Eso de que nos están diseñando una Iglesia para idiotas (creo que nos han tomado la medida) no lo digo en sentido de insulto, ¡Dios me libre!, sino en sentido estrictamente descriptivo. Es que la idiotez (¿o quizás el idiotismo?) es una intensa aspiración no sólo en el ámbito político (estamos en la civilización de la idiotez), sino también en el eclesiástico: en nuestra amada Iglesia. Se trata de una plaga que, tanto en un ámbito como en otro, acaba desembocando en el más riguroso totalitarismo. Si son inmensa mayoría los idiotas que no entienden su derecho individual y su obligación colectiva de meterse en el terreno de sus gobernantes, es inevitable que el administrador de lo que pertenece a todos (sea éste el Estado, sea la Iglesia), se convierta en el amo (autócrata, dictador, tirano, déspota, monarca absoluto) de ese bien común, sin sufrir mayores contratiempos: porque está claro que la mayoría de los miembros de esas instituciones, van simplemente “a lo suyo”. También ellos son idiotas.
Voy a la descripción del término, no vaya a ofendérseme el personal y opte por tirarme huevos y tomates podridos, o que se decida directamente a lapidarme. Claro que me hubiese gustado poner el título entre admirativos. Y no uno, sino tres. Pero eso se hubiese interpretado justamente como un grito, un insulto, que es el valor actual de uso de ese término. El único. En cualquier caso, no estaría mal que nos preguntásemos por qué ocurre eso, por qué una cosa tan “normal” como ocuparse cada uno exclusivamente de lo suyo, desentendiéndose de su dimensión colectiva (demótica, dirían los griegos), ha sido socialmente tan mal vista, que se ha convertido en un insulto. Y no de los más leves. El tonto, el atontado, el memo, el cretino, el imbécil, el estúpido, tienen una categoría inferior al idiota. Ser idiota es todo un grado.
Aunque haciendo justicia a la palabra y a su historia, hay que reconocer que tardó muy poco en adquirir esa marca de idiotez. Partiendo del inofensivo significado de individuo (por oposición a cualquier género de poder, organización o administración), a la hora de tocar el plano profesional pasó a significar inexperto, ignorante, profano (en el ámbito eclesiástico, laico). Hemos llegado ya a la posibilidad de convertirse en insulto. Y eso fue muy temprano, cuando este término estaba aún en pañales.
Entre los contextos que ofrece el diccionario Montanari, he elegido uno de Aristófanes, que nos viene como anillo al dedo: “proséuju toisin idiótais zeóis: rézales a tus dioses particulares” (lit. idiotas). Pues claro que sí, cada uno con sus dioses y con sus normas de conducta. Efectivamente, el monoteísmo fue de frente contra esta idiotez. Pero por todas las apariencias (la Nueva Iglesia se ha propuesto abrazar a todas las religiones) estamos de vuelta del monoteísmo, y hoy está maravilloso que cada uno tenga su dios (minúsculo) y se monte su propia religión. Es la idiotez sacralizada.
Y claro, no nos olvidemos de que frente al individuo (idiótes les dio por llamarle en la Grecia clásica), está el sacrosanto Démos, al que venera todo Occidente con la singular excepción de la Iglesia católica. Ésta, de forma sumamente extraña y precipitada, se ha propuesto entronizarla a través de doctrinas individualistas, es decir idiotizantes, que desembocan en una singular “democratización” de la Iglesia. A ese nuevo invento lo llaman sinodalismo. Un engendro totalitario y absolutista, como no podía ser menos.
Lo relevante es que, en todo el mundo, las leyes están hechas con la intención de que funcione el cuerpo colectivo, el démos, el Pueblo (en el caso de la Iglesia, el Pueblo de Dios), no el individuo. Eso está en total contradicción con el invento del discernimiento, que le permite a cada uno pasar de la ley de Dios. Y curiosamente, en la ley humana (sin importar si es democrática o totalitaria) no funciona nada que se parezca al genial discernimiento jesuítico. ¿Por qué? Porque ése es el camino más corto para negar la ley, abrirle paso a la anarquía y finalmente entronizar el más demoledor totalitarismo. Desde el punto de vista de cualquier sistema colectivo, eso del discernimiento (la facultad de interpretar cada uno la ley como le parezca o le convenga) es la mayor idiotez, sí, cosa de idiotas y para idiotas, que se podía inventar. A no ser que lo consideremos una genialidad diseñada para reventar el sistema desde dentro.
