La reliquia del obispo mártir Polanco, asesinado en Cataluña, en el pectoral de León XIV

13

El pasado jueves salía a la logia principal de la basílica de San Pedro, el flamante nuevo Papa León XIV, volvía a vestir como casi todos sus predecesores, a excepción de Francisco, lo mismo sucedía con el pectoral que llevaba, aunque en esta ocasión, esa cruz, contenía en su parte trasera un secreto que nadie de los que estaba mirando en vivo o por los medios telemáticos pudo observar. Se trata de las reliquias de cinco hombres santos, vinculados a la Orden de San Agustín, a la que pertenece el nuevo Pontífice, y que solo puede verse dándole la vuelta al pectoral.
 
Dos de ellos son los insignes, San Agustín y su madre Santa Mónica, a los que hay que añadir el español Santo Tomás de Villanueva que fuera arzobispo de Valencia, los otros dos restantes no son santos, el primero es el beato obispo mártir de Teruel Anselmo Polanco y el último el venerable Giuseppe Bartolomeo Menochio, otro obispo valiente que tuvo que dar la cara en la invasión napoleónica de Roma.
 
Anselmo Polanco Fontecha, nació en el pequeño pueblo de Buenavista de Valdavia en la provincia de Palencia en 1881, fue religioso agustino y obispo de Teruel entre 1935 y 1939. Es definido por el historiador inglés Paul Preston como un "clérigo pío, austero y conservador, dado a repartir limosnas entre los pobres"

A diferencia de los obispos tibios que tenemos hoy en día, el obispo Polanco no dudó en adoctrinar a sus fieles, como buen pastor de sus ovejas, ante las elecciones de febrero de 1936, enviando una circular a los párrocos de su diócesis afirmando que en aquellas elecciones se dirimía "entre los defensores de la religión, de la propiedad y de la familia" y "los voceros de la impiedad, del marxismo y del amor libre", como buen agustino, acababa su circular haciendo una división entre "las dos ciudades enemigas de las que habla San Agustín: los bandos opuestos del bien y del mal" refiriéndose a la contienda electoral entre el Frente Popular, y los partidos conservadores.
 
 
El obispo Polanco fue hecho prisionero en enero de 1938 por el ejército republicano tras la conquista de Teruel y después de varios traslados fue llevado por los que huían hacia Francia hasta casi la frontera como rehén, por si fuera necesario un canje. Al no ser necesario, los prófugos lo fusilaron junto a otros prisioneros, entre los que se encontraba su Vicario General, el sacerdote Felipe Ripoll que también fue beatificado junto a su obispo el 1 de octubre de 1995 por el Papa San Juan Pablo II. Las tropas de Líster, antes de llegar a Francia, asesinaron también a 42 oficiales y soldados, que llevaban como prisioneros.
 
De esta manera, el obispo mártir tiene tres territorios españoles que marcaron su vida, su Palencia natal, el Teruel del que fue obispo y donde está enterrado y la Cataluña que le vio peregrinar hacia la muerte, que se hizo efectiva en la población gerundense de Pont de Molins. El monumento que recuerda la muerte de aquellos mártires ha sido saboteado y maltratado en diversas ocasiones por aquellos que dicen defender la memoria histórica, pero solo de un lado, el del otro hay que negarlo y ocultarlo.
 
Me alegra enormemente que el nuevo Papa tenga devoción a este obispo nuestro que dio su vida por Cristo, en la persecución religiosa que se realizó en aquellos fatídicos años, Ojalá él también sea valiente y alerte de los peligros de nuestro mundo, me consta que en algunas ocasiones lo ha hecho por ejemplo en Perú ante leyes que van contra la vida y la moral católica. 

Y un último detalle, no creo que a los "progres" que sueñan con un Francisco II les haya hecho gracia esta historia, y no solo por el obispo Polanco, sino también por la fuerza de las reliquias de los santos, algo en lo que ellos no creen y que ridiculizan y se ríen así que pueden.
 
