Lo sucedido con el cardenal Keith O'brien no sólo ha empañado la actualidad previa al Cónclave que elegirá al sucesor de Su Santidad Benedicto XVI, sino también ha vuelto a poner de manifiesto que en el Colegio Cardenalicio, ha habido, hay y habrá cardenales indignos. Lo del arzobispo ya emérito de Saint Andrews y Edimburgo, es especialmente grave porque se le acusa de "comportamientos y actos impropios" y no sólo de haberlos ocultado. En el lado de los que encubrieron encontraríamos otros cardenales como Mahony, Danneels o Brady que sí participarán en el Cónclave, y que por dignidad más les hubiera valido encontrar cualquier excusa y quedarse en casita.
Otra cuestión que también ha quedado clara en este caso es que la indignidad cardenalicia abarca personas de todas las tendencias ideológicas eclesiales. Por tanto objetivamente hablando, no podemos decir que los sacerdotes, obispos o cardenales con actitudes impropias, que incluyen encubrimientos e incluso pederastias, son de un lado o del otro. En el caso de O'brien, todo indica que no era precisamente un arzobispo del ala progresista, y que incluso había celebrado por el rito extraordinario, algo que no hemos visto hacer nunca a n.s.b.a cardenal Martínez Sistach y a muchos otros de sus colegas.
Saco a colación este tema para hacer una reflexión alrededor de todos aquellos que nos critican porque atacamos o dejamos en evidencia a nuestro actual arzobispo. Es evidente que las críticas que hacemos a nuestro pastor no tienen nada que ver con cuestiones truculentas, sino por la tolerancia y connivencia con el nacional-progresismo eclesial que sigue campando a sus anchas en nuestra castigada diócesis y que tiene entre algunos de sus colaboradores más próximos a sus principales representantes.
El caso O'brien demuestra que el hecho de haber sido creado cardenal no hace a la persona inmune a las miserias humanas, que los cardenales como el resto de los mortales son pecadores y algunos en lado superlativo y que se equivocan y a veces mucho. Y si me apuran, el hecho de que según que personas hayan recibido el birrete rojo, apunta directamente al Santo Padre de turno, entre los que se encuentran santos y beatos.
Por tanto es de una infantilidad supina, aquellos que nos acusan de poco cristianos por criticar los errores humanos de un arzobispo concreto, en este caso el nuestro. Nos quieren hacer creer que un cardenal es perfecto e incriticable sólo porque ostenta este título, un título que en el pasado han llevado personalidades de lo más siniestras como el cardenal César Borgia.
Esto me recuerda el tema también de actualidad de S.M. el rey Juan Carlos I, al que durante muchos años parecía que no se le podía criticar porque hacerlo era de mal español o significaba desestabilizar la Sagrada Monarquía Constitucional. Hoy en día el rey y por extensión su familia reciben criticas abundantísimas y nadie se rasga las vestiduras, hasta el mismo rey reconoció en público haberse equivocado cazando elefantes. Y que conste que el que critica al rey por sus múltiples errores humanos no tiene por que ser antimonárquico. Uno puede tenerle mucha simpatía al monarca pero como persona sensata tiene que reconocer sus errores, como lo hacemos con los miembros de nuestra propia familia por mucho que les queramos.
Por encima de los eclesiásticos, por muy alta graduación que tengan, está la Santa Madre Iglesia, y es de buenos hijos que se sepa la verdad por muy incómoda que sea, esto a la larga contribuye a la "purificación de la Iglesia" de la que tan valientemente habló el beato Juan Pablo II, reconociendo públicamente sus pecados a lo largo de la historia.
Criticar a un cardenal no es nada malo, porque los hay de buenos, de regulares y de malos. Los hay de muy eficientes y poco piadosos, y los hay de muy piadosos y poco eficientes. Y en cualquier caso y sea quien sea el que ostente la dignidad cardenalicia hace cosas buenas y cosas malas. Y opinar, valorar o criticar la gestión de un cardenal, sobre todo si a uno le afecta directamente como es el caso de todos los fieles diocesanos de Barcelona no es algo que tenga que estar prohibido o mal visto.
