"Que abran más espacios en español y encontrarán más feligreses en Cataluña, no lo duden. Que el nacionalismo no frene la evangelización" (Pablo Ginés)
El periodista Pablo Ginés, colaborador de Religión en Libertad |
Soy catalán, españolista (es decir, pro-España, no independentista) y católico.Quiero mucho a mis hermanos y vecinos catalanes indepes. Los conozco de toda la vida. No son algo extraño que de repente me hayan sorprendido. Siempre estuvieron ahí. He crecido con ellos, desde niño. Muchos son muy majos.
Creo que políticamente se equivocan. Pero también lo creo de muchos españolistas que votan ciegamente partidos anti-vida y anti-familia. Rezo por los indepes. Y a menudo rezo con ellos, cuando coincidimos en la misma misa, por ejemplo. No tienen cuernos ni rabos. Casi todos los que aún vienen a misa aman al Señor. Nos damos la señal de la paz. A menudo coincidimos en cosas de activismo provida, profamilia o actividades devocionales. He sido catequista con ellos. Espero el día en que nos encontremos todos en el Cielo, un solo pueblo con el Señor.
Mientras tanto, aquí abajo, no muchos catalanes de lengua castellana vamos a misa cada domingo. Según el Centro de Estudios de Opinión de la Generalitat, con datos de 2016, un 14% de la población de Cataluña que tiene el castellano como primera lengua vamos a misa "cada semana o más". No es mucho. Pero aún así es el doble que nuestros hermanos que tienen el catalán como primera lengua: de ellos, solo un 7% van a misa cada semana.
Los practicantes castellanohablantes somos el doble que los catalanohablantes. De hecho, a nivel de toda España, hay un 16% de población católica practicante. Habría que intentar explicar por qué es tan baja la práctica entre la población catalanohablante, por qué es la mitad que entre la población de lengua primera castellana. Yo creo que el nacionalismo funciona como una religión pagana de sustitución, pero habría que demostrarlo con más datos sociológicos.
La unidad de España no es un dogma pero...
Acto anti-clerical de la CUP ante la catedral de Tarragona |
Los catalanes españolistas podríamos dar muchas razones prácticas por las que esto sería un desastre empobrecedor, e incluso descristianizador. Por ejemplo, cuando toda Cataluña, kosovorizada, se empobreciera, los líderes de la Cataluña independiente buscarían un chivo expiatorio. ¿España? No, ya estaría fuera, no se le podría sacar nada. El mejor chivo sería ¡la Iglesia! La CUP ya ha dicho que hay que expropiar las catedrales, recurso clásico de manual soviético. Se acusaría a la Iglesia de quintacolumna, botiflera, cualquier cosa, para saquearla y terminar de machacarla. Con solo un 7% de catalanohablantes practicantes, ¿quién lo impediría?
A los indepes católicos les dan igual las razones. Hay muchas razones razonables contra la independencia -ahora no las expondremos-, pero es verdad que no es dogma de fe, que los pueblos pueden lícitamente organizarse de muchas formas. Y a los indepes les mueven, sobre todo, sentimientos muy primarios y básicos, no es un tema de razones.
Convivencia... pero con clero neutral
En cualquier caso, la realidad es que los catalanes indepes y los unionistas, si nos tratamos con respeto, podemos convivir, ir a la misma parroquia, a la misma misa y a la misma romería.Eso sí: el clero y las autoridades eclesiales catalanas han de ser neutrales en lo político y equilibrados en lo lingüístico.
Interior de la iglesia barcelonesa de Sant Medir |
Y unos y otros, españolistas e indepes, queremos que nuestro párroco nos respete y que no nos venda sus ideas políticas y nacionales. A lo mejor no nos importa si nos las comenta en privado en el bar del pueblo. Pero casi mejor que no. Ha de ser párroco de todos, ha de ser otro Cristo para todos. Y lo mismo con los obispos.
Los españolistas, además, pedimos que deje de marginarse el idioma castellano. Pedimos que vuelva a los tablones de anuncios, a las hojas parroquiales y a las misas. Ya no nos vale lo de "pero si en catalán ya lo entendéis". Sí, ya lo entendemos, pero el castellano también es nuestra lengua, es con la que rezamos, nos gusta y ya está bien de arrinconarla.
Además, el idioma castellano es necesario para acoger mejor a la población inmigrante de otros países hispanos hermanos, que quieren rezar a su Dios -nuestro Dios- en su lengua -nuestra lengua-.
