Omella sorprende en su discurso en la Conferencia Episcopal... incluso molesta

5

Los obispos españoles están celebrando estos días su Asamblea Plenaria que se inició el pasado lunes 25 de abril y concluirá este viernes 29. Este tipo de reuniones suelen tener poca trascendencia exterior en los medios generalistas, ya que son interpretados como un simple encuentro de los prelados para poner en común el trabajo que se está realizando desde las diferentes comisiones. Por eso tradicionalmente solo parece interesar el discurso inaugural del Presidente del episcopado para ver si dice alguna cosa noticiable o que pueda dar algún titular interesante.
 
Durante la presidencia del cardenal Rouco Varela, se esperaba la intervención del entonces arzobispo de Madrid con gran interés mediático, ya que sobre todo en los tiempos del gobierno del socialista Zapatero, casi siempre caía alguna dura critica a la gestión de aquel mandatario tan propicio a promulgar leyes contrarias a la moral y al Magisterio de la Iglesia.
 
Después de la era Rouco vino la soporífera etapa del cardenal Blázquez, que aún siendo de buena doctrina, hacía unos discursos aguados y de poquísimo interés, además su timbre aflautado no ayudaba demasiado a dar consistencia a sus palabras. 
 
Con la llegada a la presidencia de Don Juan José, vuelve otra vez una voz fuerte y clara, aunque los contenidos eran más de lo mismo, e incluso más blandos con respecto a la descristianización que está sufriendo España, aquí en Barcelona ya estamos acostumbrados a ese estilo, mucho de buenismo, diálogo y concordia por todas partes y sobre todo no molestar para nada a los gobernantes social-comunistas.
 

 
Y es que el gobierno de Sánchez y sus socios, aplaudieron la llegada del turolense a la presidencia del episcopado español, era sin duda su candidato ideal, con el que iban a entenderse de mil maravillas, y su alegría no la ocultaban a pesar de su anticlericalismo, como se demuestra con la visita que el presidente del gobierno realizó a Omella en la mismísima Conferencia Episcopal.
 
Pero algo raro ha pasado este lunes con su discurso, en que además de hablar del manido tema de los abusos, ha dicho cosas que no han sentado demasiado bien en algunos sectores. Incluso en el tema de la pederastia ha sido algo más valiente de lo habitual, no solo pidiendo perdón y diciendo que se está haciendo todo lo que se puede gracias a la Auditoría del bufete Cremades & Calvo Sotelo, sino recordando que este es un mal que afecta a toda la sociedad y no solo a la Iglesia, definiéndolo como una "epidemia global silenciada".
 
El actual presidente de los obispos ha hablado de temas y cuestiones que quizá muchos no se esperaban, por ejemplo del matrimonio y la familia, diciendo que "la sociedad necesita apostar por la familia y por la vida". Definiendo el matrimonio como "unión fiel y definitiva entre un hombre y una mujer abiertos a la vida" Ha defendido la vida "en su integridad", afirmando que "una sociedad que no protege la Vida de sus integrantes es una sociedad abocada al fracaso y a la barbarie". Sobre el tema del aborto dice que "el Estado en lugar de potenciarlo, debería proteger con ayudas económicas y sociales a quien decida dar a luz una nueva vida". y añade que "al estado no le corresponde hacer proselitismo del aborto".

Omella ha hablado de otras cuestiones, como la defensa de la libertad religiosa, para que la Iglesia pueda "proponer  el anuncio de Cristo Salvador", o sobre la Objeción de conciencia, a la que define "como un derecho necesario en la vida democrática". También comenta otras cuestiones delicadas como la desconfianza que se está produciendo de las instituciones y los partidos políticos". Defiende la Constitución y es crítico con los medios de comunicación, ya que en ocasiones "se ponen al servicio de intereses ideológicos", unos medios que realizan un "afeo sistemático" a esa gran familia que es la Iglesia.
 

Estas y otras declaraciones, que ya no comento para no alargarme, parece que han sentado a cuerno quemado en algunos sectores de la sociedad que han visto el espíritu del cardenal Rouco sobrevolando la sala de la Plenaria de la Conferencia Episcopal. Algo que no se esperaban, porque no es el estilo habitual de Omella sino más bien del secretario general, el obispo Luis Argüello, bastante más claro y menos buenista que su presidente.

¿Que ha pasado? ¿Ha escrito el discurso Argüello? ¿Omella está haciendo un viraje en su manera de ejercer la presidencia viendo que aunque sus colegas le votaron, no están de acuerdo con su estilo? ¿Le han dicho desde Roma que tiene que mostrar algo más de contundencia con el actual gobierno de España?

No soy capaz de responder a estas preguntas, pero la cuestión es que algunos se han puesto muy nerviosos, de manera especial José Manuel Vidal de Religiondigital, que hasta hace poco era uno de sus grandes defensores y que ha sido de los más críticos, probablemente por la obsesión que tiene por Rouco Varela, pero también porque algunos apuntan a que ante el aparente distanciamiento entre Omella y Osoro, el ex-sacerdote ha optado por el segundo.
Entre las perlas que le dedica Vidal a Don Juan José encontramos esta: "¿De verdad cree usted, monseñor Omella, que en España están en peligro las libertades fundamentales? Me cuesta creerlo, aunque lo que sí me parece es que en su discurso oigo resonar el de Vox, que no es precisamente el partido más amigo de las libertades".
 
Es lo último que me esperaba, que comparasen a Omella con VOX, porque hasta ahora esa insinuación daba risa, todo el mundo sabe que hasta ahora no había nada más lejano al partido de Abascal que el cardenal turolense, al que desde que era sacerdote zaragozano se le ha acusado de estar más cerca del PSOE que del PP.
 
