TRAS LAS HUELLAS DE CRISTO CON D. GIUSSANI

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Las noticias que nos llegan cada día de la Tierra santificada por Cristo, atormentada, una vez más, por la guerra, nos trasladan a los lugares que muchos de nosotros hemos visitado.  Me alegra poder evocarlos hoy de la mano de don Luigi Giussani, que nos los representa con la vivísima fuerza que emanaba de su impactante visión de Cristo y de su doctrina.  
Tras las huellas de Cristo. Viaje a Tierra Santa con Luigi Giussani es un libro cuyo autor, el periodista Luigi Amicone, realiza una aproximación espiritual a Tierra Santa de la mano del fundador de Comunión y Liberación, el sacerdote Luigi Giussani ,en el que recorre la historia humana de Cristo con la profundidad de las meditaciones, convirtiéndolo en una propuesta concreta y documentada del cristianismo.
Como escribía en el prólogo el cardenal Pierbattista Pizzaballa, patriarca de Jerusalén de los Latinos, seguir las huellas de Cristo en compañía de don Giussani -a través de esta crónica de un viaje- nos hará bien. En esta peregrinación la mirada de don Giussani se dirigía a la esperanza, a la vida que no cede a la tribulación, a la hostilidad, a la guerra que había entonces, como la hay, aún más, ahora. El cardenal Pizzaballa insistía: Parece que no hay salida, que la paz es imposible. Y también nosotros, cristianos, podemos ceder a este clima y perder la esperanza... Dejemos que Cristo atraviese la tierra árida de nuestros corazones y haga brotar en ella la vida nueva que nos ha prometido
En la introducción, Amicone revela sus sentimientos sobre la tierra de Cristo: Nos da pena un cierto turismo religioso que hurga entre las piedras sagradas y pasa por alto con indiferencia la consideración de los hombres que viven en torno a esas piedras... Por mi parte, no tengo ningún problema en declarar mis simpatías: son todas por el pueblo. Por el pueblo palestino y por el pueblo israelí, más allá de las razones y agravios que unos y otros tengan que exhibir
Al inicio de la peregrinación, tras el rezo del Ángelus en el autocar, D. Giussani indicará que el "sí" de la Virgen, la sencilla y total disponibilidad a Dios de una muchacha, "permitió" que la fuerza del Misterio entrara en el mundo. La primera parada fue en Cesarea Marítima, con la lectura de los Hechos de los Apóstoles y la meditación de Giussani sobre estos hombres, los apóstoles, que sintieron que había surgido algo nuevo en el mundo.
El cardenal Pierbattista Pizzaballa
Y en Meghiddo, la ciudad fortaleza, donde en la guerra contra los egipcios murió el justo rey Josías, que pensaba que vencería por su observancia de la ley. El plan de Dios es misterio, manifestará Giussani.
Luego, en el Monte Carmelo se leerá el primer Libro de los Reyes, con el gran discurso al pueblo del profeta Elías, demostrando con un signo milagroso la santidad del único Dios frente a los sacerdotes de Baal, finalmente ejecutados por sus horribles crímenes. D. Giussani comenta: Es una verdad hermosa, pero no cómoda. Da paz y alegría, pero no hace la vida fácil.
Al llegar a Nazaret, la meditación sobre el anuncio del ángel a María. El nada es imposible para Dios (Lucas 1:37), se enmarca en un contexto de estudios históricos y arqueológicos que ponen de relieve la singularidad y la originalidad del lugar. Ya adulto, Jesús vuelve y habla en la sinagoga, pero los espectadores no lo reconocen a causa de la identificación casi invencible de la bondad, la salvación, la felicidad con lo que le viene a uno a la mente. Después en Caná, con la transformación del agua en vino, el encuentro que hace revivir la fe está siempre dentro del desarrollo habitual de la vida: en este caso una boda.
Y, finalmente, Tiberíades, con su ardiente atardecer sobre el lago, vida para los pescadores, para los apóstoles, que tenían allí sus pobres aldeas. D. Giussani repetía: Todo nació de aquellos lugares a trasmano... Por ello, una de las tareas más grandes del Estado de Israel es dejar que estos signos vivan en libertad.
Luigi Giussani, en el centro de la imagen, en Jerusalén en el año 1986.
En el lago de Galilea se medita sobre las manifestaciones de Jesús tras la resurrección y sobre el fundamento del primado de Pedro, cuya autoridad emana del amor, garantía de unidad y de pertenencia: Pedro, ¿me amas? (Juan 21:15). Luego, desde la casa de Pedro, donde fue curado el paralítico, al Monte de las Bienaventuranzas. Aquí, para la compañía de los apóstoles, se abren los horizontes de un poder: bueno, pero enigmático e incomprensible.