Francisco Fabra

Entradas que pueden interesarte

13 comentarios

  1. Creo que las reliquias están embutidas en la ceuz

    ResponderEliminar
  2. Curiosa esta cruz del Papa y por lo que veo no se trata de la parte oculta de detrás sinó que es el interior que se puede observar abriendo una tapa. Esperemos que el papa León les de un buen aldabonazo a los socialistas españoles que predican la unipersonal Memória Historica del Diablo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sr. Garrell, vostè té odi indiscriminat.

      Eliminar
    2. Totalmente de acuerdo con el Sr. Garrell.

      Ojalá se abra la causa de Canonización del Glorioso Caudillo, que terminó con la masacre de gente buena.

      Que no sean cobardes , HOMBRE!

      Eliminar
    3. Ciertamente que si, según el de 9.12 que tengo un odio pero "discriminado" a sólo la Memória Histórica Del Diablo.

      Eliminar
    4. Franco canonitzat... ?

      Vés, potser arribarà, de moment ja tenim com a Beat i Màrtir al cardenal croat Stepinac.
      Sense oblidar els mèrits pendents del màrtir Mossèn Josef Tiso, capellà i governant eslovac.

      Eliminar
  3. Obispo Polanco (1)14 de mayo de 2025, 4:53

    El asesinato del Obispo Polanco se produjo junto con su vicario episcopal, Ricardo Ripoll Morata, y 40 prisioneros de guerra militares: el coronel Domingo Rey d'Harcourt, el teniente coronel José Pérez del Hoyo (jefe de la Guardia civil), José Coello (jefe de la policía), 21 militares italianos (capitán Antonio Galea, soldado Bolgioni...) y 1 alemán (Gerard Impimg).

    Son asesinados el 7 de febrero, el día 17 de febrero el pastor Pedro de Can Salella (Les Escaules, Alt Empordà) encuentra a los 42 genocidiados, se les da sepultura provisional el 20 de febrero debido a su mal estado, y días más tarde se los exhumó y se practicó la autopsia (precaria) para dar al Obispo Polanco cristiana sepultura en la Catedral de Teruel, después de haber sido velado su féretro en Barcelona en la Residencia de los Agustinos y luego llegaron a Zaragoza (cripta del Hospital de Nª Sª de Gracia, en la 1ª sepultura de la Madre Ráfols) y luego a su lugar definitivo, la Catedral de Teruel.

    Esta matanza roja prueba un crimen de guerra, más otro crimen de lesa humanidad y otro genocidio católico, pues es el último obispo asesinado en territorio rojo del presidente republicano Manuel Azaña y del presidente de Gobierno Juan Negrín del PSOE y de la Generalidad de Cataluña bajo la ERC de Companys, compañero de los otros 12 obispos genocidiados desde 1936.

    El Obispo Polanco se quedó en Teruel cuando el ejército rojo rodeó la ciudad y luego la tomó: “He venido a dar la vida por mis ovejas”, no salió del Teruel asediado, pues dijo “Yo soy el pastor y debo permanecer al lado de mis ovejas; o me salvo con ellas, o con ellas muero”, siendo capturado el día 8 de enero de 1938 (mi padre, cabo sanitario DECA del Ejército Popular, siempre recordó el maldito terrible frío de Teruel, que causó más bajas que las balas; lo cierto es que todos los soldados de los dos bandos salieron traumatizados por el frío, un frío agravado por la humedad de miedo y el viento perenne que detenía a las balas en el mismo vuelo, envueltas de hielo, y las desplomaba al suelo).

    Se describe lo siguiente en el libro de P. A. del Fueyo, O.E.S.A., "El Obispo de Teruel", serie Héroes de la Epopeya, "Ejemplo formidable de religiosidad y españolismo (General Varela)", Editorial Amaltea, Barcelona, 1941:

    Estaba el Obispo en la primera terraza, tendido en el cauce, algo aislado, de rostro al suelo, completamente desnudo, ennegrecido todo por la llama, desfigurado, pero intacto. Sólo a él no le faltaba miembro ninguno. Conservaba el pelo que pudo tapar la boina; junto a la cabeza, un rosario chamuscado, y a sus pues, un libro -el Breviario- que, al hojearle, se hizo pavesas.

