Anexo a este oratorio existe una escuela, hasta ahora concertada, que las dificultades económicas le han hecho pasarse a la red pública con un acuerdo entre el Consorcio de Educación de Barcelona y la congregación, que se firmó el pasado 7 de octubre, en el que se hacía efectivo el cambio de titularidad y en el que, evidentemente, no figuraba para nada el uso del espacio del convento y menos aún su expropiación.
Pero, por sorpresa, la comisión de gobierno del Ayuntamiento anunció el pasado viernes la aprobación de un plan urbanístico para iniciar la expropiación del convento de la iglesia de Sant Felip Neri con la idea de instalar allí un instituto. De esta forma el gobierno de Colau reproducía lo que ya ocurrió en 1936.
Es evidente que el gobierno municipal no tiene ningún derecho para ejercer una expropiación de este tipo y menos de una obra patrimonial como ésta. Si el Ayuntamiento quiere resolver los problemas de equipamiento educativo, debe encontrar otras vías. Y de la misma manera que no expropiaría un edificio privado por el alboroto y el precedente de inseguridad jurídica que determinaría, tampoco puede hacerlo por el hecho de que éste sea religioso.
Pero estamos en período electoral y Colau quiere asegurar cómo sea que su votante, que tiene en gran parte un contenido ferozmente contrario a la iglesia, esté motivado. Cabe recordar en este sentido que Colau gobierna por segunda vez, con el orden del 13% del total de votantes. Es una mínima expresión de la opinión política de la ciudad, pero esto no le impide actuar de forma despótica y retorciendo la ley de acuerdo con su ideología.
Más allá, y ya está muy allá, del intento de expropiar el oratorio, existe en la actuación del gobierno Colau una amenaza continua a la legalidad que recibe un trato favorable de la fiscalía y del gobierno español, pero que sigue siendo vulneración. El hecho de que imponga con un simple plan de obras una reforma tan radical del Eixample como la supermanzana, es otro ejemplo clamoroso de este pasarse la norma jurídica por el forro.
Pero hay que decir que Colau no tiene mayoría política en el Ayuntamiento, y si bien es previsible que ERC le apoye, una actitud anticlerical clásica en su repertorio tradicional, el conjunto de otros partidos, incluidos los socialistas, siguen teniendo mayoría absoluta, 21 escaños. Ahora es necesario que el Ayuntamiento, a través de su pleno municipal, haga oír su voz sobre esta arbitrariedad y ponga de relieve, tanto por los de dentro como para los de fuera, que Barcelona es una ciudad que sigue ofreciendo garantías y responsabilidades jurídicas a todo el mundo con independencia de si son considerados amigos o enemigos por el gobernante de turno.
*Artículo publicado en catalán por Ricard Mestres en la web "conversesacatalunya.cat", el 14 de marzo de 2023
Jo crec que no feia cap falta traduir l´article. Tots entenem el català...
ResponderEliminarEl catalán es un simple dialecto del provenzal. Está en decadencia, como la región en que se habla, de manera minoritaria en comparación con el español. Por lo tanto es lógico que se haya traducido el artículo. Lo mejor que puede pasar es que el catalán se acabe extinguiendo, y con él toda la cretinez identitaria.
EliminarUn poquito de por favor el articulo nada tiene que ver con la lengua. Sus odios a la lengua en otra pagina aquí hablamos de cristianismo
EliminarIrán a más. En la Generalidad, el puesto de asistencia social que ocupaba tradicionalmente el partido democristiano Unió ha pasado a manos musulmanas, con lo que ello comporta. En muchos municipios gerundenses se está clamando ya por el traspaso del templo casi desierto a centro de culto musulmán. La demografía es implacable: más de cien mil musulmanes --que no árabes-- hay ya en la provincia de Gerona, según recogía ayer el Diari de Girona, una cifra muy superior al número de fieles practicantes, porque los musulmanes sí acuden los viernes a la oración del imán.
ResponderEliminarY, mientras tanto, nuestros obispos, abades, curas y monjas aplaudiendo el separatismo de quienes están detrás de esas medidas congtrarias a los católicos y a sus líderes. Colau no engaña, pero Junqueras y su ERC, Turull o Borrás y su Junts, sí a dos carrillos. Nunca se ponderará bastante el daño que se está haciendo a la Iglesia de Cristo desde dentro en Cataluña.
Ya lo dijo delante de las cámaras de televisión y de millones de televidentes el Mosén Ballarin cuando le preguntaron por el lema de Torres y Bages "Cataluña sera cristiana o no será". No quiso mojarse delante de millones de catalanes y contestó: Cataluña será Cataluña tanto si es cristiana como si no lo es. Pues aquí estamos es cuestión de "mojarse".
EliminarTotal y absolutamente de acuerdo con el Sr. Valderas Gallardo.
EliminarSr. Valderas, vostè creu realment tot el que ha escrit? Generalitza molt i és perillós.
ResponderEliminarSr. Garrell, ese que se hacía llamar Mosén tronco no era cristiano, ni mucho menos Católico.
ResponderEliminarSimplemente era un troncho....de COL, NADA MÁS.
Al Sr. Anònim de les 16:09. Abans d'escriure sobre temes que desconeix, informi-se'n. No se n'adona que està fent el ridícul? M'agradaria veure si és capaç d'escriure en català el que ha escrit.
ResponderEliminarVosté esta una mica... obsesionadillo con la lengua... A los católicos de pro nos preocupa la descristianizacion de nuestras tierras y las desamortizaciones de los bienes de la Iglesia, herederas del espíritu masón del s. XIX
EliminarQué no hay libertad de expresión en éste País?
ResponderEliminar