Llevamos ya unos cuantos decenios en la civilización de la idiotez. Es lo que tienen el hedonismo y el epicureísmo como normas supremas de la conducta. Discúlpeme usted, con-ducta es la manera de com-portarse una colectividad. El individuo suelto ni tiene ni necesita normas de com-portamiento (en latín, con-ducta) porque no tiene con quién portarse o llevarse: ni bien ni mal. Obsérvese que el prefijo con-com, tanto en la conducta como en el comportamiento hace referencia a la colectividad. La conducta y el comportamiento sólo tienen sentido si se vive en sociedad y por tanto ya no está bien visto (ni bien experimentado) que cada uno piense exclusivamente en sí mismo.
Y como la hedoné en que se sustentan el hedonismo y el epicureísmo son sensaciones (eventualmente elevadas a la categoría de sentimientos) totalmente individuales, cuya razón de ser es estrictamente individual (y egoísta si se quiere), no necesita ningún género de ley o norma ni tampoco leyes que la defiendan. Es la ley de Juan Palomo, yo me lo guiso, yo me lo como.
Es que no hay más que contemplar la legislación más reciente para entender que las leyes actuales están dirigidas especialmente al privi-legio, a la ley privada. Una ley para cada uno, basada especialmente en el “discernimiento” (eso para la ley eclesiástica) que le permite a cada uno hacer su propia exclusiva e interesada lectura de la ley, con el derecho inalienable de acomodarla a cada momento y circunstancia, con el nobilísimo fin de que la ley no fuerce, ni obligue ni violente al individuo. Evitando por todos los medios que éste se vea forzado a cumplirla si no le conviene.
Y es aquí cuando llega la novísima Iglesia y so capa de misericordia infinita, en total contradicción con la misericordia de Dios, dice que en el sacramento de la penitencia (sin pena ni culpa, aunque poenitentia proceda de poeniteri, que significa arrepentirse: para enderezar la conducta) se le ha de perdonar todo, todo, todo al impenitente, aunque ni se arrepienta ni tenga propósito de enmienda. Como si Dios nos hubiese dado los mandamientos para darnos por medio de ellos la felicidad individual. Sin entender que las leyes están escritas para contener las pasiones del individuo en beneficio de la colectividad. Desde el momento en que se juntan dos seres humanos (y eso ocurre no sólo en la ética, sino también en la etología) el comportamiento de ambos no puede orientarse al exclusivo bien individual, sino que se ha de dirigir al bien común: aceptando las limitaciones que eso le imponga a cada uno.
Pero es el signo de los tiempos. Hoy la política está hecha para idiotas (los que miran sólo por sus intereses y placeres) con el fin evidente de que enajenándose cada uno de su dimensión demótica (colectiva), sea más fácil construir una política totalitaria en la que los individuos dejen hacer a los profesionales de la política y a su jefe supremo. Y la Iglesia no podía ser menos: está liderando el invento. También está configurándose meticulosamente para que cada fiel, gracias sobre todo a su facultad de discernimiento basada en la misericordia para consigo mismo, alcance la plenitud de la felicidad a la que sólo es posible acceder desde la más absoluta idiotez.
De ese modo quedan abolidos los mandamientos porque imponen demasiadas renuncias al pobre individuo que nunca es culpable de nada. Queda, por tanto, la novísima tarea eclesiástica de acomodar la biblia, la moral y la pastoral, la teología al fin, al bienestar de cada uno. ¡Menuda idiotez!
