¿Por qué hubo tan poco clero en la imposición del palio al arzobispo Omella?

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El sábado 3 de diciembre se realizó en la S. I. Catedral de Barcelona el acto de imposición del palio, que  acredita a Don Juan José Omella como arzobispo metropolitano. La ceremonia estuvo presidida inicialmente por el Excmo Sr. Nuncio de Su Santidad en España, Don Renzo Fratini, y una vez realizado el acto protocolario de imposición, fue el mismo Omella el que presidió el resto de la celebración.

A la misma acudieron los máximos reperesentantes de la Iglesia archidiocesana de Barcelona y de sus dos diócesis sufragáneas, encabezadas por sus tres obispos: Don Agustín Cortés y Don José Ángel Saiz, acompañado de su auxiliar Don Salvador Cristau. También estuvo presente el arzobispo emérito de Barcelona, Don Lluís Martínez, el auxiliar Don Sebastià Taltavull y el abad de Montserrat.

El clero de las tres diócesis estaba invitado al acto, pero más allá de los que tenían que estar por razones obvias de sus cargos, el presbiterio de la provincia brilló bastante por su ausencia, de hecho los organizadores del acto, previendo esta circunstancia hicieron vestir de blanco a todos los seminaristas de las tres diócesis y los colocaron en el coro para hacer relleno. Pero, ni siquiera con esa "trampilla" se pudo evitar el vacío de una parte importante del coro catedralicio.
Sería muy fácil hacer una crítica al arzobispo, diciendo que no arrastra a sus sacerdotes o que ya hay descontento entre los dos bandos ideológicos del clero (progresistas y conservadores), pero eso sería una explicación demasiado fácil e injusta, porque hay muchos factores que hay que tener en cuenta.

1) No hay tradición de este tipo de actos en la diócesis y la provincia
Es la primera vez, que se impone el palio en la propia catedral barcelonesa, el clero no está acostumbrado a participar en esta ceremonia, porque sencillamente nunca se ha hecho. Y los sacerdotes funcionan con bastantes automatismos: "si fui la última vez y me gustó, intento volver a ir".
Omella arrodillado ante el Nuncio, reza el Credo
2) El calendario no era el más adecuado
En pleno Adviento, y después de dos actos diocesanos en las dos semanas previas como la clausura en la catedral del Año Jubilar y posteriormente el Acto en Santa María del Mar. Y no hace mucho con la conmemoración de la consagración de la Sagrada Familia. 

3) La Provincia Eclesiástica no tiene gancho
Qué lejos queda aquella manifestación encabezada por Turull, megáfono en mano, contra la decisión de Roma de dividir la antigua archidiócesis en tres. Hoy en día el clero de Terrassa y Sant Feliu están contentos con su actual situación diocesana y no quieren saber nada de las otras dos diócesis hermanas. A ello también contribuyó mucho la actuación de n.s.b.a... y jubilado cardenal Martínez Sistach que trató con soberbia a sus diócesis sufragáneas, queriendo que sus prelados fueran simples monaguillos a su lado.

4) Al clero progresista no le gusta este tipo de actos
Palios, mitras, nuncios, comunión con Roma.... Todo este lenguaje al clero progresista le repatea, ellos creen en esa Iglesia "sencilla" y "asamblearia" en la que no cabe toda esta parafernalia. Por eso la ausencia de los sectores progresistas, aún lamentablemente mayoritarios en nuestra diócesis, era prácticamente total. Como muestra un botón: Miren la página de Llisterri, y es como si este acto no hubiera existido.

5) El clero nacionalista, empieza a estar mosqueado con el "bilingüismo"
El clero  nacionalista, mayoritariamente progresista pero con algunas excepciones de nacionalistas no progresistas, está mosca por el uso del castellano en las celebraciones solemnes diocesanas. En esta ocasión los asistentes vieron como el Nuncio no dijo ni una sola palabra en catalán. Las lecturas bilingües, la Oración de los fieles bilingüe, la homilía bilingüe, y el padrenuestro tras una larga introducción en castellano de Don Juan José, rezado por casi todos los asistentes en esa misma lengua. 

