¿Primero vendrá un auxiliar para Terrassa?

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Mientras esperan un nuevo obispo de Gerona o la designación de un tercer auxiliar de Barcelona y mientras pronto se tendrán que iniciar los procedimientos de provisión de las diócesis de Tortosa y Sant Feliu de Llobregat, podría saltar la sorpresa de que el primer nuevo nombramiento en Cataluña fuese un obispo auxiliar de Terrassa. Ya tuvo la demarcación egarense un prelado auxiliar en la persona de su actual residencial, Mons. Salvador Cristau, y las informaciones que corren cuentan que ha solicitado a la Santa Sede la necesidad de ese apoyo episcopal. Se trata de la décima diócesis española en población y, por delante de ella, únicamente Málaga, Orihuela-Alicante y Cartagena-Murcia no cuentan en la actualidad con dicha figura. Además, Cristau ya tiene 72 años, su mandato forzosamente será corto y un auxiliar de su confianza facilitaría su sucesión, tal como le sucedió a él con Saiz Meneses. Por otro lado, Terrassa es la diócesis que mejor funciona en Cataluña, posee un clero relativamente joven, pastoral y socialmente activo, con lo que el elenco de candidatos no ha de presentar problemas, al contrario de lo que está sucediendo en otros pagos. 113 sacerdotes diocesanos, 73 menores de 75 años, 45 sacerdotes religiosos y 20 seminaristas son los números actuales de la diócesis para 121 parroquias y una población de 1.319.540 habitantes. ¡Huelgan comparaciones!

A nadie se le escapa que el principal candidato sería Fidel Catalán Catalán (1965), actual Vicario General y tampoco se le escapa a nadie la influencia que sigue teniendo el actual arzobispo de Sevilla en la diócesis del Vallés, con la suficiente longa manu en Roma para ver atendidos los ruegos. El nombre de Fidel Catalán ya sonó en aquellas ternas para Gerona, que fueron yendo y viniendo, hasta que el proceso quedó en stand by. Cierto es que en la diócesis gerundense (solo 30 sacerdotes menores de 75 años para 393 parroquias) anhelan tener obispo, pero han surgido tantos problemas, tantas negativas, que se ha decidido aparcar la selección. En la misa de San Narciso del pasado sábado, el administrador diocesano suplicaba que se ocupasen urgentemente de la designación. No ha de extrañar el ruego del pobre hombre al que, con 76 años, le ha caído un cargo que esperaba fugaz y se va a demorar en el tiempo. Un administrador diocesano designado a la edad en la que los obispos presentan la renuncia. Ciertamente, aunque el fallecimiento de Pardo en activo provocase legalmente la reunión del Colegio de Consultores, una intervención de Roma y la designación de un administrador apostólico ad nutum Sanctae Sedis habría sido la mejor solución.
 

No obstante, habrá que contar con la alegal comisión Omella-Arana que se cuida de las designaciones episcopales y de torpedear la labor ministerial del Nuncio. Una comisión que parece que ha conseguido doblegar los propósitos de Mons. Bernardito Auza, a pesar de su resistencia, buen talante y probidad diplomática. La designación de un hombre de Omella como Brotóns para Plasencia, la fulgurante aceptación de la renuncia de Reig en Alcalá, con el oprobio de que no se le nombrase sucesor, sino una administración apostólica en la persona de un auxiliar de Madrid, son claros triunfos de la peculiar comisión.

Y ahora San Sebastián como último botín de los actuales hombres fuertes de la Iglesia en España. Una designación efectuada de la manera más opaca y tenebrosa, filtrándose nombres a los medios a fin de que cayesen en la trampa para acabar nombrando a quien era fijo en las primeras quinielas: el claretiano Fernando Prado Ayuso, el cual, a pesar de no poseer ocho apellidos vascos, habla perfectamente euskera y ha sido formado bajo el manto de los Setién y Uriarte de poco propicio recuerdo. Un religioso de San Antonio Mª Claret que viene a incrementar la nómina de prelados de dicha orden en España, con un cardenal tardío, el padre Aquilino Bocos y con el obispo de León, Mons. Luis Ángel de las Heras, miembro también de la anómala comisión y con mucho futuro en las próximas promociones episcopales. Y por si no fuere suficiente, colaborador del omnipresente Padre Ángel.
 
