Mn. Àngel Caldas: "La crisis del post-Concilio fue terrible y nos dejó en calzoncillos"

Un honorable sacerdote, que ha visto desaparecer quizás a 10 Cataluñas, la de la Restauración, la de la II República, la de la Guerra Civil, la de la posguerra, la del desarrollismo, la del pujolismo, la del postpujolismo, la del procesismo, la del covid y la situación de fracaso y derrota actual. Y además, ha visto desaparecer dos Iglesias: la preconciliar de Trento y la postconciliar del Concilio Vaticano II, que ha muerto con Bergoglio, el nacional-progresismo y la postración de Gerona en su presente decadencia y próxima desaparición. Casi ná...

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En una situación de crisis en una diócesis como la de Gerona, condenada a la decadencia y extinción en ya pocos años, es importante tomar medidas para abordar los problemas de fe, moral y liturgia. Algunas sugerencias "de manual" (ya sabidas por todos los obispos y Roma) que se pueden hacer en este mi "sinodillo individual" y que se ofrecen gratuitamente a quien corresponda, incluyen cuatro perspectivas:


A.- Sobre cómo afrontar una diócesis en crisis de decadencia y desaparición

1. Eliminar toda doctrina cismática, herética y apostática, en especial, el nacional-progresismo asociado a la izquierda y al independentismo, así como al progresismo y modernismo teológico y espiritual. Condictio sine qua non... Y no dejar entrar ni una sola apostasía del Camino Sinodal alemán, aceptando sólo la doctrina sana, verdadera, ortodoxa y tradicional, en especial, desde Trento hasta el Concilio Vaticano II, éste sumiso a toda la Sagrada Escritura y Sagrada Tradición, el Magisterio vivo desde San Pedro y todos los Concilios y Papas ortodoxos y fieles, y finalmente, a todos los Padres, Doctores y grandes teólogos de la Iglesia. Volver a los grandes documentos de Juan Pablo II y Benedicto XVI, luchar contra la cultura de la muerte y la ideología de género, y aferrarse a los principios y valores innegociables de los católicos en la vida pública: vida, familia y matrimonio, educación de los hijos por los padres y bien común (patria y nación españolas)

2. Reunir información: Reúna información detallada sobre las parroquias afectadas y los problemas específicos que están enfrentando. Esto le dará una comprensión más profunda de la situación y le ayudará a identificar las causas subyacentes de los problemas.

3. Establecer metas claras: Establezca metas claras para abordar los problemas y establezca un plan para alcanzarlos.

4. Fomentar la comunicación: Fomente la comunicación entre las parroquias y la diócesis. Esto incluye establecer canales de comunicación efectivos entre la diócesis y las parroquias, así como entre las parroquias.

5. Fortalecer la formación: Fortalecer la formación de los sacerdotes, diáconos, religiosos y laicos, especialmente en temas relacionados con la fe, la moral y la liturgia.

6. Promover la colaboración: Promover la colaboración entre las parroquias y la diócesis, y entre las parroquias mismas, para abordar los problemas de fe, moral y liturgia.

7. Promover la renovación: Promover la renovación de las parroquias afectadas mediante la promoción de iniciativas y programas que fomenten la fe, la moral y la liturgia.

8. Acompañamiento pastoral: Acompañar a las personas y comunidades afectadas mediante el acompañamiento pastoral y la ayuda espiritual.

9. Aplicar la sinodalidad, preguntando al Pueblo de Dios por completo (curas, diáconos, religiosos y laicos), dando información transparente de todo.

10. Que el nuevo obispo sea un hombre moralmente y fideísticamente íntegro, santo y de oración, que aplique el derecho canónico y el sentido común, fiel a la Iglesia y dedicado a la salvación de las almas, su única ley suprema (c. 1752 CDC)

Se tiene en cuenta que éstas son solo algunas sugerencias generales, y que la mejor manera de abordar una situación de crisis en una diócesis es a través de un enfoque personalizado y adaptado a las necesidades específicas de la diócesis en cuestión.