    Tenía su cadáver ésa que llaman actitud de gladiador, propia, dicen, de los que mueren a fuego. Por eso y no hallar en él orificio ninguno ni tiro de gracia, decimos nosotros si el Obispo de Teruel no habrá sido fusilado; si al Obispo de Teruel sus verdugos no le habrán quemado vivo.

    El acta de exhumación y reconocimiento de cadáveres en el cementerio de Pont de Molins, partido judicial de Figueras, provincia de Gerona, dice:

    "...El aparecido en el último lugar ha sido identificado como el cadáver de Su Ilustrísima Don Anselmo Polanco Fontecha, Obispo de la Diócesis de Teruel, identificado por la configuración del cráneo, las manos, la dentadura, la piel y aspecto general que da la certeza moral de pertenecer a dicho señor. Se hace también constar que el rostro, las orejas -sumamente pequeñas- y el pelo, coinciden con los del referido señor. Acto seguido ha sido colocado en una caja de cinc que, una vez soldada, ha pasado a cargo de las autoridades para su traslado a la capital de la Diócesis de Teruel... Todos los cadáveres presentan señarles evidentes de haber sido incinerados...

    ResponderEliminar
  4. Obispo Polanco (2)14 de mayo de 2025, 4:56

    Otra descripción:

    En el reconocimiento del Obispo hubo algunas dificultades por la total ausencia de ropa; sólo conservaba el calcetín del pie izquierdo, y un retacito de pantalón kaki sujeto con una cuerda en la parte inferior de la misma pierna. Por lo demás, el cadáver apareció íntegro, hasta el punto de no faltarle el más pequeño miembro, ni daba seña de ninguna de corrupción, cuando en los todos abundaban ya los gusanos y el hedor era pestífero. Mostraba su piel un color amarillo-versos, debido al fuego, e hinchada la cara. No se le hallaron heridas de bala; pero sí saltado el ojo derecho; un leve desgarre hecho sin duda cuando le sepultaron o al desenterrarle, si ya no fue al bajarle de Can Tretze al cementerio, en la mitad derecha del tórax al nivel del corazón, y otro semejante en lo cimero del brazo izquierdo. También tenía un poco desgarrado el vientre, y por allí asomaban los intestinos, intactos y frescos. El pie cubierto aparecía muy blanco, y la carne aparentaba estar cocida.

    Sigue diciendo:

    Para examinarle la dentadura, le hundió el médico unas pinzas en las encías, de las que brotó sangre fresquísima, lo cual llamó la atención de todos. "-Es extraño- dijo el forense, Antonio Brusés-; sí, muy extraño." ... lavado convenientemente y envuelto en una sábana, se le encerró en luna caja de cinc soldada, y ésta, a su vez en otra de madera.

    En la prisión de Molins se halló el hábito agustino que conservaba para el día de su liberación, y el bonete negro con que salió de Teruel.

    Se menciona que el cadáver, 25 días después, estaba incorrupto, a diferencia de todos los demás, y tenía el fenómeno de la sangre fresca, que en tal cadáver, cualquier resto de sangre estaría al 100% seca, coagulación post mortem (cruor sanguinis post mortem), descomposición de los componentes sanguíneos y su inclusión dentro del proceso general de putrefacción del cadáver. Al parecer, se le puso de inmediato en el ataúd, por lo que no se hizo una atenta inspección para saber más detalles porque no había las condiciones necesarias para hacer una autopsia.

    Los religiosos estudiantes agustinos, de uniforme, sacaron el ataúd de su hermano, el Obispo, según se ve en una foto.

    Yace a la derecha del presbiterio, en la Catedral de Teruel, capilla de Santa Emerenciana, con una lápida que dice:

    HIC SERVANTUR EXUVIAE EXCMI. ET REVMI.
    FR. ANSELMI POLANCO ET FONTECHA
    OR. ER. SANC. AUG. EPISOPI TUROLENSIS
    ET ADMINISTRATORIS APOSTOLICI ALBARRACINENSIS DEO
    HISPANIAE ET TUROLIO OBLATAE ET A DIOECESANIS PIE COLLECTAE - ANNO A NATIVITATE DOMINI M·CM·XXX·IX
    EPISCOPI

    ...