El paso número 1 de la nueva evangelización es la acogida: y eso implica una oferta suficiente de misas en español.
El caso de la novia guiri
Yo tenía una novia guiri que estaba sin bautizar y vivía en otra región de España. Ella fue tan amable de acompañarme a misa un domingo ya tarde en Barcelona, en la primera parroquia que encontramos. Me acerqué al cura, lo llevé aparte y le dije:
- Mosén, aunque veo que la misa a esta hora es en catalán, mi novia, que no ha ido nunca a misa, me ha acompañado, y quizá podría usted decir un par de cosas en castellano en la homilía; ella es de un país postcomunista, quizá es la primera vez que le hablan de Dios. Por una vez que diga algo en castellano no pasa nada.
- Que se acostumbre y así aprende catalán -me dijo el cura, sin ninguna gana de predicar a la chica pagana.
Mi novia acabó viviendo en Cataluña y aprendiendo catalán porque es filóloga, tiene facilidad para los idiomas y le dedicó mucho tiempo y esfuerzo. También se bautizó y nos casamos y nos va muy bien, gracias a Dios. Pero siempre pongo este ejemplo como modelo del gran fervor catalanizador y escaso fervor evangelizador de parte del clero, incluso en la capital.
El caso de las misas en Gerona
El párroco y la iglesia de Santa Coloma de Farners |
Según un estudio de la Generalitat, un 29% de la población en las comarcas de Gerona tiene el castellano como lengua habitual, a lo que hay que sumar un 9% que usa ambas -catalán y castellano- como habituales. Los partidos españolistas sumaron un 32% del voto en las autonómicas del 2017.
Es evidente que ofrecer solo 10 espacios de misa en español son pocos para esta diócesis. Que abran más espacios en español y encontrarán más feligreses, no lo duden. Que el nacionalismo no frene la evangelización, por favor.
Pensemos que un análisis del estudio que hemos comentado de 2016 calcula que entre un 20 y un 60% de los catalanes que apenas van a misa (los que dicen que van un par de veces al año) podrían "reengancharse" a la vida de la Iglesia. Pero hay que ponérselo fácil y acoger.
El caso del pueblo de costa tabarnesa
Conozco un pueblo costero en el corazón de Tabarnia que está empezando a poner en marcha LifeTeen, que es un magnífico sistema de evangelización para jóvenes. Pero en este pueblo lo anuncian solo en catalán. En este pueblo, en las autonómicas, votaron 6.500 personas: los independentistas no llegaban al 29%. Ciudadanos, el partido que defiende el bilingüismo, ganó con el 37% de los votos. No puedes intentar evangelizar un pueblo donde Ciudadanos es el partido más votado con anuncios solo en catalán: lo inteligente es que sean bilingües. Tradicionalmente, el cura indepe te decía: "es que estamos en Cataluña". Pero ahora le respondemos: "es que esto es Tabarnia".
Sant Felip Neri de Barcelona |
En realidad, no es un tema de territorios, sino de personas, porque la evangelización es para personas. El 20 o 30% de catalanes de Solsona que no son indepes también se merecen una exquisita neutralidad de su clero.
Durante años, los católicos castellanohablantes hemos cedido y cedido en las parroquias, las catequesis y las asociaciones. A veces, se nos ha ninguneado e invisibilizado, y veíamos que solo se usaba el castellano para pedir dinero.
Ahora, con amabilidad, sin buscar rupturas ni enfrentamientos, pero con firmeza, hemos de decir "no" al adoctrinamiento nacionalista de algunos clérigos. Algunos de ellos adoctrinaban sin entender al pueblo que tenían delante: solo ahora descubren que un 30 o 40% de su feligresía somos españolistas y que nos fastidia su militancia política. Que los clérigos se pongan al servicio del pueblo de Dios, no de sus preferencias políticas. Que hablen de Cristo, no de sus opciones políticas personales.
Hay que reconocer la pluralidad de nuestras parroquias y ciudades catalanas y con acogida exquisita reconocer ambas lenguas, el castellano y el catalán -y, en algunas parroquias, algunas más- para llegar a las mentes, corazones y almas que necesitan al Señor y a su Iglesia.
Que la lengua o el nacionalismo nunca más se pongan por delante de la evangelización.
*Escrito publicado por Pablo Ginés en la web Religion en Libertad
" No tienen cuernos ni rabos "
ResponderEliminarTampoco los votantes del nazismo, comunismo, anarquismo...