En el monte Tabor, la Transfiguración. Los apóstoles que acompañan a Jesús, Pedro, Santiago y Juan, están felices, no quieren irse porque el hombre está mejor que nunca cuando se familiariza con la conciencia de su propio destino: la eternidad. Por ello, la moral -afirmará Giussani- es pertenencia e interrogación, movida por una fascinación que cambia el corazón humano: el encuentro con Cristo que cura y salva.
Las riberas del Jordán, Samaría, nos presentan el bautismo de Jesús con el encuentro de los primeros discípulos, y el revelador encuentro con la samaritana. En Zabida y Belén se nos revela la vida de los palestinos, que se sienten "invisibles" aunque posean tierras.
Belén, ampliamente descrita en el relato y su basílica, es el lugar del nacimiento del Señor. Escuchemos al fundador de Comunión y Liberación: Una semilla en la tierra no se reconoce entre todos los demás pedazos de tierra, porque una semilla en la tierra es como un grano de tierra. Y el Señor entró en el mundo como un grano de tierra... El método de Dios no es un clamor, sino un estar ante nuestros ojos.
Y en el centro de la historia cristiana, se llega por fin a Jerusalén. Aquí se empieza por Mambré, donde Sara, la esposa de Abraham, se rió con escepticismo cuando el ángel le anunció que en su vejez tendría un hijo. Todo lo contrario de la actitud de la Virgen, testimoniada en el Magnificat: un torrente de gratitud que brotó de ella cuando visitó a su prima Isabel.
El autor del libro Luigi Amicone
Jerusalén es descrita con precisión en su historia porque es el lugar de la pasión y de la resurrección pascual, fundamento de la fe cristiana: La vida de cada uno es un Vía Crucis -señala D. Giussani-, que comienza con un juicio que tiene como contenido aquello por lo que merece la pena vivir... La decisión por Cristo dentro del dolor y el arrepentimiento es amor a la verdad... el cuerpo y el rostro de esta persona que nos acompaña en la vida es el rostro y el cuerpo de su misteriosa comunidad de hermanos: la Iglesia. En una conversación final durante la visita a Jerusalén, Giussani afirmará que superar la muerte significa superar el tiempo y el espacio como límites para vivir plenamente la comunión con Cristo resucitado.
La peregrinación narrada concluye con la visita a Jericó, donde Jesús, escandalizando a todos, dijo a Zaqueo, considerado un exponente de la "mafia" local: Date prisa, desciende, porque hoy es necesario que cene en tu casa (Lucas 19). 
Y Masada, la aldea fortificada donde toda la población se suicidó para no caer en manos de los romanos; Qumrán, sede de la secta de los esenios, donde se encontró un fragmento de papiro que contenía versículos del evangelio de Marcos escritos antes del año 50 d.C, estudiado exhaustivamente por el jesuita O’Callaghan al que Martini, prefecto entonces del Pontificio Instituto Bíblico, quiso callarle la boca, pues el descubrimiento trastocaba todas las teorías progres en boga. Giussani, en cambio, se entusiasmó con el hallazgo, pues confirmaba la historicidad casi contemporánea de la narración de la vida de Cristo, la cual negaban con furia los biblistas postconciliares.
A su regreso de la peregrinación, D. Giussani dijo haber vuelto sintiendo la renovación del concepto de encarnación. En el Muro de las Lamentaciones -afirmó el sacerdote- había visto ante él la multitud del pueblo judío, el símbolo de una enorme voluntad de memoria que, sin embargo, parece no tener casi ningún poder sobre el cambio del hombre y, por tanto, sobre su salvación. Así pues, la concreción del acontecimiento cristiano es tan humana que viendo esos lugares uno no puede volver de Palestina con la duda de que el cristianismo sea una leyenda, ya que como dijo el apóstol Pedro: Cuando os dimos a conocer el poder y la venida de nuestro Señor Jesucristo, no seguimos fábulas ingeniosamente inventadas, sino que fuimos testigos oculares de su gloria (2Pedro 1:16).
Custodio Ballester Bielsa, Pbro.
www.sacerdotesporlavida.info

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3 comentarios

  1. La Espiritualidad de Luigi Giussani:

    Enfoque en la dimensión humana de la Fé: Giussani dice cómo los acontecimientos bíblicos se relacionan con las experiencias y desafíos de la vida cotidiana. Alguien podría decir que cómo casan los hechos sociales de una civilización altotecnológica del 2024 con una civilización bajotecnológica de la Palestina del siglo I d.C.