    El Obispo Polanco, en 1939, no era O.S.A sino que era O.E.S.A, Orden de Ermitaños de San Agustín, en latín Ordo Eremitarum Sancti Augustini, como fueron desde 1244, pues O.S.A es el renombre que se les dio en 1968.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por su aportación de la muerte del obispo Polanco, mi padre era de Teruel y tengo familia allí que vivió la guerra. Leyéndo du descripción sorprende lo de hallarse desnudez y sin orificios de balas. ¿Pudo ser un ritual satánico? Detrás del Comunismo y de los que odian a Cristo está la larga mano de la más furibunda masoneria.

      Eliminar
  5. No se preocupe por la gente descreida que no cree en reliquias, ni en Dios, ni en nada que no puedan ver con sus propios ojos llenos de legañones. Los que sí temen esa Cruz pectoral llena de reliquias de santos y mártires son los masones; ¡Habría que ver a más de un cardenal/obispo infiltrado cuando se acerca a León XIV, qué muecas hace...al Diablo no le va nada las reliquias de mártires porque sabe bien de su valor exorcizador!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Creo en Dios. Pero esperar que una reliquia pueda sustituir a un cirujano y las píldoras medicinales o que sane a un enfermo me parece cosa de magia, cuando no cosa de superstición.

      Eliminar
  6. Anonimo 10:00. ¿Quien le ha dicho que una reliquia puede sustitir a un cirujano o las medicinas ?
    Esta muy feo esto de inventarse una excusa para despreciar las reliquias.

    ResponderEliminar
  7. Las reliquias e imágenes de Santos tienen un poder inmenso.

    Si se tiene FE , claro 🙏🙏

    Particularmente tengo una estampa del Caudillo en mi mesita de noche y la verdad, me da paz interior cuando la veo.

    ResponderEliminar

ESCRITOS INTERESANTES ANTERIORES

ESCRITOS INTERESANTES ANTERIORES
El cardenal Omella suspende una charla sobre noviazgo del padre Javier Olivera
Los Salesianos de Mataró homenajean a los brigadistas que confiscaron el colegio durante la guerra
«De cómo fue salvada la patrona de Barcelona»
PEDERASTÍA Y HOMOSEXUALIDAD EN EL MONASTERIO DE MONTSERRAT
L'arquebisbat de Barcelona aparta un dels sacerdots de la Casa de Santiago acusat d'abusos
El Vaticà pren el control directe del bisbat d’Urgell per “liquidar” la figura del copríncep episcopal
Apostolado “Transformados”: Dejan el mundo LGTB tras un encuentro con Cristo, sin terapias
La Iglesia catalana no para de arrodillarse ante el separatismo
La Iglesia catalana, partida en dos por el derribo de una parroquia
Omella destituye a un párroco crítico con un plan urbanístico de la Iglesia en Barcelona
Centenares de catalanes acompañan a la Virgen de Fátima por el centro de Barcelona.
Dues nuevas denuncias por abusos sexuales afectan a los Jesuitas de Casp
La CUP elige a un profe de religión como secretario general
El párroco de la Mercè, tras la retirada de la misa: «Tal vez recibamos a las autoridades tocando a muertos»
El Clínic traslada su proyecto de centro de investigación por la imposibilidad de instalarse en una iglesia del Eixample
El gran vitrall de l’església de l’Esperit Sant se salvarà de l’enderroc
Omella no está en su mejor momento: el cambio en Barcelona se acerca
La secta de la Casa de Santiago. El escándalo que la Iglesia catalana ocultó durante 30 años
Omella envía a un cura de 72 años a comerse el Santísimo de la iglesia que quiere derribar
Derribos Omella: el arzobispo desacraliza la iglesia del Espíritu Santo de Barcelona y suspende a divinis al párroco
Los memos del Bisbat de Sant Feliu de Llobregat
El hilo que une Monserrat con el Opus Dei: 85 años de amistad y protección