B.- Sobre la economía de la diócesis

La economía de una diócesis puede ser complicada, ya que debe equilibrar las necesidades financieras de la diócesis con la promoción de su misión y ministerios. Algunos consejos para manejar la economía de una diócesis incluyen:

1. Establecer un presupuesto: Establecer un presupuesto detallado y realista para la diócesis, que incluya ingresos, gastos y reservas.

2. Controlar los gastos: Controlar los gastos de la diócesis mediante la implementación de medidas de austeridad y la eliminación de gastos innecesarios.

3. Fomentar la transparencia: Fomentar la transparencia en la gestión financiera de la diócesis mediante la publicación de informes financieros periódicos y la rendición de cuentas.

4. Aumentar los ingresos: Aumentar los ingresos de la diócesis mediante la diversificación de las fuentes de ingresos, como la generación de ingresos a través de inversiones, donaciones y eventos benéficos.

5. Fomentar la colaboración: Fomentar la colaboración entre la diócesis y las parroquias para compartir los recursos financieros y reducir los gastos.

6. Desarrollar un plan de inversión: Desarrollar un plan de inversión a largo plazo para la diócesis, con el fin de maximizar los ingresos y reducir los riesgos financieros.

7. Tomar en cuenta las necesidades de las parroquias y comunidades: Asegurarse de que las necesidades financieras de las parroquias y comunidades estén siendo atendidas y de que no se estén sacrificando los ministerios y la misión de la diócesis.

Es importante recordar que la economía de una diócesis no debe ser el único factor a considerar, sino que debe estar al servicio de la misión y ministerios de la diócesis.


C.- Consejos sobre la pastoral

La pastoral es una parte importante de la vida de una diócesis, ya que se refiere a la promoción de la fe y el ministerio a las personas. Algunos consejos para manejar la pastoral en una diócesis incluyen:

1. Conocer a las personas: Conocer a las personas de la diócesis, sus necesidades, desafíos y esperanzas, para poder desarrollar programas y servicios que se ajusten a sus necesidades.

2. Fomentar la participación: Fomentar la participación de las personas en la vida de la diócesis mediante la promoción de programas y actividades que involucren a las personas.

3. Fortalecer las parroquias: Fortalecer las parroquias mediante la promoción de programas y actividades que involucren a las personas y aumenten su compromiso con la fe.

4. Desarrollar líderes: Desarrollar líderes en la diócesis mediante la formación y la capacitación, para que puedan guiar y servir a las personas.

5. Fomentar la comunicación: Fomentar la comunicación entre las personas y la diócesis mediante la promoción de una variedad de canales de comunicación, incluyendo redes sociales, boletines y sitios web.

6. Promover el diálogo: Promover el diálogo entre las personas de la diócesis y otras comunidades y organizaciones para fomentar la comprensión mutua y la colaboración.

7. Proporcionar una formación adecuada: Proporcionar una formación adecuada para sacerdotes, diáconos, catequistas, líderes de grupos de jóvenes y otros líderes para ayudarles a ser más efectivos en su trabajo pastoral.

8. Fomentar la espiritualidad: Fomentar la espiritualidad en la diócesis mediante la promoción de programas y actividades que ayuden a las personas a crecer en su relación con Dios.

Es importante recordar que la pastoral debe ser adaptada a las necesidades y desafíos de las personas de la diócesis y debe ser un proceso continuo de evaluación y mejora.

D.- Consejos sobre la liturgia, las misas y los sacramentos, sobre todo el de la confesión

La liturgia, las misas y los sacramentos son una parte importante de la vida de una diócesis. Algunos consejos para manejar la liturgia, las misas y los sacramentos en una diócesis incluyen:

1. Asegurar la calidad litúrgica: Asegurar que las misas y otros servicios litúrgicos en la diócesis se celebren con calidad y reverencia, siguiendo las normas establecidas por la Iglesia

2. Promover la participación activa: Promover la participación activa de las personas en las misas y otros servicios litúrgicos, para que puedan experienciar una conexión más profunda con Dios