"Durante años, los católicos castellanohablantes hemos cedido y cedido en las parroquias, las catequesis y las asociaciones. A veces, se nos ha ninguneado e invisibilizado, y veíamos que solo se usaba el castellano para pedir dinero.
ResponderEliminarAhora, con amabilidad, sin buscar rupturas ni enfrentamientos, pero con firmeza, hemos de decir "no" al adoctrinamiento nacionalista de algunos clérigos. Algunos de ellos adoctrinaban sin entender al pueblo que tenían delante: solo ahora descubren que un 30 o 40% de su feligresía somos españolistas y que nos fastidia su militancia política. Que los clérigos se pongan al servicio del pueblo de Dios, no de sus preferencias políticas. Que hablen de Cristo, no de sus opciones políticas personales."
Todo lo que dice es correcto, pero no es sólo una militancia política de los clérigos, es una militancia religiosa y teológica en el modernismo, lo que aquí se ha venido diciendo como nacional progresismo, y qué acepta como moralmente licito y como bien social, la cultura de la muerte, el relativismo moral y la ideología de género.
"Durante más de 40 años, los católicos catalanohablantes hemos cedido y cedido en las parroquias, las catequesis y las asociaciones. A veces, se nos ha ninguneado e invisibilizado, y veíamos que solo se usaba el catalán para pedir dinero".
EliminarY yo añado se tenian que tapar escritos serigrafiados en la pared, imagenes,...etc para no ofender al regimen, en algunos casos se cubria con pintura encima de las letras, y algunos sacerdotes cultos sustituian el catalán por el latin.
Digamos todo. Siempre hay una causa.
Lo mejor es que haya Misas en Català y en Castellano y que cada uno vaya dónde se celebra bien la Misa (tal como esta mandado, ornamentos, rubricas, devoción, dignamente,...).
Mi experiencia y ya tengo unos años es que quién defiende el bilingüismo normalmente solo habla y escribe castellano.
En cambio la mayoria de los que hablan y escriben catalán suelen practicar el bilingüismo y conocen perfectamente las dos lenguas.
Mis sobrinos que han estudiado en la escuela pública y en la concertada son trilingües.
estoy hasta las narices..de ver escrito "castellano" en vez de español..a ver si de una vez se escribe correctamente tal definición. es una recomendación de la RAE.
EliminarNo es para enfadarse. En Galicia siempre se ha hablado de "castellano" y "gallego" menos ahora que triunfa la normativización ¡mal hecha! y dicen "español" y "nosalingua". Decir "castellano" (como decir "español") es como decir "francés", con la diferencia de que allí la región de origen pasó a denominar al estado de "Francia" (no las Galias o xx), y en cambio "España", hablase lo que hablase, siempre tuvo nombre, y no nos llamamos "Castilla". Las otras lenguas españolas tienen un nombre, el castellano tiene dos.
Eliminar"En cualquier caso, la realidad es que los catalanes indepes y los unionistas, si nos tratamos con respeto, podemos convivir, ir a la misma parroquia, a la misma misa y a la misma romería.Eso sí: el clero y las autoridades eclesiales catalanas han de ser neutrales en lo político y equilibrados en lo lingüístico."
ResponderEliminarEn teoría esto es muy bonito y parece un ideal muy hermoso, pero en la práctica, tanto los unos como los otros votan a partidos políticos que son contrarios a la ley de Dios.
"Hoy creo que el nacionalismo funciona como una religión pagana de sustitución, pero habría que demostrarlo con más datos sociológicos."
ResponderEliminarJamás se hará tal estudio. Pero los efectos del nacionalismo se demuestran por datos objetivos: votos, iniciativas, propuestas, apoyos...
Un discernimiento de los tiempos actuales:
ResponderEliminarSe puede observar que ya ha culminado el ciclo de la Gran Apostasía, a los ojos de Dios, la cual hoy es general en Europa, como muestra una encuesta reciente (Pew), y ha entrado a través de los cinco países antiguamente pilares del catolicismo durante siglos, como España (1985), Portugal (2007), Francia (1975), Italia (1978) e Irlanda (2018).
La apostasía se ha completado, ha hecho "clic", con la última aprobación del aborto en Irlanda, en el mes de mayo, mes de María, con aplausos y alegría de muchos católicos por haber entrado en el progresismo, siendo éste un falso ídolo que dice a los pueblos que "son como dioses" para decidir el bien y el mal.