Y está claro que no todo el mundo piensa así, porque por expresar nuestra opinión sobre el cardenal Sistach y sus colaboradores, nos han intentado hacer callar por todos los medios, muchos de ellos poco ortodoxos, incluyendo los ilegales. Véte tu a saber si algo tienen que ver los de Método 3, con las investigaciones y espionajes que han recibidos personas sospechosas de pertenecer a Germinans. Aunque yo creo que los nuestros eran otros, demasiado chapuceros, lo que responde al perfil de otros detectives a los que les pagaban bastante menos, y es que hay mucho tacaño entre los altos jerarcas de nuestra diócesis.
Y está claro que no todo el mundo piensa así, porque por expresar nuestra opinión sobre el cardenal Sistach y sus colaboradores, nos han intentado hacer callar por todos los medios, muchos de ellos poco ortodoxos, incluyendo los ilegales. Véte tu a saber si algo tienen que ver los de Método 3, con las investigaciones y espionajes que han recibidos personas sospechosas de pertenecer a Germinans. Aunque yo creo que los nuestros eran otros, demasiado chapuceros, lo que responde al perfil de otros detectives a los que les pagaban bastante menos, y es que hay mucho tacaño entre los altos jerarcas de nuestra diócesis.
Yo respeto (aunque no comparta para nada sus postulados) a los que en tiempos de Don Ricardo le criticaban desde los medios nacional-progresistas (Foc Nou, El Pregó...) Otra cosa muy distinta es cuando algunos clérigos enviaban información falsa y manipulada a los medios que odian a la Iglesia, para que estos se encarnizaran con el prelado valenciano. Una cosa es la crítica ideológica y veraz y otra muy distinta es recurrir a cualquier fórmula con tal de destruir al obispo que no gusta. Como ejemplo recordar la intentona de dejar a media diócesis sin la Santa Misa dominical como fórmula visible para expresar el malestar contra Don Ricardo. El fin no justifica los medios y perjudicar al Pueblo de Dios no tiene ninguna justificación. Expresarse libremente es legítimo, pero se tiene que respetar el juego de la libertad. Es decir: yo puedo criticar, pero tengo que respetar que a mi también me critiquen.
Cuando veo como reaccionan algunas personas ante las críticas de Germinans me doy cuenta que son muy poco democráticos y muy poco amantes de la libertad, ellos pueden criticar al Santo Padre y a los obispos que no son de su cuerda (por ejemplo los hispanos no catalanes), pero si nosotros criticamos por ejemplo al nuestro, somos malvados y malos cristianos.
Antoninus Pius
Antoninus Pius
¿Que O'Brien no es progresista? Dias antes de renunciar al cónclave abogó por el celibato opcional. Al parecer, cuando fue creado cardenal, el Cardenal Ratzinger, entonces prefectos de la CDF, lo obligó a hacer profesión de Fe. Que haya celebrado la Misa tradicional no pasa, pues, de pura anécdota.
ResponderEliminarTodos los cardenales afectados por el encubrimiento de la pederastia son muy progresistas.
No creo en absoluto que revisar la norma del celibato para los sacerdotes latinos implique ser progresista. Si así fuera el primer progresista disolvente de la Iglesia hubiera sido el mismísimo San Pablo, Pilar de la Iglesia.
EliminarYo no me considero en absoluto progresista y sin embargo creo que el celibato y el sacerdocio no son inseparables y que no sólo desde el celibato se puede servir a Dios y a la Iglesia.
Si este señor cardenal resulta ser "progresista" (liberal le llamaría yo) no será por esta postura, sinó por otras.
Ningún católico tradicional aboga HOY DÍA por revisar la disciplina del celibato en la Iglesia latina.
EliminarY, por cierto, San Pablo habla de ordenar hombres casados, pero no de que los ya ordenados se puedan ordenar, como propuso O'Brien.
EliminarNo estoy abogando porque los sacerdotes latinos puedan casarse después de ordenarse, no entro tan a fondo en la cuestión. Como tampoco hacía San Pablo que aludía a los presbíteros como hombres casados.
EliminarNo conozco ninguna epístola en la que San Pablo hable acerca de esta distinción entre casados antes de la ordenación y casados después de la misma. Tampoco, que yo sepa, fija una posiblidad y prohibe la otra.