3. Formar a los ministros: Formar a los ministros, como sacerdotes, diáconos y ministros de la comunión, para que puedan celebrar las misas y administrar los sacramentos de manera correcta y con calidad

4. Fomentar la educación litúrgica: Fomentar la educación litúrgica entre las personas de la diócesis, para que puedan comprender mejor la liturgia y participar de manera más consciente y significativa

5. Fortalecer la confesión: Fortalecer el sacramento de la confesión en la diócesis mediante la promoción de programas de formación y oportunidades para la confesión, y asegurando la disponibilidad de sacerdotes disponibles para escuchar las confesiones

6. Asegurar la calidad en la celebración de sacramentos: Asegurar que los sacramentos se celebren con calidad, ofreciendo una preparación adecuada para los candidatos y asegurando que los ministros estén debidamente formados y autorizados para administrar los sacramentos

7. Permitir sin ningún tipo de excusa, rebaja o dilación la celebración de la Misa Antigua y de la Misa Nueva Normativa (la que está ajustada al rito católico del Ritual)

8. Fomentar la espiritualidad sacramental: Fomentar la espiritualidad sacramental en la diócesis mediante la promoción de programas y actividades que ayuden a las personas a crecer en su relación con Dios a través de los sacramentos.

9. Proporcionar una formación adecuada: Proporcionar una formación adecuada para sacerdotes, diáconos, catequistas, líderes de grupos de jóvenes y otros líderes para ayudarles a ser más efectivos en su trabajo pastoral y litúrgico.

Es importante recordar que la liturgia, las misas y los sacramentos deben ser adaptadas a las necesidades y desafíos de las personas de la diócesis y deben ser un proceso continuo de evaluación y mejora.



E. Consejos finales sobre qué hacer en el caso de una diócesis difícil como Gerona, con pocos sacerdotes, con escasa participación de los fieles y en situación de crisis de fe, moral y liturgia que la condenan a la desaparición en pocos años. Algunos consejos para abordar la situación incluyen:

1. Declarar a Gerona como "DIÓCESIS ABIERTA A TODOS LOS NUEVOS MOVIMIENTOS Y NUEVAS ÓRDENES Y CONGREGACIONES RELIGIOSAS", entre ellas, todas las que tienen éxito y son tradicionalistas. Gerona NO PUEDE DESAPARECER ni desatender la salvación de las almas porque un grupo de poder y opresión ya fracasado disponga qué es bueno o no para la diócesis. La diócesis de Gerona es milenaria y no puede desaparecer porque se han hecho mal las cosas desde el Concilio Vaticano II, hace unos 50 años. La situación es grave, causa perjuicio grave, y es urgente y perentoria

2. Establecer prioridades: Identificar las áreas de mayor necesidad y establecer prioridades para abordar las problemáticas más urgentes

3. Fomentar la colaboración: Fomentar la colaboración entre los sacerdotes y los fieles laicos, y buscar la ayuda de líderes comunitarios y otros miembros de la diócesis para abordar los problemas

4. Aprovechar los recursos existentes: Aprovechar los recursos existentes en la diócesis, como los edificios, los programas y las personas, para apoyar los esfuerzos de recuperación

5. Aumentar la formación: Aumentar la formación de los sacerdotes, diáconos y líderes laicos para ayudarles a manejar mejor los desafíos y para mejorar la calidad de la liturgia, la predicación y la catequesis

6. Promover la participación activa: Promover la participación activa de los fieles en las misas y en las actividades de la diócesis y parroquias, con el fin de fomentar una mayor compromiso y una mayor participación en la vida de la Iglesia, promoviendo programas y actividades que los involucren y los formen.

7. Promover la espiritualidad: Promover la espiritualidad en la diócesis mediante la promoción de programas y actividades que ayuden a las personas a crecer en su relación con Dios.

8. Fortalecer la comunicación: Fortalecer la comunicación entre los líderes de la diócesis, los fieles y los miembros de la comunidad, para asegurar que las personas estén informadas y comprometidas con las iniciativas de recuperación.