Virtelius Temerarius
Me parecen interesantes estas cuatro ideas que presenta el articulista: individualismo y relativismo como factor anarquizante protestante, pero por otro lado, politización y totalitarismo como argamasa de este concierto de grillos, pues la unidad sólo la puede mantener el político del país que sea, o sea, sería una Iglesia bolivariana y estatalizada, por tanto, una Iglesia luterana sui generis. Me gusta y parece cierto, Bergoglio ha estrellado a la Iglesia hacia su sumisión al Estado y la facción dominante de dicho estado.
ResponderEliminarFACTOR DE LIBERALIZACIÓN ANARQUIZANTE
1. Individualismo exacerbado: la Iglesia estaría promoviendo un individualismo extremo, donde cada fiel es llamado a interpretar las enseñanzas a su manera, sin considerar la dimensión comunitaria de la fe.
2. Relativización de la ley moral: el concepto de "discernimiento" es utilizado para justificar una relajación de las normas morales, permitiendo a cada individuo decidir qué es bueno y qué es malo.
FACTOR DE UNIFICACIÓN DICTATORIAL
3. Politización de la fe: la Iglesia, al adoptar posiciones más cercanas a las ideologías políticas dominantes, estaría abandonando su papel trascendente y convirtiéndose en una institución más.
4. Totalitarismo encubierto: a pesar de las apariencias democráticas, el autor ve en estas tendencias una forma de totalitarismo sutil, donde la libertad individual es restringida en nombre de una supuesta unidad.
Es evidente que ello puede verse en Alemania con su apostático camino sinodal, cohesionada por el Estado benefactor y benemérito (impuesto religioso, capacidad de ilegalizar toda comunidad ortodoxa por ir contra los nuevos derechos), y además, por la ideología de la Teología del Rin protestantizada, que se extienden por Bélgica, Holanda, Austria y Suiza.
Sí, hay que ayudar a hacer cómoda la vida del católico. Por ejemplo, que las homilías duren ménos de diez minutos. No hay que aburrir al creyente que acude a la misa dominical. Y meno cansarlo. Que le queden deseos de volver el próximo domingo.
ResponderEliminarEl sermón del viernes en las mezquitas suelen durar media hora.Los protestantes invierten una media hora o más. En la iglesia Ortodoxa, de tres cuartos de hora o una hora entera. Un domingo, asistí a la celebración de la divina litúrgia en un templo ortodoxo rumano y la homilía duró casi una hora y media. Y los fieles de pie, escuchando con atención. Y regresan al domingo siguiente todos. ¿Por qué será?
Y el contenido de la mayoría de las homilías. Sonroja el bajo nivel del clero en muchas de ellas. Desconocen con rigor la doctrina, ya no digamos el catecismo o los dogmas. De ciencia bíblica y de patrística pocos saben más que cuatro nociones vagas. Y en liturgia o espiritualidad... En fin, nadie da lo que no tiene. Yo recomendaría que leyesen más, porque, sin mala voluntad, he escuchado herejías en más de una homilía.
Eliminar¡Diez minutos! Por qué no doce...
EliminarYo pondría el Homiliometer Leo Magnvs 3500 en cada parroquia.
Teniendo en cuenta el contenido informativo teológico-espiritual, el ritmo, la cadencia y la entonación, junto con un análisis de la cara de todos los feligreses a través de la IA, podría decir:
- Por favor, abrevie si homilía a 5 minutos
- Por favor, tiene un plus homilético de 5 minutos de extensión
:)
uns familiars ,ell diplomàtic, estaven a veure si el co-príncep asistia a l´acte inaugural de la restauració de la Catedral de NOTRE DAME, El varen veure ahir a la nit en una discreta tercera fila entrant a l esquerra. Aquest mati estava a la Santa Misa, en un primer banc, ha saludat poc i estava tot l´Ofici bastant serio ,vestia una mena d´abric. Ahir si que m´han dit que estava somrient parlant mb una senyora a la seva esquerra amb medalla de co-príncep. NOTRE DAME sigui per tots un lloc de pregaria i silenci, i sobretot per la nació francesa, que prou que ho necesita. Em va dir aquest parent diplomàtic que es comentava l´ausencia de cap autoritat d´Espanya... sento una gran pena.
