de los sacerdotes quedará diluida en un equipo cuyo único responsable será el coordinador de unos servicios mínimos que desmotivarán a unos fieles que ya ahora son como ovejas sin pastor. Los curas sin responsabilidad alguna, pues nunca ya serán párrocos, no tendrán ninguna comunidad a su cargo exclusivo. Como eternos adolescentes saltarán de parroquia en parroquia, a diferentes horarios, a fin de que los feligreses no se encariñen con ninguno y lo conviertan de facto en su pastor.
¡Menudo discurso! Es que el tío Aurelio es largo. No en vano estuvo varios años en el Seminario de Alcorisa, aunque en aquel tiempo en que los profesores aún enseñaban teología católica. Será por eso que añora épocas pasadas. Tan pasadas que nunca volverán. Otra cosa es que el buen Dios haga un milagro y nos libre de tanto desmán.
Lástima, amigo, que una cuadrilla de irresponsables te metieron en el embrollo del Espíritu Santo, que se ha saldado con unos cuantos daños colaterales, entre ellos, el del párroco, que ha quedado bien tullido y misericordiado. Pero bueno, esas cosas van con el oficio, y al que le toca, le toca.
En fin, amigo y paisano, que La Bellota está que arde. Los próceres del lugar están planteando hacerte una gran fiesta homenaje para celebrar tu jubilación, con la idea de retenerte en nuestra tierra. Gran idea, aunque difícil de realizar. Los calandeños nos sentiríamos felices de poder gozar durante un buen puñado de años, de nuestro cardenalico. No te vemos caducando sólo por el hecho de que te jubiles. Descansarás de tus responsabilidades, pero vivirás largamente en nuestros corazones, y si Dios quiere, en nuestras tierras. 
El Cojo de Calanda

Entradas que pueden interesarte

15 comentarios

  1. "Con un inconveniente añadido, bastante grave: y es que al ser la hora de los laicos, serán éstos los que lleven la gestión del nuevo tinglado, serán ellos los gerentes. Con lo que los curas quedarán subordinados a los laicos, quedando en una especie de cuerpo de trabajo pastoral al servicio de los gerentes de la unidad pastoral."
    Los fieles serán los primeros perjudicados, y ha continuación los sacerdotes.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No hay curas, y al ser los únicos que consagran y confiesan, van a ser itinerantes.

      Los laicos solo son administradores del agua, luz, limpieza y vigilancia...

      Eliminar
  2. Omella no ejerce de cardenal de la Iglesia catolica, mas bien ejerce de político para quedar bien con los que mandan y pisar a los que tiene debajo.
    Ha sido un desastre para Barcelona, mejor que se jubile cuanto antes.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Su comentario es fruto del conocimiento personal que tiene de Mons. Omella? No esw ético opinar sin conocer.

      Eliminar
    2. Hermano/a, usted wur conoce bien a Don Juan José, cuéntenos alguna cosilla que nos saque del tembleque que nos ha dejado el cardenal estos largos años

      Eliminar
  3. Presidente de la Conferencia Episcopal Española (2020-2024)
    Arzobispo de Barcelona (2015-2025)
    Francisco (2015-2025)
    León XIV (2015-hoy)
    Jubilación: 21 de abril de 2026

    Para ser un cazador de ureñas y un fiel servidor del Marqués de la Pampa, más siendo misionero en Congo y obispo de diócesis de tercera, realmente, ha tenido en la vida más de lo que vale, al menos a nivel curricular en relación con Barcelona. Lo que vale ser cazador y fiel servidor...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No coneixo gaire/ GENS la cúria catalana/ espanyola/ vaticana

      Això no obstant, tinc gravat la data:

      '13/3/2013'

      FEM

      Eliminar
  4. Gracioso el Cojo de Calanda:

    1. Preocupación por el retiro de Omella: Los calandinos temen que, tras su jubilación, Omella sea relegado a un papel secundario (como cardenal emérito) y termine lejos de su tierra, en un entorno poco deseado como un geriátrico para sacerdotes. ¡Eso jamás!