Por eso pienso sinceramente que la baja participación de clero, no se debió a una desafección hacia el arzobispo metropolitano, sino hacia el acto en sí. Ya que si hubiera sucedido lo mismo en tiempos de Sistach probablemente hubiera pasado algo parecido, a pesar de las grandes amistades del entonces arzobispo con el clero progresista y nacionalista.

Pero si que es cierto que Don Juan José tiene que tomar nota y darse cuenta de que ganarse a su clero no va a ser fácil y una política de "buenismo" mirando para otro lado en las cuestiones conflictivas, para no ponerse a nadie en contra, no va a tener buenos resultados. Si no quiere acabar como su antecesor al que al final no le querían ni los unos ni los otros, va a tener que tomar partido, o por la Iglesia fracasada, estéril y sin futuro de la que venimos, o por esa Iglesia dinámica que bebe de las fuentes del Gran y Santo Papa Juan Pablo II y de sus sucesores, en cuyas manos la diócesis puede germinar y dar frutos.

Antoninus Pius

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16 comentarios

  1. Y el mundo laico también brilló por su ausencia!

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  2. MARPN
    "Si no quiere acabar como su antecesor al que al final no le querían ni los unos ni los otros, va a tener que tomar partido, o por la Iglesia fracasada, estéril y sin futuro de la que venimos, o por esa Iglesia dinámica que bebe de las fuentes del Gran y Santo Papa Juan Pablo II y de sus sucesores, en cuyas manos la diócesis puede germinar y dar frutos".
    Cuanto me satisface, Sr. Antoninus Pius, leer estas palabras. Espero y deseo que el Sr. arzobispo Omella las tenga en cuenta y las ponga en práctica. Yo estoy convencido de que tiene una buena predisposición y conoce de sobras, después de un año, las verdaderas necesidades de nuestra querida Iglesia católica en Barcelona. Vigile y no se deje influenciar por los curas progres que parecen más políticos que sacerdotes.No tenga reparo en actuar con consistencia D. José Luis e imponga los criterios de la Iglesia de los Santos.San José protege a tu Iglesia e ilumina a nuestro arzobispo en su misión.

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  3. Karol Wojtyla en Barcelona6 de diciembre de 2016, 23:41

    Sospecho que quien está sentimentalmente en contra del acto en sí (puntos 3, 4 y 5), evidentemente, está también en contra del actuado y el actuante en sí.


    Lo que prueba la veracidad del último párrafo:

    "Pero si que es cierto que Don Juan José tiene que tomar nota y darse cuenta de que ganarse a su clero no va a ser fácil y una política de "buenismo" mirando para otro lado en las cuestiones conflictivas, para no ponerse a nadie en contra, no va a tener buenos resultados. Si no quiere acabar como su antecesor al que al final no le querían ni los unos ni los otros, va a tener que tomar partido, o por la Iglesia fracasada, estéril y sin futuro de la que venimos, o por esa Iglesia dinámica que bebe de las fuentes del Gran y Santo Papa Juan Pablo II y de sus sucesores, en cuyas manos la diócesis puede germinar y dar frutos."

    Constaté personalmente en 1990 que Don Carlos ya fue rechazado irreversiblemente ("es del Opus, es un conservador") a los pocos meses de su posesión, y por parte de su gobierno episcopal.

    Ojalá tengamos en Barcelona el modelo de arzobispo de Cracovia, el de Karol Wojtyla. Desde 1971, hace 45 años, entre pitos y flautas, carecemos de modelo ejemplar de verdadero amante de la doctrina y el evangelio.

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  4. El acto se celebró, quizá providencialmente, en el aniversario del fusilamiento del Dr. Manuel Irurita Almandoz. Algunos, no sabemos si muchos, lo tuvimos en cuenta y encomendamos a la intercesión del siervo de Dios don Manuel la tremenda responsabilidad pastoral de Mons. Omella. Pero encontramos a faltar siquiera una mención de su antecesor mártir, por parte del nuevo arzobispo.

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    1. Mala es la desconexión con el pasado, o se ignora, o hay desinterés, o hay miedo.