9. Establecer metas y objetivos a largo plazo: Establecer metas y objetivos a largo plazo para la diócesis y trabajar de manera sistemática para alcanzarlos, con el fin de mejorar la situación a medida que se avanza en el tiempo.

10. Promover el trabajo en equipo: Fomentar el trabajo en equipo entre los diferentes grupos y ministerios de la diócesis y asegurar que todos estén trabajando juntos hacia un objetivo común.

11. Reflexionar y evaluar: Reflexionar y evaluar regularmente sobre el progreso hecho, los resultados obtenidos y las nuevas estrategias necesarias para enfrentar los desafíos y alcanzar los objetivos.

12. La formación y el fortalecimiento de los líderes de la comunidad: Asegurar que los líderes de la diócesis, incluidos los sacerdotes y los líderes laicos, estén debidamente formados en fe, moral y liturgia.

13. La formación de catequistas: Asegurar que haya un gran número de catequistas debidamente formados y capacitados para impartir enseñanzas y sacramentos en la diócesis.

14. La promoción de una liturgia viva y fiel: Asegurar que la liturgia en la diócesis sea viva, participativa y fiel a la tradición de la Iglesia. Se evitará todo lo que cause escándalo y confusión en los fieles.

15. Fortalecer la liturgia: La liturgia es el "culmen de la actividad de la Iglesia" y es esencial para la vida espiritual de los fieles. Es importante asegurar que la liturgia sea celebrada con belleza y reverencia y que los fieles estén bien preparados y formados para participar en ella.

16. Abrir las puertas de la Iglesia: Es importante ser acogedor y estar abierto a todos los que buscan la fe y la espiritualidad. Es importante ser amables y comprensivos con aquellos que tienen dudas o preguntas sobre la fe y estar dispuestos a ayudarles a encontrar las respuestas.

17. La promoción de la confesión: Fomentar la práctica de la confesión, proporcionando tiempo y espacio adecuado para ella. También se promocionarán los sacramentales del agua, sal, aceite, medallas y estampas, libros y audiovisuales, las oraciones del Rosario y el Vía Crucis, las procesiones, los viajes a Tierra Santa, los retiros, la Adoración al Santísimo y todas las viejas y nuevas devociones.

18. La promoción de la evangelización: Asegurar que se realice una eficaz labor de evangelización, para llevar el amor de Dios a los miembros de la diócesis y atraer a nuevos miembros a la comunidad.

19. La promoción de la caridad: Fomentar la caridad y la solidaridad entre los miembros de la diócesis, ayudando a los necesitados y llevando a cabo obras de caridad.

20. Fomentar una cultura de vocaciones: Es importante fomentar una cultura de vocaciones en la diócesis, a través de la oración, el testimonio y la promoción de las vocaciones sacerdotales y religiosas. También es importante proporcionar recursos y apoyo a los jóvenes interesados en responder a una llamada al ministerio sacerdotal o religioso.

21. Mejorar la catequesis: La catequesis es esencial para ayudar a los fieles a profundizar en su fe y a vivirla de manera más auténtica. Es importante proporcionar programas de catequesis de alta calidad a todas las edades y establecer grupos de reflexión y estudio para adultos.

22. Revisar y actualizar el plan pastoral diocesano: Es importante revisar y actualizar el plan pastoral diocesano de manera periódica para asegurar que se estén abordando los problemas actuales y se estén promoviendo las prioridades correctas.

23. Establecer un sistema de mentoría para los jóvenes: Es importante establecer un sistema de mentoría para los jóvenes que les permita conectarse con adultos que puedan guiarlos y apoyarlos en su camino de fe.

24. Fortalecer la formación espiritual: Es importante proporcionar oportunidades para la formación espiritual a todos los miembros de la diócesis, incluidos los sacerdotes y los líderes parroquiales.

25. Promover la participación activa de los laicos: Es importante promover la participación activa de los laicos en la vida de la diócesis, especialmente en la toma de decisiones y en el liderazgo.