    La fuerza del misterio: parece que pide reconocer el misterio de Dios presente en la historia y en cada persona. Eso lo veo un desafío muy excesivo para cualquiera, es nada menos que "cada persona" y "cada evento histórico"...

    La esperanza en medio de la adversidad: a pesar de las dificultades y conflictos del mundo, Giussani invita a mantener viva la esperanza en la promesa de salvación de Cristo. Cierto, aquí hay muchos ejemplos históricos...

    La Tierra Santa como lugar de encuentro:

    El pueblo y la historia: Amicone dice que existe la importancia de tratar tanto los lugares santos como las personas que viven en ellos, evitando un turismo religioso superficial. Yo estuve por allá, hay como diversos peligros, la sobresaturación (el síndrome de Stendhal, puedes quedar cortocircuitado), el exceso de ignorancia que te hace perder muchas cosas, y el turismo de entretenimiento y superficial del espectáculo de ver un lugar donde pasaron "películas y películas"...

    La encarnación: La peregrinación a Tierra Santa se convierte en una experiencia de encuentro con el misterio de la Encarnación, es decir, de Dios hecho hombre. De todas maneras, se hace raro intentar comprender cómo todo un Dios decidió vivir una época y un lugar tales como la Palestina... la sociedad judía y galilea estaban profundamente divididas, desiguales, descohesionadas y corruptas en grupos de presión e interés, con un Templo, Gran Sacerdote y sacerdocio que no era ningún ejemplo en nada, sólo para alejarte de ellos... eso es un misterio... (pregunta del fanfarrón: ¿por qué no vino en el 2024? ¡Lo habríamos tratado mejor y habría hablado científicamente!)

    La actualidad de la fe: Los autores demuestran cómo los acontecimientos bíblicos siguen siendo relevantes para la vida de los creyentes en el siglo XXI. Eso es interesante, lo que da mucha creatividad literaria, pues la vida es enorme: un europeo, un asiático, un africano...

    Temas teológicos destacados:

    La fe como respuesta: La fe en Cristo es presentada como una respuesta libre y personal a una invitación amorosa. Ya, pero ¿y si rechazo la invitación? ¿Realmente es una "invitación" algo procedente de Dios? ¿Cómo afectará a mi vida eterna si "rechazo la tarjeta de invitación"? ¿De verdad voy a ser tan bueno o mejor si la rechazo que si la acepto? ¿Y el tema del castigo e ira de Dios?

    La comunidad cristiana: La Iglesia es vista como una comunidad de creyentes unidos por el amor a Cristo y llamados a vivir el Evangelio en el mundo. Lo mismo que antes, el enfoque del mal y del castigo: ¿acaso no hay hostes extranei y hostes domestici, es decir, la maldad dentro y fuera de la Iglesia? ¿Y las grandes catástrofes históricas?

    La esperanza escatológica: La esperanza en la vida eterna es un motor que impulsa a los cristianos a vivir con sentido y propósito. Pero la esperanza, como la fe, y la Iglesia purgante y militante, al final del mundo, desaparecerán, para sólo quedar la caridad y la Iglesia Triunfante, y sabremos toda la verdad. Pienso que de momento, son la fe y la esperanza, dos virtudes más terrenas...

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  2. Este artículo del padre Custodio no interesa a nadie, la prueba es que no ha generado comentarios. Es un tema en que los católicos ya estamos bien aleccionados y no hace falta repetirlo. Le recomiendo al P. Custodio que se meta en más vuelos de águila como el Creacionismo de tanto auge en Internet y tan silenciado en el Catolicismo.

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  3. Por favor, no invite a D. Custodio a meterse en vuelos de águila como el Creacionismo. Es inteligente y sabe donde está el camino de la verdad y la expresión de "verdades" fruto de la ignorancia.

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