No debe ser una norma tan sagrada ni tan nuclear, ni para la fe ni para la santidad, cuando la Iglesia ya admite a sacerdotes casados en su seno y, de manera particular, ordena a hombres casados.
Ya sé que es un argumento muy manido por los "progres" pero creo que debemos distinguir entre lo nuclear y lo accesorio.
Entiendo que el celibato tiene su pleno sentido en la vida religiosa consagrada. Pero en el sacerdocio lo veo nada más como una norma disciplinaria. Esto no le quita valor a la capacidad de sacrificio de esta parte importante de su naturaleza que hacen los sacerdotes célibes.
Sin ánimos de discutir. Atentamente.
Por supuesto que el celibato es una ley disciplinar y no tiene carácter dogmático, pero, con el paso de los siglos, se ha convertido en una característica propia del sacerdocio latino.
Eliminar"Pensamos, pues, que la vigente ley del sagrado celibato debe también hoy, y firmemente, estar unida al ministerio eclesiástico; ella debe sostener al ministro en su elección exclusiva, perenne y total del único y sumo amor de Cristo y de la dedicación al culto de Dios y al servicio de la Iglesia, y debe cualificar su estado de vida, tanto en la comunidad de los fieles, como en la profana". (Pablo VI, Sacerdotalis caelibatus, n. 14)
Y, en fin, ni en Oriente ni en Occidente, la Iglesia nunca ha permitido el matrimonio de los sacerdotes; sino sólo ha ordenado hombres casados, que es la práctica que se mantiene en las Iglesias orientales para los presbíteros, no así para los obispos. También éste es el modelo previsto para los pastores anglicanos y luteranos que se ordenan sacerdotes católicos.
Atentamente.
La Conferencia Episcopal alemana ha publicado un extraño documento por el que dicta la moralidad de la píldora del día después en caso de violación, porque ya existen píldoras sin efectos abortivos y sí sólo anticonceptivos:
ResponderEliminar8. Cuestiones teológico-morales en casos de violación («Píldora del día después»): “...La Asamblea reitera que las mujeres que son víctimas de una violación...puede incluir la administración de la «píldora del día después» partiendo de la base de que sus principios sean no abortivos, sino anticonceptivos. No se pueden aplicar métodos médicos o farmacéuticos que conlleven la muerte del embrión...En cualquier caso, ha de respetarse la decisión de la mujer afectada.” (infocatolica.com/?t=noticia&cod=16576).
En ella se da una afirmación sin aportar información para su comprobación: ¿cuáles son los nombres comerciales y los principios activos de las píldoras del día después sin efectos abortivos? Los obispos alemanes omiten los compuestos químicos, los nombres de los medicamentos y los estudios científicos que lo avalen.
Según un sitio católico alemán, tal píldora del día después sin efectos abortivos es una pura suposición:
charismatismus.wordpress.com/2013/02/09/stutzt-sich-kardinal-meisner-betreff-pille-danach-auf-interessengeleitete-forschungsergebnisse-von-abtreibungsbefurwortern/
Parece que el informe que tuvo en cuenta la Conferencia episcopal alemana procede de dos organizaciones médicas proabortistas alemanas, la Sociedad Alemana de Endocrinología Ginecología y Medicina Reproductiva y la Asociación Profesional de Ginecólogos:
www.dggef.de/styled-42/index.html
DEFINICIÓN DE ABORTO Y EMBRIÓN
Aunque carezco de estudios médicos, parece que la polémica se dirime al entorno de la definición de aborto y embrión: para la Iglesia Católica hay aborto cuando se elimina a un óvulo fecundado antes de la implantación en el útero (aborto preimplantacional), mientras que para la ley sólo hay aborto cuando se elimina a un óvulo fecundado anidado en el útero (aborto implantacional), momento en que pasa a llamarse embrión; antes sólo hay anticoncepción, no aborto. Puede ser que para los obispos alemanes crean que sólo son seres humanos los embriones anidados, mientras que no sean humanos los embriones preimplantados.
Aborto inducido es la interrupción voluntaria del embarazo (IVE) que provoca la muerte biológica del embrión o feto. El embrión humano empieza en la fecundación (fusión de espermatozoide y óvulo), y su implantación se inicia entre los días 7-8 y finaliza en el día 14.
