El artífice de este milagro tiene nombre
y apellidos: Mossèn Francesc Espinar Comas. Un cura culto (licenciado
en geografía e historia por la UNED y en derecho canónico por la
Lateranense ), políglota (habla 8 idiomas) e hiperactivo (además de su
parroquia, que lleva completamente solo; hace 15 años que se cuida del
servicio religioso del Tanatorio de Santa Coloma). Sus números son
extraordinarios: una media de 120 primeras comuniones anuales, más de 20
confirmaciones y una atención mensual -que va en aumento por mor de la
crisis- de más de 40 familias, a cargo de la Caritas parroquial. No
contento con su labor intramuros, se ha cuidado enormemente de
exteriorizar la fe en el barrio. Toda Santa Coloma (no solo barrio de El
Fondo) conoce ya su procesión del Corpus, o la del Encuentro que sale a
la calle la mañana del domingo de Pascua o la de la vigilia de la
Inmaculada. Cuando le visitaba nuestro añorado obispo Carrera solía
decirle : "Ets insustituible".
Que no se crea quien no le conoce que se
va a encontrar con un pío sacerdote, ensimismado por la mística más
devota. Al revés, todo el barrio lo conoce por su campechanía y su
capacidad de acogimiento. Mossèn Francesc es el cura del Fondo. El cura
al que saludan por la calle, al que le explican los vecinos sus cuitas,
al que se acercan tanto creyentes como no creyentes. Allí en ese
olvidado rincón (por algo le llaman Fondo) se desarrolla el verdadero
atrio de los gentiles, del que tanto se llena la boca (pero no lleva a
la práctica) nuestra progresía local.
Mn. Francesc Espinar Comas |
La parroquia de San Juan Bautista se
erigió en los años 60, en una Santa Coloma de Gramenet que, en poco
tiempo, había pasado de tener 2.000 habitantes a más de 100.000. En
tiempos del Doctor Modrego se crearon 6 parroquias nuevas, en un solo
año. Entre ellas la de este barrio. Su primer rector fue el sacerdote
comunista Jaume Patrici Sayrach i Fatjó dels Xiprers (véase mi artículo
del 5/8/2008). La construcción de la parroquia finalizó en el año 1967.
El propio Sayrach en su libro "L'esperança d'una església pobra i
evangèlica. Santa Coloma de Gramenet 1965-1980" definía como entendía su
parroquia:
" Desde el tipo de comunidades
populares obreras como las de Santa Coloma se milita en esta línea de
compromiso con el pueblo, y se intenta, desde esta opción por la
liberación de toda injusticia y de toda opresión, hacer cambiar el signo
del compromiso de la Iglesia : que del lado de los explotadores pase al
de los explotados".
Estas "comunidades populares
obreras" arraigaron en estas seis nuevas parroquias del extrarradio y,
ciertamente, tuvieron un éxito inicial. No solo eso, en ellas se
albergaron notables núcleos de oposición al franquismo. Obviamente
comunistas. No había otra oposición. Sin embargo, a partir de la muerte
de Franco languidecieron irremediablemente. Nada quedó. El propio
Sayrach abandonó la práctica del sacerdocio en el año 1980, con una
actividad parroquial bajo mínimos.
Justo es reconocer que, tras unos años
de letargo, el movimiento renovador fue iniciado por Mossèn Antonio
Rubio, hoy incardinado en la diócesis de Terrassa. Pero la verdadera
eclosión se ha producido con Mossèn Francesc Espinar. Y se ha producido
cuando el barrio ha cambiado radicalmente. Los hijos de los emigrantes
gallegos, andaluces y extremeños de los años 60, han sido sustituidos
por una emigración latinoamericana, eslava, africana y, sobre todo,
china. Tanto que se conoce al Fondo como el Chinatown barcelonés. Y el
cura Espinar que se adapta a todo, hasta confiesa a los chinos.
Otro sacerdote joven. Otro rector activo. Otro cura con la suficiente talla para regir destinos mayores. Otra parroquia germinante. Hasta en los confines del extrarradio barcelonés. Esto ya es un verdadero movimiento. Y quieren pararlo. ¡Quiá!
Oriolt (Artículo publicado el 13 de marzo de 2010)
¡Feliz fiesta de la Asunción de la Virgen a todos!
ResponderEliminarY felicidades a todas las parroquias que van apareciendo estos días en esta sección
Claro ejemplo de un párroco que ha entendido bien lo que es evangelitzar, si hay que confesar a un chino, se hace, solo basta buena voluntad por ambas partes.
ResponderEliminarLo principal para un sacerdote es llevar las almas a Dios y como Mn. Espinar, por lo visto es de los que dejan "lo politícamente correcto" al margen, y ya se ve en la foto como la feligresia le responde.