    2. Admiración por su resiliencia y trayectoria: Se destaca la energía y eficacia de Omella, su capacidad para mantenerse en roles clave en Barcelona y el Vaticano sin buscar protagonismo, y su lealtad al papa, especialmente en la promoción de la sinodalidad como presidente de la Conferencia Episcopal Española.

    3. Proyectos pendientes como legado: Se mencionan dos hitos que podrían justificar una prórroga en su cargo: la culminación de la Sagrada Familia (con una posible visita del papa León XIV para coronar la fachada) y el milenario del monasterio de Montserrat. Fechas:

    Acto de clausura de Montserrat
    8 diciembre 2025 - Vísperas y canto del Te Deum milenario

    Acabamiento Sagrada Familia
    10 junio 2026 - centenario de su deceso

    4. Críticas a su gestión diocesana: Se le reprocha haber impulsado una reestructuración que elimina la figura tradicional del párroco, reemplazándola por "Comunidades Pastorales" donde los laicos asumen roles gerenciales, subordinando a los sacerdotes y diluyendo sus responsabilidades. Esto se percibe como una pérdida de la identidad parroquial y una desmotivación para los fieles. ¿Qué es sino un genio avanzado a su tiempo?

    5. Nostalgia por una época pasada: Lamenta que la jubilación de Omella marque el fin de una era en la Iglesia, con la desaparición de párrocos, parroquias y seminarios tradicionales, reflejando los "signos de los tiempos" pero generando tristeza. ¡Su visión profética es la correcta!. Ya sé que la envidia resta méritos, pero eso es lo correcto: lo que nunca la Iglesia ha visto en 2.000 años, Omella sí.

    6. Acusaciones de abuso de poder: Algunos personajes, como el tío Caldu y Aurelio, prohombres de bien y bondad, critican a Omella por destruir el tejido parroquial multisecular y por su supuesta prioridad de servir al papa en lugar de a la Iglesia, lo que le habría permitido ascender en su carrera. ¡Malpensados, no les mires ni a la cara ni les pagues el café!

    7. Deseo de retenerlo en Calanda: Los paisanos proponen una fiesta homenaje para celebrar su jubilación y mantenerlo en su tierra, expresando el cariño y deseo de que siga siendo una figura relevante en Calanda: ¡La festa d'Omella!

    ResponderEliminar
  5. 2025 y 2026 pueden ser años venturosos donde se de un vuelco a la situación estancada.

    Se ha ido Francisco y en meses Omella, se irá pronto Sánchez, también Illa, y dicen que Collboni también, ya que Junts pide a Sánchez la alcaldía de Barcelona... pongan quien sea, será muchísimo mejor que este alcalde que ha destruido Barcelona, incompetente, incapaz, que la ignora ni le importa nada.

    Sólo falta que se larguen Macron y Von der Thorpen y algunos políticos globalistas que hay llevado a Europa a la ruina desde 2015... hace unos 10 años, la influencia mundial estaba compartida entre Europa, EEUU y China. Hoy, EEUU se mantiene, China sube y la UE está en mínimos históricos, por culpa de una hornada de pésimos políticos, que entre otras cosas, han reventado la industria automovilística, de las nuevas tecnologías (IA), del mercado energético y minero, de las tonterías del cambio climático que no siguen ni EEUU ni China, de la locura de control social...

    Puede ser, sí, un bienio que se lleve a consagrados y civiles bien prevaricadores, perniciosos, perversos y perjudiciales.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El Collboni está ahí de alcalde porque es del gremio arco iris..para retener cuota y dar de comer a mucho apresurado que dejó la infame Colau. Por lo menos parece que este año el aquelarre de junio no fue tan "subvencionado"

      Eliminar
  6. No pretendo defender ni justificar a Omella.
    Pero, para un católico que se precie, hay acciones y comentarios más positivos, cultos y edificantes, que juzgar y vilipendiar a un Cardenal. Cardenal con su Eminencia correspondiente.
    Opino que se manifiestan señales de engreimiento cuando un humano pretende con mucha frecuencia, anticiparse y suplantar al verdadero y único Juzgador.
    Ya es desagradable que “el Cojo ese”, suplantador de personalidad ajena, rocíe con su bilis a quien le place. Solo faltaba que se le siga la corriente en sus filípicas, terminando de remover los despojos esparcidos.
    ¡Porca miseria!
    Flaco favor hacen, unos y otros, a mi entender, al soporte GERMINANS.
    Flaco favor hacen, unos y otros, a mi entender, a la labor o misión encomendada desde hace dos mil años.
    Más bien pronto que tarde, llegará el momento en que el Juzgador, peine adecuadamente a cada uno de nosotros.
    TEROL

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No te sulfures, Juan José.