ResponderEliminarPolíticos que no son Católicos de verdad ,no tienen que asistir a ningún acto religioso.
EliminarEl primero que sobraba era el masonazo de Macron y siguiendo toda la recua de lameculos que le rendían pleitesía.
También los ropajes del Arzobispo y sus acólitos necesitaban un poco más de coherencia.
Parecía un desfile de moda lgtbxyz.
'...genial discernimiento jesuítico'
ResponderEliminarNi el millor amic afirmaria que mossèn Francisco fos 'genial.'
Al rumiar el concepte 'millor amic' pensava fer una llista... Pare Arana sj, Emma Bonino, Tucho ... per començar.
Ironia a part, potser sóc el primer a notar que sembla que tenim un Sant Pare 'lliure d'amistats.'
Però, com a minim, te arrels familiars?
Ni pensar-ho. Inclòs ha elevat a cardenal molt molt recentment un sacerdot funcionari de Vatica... per haver tingut exit en no aconseguir bitllets d'avió fins a BA als portals d'internet ni un sol dia des de març del 2013.
Puede decirse que la Iglesia bajo Francisco es una Iglesia colapsada y fallida, ha sucumbido al mundo y su moral relativista, como se ve en Amoris laetitia, Fiducia supplicans, y en las inmanentistas y antropocéntricas Fratelli tutti y Laudato si, además de casi toda su documentación y normativa.
ResponderEliminarUna diferencia clave entre la firmeza histórica de la Iglesia en erradicar prácticas inhumanas y no aceptar el enfoque gradualista y adaptativo que podrían proponer los progresistas.
Desde el Imperio Romano, naciones bárbaras germanas y eslavas, hasta los sanguinarios imperios incas y aztecas, con prácticas bárbaras como el canibalismo, sacrificios humanos de niños, abandono de vulnerables (ancianos y enfermos), esclavismo salvaje, adoraciones a ídolos vandálicos, poligamia, malos tratos, abusos... no deben tolerarse ni por un instante, y cualquier sistema moral y religioso que contemple transiciones prolongadas para eliminarlas podría considerarse éticamente fallido.
1. Firmeza frente a la inhumanidad: el enfoque de la Iglesia
a) Erradicación inmediata de prácticas bárbaras: No se permitió ninguna tolerancia hacia acciones que consideraba intrínsecamente inmorales y contrarias a la dignidad humana.
b) Transformación cultural radical: La imposición del cristianismo se entendió como una obligación moral para proteger la vida y erradicar la brutalidad.
c) Principios universales no negociables: Este enfoque implicaba que no podía haber "transiciones" en ciertos aspectos fundamentales, como el respeto por la vida humana y la abolición de costumbres bárbaras.
2. Enfoque progresista: transiciones y adaptaciones
El modelo progre podría verse como más gradualista, basado en la idea de que un cambio cultural sostenible requiere tiempo y adaptación. Sin embargo, este enfoque podría parecer problemático frente a atrocidades inaceptables.
a) Sociometría y análisis gradual: se enfatiza la comprensión y el respeto por las dinámicas sociales, pero esto podría interpretarse como una permisividad implícita si no se actúa de inmediato contra la barbarie, que no debe de admitirse ni un segundo.
b) Peligro de relativismo moral: Aunque no sería su intención, su enfoque podría ser percibido como priorizando el interés de la estabilidad sobre la justicia inmediata.
3. El dilema ético progresista
Desde el punto de vista progresista, un sistema que busca la armonía a través de transiciones graduales podría ser menos efectivo, o incluso inmoral, si tolera prácticas bárbaras en nombre de un cambio ordenado:
a) Fallo en el sistema: Si bien la sociometría busca minimizar conflictos, fallaría en casos donde el daño moral es inaceptable y requiere acción inmediata.
b) Conflicto con principios universales: Esto entra en contradicción con el valor de respeto por la dignidad humana, que debería ser intransigente.