Jesús está como en Getsemaní: la mayoría duerme, es la caída de las "estrellas" de la Iglesia Católica, al perder su función de salvar y santificar, mientras que una minoría, son como Judas. En este momento de la Gran Negación, María se muestra a Dios Padre como la dulce reparación de la Mujer vestida de Sol.
"Primero tiene que venir la Apostasía y manifestarse el Hombre impío, el Hijo de perdición, el Adversario que se eleva sobre todo lo que que lleva el nombre de Dios o es objeto de culto, hasta el extremo de sentarse él mismo en el Santuario de Dios y proclamar que él mismo es Dios." (2Te2)
El aborto es el mayor pecado grave, intrinsece malum per se semper et pro semper, el primero que clama al cielo por su específica gravedad (asesinato de inocentes, Génesis 4, 10. Abel es el primer hombre de fe, tipo de Jesús, Hebreos 11, 4).
Para completar más aún la Gran Apostasía europea, española y catalana, se suma la aprobación del matrimonio homosexual (2º pecado que clama al cielo, Génesis 18, 20 y 19, 13), las uniones de hecho, el divorcio, la ideología de género y la reproducción asistida, mientras que se preparan la eutanasia y el suicidio asistido. Los pueblos y sus reyes van contra Dios, y Dios les enviará un poder que los juzgará severamente.
La Gran Apostasía no sólo se limita al Pueblo de Dios, sino que también afecta dentro de la misma Iglesia jerárquica, en toda su extensión, por la misma lógica de 2 Tesalonicenses 2, y por el ejemplo histórico de la gran herejía arriana. No hay fechas para saber estos importantes eventos, pero se da la señal que dijo Jesús: "cuando veáis que la higuera florece..." (florece de primavera a otoño):
Esta Gran Apostasía viene acompañada del Anticristo, junto con fenómenos preternaturales y taumatúrgicos, además de actos morales perversos, causados por satanás, y que van a atraer aún más al mal a todos aquellos pecadores graves:
"La venida del Impío estará señalada por el influjo de Satanás, con toda clase de milagros, señales, prodigios engañosos, y todo tipo de maldades que seducirán a los que se han de condenar por no haber aceptado el amor de la verdad que les hubiera salvado. Por eso Dios les envía un poder seductor que les hace creer en la mentira, para que sean condenados todos cuantos no creyeron en la verdad y prefirieron la iniquidad." (2Te2)
De momento, hay un poder que lo retiene (Jesús-Eucaristía), pero cuando sea quitado de en medio, actuará con plena libertad:
"Vosotros sabéis qué es lo que ahora le retiene, para que se manifieste en su momento oportuno. Porque el ministerio de la impiedad ya está actuando. Tan sólo con que sea quitado de en medio el que ahora le retiene, entonces se manifestará el Impío" (2Te2)
Pero tenemos una promesa: al final, el Anticristo será realmente muerto por Jesús, y triunfarán los corazones de Jesús y María:
"a quien el Señor destruirá con el soplo de su boca, y aniquilará con la Manifestación de su Venida."
Por desgracia, nadie de la Iglesia cree en Dios consumador manifestado en la Escatología apocaplítica, debido a la herejía de la teología del modernismo racionalista y cientifista: el Apocalipsis es fantasioso, simbólico, imposible de que se cumpla. Se ríen. Pero de Dios, nadie se ríe.
Aunque todavía Polonia no ha caido ni me parece que pueda hacerlo, no obstante si que es cierto que los cinco pilares del catolicismo occidental han caído todos en el diseño demoníaco de sociedad humana, basada en la cultura de la muerte y del relativismo moral de la ideología de género.
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ResponderEliminarAlguno se sorprende de que mi afición a entrar en Germinans -- es más bien una necesidad de oxigenarme—no alcance a comentar aquellos posts en que se trata de cargos y personas. Ni estoy enterado, ni me atrae. Me interesan más los comportamientos y la doctrina. Ni que decir tiene que lo que el periodista relata hoy ha aparecido en numerosas ocasiones en Germinans. Lo de las publicaciones, por ejemplo, es de vergüenza. Los separatistas dirán que es por animosidad contra el catalán o lo catalán. Menuda pandilla de mentirosos. Es, sencillamente, por decoro. Aquí en la diócesis de la que soy fiel hemos criticado la memez de los responsables al presentar escritos en el Full (Hoja parroquial) cuyo título no se entendía si no eras “mestre en gay saber”, como aquel anciano sacerdote que yo conocí en Samalús, junto a La Garriga, que usaba todavía rapé y que celebraba misa sobre la mesa de carpintero su padre.