 
Vendrán sorpresas, como puede ser un auxiliar de Terrassa, mientras Gerona, Sant Feliu y Tortosa esperan la vez. Pero esos extraños nombramientos solo pueden achacarse a esa irregular comisión, que suplanta un procedimiento reglado, cuya dirección corresponde al Nuncio de su Santidad. Cuando se tuerce la legalidad suceden estas cosas. Empieza a ser preocupante el papel que hacen desempeñar al diplomático filipino.
 
Oriolt 

18 comentarios

  1. Nombrar un auxiliar para Tarrasa con vistas a la sucesión de Cristau, significaría que todos los obispos de esta diócesis van a salir de su propio clero, lo que no es habitual.

    En cuanto a Fernando Prado, en 1998 se sacó el título EGA de euskera, que sólo está clasificado como título de nivel C1. Si, además, no lo ha practicado desde entonces, es dudoso que hable perfectamente esta lengua.

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  2. Sobre Barcelona corren dos versiones:
    a) Que ya no saldra el nombramiento de un nuevo auxiliar para sustituir al fallecido Antoni Vadell, por el tiempo que le queda a Omella.
    b) Que saldran tres nuevos obispos auxiliares en Barcelona a la vez para Navidades.
    Ya que Mons. Sergi Gordo iria a Sant Feliu, y Mons. Javier Vilanova a Tortosa.
    Veremos si manda el Sr. Nuncio, o Mons Omella - Arana.
    Según lo que salga tendremos la respuesta.

    Hasta ahora se decia que faltan sacerdotes, ahora en Catalunya podremos decir también faltan Obispos.

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    1. Mons Sergi Gordo no irá a San Feliú. Mons. Sergi Gordo, ya tiene diócesis asignada, y corresponde a la diócesis de Urgel. Posiblemente veremos que para inicio de año nuevo, Enero/Febrero se haga público el nombramiento como obispo coadjutor de Mons.Sergi Gordo.

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    2. Entonces en Sant Feliu el obispo seria Mn. Joan Pere Pulido i Gutiérrez

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    3. Creo que a Tortosa irá el de Vic. Vic y Solsona se unirán.

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    4. Y no hay nadie más en Sant Feliu que pueda aspirar al cargo?

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  3. "Vendrán sorpresas, como puede ser un auxiliar de Terrassa, mientras Gerona, Sant Feliu y Tortosa esperan la vez. Pero esos extraños nombramientos solo pueden achacarse a esa irregular comisión, que suplanta un procedimiento reglado, cuya dirección corresponde al Nuncio de su Santidad. Cuando se tuerce la legalidad suceden estas cosas. Empieza a ser preocupante el papel que hacen desempeñar al diplomático filipino."

    En mi opinión, estamos en el peor pontificado de la historia, el de Bergoglio.



    1. Diferenciamos el Ius Conditum o lex data (el derecho establecido) y el Ius Condendum o de lege ferenda (proyecto de reforma de la ley); luego el procedimiento ilegal



    2. Para la elección de obispos tenemos:


    a) LEX DATA o el procedimiento legal canónico actualmente vigente;


    b) DE LEGE FERENDA o la propuesta de volver al sistema tardoantiguo del procedimiento de elección sinodal basada en los principios de consensus populi y clerus populusque ecclesiae (San Cipriano de Cartago); en Suiza y Alemania hay la elección por el Cabildo Catedralicio, e incluso en otros sitios hay un colegio pro eligendo Pontífice de tipo diocesano;


    c) y la ilegal comisión de los entrometidos de Bergoglio, que son Omella y Arana



    3. El actual sistema de elección de obispos, configurado por el Concilio Vaticano II, es la continuación del sistema monárquico del absolutistismo ilustrado: todo para el pueblo pero sin el pueblo. Es cierto que el papel del Papa y los obispos tienen una función determinante, pero no hasta el punto en que se excluya la libre participación y la transparencia informativa a todo el pueblo de Dios. Aunque se equivoque, el pueblo de Dios debe de participar en su justa medida, que ya la conocen los historiadores del derecho, en la elección de Obispo titular, coadjutor o auxiliar.