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  5. Estos actos litúrgicos no les gusta al clero nacional progre e independentista, y con la asistencia del Nuncio todavía menos, porque lo ven como un embajador en España, y casi toda la liturgia sería en castellano. Por otro lado nuestro clero, ¿cómo se iban a presentar delante del Nuncio, si la mayoría no tiene ropa de clérigo?.

    El primer Anónimo critica la falta de laicos en la ceremonia, y la razón es que no se ha divulgado esta imposición de palio, todos creían que ya era arzobispo, aunque personalmente alguna vez había pensado que ya se lo habrían impuesto.

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  6. Los Obispos de Barcelona, San Feliu y Tarrasa han suprimido los últimos años un encuentro que se realizaba entre año nuevo y reyes, un día por la mañana, con charla formativa, eucaristia, y comida fraterna.

    Esto además de compartir con muchos compañeros del seminario, de trabajo conjunto pastoral antes de la división por diócesis ayudaba a hacer provincia eclesiástica de Barcelona.

    El sábado solamente de sacerdotes diocesanos de Barcelona, no llegaba ni a una cuarta parte de los que asisten a la Misa Crismal normalmente. Y más si descontamos algunos sacerdotes religiosos que asistieron.
    De San Feliu se podian contar con una mano los sacerdotes asistentes, y de Tarrasa idem.
    Recuerdo diferentes celebraciones en sábado por la mañana y la asistencia era nutrida.
    Una pena tot plegat.

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  7. ¿... Lo que aún te queda por ver por este clero, Anónimo de 14.15?. Te encontrarás, en Cataluña, un clero rebelde con su obispo y al sucesor del Obispo de Roma, en cada uno de ellos tiene la fórmula para dirigir el mundo. En vez de viñadores de la "Viña" parecen políticos entregdos al nacionalismo ciego y agresivo. ¡¡¡Haa...!!!, se olvidan que al buen Dios darán pasar cuentas

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  8. Hechos buenos... y preocupantes7 de diciembre de 2016, 17:25

    Joan Josep Omella tomó posesión el sábado 26 de diciembre como nuevo arzobispo de Barcelona, con una asistencia de 2.500 personas,entre las cuales estaban la delegada del Gobierno central en Catalunya, María Llanos de Luna; el director general de Afers Religiosos de la Generalitat, Enric Vendrell; el abad de Montserrat, Josep Maria Soler, y el de Poblet, Octavi Vilà, entre otras autoridades civiles, religiosas y militares. (El Periódico)


    Omella realizó el acto de imposición del palio el 3 de diciembre, que por lo que se ve, casi sólo con la asistencia de los obligados concurrentes acostumbrados.


    El 3 y el 26 de diciembre fueron días que, en principio, no son indicados para grandes concurrencias, y parecen más bien días "escondidos".


    Contrasta vivamente la concurrencia del pasado 26, cuando tomó posesión, y la del reciente 3, cuando se le impuso el palio.


    La primera conclusión natural es que, fuera de la primera vez que se le veía, luego ya se ha perdido todo interés sobre su persona: carece de grupo de apoyo.


    Problema: es bueno que los malos se desinteresen, pero es preocupante que los buenos también.

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  9. Por favor, arreglen el enlace a las moniciones de la Misa, ya que no se pueden descargar, da un mensaje de error. Muchas gracias.

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  10. Creo que Mons. Omella más que darnos "contento", nos va a dar tormento. Será una lástima para la Diócesis. Pero si así es, que con su pan se lo coma. Sufriremos y sufrirá mucho.

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  11. Patético.

    El obispado patas arriba, parálisis total y Omella en bavia.....

    Cristo, que cruz.!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

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  12. Veamos la botella medio llena hermanos, que mucho peor están en otros parajes los católicos....La Inmaculada Concepción, patrona de España, siempre está ahí.

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  13. En función de su cargo, lo importante no es si los párrocos lo van a ver, sino si él acude a ver a sus párrocos (visita y apoyo pastoral). En este sentido Omella esta visitando las parroquias de la diócesis. Este mes de diciembre esta por las de Hospitalet.

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