De la obscenidad del comportamiento de esos miserables cuenta el periodista una anécdota contundente.
Pero vayamos a la doctrina, que a mí me importa sobre todo. Empieza a espabilar la Congregación de la Fe a propósito de la presión antisacramental de los obispos alemanes, con Marx al frente. Empieza a hablar de verdades definitivas. Viene esto a cuenta de la opinión del autor de que la unión nacional no es un dogma, extensión de aquella propuesta montserratina de que el separatismo no es pecado. Tesis a las que se abonan los obispos Pujol, Vives, Novell y Pardo. Algunos con excitación enfermiza, de ribetes paranoicos, y no sólo por parte del de los ojos saltones.
No es lo mismo el dogma que la moral, de entrada. La unión o disgregación no pertenece al dogma. Por tanto carece de sentido decir que no es un dogma. No es su terreno. Tal expresión es hacerles el juego a los secesionistas, obispos y curas en tropel juntos. Pertenece al terreno de la moral social. Y en moral, aunque no hay dogmas sí hay verdades definitivas. Por ejemplo, el aborto. Por ejemplo, el escándalo. Por ejemplo, los mandamientos de la ley natural. Los curas abortistas, que no hay pocos, paguen o no el sacrificio in utero, suelen apelar al bien de la madre, a las condiciones futuras de existencia del niño. Y, en parte pueden tener razón, pues sabido es que en caso de muerte inevitable de la madre, el médico ha de procurar en primer lugar la vida de ésta. Por eso no es un dogma. Los dogmas no admiten excepciones. Dios es uno y trino aquí, allá, hoy, mañana y siempre.
Los obispos mienten, los abades mienten cuando dicen que no es un dogma. Claro que no es un dogma, menuda cretinez. Pero omiten, arteramente, que el odio al hermano, que la ruptura unilateral contraria al bien común, que la ruina de la paz, que la quiebra del principio de subsiariedad son objetivamente inmorales. Y eso es verdad definitiva.
Muy bien expresado, Sr Valderas, y con una contención no habitual en usted. Le felicito.
EliminarIntenta llevar el agua a su molino.
EliminarUd es lo suficientemente culto como para distinguir los sentidos que puede tener la palabra "dogma". En sentido literal nos referimos a una verdad que afecta a una fe religiosa. En sentido figurado -usado con mucha frecuencia- se refiere a una "verdad" que afecta a distintos aspectos de la realidad.
Totalmente de acuerdo con el Sr Valderas Gallardo.
EliminarDe forma aproximada, hay tres tipos de verdades de fe católicas:
EliminarTipo I: verdad divinamente revelada. Si está definida formalmente entonces se le llama dogma y sería del tipo I+. Si no se cree, entonces hay herejía y excomunion
Tipo II: verdades definitivas de doctrina católica, si no se creen, entonces se está fuera de la plena comunión. Una verdad como el sacerdocio masculino sube del tipo II a tipo I porque progresa el conocimiento teologico.
Tipo III: verdad segura, cuya negación implica un error imprudente y peligroso, y se puede castigar con la retirada del derecho a enseñar.
Junto a la sacralización del independentismo-nacionalismo hay que resaltar el paper del Barça como religión laica que muchos en Cataluña adoran. En esta línea véase también el fenómeno "Pep", una especie de semidios que cuando habla todos quedan embobados. Igualmente los líderes políticos del indep. como Puigdemont y Torra, dos personajes llenos de odio y xenofobia antiespañola, pero a los que sus seguidores no ven ningún defecto, todo es amén. Igual con la pseudomonja Caram.
ResponderEliminarTotalmente de acuedo con el artículo de Pablo Ginés. En cierta ocasión visité Montserrat con un misionero llegado de Venezuela, el P. Kelly, y me dijo, después de recorrer el templo. "Aquí no hay ningún tipo de espiritualidad". Y yo añado: solo política.
ResponderEliminarAl comentarista de las 9:52
ResponderEliminarY usted lo suficientemente inculto para no entender que cuando se trata de principios que rigen la conducta, sobre todo cuando ésta afecta al terreno del derecho y de la moral (y es éste el caso), las palabras tienen el significado que tienen. No se puede tachar a uno de violador por haber violado un secreto. Ni asesino al que mata el tiempo. Pero bueno, usted es un habitual, ¡qué le voy a contar que no sepa!