    4. La jubilación a los 75 años de los obispos debe de ser eliminada; antes del Vaticano II, el obispo estaba hasta su fallecimiento o incapacidad. El sistema actual es involutivo y regresivo, deja a la arbitrariedad discrecional injustificada del Pontífice, nada menos que la efectiva renuncia de un obispo por motivaciones políticas, estando las edades actuales de cese, además, entre 75 y 80 años, en una época en que los obispos pueden vivir lúcidamente muchos más años. El límite de edad de 75 años, por tanto, debe de ser retirado y debe ser vitalicio.



    5. El Sínodo de la sinodalidad debería de tratar de la elección sinodal de los obispos, tal como estaba configurada en la tardoantigüedad, pero en la práctica se configura como un sínodo apostático y cismático, porque trata de exportar toda la apostasía del camino sinodal alemán a toda la Iglesia Universal en todas sus vertientes fideística, moral, litúrgica y eclesiología. Por lo tanto, el Sínodo de la sinodalidad ultrapasa el ámbito de sus competencias, y por ello, debe ser desobedecido y resistido proactivamente: tanto la autoridad como la obediencia tienen un límite, nunca jamás en el catolicismo son absolutas, ni que sea la del Papa.


    6. Cessante ratione legis, lex ipsa cessat. Las leyes canónicas humanas se presentan para responder a situaciones que existen en el momento de la ley. El Pueblo de Dios evoluciona y llega el momento en que una ley, aún en los libros de leyes, no tiene relevancia para la sociedad moderna. Por eso cambian las leyes durante los siglos: lo de hoy será obsoleto mañana.

    Por ejemplo, los dos estados de alarma (inconstitucionales) declarados en la pandemia perdieron inmediamente relevancia a medida que el covid desapareció.

    Muchas cosas del Vaticano II respondieron a la ya obsoleta y antigua sociedad de 1950-1960, hoy inexistente, lo que implica que han de reformarse.

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  4. Menos Generales y más soldados combativos contra la satanización del país.

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    1. Totalmente de acuerdo. Menos mitras y báculos. Se han de preocupar de los sacerdotes que tienen en sus diócesis. Que los tienen bastante abandonados.

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    2. Un buen General tiene resultados extraordinarios. Me viene a la memoria un gallego que fue el General mas joven de Europa y que fue providencial para España

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  5. Yo también creo que podría venir alguien de fuera. Más teniendo en cuenta que se trata de una plaza apetecible a la que no faltarán candidatos precisamente. Más de uno estarán intentando ganarse la confianza de Cristau... Y de Sainz Meneses.
    A diferencia de otras diócesis, en Terrassa habrá mucha tela que cortar.

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    1. Antes de Navidad Girona - que no Gerona, eso dicen los analfabetos - tendrá Obispo!

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    2. A Cristau le quedan dos telediarios (*1950), Saiz Meneses "desterrado" a Sevilla, no tiene ninguna influencia por muy arzobispo que sea.

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  6. No sé de donde saca lo de la mano de Sainz Meneses en Roma, tampoco lo de que Cristau piense pedir un auxiliar. El obispo dijo en rueda de prensa cuando lo designaron que no lo contemplaba.

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    1. Eso era entonces. A su edad, diez años empiezan a ser muchos años.

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  7. Para suplir a Benavent habrá que sufrir mucho .

    A dejado el listón muy alto en Tortosa.

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  8. Con la casi completa secularización de la sociedad catalana (lo de Tarrasa, da, como mucho, para hacer un cómodo búnker), no importa mucho ya quién vaya a ser obispo. En realidad, da lobispo (como decían Martes y Trece). No entiendo la importancia que Oriolt le ha dado siempre a estos temas (porque es uno de sus favoritos). Oriolt, como Germinans, supongo, sufre de una poco evangélica cratofília o obsesión por el poder.

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