Franceco Della Rovere

Entradas que pueden interesarte

5 comentarios

  1. Omella acaba de indicar que el progresismo y el Gobierno Sánchez, y quizás el pontificado de Bergoglio, ya están en fase orgánica de desintegración. Como un terremoto selectivo ha caído el discursito de Omella en el progresismo, que el mismo Vidal lo indica: entramos en la desintegración del socialismo por muchos años y viene el cielo protector de Vox, mientras entran la nubes estratorouconimbus y cirrovaleracúmulus en el mundo de Bambi y Yupi y la abeja Maya... Rayos y truenos se aproximan... Malos tiempos para la poesía hippy y happy progre...

    Y es que Omella es un sensible detector de eventos porveniristas como fiel escudero del Yanero Solitario en sus cacerías de ureñas... Si Omella ha cambiado la masónica Agenda 2030 por el roucovalerianismo intransigente, dejando abandonados a Dumbo, Epi y Blas y llorando de pena todos ellos, no es en vano, no...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El Sr. Cardenal no ha indicado nada (ni quizás) sobre el "pontificado" de S.S. el Papa. Usted es de los que del Papa sólo lee lo que publican los mass media y algunos mal llamados católicos, que no soportan verse retratados como malos discípulos, pero lo son y es manifiesto a todos.
      El Cardenal Omella acaba de presidir unos dignísimos y magníficos Oficios de Semana Santa, así como el Vía Crucis del Viernes Santo en la Catedral de Barcelona, que ha llenado a rebosar, con los confesionarios a punto en un amplísimo horario, que incluso se excedió de lo al efecto previsto y publicado, para poder atender a los fieles, porque cuando hay confesores, CRÉANLO, hacen cola y se confiesan.
      Lo único que le falta al Sr. Cardenal para ser un excelente Obispo, pues ya tiene lo más importante que es un buen corazón, es promover un Congreso Eucarístico por el cual, se le devuelva al Señor todo el Honor y la Gloria que algunos le quitaron, años ha, con la comunión de pie y en la mano (de igual a ¿Igual?), práctica nacida del Masterplan, con la que se ha venido engañando a Pastores y fieles de buena fe y que venido socavando la fe de los fieles. ¡Ánimo Sr. Cardenal!, San Juan Pablo II impuso comulgar de rodillas y en la boca y dejó a la responsabilidad de los Obispos hacer otro tanto. Muchos se le opusieron, pero él es Santo e intercede desde el cielo a favor de los Pastores de buena voluntad. Recuperemos los comulgatorios, porque donde los hay, la gente también los usa. Ante el Señor, toda rodilla se doble, en el cielo y en la tierra.
      P.D. Hay que enseñar que para no tocar al comulgante, la Sagrada Forma se introduce en la boca con el dedo pulgar girado hacia arriba, no debajo del dedo índice.
      Visca Jesús, Visca el Papa, Visca el Sr. Cardenal.

      Eliminar
  2. Esta vez, un 10 por el Cardenal.

    Ya era hora de un cambio de rumbo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Goyo
      Sr. Cardenal Omella. Recuerde las palabras de nuestro Maestro y Salvador Jesús: NO TENGÁIS MIEDO. Hay que remar mar adentro y confiar en sus palabras. El Espíritu Santo le ayudará en su cometido siempre que este sea el correcto. No desfallezca y sea valiente. Siempre y en todo lugar, los católicos que deseamos servir a nuestra querida Iglesia, estaremos con Ud. Que María Auxiliadora y San Juan Bosco lo protejan y ayuden en su pastoreo.

      Eliminar
  3. Es un giro estrategico y temporal.
    Hay varios temas abiertos con el gobierno - CEE

    ResponderEliminar

ESCRITOS INTERESANTES ANTERIORES

ESCRITOS INTERESANTES ANTERIORES
«De cómo fue salvada la patrona de Barcelona»
PEDERASTÍA Y HOMOSEXUALIDAD EN EL MONASTERIO DE MONTSERRAT
L'arquebisbat de Barcelona aparta un dels sacerdots de la Casa de Santiago acusat d'abusos
El Vaticà pren el control directe del bisbat d’Urgell per “liquidar” la figura del copríncep episcopal
Apostolado “Transformados”: Dejan el mundo LGTB tras un encuentro con Cristo, sin terapias
La Iglesia catalana no para de arrodillarse ante el separatismo
La Iglesia catalana, partida en dos por el derribo de una parroquia
Omella destituye a un párroco crítico con un plan urbanístico de la Iglesia en Barcelona
Centenares de catalanes acompañan a la Virgen de Fátima por el centro de Barcelona.
El párroco de la Mercè, tras la retirada de la misa: «Tal vez recibamos a las autoridades tocando a muertos»
El Clínic traslada su proyecto de centro de investigación por la imposibilidad de instalarse en una iglesia del Eixample
El gran vitrall de l’església de l’Esperit Sant se salvarà de l’enderroc
Omella no está en su mejor momento: el cambio en Barcelona se acerca
La secta de la Casa de Santiago. El escándalo que la Iglesia catalana ocultó durante 30 años
Omella envía a un cura de 72 años a comerse el Santísimo de la iglesia que quiere derribar
Derribos Omella: el arzobispo desacraliza la iglesia del Espíritu Santo de Barcelona y suspende a divinis al párroco
Los memos del Bisbat de Sant Feliu de Llobregat
El hilo que une Monserrat con el Opus Dei: 85 años de amistad y protección