Preembrión (embrión preimplantacional) aparece en la ley sobre técnicas de reproducción humana asistida 14/2006, y es “el embrión in vitro constituido por el grupo de células resultantes de la división progresiva del ovocito desde que es fecundado hasta 14 días más tarde” (art. 1.2), o sea, es un embrión no implantado en el útero y es un ser humano dotado de derechos humanos para la Iglesia Católica.
Para el Código Penal alemán, artículo 218, sólo existe “aborto” desde la implantación del óvulo fecundado, o sea, desde el día 14. Y un sitio oficial alemán informa que la píldora del día después e un metodo anticoncepctivo de emergencia que no es aborto porque sólo afecta al óvulo fecundado preimplantacional o no anidado en el útero:
“Un óvulo fecundado necesita cinco a siete días a pasear por la trompa de Falopio al útero. En promedio, se trata en el décimo día para la implantación del óvulo fecundado en el revestimiento del útero. Habla solamente según la definición médica y legal de un embarazo.
La píldora obras solamente antes de que instala un óvulo fecundado en el útero (Die Pille danach wirkt nur bevor sich ein befruchtetes Ei in die Gebärmutter einnistet). Hasta ahora puede ser inadvertido embarazo existente no se interrumpirá. Según los conocimientos actuales, la píldora no tiene entonces también ninguna influencia negativa en el desarrollo del embrión.”
Fuente: www.schwanger-in-bayern.de/schwangerschaftskonfliktberatung/notfallverhuetung.html (Traducido por Bing)
PÍLDORAS DEL DÍA DESPUÉS
ResponderEliminarLos anticoncpetivos de emergencia se hallan en el artículo de wikipedia “Píldora del día después”, y sus prospectos en www.aemps.gob.es/cima.
En Alemania, parece que sólo se comercializan los dos primeros, por lo que parece que no existe comercializada aún ninguna supuesta píldora del día después desprovista de efectos abortivos:
1. Norlevo. Parece indicar que sí puede impedir la implantación del óvulo fecundado: “También puede producir cambios endometriales que dificultan la implantación. No es eficaz una vez iniciado el proceso de implantación.”
2. Ellaone. Parece indicar indirectamente que el óvulo fecundado puede no implantarse: “la anticoncepción de emergencia con ellaOne no evita el embarazo en todos los casos... Si se produce un embarazo después del tratamiento con ellaOne... En un ensayo clínico abierto, realizado con mujeres que solicitaron anticoncepción de emergencia y fueron tratadas con acetato de ulipristal entre 48 y 120 horas después de mantener relaciones sexuales sin protección, se observó una tasa de embarazo del 2,1%.”
3. Mifegyne: “Mifegyne puede por lo tanto causar la interrupción del embarazo.”
4. Meloxicam: usado como antiinflamatorio, un estudio lo propone como píldora del día después, aunque el prospecto de un medicamento retirado dice que “los medicamentos como Meloxicam, especialmente pueden asociarse con un moderado aumento de riesgo de sufrir un ataque cardiaco (“infarto de miocardio”) o cerebral”, y “se ha asociado a un aumento del riesgo de sufrir anomalías congénitas/abortos no se recomienda la administración del mismo durante el primer y segundo trimestre del embarazo”.
Po su parte, el Dr. Simón dice que no existen píldoras del día después sin efecto abortivo (infocatolica.com/?t=noticia&cod=16598), y el portavoz de la CEE Mons. Martínez Camino, afirma que es lícita la anticoncepción en el supuesto de violación por legítima defensa, pero que es inmoral impedir la anidación del óvulo fecundado si se ha dado la fecundación porque impide la continuación de la vida de un ser humano incipiente
(infocatolica.com/?t=noticia&cod=16619; www.unav.es/cdb/ceespdd2.html)
Si alguien puede aportar más información o corregir errores, parece que la conclusión es obvia... y alarmante:
- la Conferencia Episcopal alemana ha dictado un documento de bioética completamente equivocado, que induce al error moral en los fieles, que no proporciona la causa de justificación moral por la que la anticoncepción en caso de violación es lícita y que carece de base científica y documental probatoria.
Los obispos alemanes parece que han roto la comunión moral con la Iglesia Católica.