4. Alternativa firme dentro del modelo católico
Para corregir este fallo, el catolicismo incorporar un enfoque más tajante frente a atrocidades:
a) Acción inmediata basada en principios universales: El respeto a la vida y la dignidad humana no puede esperar.
b) Intervenciones directas: La erradicación de prácticas inhumanas debe ser prioritaria, incluso si genera conflictos iniciales.
c) Reeducación posterior: Una vez eliminadas las atrocidades, las transiciones pueden enfocarse en reconstruir la cultura de manera sostenible.
5. Reflexión final
El catolicismo subraya un imperativo ético esencial: la dignidad humana no puede ser negociada ni postergada bajo ninguna circunstancia. En este sentido, el enfoque histórico de la Iglesia, con su acción rápida y decidida, puede considerarse superior en situaciones de emergencia moral. Aunque un sistema busca estabilidad a largo plazo, la tolerancia temporal de prácticas bárbaras podría verse como un defecto fundamental en su sistema.
Por tanto, cualquier sistema que valore la dignidad humana, debe ser capaz de actuar sin demora ante la inhumanidad.
3.09 Si estamos en los últimos tiempos entonces ha de darse la gran apostasía y la fornicación con la ramera. Y vamos que no lleva años de fornicio con el mundo los jerarcas eclesiásticos ( con muy honrosas y benditas excepciones)
EliminarLa idiotez es propia de la plebe esta masa que se inclina siempre hacia a favor del viento que sopla y que en términos religiosos prefiere entrar por la puerta grande que es la entrada más fácil. Pasa esto con la política y la religión, y en la segunda que discutimos siempre en este foro la masa se inclina también a la puerta grande a favor ciertos pastores que arrasan con sus prédicas sean dogmáticas o no, sólo que debemos rezar para que ciertos "profetas" que no están en la línea del Espíritu Santo el milagro los derribe del pedestal. Si rezamos pasan ciertas cosas inexplicables y es la Providencia que nos guarda de los listos que no son aptos para dirigir el rebaño.
ResponderEliminarCon la falta de predicación del Diluvio Universal y Sodoma pasa lo que pasa!
Eliminary he aquí que se mandó el Diluvio por estas razones.
EliminarSe agradecería saber el tipo de Casulla multicolor que utilizaron los clérigos franceses en la inauguración de Notre Dame de París.
ResponderEliminarMuchas gracias.
6.30 La casulla multicolores quizá sea litúrgicamente correcta pero es una auténtica charlotada, digna del altar y del suelo ajedrezado de la nueva "catedral masónica". Norte Dame des Batailles, priè por nous!
EliminarEs una casulla apayasada, típica del modernismo... La he visto en algunos sitios...
EliminarEn algún momento, me ha hecho retroceder a la época de la Nueva Era, cuando se vendían pirámides para poner debajo de la propia cama y dar energía positiva al durmiente... Algunas de estas pirámides servían incluso para recargar pilas, conservar carne y otras tonterías más...
Lo que me ha sorprendido pero no mucho, es que la haya usado el arzobispo de París en la consagración de Notre Dame...
La casulla multicolor que lució el arzobispo de París en la consagración de Notre Dame (no se rían) tiene varios significados simbólicos:
Eliminar1. Homenaje a las vidrieras: El diseño de la casulla, con destellos de colores, es un homenaje a las hermosas vidrieras de la catedral, que son una característica distintiva de Notre Dame.
2. Vínculo entre Dios y el hombre: Según el diseñador, pop Jean-Charles de Castelbajac, el arcoíris, representado por los múltiples colores, simboliza la conexión entre lo divino y lo humano.
3. Renovación y esperanza: Los colores vibrantes de la casulla también pueden interpretarse como una representación de la renovación y la esperanza tras la devastación del incendio que sufrió la catedral.
4. Homenaje al arte contemporáneo: Algunos ven en la elección de una casulla tan colorida y moderna un guiño al arte contemporáneo y una forma de hacer que la liturgia sea más accesible a las nuevas generaciones.
En resumen, la casulla multicolor del arzobispo es mucho más que una simple prenda. Es un símbolo cargado de significado que refleja la historia, la espiritualidad y la renovación de Notre Dame...
Eso dicen, y si no te lo crees o no te gusta, revienta...