26. Revisar y actualizar los protocolos de selección de sacerdotes y religiosos: Es importante revisar y actualizar los protocolos de selección de sacerdotes y religiosos para asegurar que se estén eligiendo a las personas adecuadas para responder a las necesidades de la diócesis.

27. Crear una estrategia de comunicación efectiva: Es importante crear una estrategia de comunicación efectiva para asegurar que los miembros de la diócesis estén informados y comprometidos con lo que está sucediendo en la diócesis.

28. Crear un sistema de apoyo para los sacerdotes y religiosos: Es importante crear un sistema de apoyo para los sacerdotes y religiosos para asegurar que estén bien preparados y formados para responder a las necesidades de la diócesis y para ayudarles a manejar el estrés y la presión de su ministerio.

29. Reevaluar la estructura de la diócesis: Es importante considerar la posibilidad de reevaluar la estructura de la diócesis, incluyendo la posibilidad de fusionar o dividir parroquias o incluso la creación de nuevas diócesis.

30. Establecer un proceso de discernimiento vocacional sacerdotal, religioso y laico: Es importante establecer un proceso de discernimiento vocacional para ayudar a los jóvenes a identificar su llamado a la vida sacerdotal o religiosa.

31. Promover la formación permanente: Es importante promover la formación permanente para todos los miembros de la diócesis, incluidos los sacerdotes y los líderes parroquiales, para asegurar que estén preparados para responder a las necesidades de la diócesis.

32. Revisión y actualización de la liturgia: Es importante revisar y actualizar la liturgia para asegurar que está en línea con los principios de la fe católica y con las necesidades de los fieles.

33. Fomentar la devoción y la espiritualidad popular: Es importante fomentar la devoción y la espiritualidad popular, especialmente entre los jóvenes, para ayudarles a conectarse con su fe y a desarrollar una relación personal con Dios.

34. Crear una cultura de discipulado: Es importante crear una cultura de discipulado en la diócesis para fomentar el crecimiento espiritual y la formación de líderes.

35. Establecer una estrategia de evangelización: Es importante establecer una estrategia de evangelización para llegar a las personas que no están involucradas en la vida de la iglesia y para ayudar a los fieles a compartir su fe con otros.

36. SINODALIDAD. Fomentar la formación y preparación de los laicos, involucrarlos en las deliberaciones y toma de decisiones (evangelización, catequesis, formación y pastoral), promover el liderazgo laical entre los jóvenes para la dirección de equipos parroquiales, crear equipos de trabajo laicales para ayudar en áreas específicas de la vida eclesiástica

Todo ello procede de diversas fuentes de estudios, investigaciones y opiniones de expertos en estos temas.

He buceado en Amazón y no se encuentra el libro de Mossèn Angel Caldas, habría que comunicarle que lo inserte en Amazón para que todos podamos comprarlo rápidamente y en formato digital también. El Concilio fue para muchos un batacazo, pero son los cambios en el sistema que afectan a los que estan "instalados" adaptados a un ambiente determinado. Cuando cambia el sistema luego la naturaleza exige una nueva adaptación al nuevo ambiente y el resultado es el "sufrimiento" que se padece. Lo padecemos con este frio no normal en invierno en nuestro país por el cambio de temperatura a la que no estamos adaptados. Precisamente los que más se quejan del Francisco actual son los más acérrimos defensores de la Infalibilidad Pontificia en temas de Moral y caen en una contradicción, queda claro. Existe este fallo "intelectual" de caer en contradicciones cuando el pensador no piensa correcto y no mira el objeto por todos los lados y solo mira por el lado que le interesa. Muy ilustrativo Balmes en El Criterio cuando habla del buen pensador.