      Eliminar
    2. Pues mire amigo TEROL, yo le.pediría a Su Eminencia Reverendísima que hiciera canónigo de la catedral al Sr Cojo y al Aurelio que le diese la administración de alguna capilla personal donde pudiera celebrarse según el rito de Trento, ese que el finado se ensañó con ahínco en perseguir

      Eliminar
  7. El comentarista firma su glosa con doble pseudónimo, ambos muy ligados a Calanda, tan calandinos como Buñuel y la tamborrada. Me refiero a la leyenda o historia piadosa del Cojo y el melocotón. Prunus persica, en la denominación binomial de Linneo, el melocotón ha sido, a lo largo de la historia de la farmacia, un vegetal terapéutico de primer orden.
    ¿Por qué ha escogido el autor ambas firmas? Mezcla almibar con el sarcasmo de otro cojo universal, don Francisco Quevedo. Dificilmente se puede tomar mejor opción cuando del retrato de un prelado se habla. El azúcar del respeto a la mitra no puede celar una nefanda actividad que ha humillado a la Iglesia en lo más ruin: su genuflexión a los poderes de este mundo. Quevedo sufrió la dictadura del poder al no plegarse. Un obispo católico jamás tendría que haber abdicado ante los poderes de este mundo hasta el punto de entregar la testa de uno de sus más celosos sacerdotes a una alcaldesa que ha mostrado su rostro auténtico en el sanedrín de Illa. Menudo par de infatigables perseguidores del débil, en un caso al menos con resultado de muerte.

    ResponderEliminar
  8. El vino tinto de Lledo ya está preparado y el Sr. Chili al punto.

    Jeje!

    ResponderEliminar

ESCRITOS INTERESANTES ANTERIORES

ESCRITOS INTERESANTES ANTERIORES
El cardenal Omella suspende una charla sobre noviazgo del padre Javier Olivera
Los Salesianos de Mataró homenajean a los brigadistas que confiscaron el colegio durante la guerra
«De cómo fue salvada la patrona de Barcelona»
PEDERASTÍA Y HOMOSEXUALIDAD EN EL MONASTERIO DE MONTSERRAT
L'arquebisbat de Barcelona aparta un dels sacerdots de la Casa de Santiago acusat d'abusos
El Vaticà pren el control directe del bisbat d’Urgell per “liquidar” la figura del copríncep episcopal
Apostolado “Transformados”: Dejan el mundo LGTB tras un encuentro con Cristo, sin terapias
La Iglesia catalana no para de arrodillarse ante el separatismo
La Iglesia catalana, partida en dos por el derribo de una parroquia
Omella destituye a un párroco crítico con un plan urbanístico de la Iglesia en Barcelona
Centenares de catalanes acompañan a la Virgen de Fátima por el centro de Barcelona.
Dues nuevas denuncias por abusos sexuales afectan a los Jesuitas de Casp
La CUP elige a un profe de religión como secretario general
El párroco de la Mercè, tras la retirada de la misa: «Tal vez recibamos a las autoridades tocando a muertos»
El Clínic traslada su proyecto de centro de investigación por la imposibilidad de instalarse en una iglesia del Eixample
El gran vitrall de l’església de l’Esperit Sant se salvarà de l’enderroc
Omella no está en su mejor momento: el cambio en Barcelona se acerca
La secta de la Casa de Santiago. El escándalo que la Iglesia catalana ocultó durante 30 años
Omella envía a un cura de 72 años a comerse el Santísimo de la iglesia que quiere derribar
Derribos Omella: el arzobispo desacraliza la iglesia del Espíritu Santo de Barcelona y suspende a divinis al párroco
Los memos del Bisbat de Sant Feliu de Llobregat
El hilo que une Monserrat con el Opus Dei: 85 años de amistad y protección