Jordi, tu siempre a tu bola, poniendo tu blog en blog ajeno, con temas que no vienen a cuento.
Eliminar¿No te das cuenta que resultas pesado y molesto con tus largas disertaciones que no son del tema del dia?
Es cierto que Jordi escribe sobre cuestiones que no siempre tienen que ver con el tema del día. Algo que yo mismo he dicho en diversas ocasiones que no me gusta.
EliminarPero también es cierto que Jordi escribe siempre sobre cuestiones eclesiales y que argumenta sus afirmaciones, como también es cierto que abarca muchos temas y no se repite como el ajo en alguna obsesión determinada.
Algún comentarista ha sugerido que debería tener su propio blog, y no es mala idea, pero de momento y hasta nueva orden Germinans lo acoge aunque sea provisionalmente.
Si bien es cierto que algunos comentarios no guardan relación con el artículo, los publico no con la intención de sacar protagonismo al autor, sino para exponer un tema eclesialmente importante a los lectores de GG. Es, por tanto, una donación de una aclaración a una noticia de actualidad que creo insuficientemente tratada.
EliminarMuchos temas -casi todos- podrían esperar a que un autor de GG los articulice, pero la urgencia del momento me parece que prevalece sobre la espera del momento apropiado. Y evidentemente, como el titular de este sitio es GG, si ven que ya no puedo comentar, pues será un acto legítimo, pues son responsables de discernir.
De hecho, casi todos los temas sin relación con el artículo principal me salen espontáneamente, y éste en concreto ha necesitado una semana -desde la aparición de la polémica- para recoger datos, y se redactó en unas dos horas. Siempre he intentado ajustarlo al límite de un comentario, y sólo lo he superado cuando he visto que ello era imposible.
El comentario de hoy tiene relación también con la polémica de los hospitales católicos catalanes abortistas.
Resulta que la definición estricta de embarazo, aceptado por la OMS y las organizaciones farmacéuticas y médicas, éste sólo empieza en el momento de la anidación o implantación del óvulo fecundado (preembrión) en el útero, el día 14 de la fecundación, cuando el blastocisto transfiere a la madre la hormona HCG y puede así ser detectada por las pruebas de embarazo. La eliminación del embrión es aborto, y la del preembrión es anticoncepción.
Al definir que el embarazo empieza en la anidación o implantación (día 14) y no en la fecundación , entonces la eliminación del preembrión u óvulo fecundado aún no implantado (días 1 a 13) NUNCA ES ABORTO, sólo es anticoncepción, por lo que es moral el uso de la píldora del día después o siguiente.
Pero para la Iglesia Católica, el ser humano comienza en la fecundación del óvulo (día 1: preembrión), por lo que la píldora del día siguiente es un instrumento químico de homicidio de una persona, el preembrión, y es aborto, o si se quiere, aborto de preembrión, preimplantacional o preanidacional (días 1 a 13).
Resumen de la definición oficial:
- óvulo fecundado no anidado (preembrión) - eliminación: anticoncepción
- implantación - embrión - embarazo - eliminación: aborto
Así, para la Iglesia Católica, hay dos tipos de aborto inducido que es inmoral:
1. Aborto de preembrión, preimplantacional o preanidacional: eliminación física o química del preembrión u óvulo fecundado antes de su implantación en el útero, cuando puede liberar la hormona HGC y es detectada por las actuales pruebas (días 1-13)
2. Aborto del embrión, implantacional o anidacional: cuando se elimina el embrión (día 14 y siguientes).
Pero para los Estados (y los entes médicos y farmacéuticos), la concepción de ser humano de la Iglesia Católica es pseudocientífica y fundamentada en creencias prejuiciadas, y sus argumentos son desarticulados y sus conclusiones son forzadas. Además, la Iglesia va contra los derechos humanos de la mujer para la anticoncepción y el aborto.
Bueno pues que siga publicando sus interminables parrafadas. Las pasaremos de largo y asunto concluído.
EliminarAunque extemporáneo, parece que se aclara la moderna Torre de Babel conceptual que se produce en el interior del debate al derecho a la vida: hablamos una misma lengua, pero nadie se entiende porque se comunican idénticas denominaciones con definiciones disimilares.