Hermano de las 17.30. ¿ EL Báculo episcopal con ese círculo azul más pareciera un portal al metaverso que un homenaje a las vidrieras? Eso y la disonancia del magnífico órgano pues, que quiere que le diga, reviente o no reviente, yo diría que es a) horteras y b) satanismo/ masónico. ¿Cómo lo ve?
EliminarEl mayor ejemplo de idiotez lo tenemos en Tarragona con Planellas y sus secuaces.
ResponderEliminarQuienes son sus secuaces?
EliminarDe nombres!
Es esta una sociedad de autocomplacencia, de autochiringuitos auroreferenciales. Es esta una etapa boba de la historia para que las masas traguen
ResponderEliminarMaria Auxilio de los Cristianos, ¡ayúdanos madre! Tú eres una de las dos columnas donde asirse en este mundo de idiotas manipulados
ResponderEliminarComo decia hace pocos dias el pensador frances Hadjadi, ahora tenemos la Iglesia de los afectos, de los sentimientos, donde ya no importa la doctrina, sino lo que siento.
ResponderEliminarY asi tenemos que, quien no tiene razones, solo es capaz de tachar de odio, ultra, etc. al discrepante. Tipica actitud infantiloide que vemos a menudo y que el poderoso usa para imponer la "verdad oficial".
Es una derivada de la dictadura del relativismo que magistralmente denuncio B XVI .
Sr. Virtelius, es muy correcto lo que dice usted. El Comunismo no para en su traca y matraca para implantar su doctrina de "falso mesiánico humano". Para eso ha de desconstruir todo lo que es sólido, sea la familia o los valores cristianos. O sea, lo fundamental es la Educación y, no es acaso España el país com más leyes de Educación que sólo han servido para dar una pésima calidad y la destrucción de alumnos que ya vienen muy afectados por el caos que deben vivir en sus familias, muchas divorciadas o sometidas a tensión de todo tipo
ResponderEliminarComentábamos hoy en la mesa familiar la degradación de la vida política en España, a propósito de la recuperación de la catedral de Notre Dame. Sabido es que los Reyes no pudieron asistir porque se lo prohibió Sánchez, que ya les amenazó ante el ridículo del socialista en la Dana de Valencia. Una degradación de la vida política que tiene su versión más canalla y más abyecta en las estipulaciones entre el gobierno y un golpista fuera de España. Ningún país de la Comunidad Europea caería en semejante degradación y vilipendio de su país. Es obvio que los que quieren destruir España (Junts, ERC, PNV, Bildu, Sumar, Bloque Gallego) no critiquen esa falta de pulso patriótico, de honor en realidad. O que la fuerza que sostiene mayoritariamente al felón, el socialismo catalán, sea bendecida incluso por nuestro cardenal, arzobispos y obispos. El idiota es ese. El que se cree a pies juntillas las pamemas del gobernante por el mero hecho de ser gobernante. En su ignorancia --la idiotez va unida a la ignorancia a menudo-- creen incluso hacer el bien. Es lo que sucede a nuestra Iglesia en Cataluña, donde hemos visto ejemplos del cretinismo más absurdo. Un cretinismo que rechiza con el Evangelio, donde se nos alerta sobre la importancia de la prudencia y la astucia cristianas.
ResponderEliminarHoy la frase cretina, a propósito de la inauguración de la restaurada Notre Dâme, es que el Papa no ha asistido porque prefiere las periferias, la de Ajaccio. Exponer como un ejemplo semejante conducta no deja de producir sonrojo. La restauración de la catedral y la recuperación de la centralidad religiosa en Europa era una ocasión única. A Ajaccio, como a Lampedusa o Canarias, estarán largo tiempo con nosotros. Hay múltiples ocasiones, para nuestra desgracia, en que deber reclamar la dignidad del inmigrantre. Pero el dictum del que preside la asamblea encuentra terreno abonado en un pueblo irreflexivo. Como dijo Chesterton, el católica se descubre la cabeza, se quita el sombrero, cuando entra en el templo, pero no se quita la cabeza. Y ante la secuencia inverosímil de disparates conviene, muy al contrario, tenerla bien firma y amueblada.