Cretinez, memez...
ResponderEliminarMe pregunto si para defender la moralidad es necesario insultar. Yo creo que no. El sr. Valderas Gallardo pierde credibilidad al usar ese estilo.
El anónimo de las 9:52 se pone así porque JMVG les ha sacado a relucir las vergüenzas...
ResponderEliminarLos indepes, no tienen arreglo, no van a cambiar. Es tanta la radicalización que todo lo que sea castellano hablante se ningunea y margina. Al interior de instituciones eclesiales se da mucho esa mala práctica. Sé de monasterios, en concreto, donde ello pasa. Y los obispos y demás autoridades, indiferentes ante el sufrimiento de unos cuantos por su condición no catalana. Vergonzoso y lamentable
ResponderEliminarNo confundir español con españolista. Por defender a España uno no es españolista lo mismo que por defender a Italia o a Alemania no se es italianista o germanista.
ResponderEliminarUnionista es palabra inadecuada: no se puede querer unir lo que de hecho ya está unido. Mejor, no separatista.
De Dominique Chenu, teólogo medievalista e impulsor de una renovación profunda de la teología en Le Saulchoir, autor asimismo de una influyente Pour une thélogie de travail, cuyo capítulo segundo –L´homo oeconomicus et le chrétien– a tantos ha iluminado, aprendimos a interpretar las noticias del mundo bajo el prisma del evangelio. Me lo ha traído a la memoria la lectura de esta entrevista, que coincide con la denuncia de una familia ilerdense ante el Parlamento Europeo: la familia y sus hijos pequeños sufriendo las vejaciones, los insultos, las calumnias y el hostigamiento de la población por exigir el cumplimiento del derecho a la enseñanza bilingüe. Son los expulsados del sistema. Los tenemos aquí al lado. Junto a nosotros. Lo peor del caso es que la Iglesia, a través de Escola Cristiana, es uno de los verdugos más despiadados. Porque, en el Parlamento Europeo, ha salido a relucir otros casos de centros religiosos, como el de los escolapios de Mataró. Para mayor inri, la Escola Cristiana –que no es una entidad abstracta, sino que tiene responsables clon nombres y apellidos–argumentó que ellos defendían los derechos del centro. Nada menos. No de los niños. Los expulsados del sistema. La entrevista permite más analogías Para muchos, la defensa de los maristas por los obispos de la Provincia Eclesiástica Tarraconenseha sido también una atención al buen nombre de los centros sobre el dolor de las víctimas. Llamativo en la entrevista el apartado sobre la colonización de las mentes. Pero dejémoslo aquí.
ResponderEliminarSr. Godina: "política" es palabra noble, al menos cuando la desentrañábamos en clase de Filosofía en el Instituto. Para saber lo que de verdad es Montserrat, basta con avistar por encima las egagrópilas ensayísticas que van depositando Hilari Raguer o Josep Miquel Bausset aquí, allá y acullá. "...campos de soledad, mustio collado..."
ResponderEliminarLe sugiero que se lo diga a Miró i Ardevol, tan publicitado en “Religión en Libertad”. El mismo que reiteradamente desde La Vanguardia ha amenazado con “el barrizal interminable y la inestabilidad política” mientras no triunfen los supremacistas. Para eso quieren a la Iglesia. Ahora con todo descaro se ofrece como dialogante intermediario, en plan Omella, y publictado también por este en la web del obispado. El viejo truco del árbol y las nueces de los poderes oligarcas supremacistas.
ResponderEliminarEl viejo truco del árbol y las nueces de los poderes oligarcas supremacistas.
EliminarRespondo:
= Arzallus
Miró no ha dicho lo que usted dice en La Vanguardia.
EliminarVuelve el Galicanismo, aunque habría que matizar: en Cataluña el galicanismo nunca se ha ido
ResponderEliminarPero pasa igual, con los folletos de Manos Unidas, Domund, etc. Alguien se ha cuestionado que la región catalana obtenga un tercio de lo que recauda Madrid, por ejemplo como el Domund, pues muy fácil, no se pretende sensibilizar a los fieles, si no hacer la salvaje y excluyente inmersión linguistica de la casta masónica-separatista.
ResponderEliminarEl Camino Neocatecumenal evangeliza en Catalunya en castellano, tiene muchos jóvenes catalanohablantes y cada vez más vocaciones. El idioma no puede ser un problema para la evangelización.
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