Eliminar. todo se reduce a un hecho biológico del cual dependen toda una serie de términos y consecuencias. En el preciso momento de la implantación en la matriz, junto con la implementación de la específica liberación hormonal que cierra y confirma el anclaje con el útero, hecho que sucede en el 14. día, ya se concreta un doble bautizo: el hijo se conceptúa como embrión, y la madre como embarazada, y como consecuencia de ello, el aborto se predica exclusivamente de la terminación de la vida del embrión.
Por el contrario, el preembrión, que se localiza tanto en tránsito hacia la anidación en el seno materno como dentro del transcurso del proceso de implantación, que discurren entre los días primero y 13., puede ser liquidado sin ningún tipo de preocupación ética o legal porque no es aborto, sólo es anticoncepción.
Lo anterior contrasta con la no consideración del momento de la individuación genética, que se produce en el período inicial de la fecundación y que defiende la Iglesia, con el fin de dotar de protección específica al óvulo fecundado humano desde su principiación hasta su completa inclusión en la matriz de la madre.
Quizás con ello puede entenderse los silencios e inhibiciones de los obispos catalanes con los hospitales católicos abortistas, la sorpresiva moralización de la píldora del día después de los obispos alemanes, y las reiteradas y masivas transgresiones de consagrados de todo nivel a escala global contra la castidad sacerdotal: > esquivar la realidad de las cosas con el uso del lenguaje subrepticio.
Y la diferenciación nominal del ser humano en dos constructos, embrión y preembrión, según traspase o no la barrera de los 14 días, se revela como un acto inicuo del que participan todos los estados y los organismos internacionales, así como todas las entidades nacionales y mundiales de los profesionales médicos.
De esta manera, se diseña toda una legislación que permite gozar de una ventana temporal de trece días como oportunidad moral y legal para manipular, investigar, traficar y eliminar, sin escrúpulos de conciencia de ningún tipo, a seres humanos indefensos que los desposeen de cualquier ocasión de ser oídos, defendidos en sus derechos y representados en el desarrollo y perfeccionalidad de su personalidad: selección, eliminación, manipulación, experimentación y congelación de gametos y embriones.
Todo da la apariencia de que esta ideología del relativismo se encuentra al servicio de un poderoso complejo industrial y profesional internacional médico-farmacéutico y equipacional (instrumentos médicos) de la anticoncepción, el aborto, la reproducción asistida y la investigación biomédica, y también turístico-hotelero, financiero, inmobiliario y universitario, con total desprecio y mercantilización económica de la vida humana y del que participa también la población.
El Papa acaba de decir que el amor a la Iglesia implica el tomar decisiones difíciles. Pero para algunos, es todo un arte la disimulación, la ocultación y la complicidad omisiva para que esto no acaezca en instituciones católicas.
Un artículo, el de hoy, para justificar las críticas que está web hace siempre al Cardenal. Ni más, ni menos.
ResponderEliminarEvidentemente existe la libertad de expresión. Pero sería de desear que los comentarios - positivos o negativos - estuvieran relacionados con el tema del día.
ResponderEliminarDe la misma manera que, imagino, no se publican todos, podrían dejar de publicarse los que no tienen nada que ver con lo que se comenta.
Totalmente de acuerdo.
EliminarLos derechos de los fieles están recogidos en el Código Canónico, y hay un canon referido al derecho de opinión:
ResponderEliminarCanon 212 § 3: Tienen el derecho, y a veces incluso el deber, en razón de su propio conocimiento, competencia y prestigio, de manifestar a los Pastores sagrados su opinión sobre aquello que pertenece al bien de la Iglesia y de manifestar a los demás fieles, salvando siempre la integridad de la fe y de las costumbres, la reverencia hacia los Pastores, y habida cuenta de la utilidad común y de la dignidad de las personas.
Quizás la única objeción que se puede hacer es la posible falta de reverencia hacia los pastores, en la definición del RAE aplicable al caso:
Reverencia.(Del lat. reverentĭa):
1. f. Respeto [miramiento, consideración, deferencia]
o veneración [espetar en sumo grado a alguien por su santidad, dignidad o grandes virtudes].
El problema está cuando los propios pastores incumplen de forma clamorosa sus funciones inherentes de defensa de la fe y moral, como ha sucedido con los recientes escándalos.