Puede ser que la situación acabe pronto... entre diciembre y febrero, el pluriimputado presidente Sánchez muy posiblemente dimitirá y afrontará los juicios pendientes...
EliminarTotalmente de acuerdo con el Sr. Valderas Gallardo.
EliminarSr. Valderas, personajes como Illa va a apoyar lo que sea para mantener su chiringo y el de sus aliados.
EliminarSomos individuos pero en colectividad. Tanto mata el individualismo radical (todo individualismo, como en la cosa esa del discernimiento), como el colectivismo integrista (tipo comunista, por ejemplo, que sacrifica sin piedad el individuo a la colectividad). Ni un extremo, ni otro. Pero hoy está de moda el más rabioso individualismo (idiotez suprema). Y la Iglesia, para variar, ha asumido el liderazgo y se ha puesto al frente de la ruina del Occidente que con tanto acierto y tremendo éxito construyó. Ese occidente (en principio cristiano) salió con ventaja y se hizo el dueño del mundo. Pero no hay mal que cien años dure, ni sociedad que lo resista. Demasiado daño hemos hecho al mundo con el pretexto de nuestra superioridad moral. Sí, superioridad moral. ¿Y ahora, qué? En el fondo de la pocilga. Y por delante, la otrora Santa Iglesia, con la Santa Sede a la cabeza, liderada por Su Santidad el Santo Padre. Mal vamos. Hemos vaciado de contenido tan bellos títulos; pero eso es sólo la culminación del tremendo vaciado doctrinal que hemos hecho, y del "libre examen" (en católico modernísimo, "discernimiento") del que nos hemos dotado. Para coronar nuestra idiotez.
ResponderEliminarEste artículo:
ResponderEliminarHispanófobos y supuestos humoristas
ERC blindó a los ‘P-t- Espanya’ con un contrato hasta 2029 mientras negociaba investir a Illa
Los supuestos cómicos independentistas e hispanófobos convencidos recibieron más de 2,5 millones de euros en contratos por parte de la Generalitat en funciones controlada por Esquerra
elconfidencial.com/espana/cataluna/2024-12-09/erc-blindo-a-los-puta-espanya-con-un-contrato-hasta-el-2029-mientras-negociaba-investir-a-illa_4018149/
Detalla las cuantías económicas percibidas por la empresa El Corral de l’Humor, administrada por Lluís Jutglar (alias Peyu), de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA) por diversos proyectos, esos que dicen "P-t- Espanya". A continuación, un resumen de las cifras mencionadas, salvo error u omisión:
1. Pagos por el programa El Búnquer (emitido en Catalunya Ràdio):
a) Temporada 2020: 139.978 euros.
b) Temporada 2021: 265.004 euros.
c) Temporada 2022: 265.004 euros.
d) Temporada 2023: 299.916,93 euros.
e) Temporada 2024 (firmada en mayo): 347.072,49 euros.
--- Total acumulado por El Búnquer: 1.316.967 euros.
2. Otros pagos relacionados con TV3:
a) Por 20 capítulos de Bricohéroes (2020): 272.699,40 euros.
b) Por el programa El ilusionista (enero de 2023): 70.211,55 euros.
c) Por la producción de Natura Sàvia (diciembre de 2023): 826.888,23 euros.
--- Total acumulado: 1.169.799,18 euros
3. Otros ingresos mencionados:
a) Por la presentación de la Semana de la Cultura 2020: 15.000 euros.
4. Cálculo total aproximado:
Desde 2020, El Corral de l’Humor habría recibido más de 2,5 millones de euros de fondos públicos a través de la CCMA por estas actividades y programas descritos en 1, 2 y 3.
Es decir, se regala lo que han pagado miles de contribuyentes en el IRPF a unos cafres que encima te insultan... esto no es democrático... y encima, como se lee en el artículo, TV3 no quiso nunca aplicar las normas deontológicas...
El tic nervioso de Illa delata su ascendencia Judeo-Masonica.
ResponderEliminarPor el dinero vende hasta su tía de Francia.