Bueno, lo que si es cierto es que las reformas del post-concilio supusieron un cambio para la Iglesia tremendo. Actualmente estamos viviendo en una Iglesia que conservando lo básico las formas son muy distintas. A la vista está que hemos ido a peor. Echar la culpa al Concilio no sé si sería justo pero desde luego se ha destruido toda la tradición de cientos de años y no se ha creado nada que sustituya lo destruido. Quizás sería bueno rectificar en la medida de lo posible porque dicen que rectificar es de sabios.

llenar un vacío negativo que no se sabe

Cambiando de tema, el "Titànic" puede hundirse y no es la Iglesia aquí https://www.infocatolica.com/?t=noticia&cod=45510

Aunque la deriva de la Iglesia en Gerona a peor, como en otras diócesis, se encarne en una serie de clérigos que buscaron el apoyo en el Concilio, no era una opinión fundada. Era una aplicación errónea e interesada del Concilio para hacerse cada uno una Iglesia a su medida. Lo describió muy bien Benedicto XVI. En el falso nombre del Concilio se abrieron paso las ideas más peregrinas en dogma, en moral, en cánones.
En el caso particular de Gerona, la llegada de Jubany fue un punto de inflexión. Lo que había levantado Cartañá, lo destrozó Jubany, acompañándose de unos modales impropios de un obispo que debía cuidar a sus sacerdotes. Tras la guerra y la vuelta de numerosos sacerdotes que habían huido evitando la muerte segura en manos de independentistas seguidores de Companys --en eso de la FAI y de la Juventuts Llibertaries hay mucho que matizar--, la diócesis gerundense hizo un esfuerzo de recristianización formidable. Pero bastó el corto período despótico de Jubany para echar a los sacerdotes mayores de las parroquias, quitarles la sotana y hacerse el simpático con la secularización rampante de la sociedad civil. Los obispos que lo siguieron no enmendaron nada, sino que ahondaron más en la decadencia, obispos sin formación doctrinal, más proclives al secesionismo y la "cuestió nacional" --deriva que llega hasta Pardo, inclusive--, incapaces de mirarse al espejo y pedir ayuda a quien la podía ofrecer. De las parroquias de la costa, por ejemplo, desaparecieron misas en castellano e "internacionales". Las hojas dominicales se degradaron, lo mismo que la revista mensual de la diócesis. Pusieron en puestos relevantes del gobierno de la diócesis a sacerdotes que ni siquiera celebraban. Dejaron a los pies de los caballos a sacerdotes íntegros. Para colmo de males, las casas de los religiosos fueron cerrando, igual que los monaterios de monjas y casas religiosas femeninas. Sólo queda algún convento despistado y, por supuesto, las benedictinas de san Daniel, esas que van en peregrinación...a Waterloo.

En mi humilde opinión al concilio sobre todo aquí en girona le han hecho decir lo que no decía Si hubiera habido obispos con talla de tal puede que muchas cosas no se hubieran permitido

Fuera de la Catolicidad Romana- Trentina, es un marasmo qué conduce al precipicio.

El concilio Vaticano II fue un error garrafal .

Con el primero teníamos bastante.

San Pío Nono, ORA PRO NOBIS!!!

Excelente articulo. lastima de su grave error ortográfico, si escribes en español debes escribir GERNO y en catalan también esta admitido, ver miles de poesías, aucas.... que lo escriben así.
Para que no te coja el "pruces al no res" piensa que no escribes LONDON. MILANO, PERPIGNAN, etc. cuando escribes en español, ¿verdad?

El idioma español no existe, existe el castellano...

21:31. Usted debe ser hijo de Dios, todos los somos, incluso los que son tan criticados, odiados, vilipendiados a diario por este blog, pero insisto: el idioma español "en mis escasísimos conocimientos", no existe!!! Existe el castellano. Punto!

Yo las leo en castellano... je.je.je...

Muy bien! Yo también las leo en castellano... Encara que m´agrada més llegir en català. La mare em va ensenyar a pregar amb aquesta llengua.

El més interessant del llibre: "Retall dde memòria d´un capellà vell" és el pròleg fet pel Sr. Arquebisbe de Tarragona, Joan Planellas.

Si los que odian a cientos de millones de hijos de DIOS, que hablan en ESPAÑOL dicen que leen en castellano las instrucciones, o sea que ya saben lo que es apapachar, jálele, etc.