I
Más indefenso que el lirio en la mortaja brillante
sube el Calvario teologal
sube el Calvario teologal
y penetra la zarza ardiente y crepitante de los milenios
ocultándose en la nube olorosa de la lengua.
ocultándose en la nube olorosa de la lengua.
Encorvado por vientos terribles, besa heridas sagradas en silencio,
también levanta y muestra palmas traspasadas y mendiga la paz.
también levanta y muestra palmas traspasadas y mendiga la paz.
Un hilo se extiende entre el pulgar y el índice,
sobre el abismo de la Palabra.
De los huesos de los mártires crece el gozo triturado.
La raíz de Jessé florece en el cáliz al rojo vivo. y en la luna blanca
una cruzada de sangre
La raíz de Jessé florece en el cáliz al rojo vivo. y en la luna blanca
una cruzada de sangre
y un estandarte que, al levantarse, debilita sus rodillas.
En la piedra angular, la muerte nos rompe,
la eleva al horizonte de las lágrimas
con terror maternal sobre estigmas de labios para mendigar la vida.
la eleva al horizonte de las lágrimas
con terror maternal sobre estigmas de labios para mendigar la vida.
Las serpientes silban alrededor de la comida mortal.
En el borde de los límites de Dios.
muerden finalmente el corporal en las cuatro esquinas del conopeo,
se enrollan las páginas de los cielos,
muerden finalmente el corporal en las cuatro esquinas del conopeo,
se enrollan las páginas de los cielos,
las grietas arremeten contra los pilares.
Obsesionados en la puerta con el hedor de la peste
imitan y venden con bromas a los enfermos y deformados
de la Piscina probática su triste máscara de atormentados.
de la Piscina probática su triste máscara de atormentados.
II
Halconero del cielo desde cuya mano levantada
se desploma el eterno Depredador ávido de prisión.
se desploma el eterno Depredador ávido de prisión.
III
¿Adónde va este Cordero que a los puros se les concede seguir
doquier que vaya?
¿Dónde va este Cordero inmolado y en pie
sobre el libro de los sellados ab órigine mundi?
¿Dónde va este Cordero inmolado y en pie
sobre el libro de los sellados ab órigine mundi?
No puedes nacer pero puedes permanecer inocente.
¿Adónde va este Cordero con los sellados,
que a nosotros los asesinos
no nos es concedido seguir, ni del mismo huir;
no nos es concedido seguir, ni del mismo huir;
pero sollozando, podemos dulcemente concebir
en el oscuro útero de la mente usque ad consummationem mundi?
en el oscuro útero de la mente usque ad consummationem mundi?
No puedes nacer pero puedes morir inocente.
Mn, Francesc M. Espinar Comas
Párroco del Fondo de Santa Coloma de Gramenet
A veces la ilustración encierra una lección poderosa y no es mero ornato del texto. La primera viñeta, querido mosén, parece sacada de un libro miniado. De los tiempos del cólera, de Yersinia pestis, de tantas plagas y epidemias. En ese pueblo fiel de perfiles campesinos y rudos se ve reflejada la humanidad doliente, que, impotente ante un agente obscuro, invisible y arrasador, se arrodilla ante Quien únicamente puede liberararle.Como decía monseñor González Agápito, es tiempo de letanías. A peste, morbo, et inquinamento, liberanos Domine, pudiéramos suplicar.
ResponderEliminarLa invocación es: "A peste, fame et bello, libera nos, Domine. Así recuerdo haberlo cantado en las "Rogativas",
EliminarTotalmente de acuerdo con el Sr. Valderas Gallardo.
EliminarA la peste actual, solo nos falta la política.
Gran metáfora sobre la comunión espiritual que sirve para exaltar justo lo que en este tiempo a fieles de muchas diócesis les está vedado: la comunión directa en el sacrificio de la Misa. Cada vez que uno comulga vuelve a nacer, a ser niño de Dios. Pero si no se puede ir a la celebración de la Misa con público, sí se puede interiormente morir al mundo y a sus afectos, morir al mundo derrotado por el Cordero, morir al mundo desde lo hondo de tal manera que permanecerá inocente. O morir incluso físicamente, como sucede estos días de manera cruel, pero con la inocencia de haber conformado la voluntad a la voluntad de Dios.
ResponderEliminarGracias, mosén.