Buen comentario de Antoninus Pius.
ResponderEliminarAunque ciertamente los Cardenales los nombra el Papa reinante en ese momento, no es menos cierto que el cardenalato, en lo que se refiere a los nombrados por su pertenencia a las archidiócesis, creo que se nombran más por la importancia de la archidiócesis que rigen que por sus méritos personales.
Por ejemplo: si nuestro Cardenal en lugar de recaer en Barcelona, se hubiera quedado en Tarragona o lo hubieran llevado a otra archidiócesis española ¿lo hubieran nombrado Cardenal?.
Entonces, de la misma manera que hubo un Judas que vendió a Jesús por 30 monedas de plata, no le pidió perdón a Jesús y se ahorcó y un Pedro que le negó tres veces, pero se arrepintió y Jesús lo escogió para ser la primera cabeza de su Iglesia.
Pues hoy día, no es extraño que tengamos Judas y Pedros y si esta mañana en su última Audiencia General nos ha recordado que no se ha sentido solo po la fuerza de la oración de la Iglesia y que continuáramos pidiendo por los Cardenales reunidos en el Cónclave y por el futuro Papa.
Lo que no entiendo es porque justo en este momento las supuestas personas "agredidas" por este cardenal (O'Brien) se manifiestan. Se supone que si los hechos sucedieron hace unos 30 años, podrían haberlo denunciado antes, ¿no? ¿Este clérigo ya era cardenal en el Cónclave que eligió a Ratzinger como Papa? Si es así, ¿por qué los acusadores no lo decían entonces?
ResponderEliminarTengo entendido que los seminaristas que supuestamente fueron agredidos no le han llevado a los tribunales. Parece que no hay hechos probados. ¿Por qué se le acusa tan despiadadamente?
ResponderEliminar¿En este supuesto, la clerecía se rige por otras leyes internas, con tribunales equivalentes a los de la sociedad civil?
¿Alguien me puede dar información adicional?
Quien esté libre de pecado que tire la primera piedra.
ResponderEliminarQuizá primero orar por los pecadores, entre los que evidentemente me incluyo, luego la corrección fraterna del que hierra, sin hacer leña del árbol caido, y por último....ponernos en los brazos de María.
Escribo desde Dubai, donde hoy he vivido como se paraba una reunión porque el cliente árabe de Cola Cao se ponía en la esquina del stand a rezar, se ha sacado una "alfombrilla portátil" del bolsillo, luego los zapatos y a continuación ha estado cinco minutos haciendo la ola. Los dos interlocutores españoles, ni mú....y yo pensaba si los católicos hicieramos lo mismo y pararamos reuniones para hacer un misterio del Rosario, el pitorreo sería monumental, cuando no otra cosa.
Qué Dios os bendiga
Qué Dios os bendiga.
FIDEL: en este tema de las acusaciones de pederastia ya sea a un cardenal ya a un sencillo clérigo se debería proceder con extrema cautela ya que si es cierto que hay pedófilos también hay calumniadores y, además, hay dinero por medio como para incitar aún más a la codicia de estos últimos. ¿En el caso que nos ocupa existen pruebas irrebatibles o no? pues si no las hay, presunción de inocencia y punto. Y cuando haya pruebas pues caña de lo lindo contra lo que el antiguo código llamaba "crimen pésimo"
ResponderEliminarUn tanto penosas resultan las medida adoptadas en el ponticado que expira. Se empapela al clérigo acusado como una habitación, se le retira de los cargos pastorales y después ya se verá despues de haberlo marcado para toda la vida.Con el agravante de que Doctrina de la Fe no dispone de personal suficiente para tramitar las denuncias que llegan allá y los procedimientos se hacen interminables. Yo conozco un caso en Galicia que lleva meses en las condiciones antes descritas, apartado de sus cargos y viviendo en un hotel y esperando el fallo por algo, a veces, que ocurrió -si es que ocurrió, hace 20 años y mas.
Un profesor de derecho cnónico en Salamanca calificaba la reacion de Benedicto-Bertone ante las acusaiones de pederastia como "histérica"
Y por otro lado ¿se aplica el mismo rigor a las acusaciones que del Pablo VI estudió y publicó Don Luigi Villa?