“Lo que yo os digo en la oscuridad, decidlo vosotros a plena luz, y lo que escucháis en secreto, pregonadlo desde las azoteas” (Mt 10:27).
El padre Jordi Peña es, desde hace casi dos años, el nuevo párroco de San Celoni, en el territorio de la diócesis de Tarrasa. Como tal, debería ser por derecho propio el vicepresidente del Hospital Comarcal, fundado hace más de cuatrocientos años por la Iglesia al objeto de ofrecer caridad y atención médica a los enfermos pobres con el apoyo del consistorio municipal. Con el paso de los años la institución entró a formar parte de la Red Pública Sanitaria de la Generalitat de Cataluña con todo lo que ello conlleva: dinero -y mucho-, pero también esterilizaciones y abortos –de momento, sólo de momento, farmacológicos-.
El Obispo de Tarrasa, José Angel Saiz Meneses, informado durante años puntualmente de todo por el padre Fuster, envió consulta a Roma –la pregunta que formuló el prelado la desconocemos- que fue respondida con un “parecer” de la Congregación para la Doctrina de la Fe que mostraba un amplio abanico de posibilidades a elegir: Quedarse en la junta y denunciar los abusos con la intención de eliminarlos, o abandonar la junta explicando por qué, si ya no es posible hacer nada. Pero también se podría continuar para limitar los daños… En fin, un galimatías monumental que ha llevado al obispo de Tarrasa, al de Barcelona, Martínez Sistach, y al de San Feliu, D. Agustín Cortés, a escuchar la voz del ingenioso hidalgo de la Mancha y a observarla escrupulosamente: Peor es meneallo, amigo Sancho. Peor es meneallo… Así pues, los hospitales de Granollers y San Celoni (Tarrasa), San Pablo (Barcelona) y San Juan de Dios (diócesis de San Feliu) –moralmente, como poco, todos bajo responsabilidad episcopal- continúan tan campantes con sus prácticas abortivas y criogénicas, con la única diferencia de que ya no pueden hacer el mal con tanta comodidad como antes, pues ya se les ha visto el plumero.
Mn Jordi Peña, en su entrada como párroco de Sant Celoni |
El caso que nos ocupa, el Hospital Comarcal de San Celoni, es, si cabe, más patético. El Ayuntamiento de San Celoni, liderado hasta hace poco por el socialista Joan Castaño, y el Obispado de Tarrasa han elaborado nuevos estatutos para el hospital. El cargo de vicepresidente llevaba más de cuatro años vacante tras la dimisión del P. Fuster. El nombramiento de Jordi Peña como nuevo párroco agudizó la situación pues, licenciado en bioética por el Pontifico Instituto Juan Pablo II de Roma, no iba a dejarse manejar con politiqueos inconfesables.
Al final, fue el propio Alcalde de San Celoni, no el obispado, el que proporcionó al P. Jordi los estatutos confeccionados a sus espaldas en el más absoluto secreto. Tal y como profetizamos tiempo atrás, los nuevos reglamentos sólo aportan una pequeña pero trascendente novedad: En la nueva junta el vicepresidente será nombrado directamente por D. José Angel Sáiz junto a los vocales laicos como representación eclesial en el Patronato de Hospital. De esta manera el párroco de San Celoni –el que sea- ya nunca podrá molestar con sus escrúpulos morales ni con sus denuncias a los mismos caraduras de antes, pero ahora con plenos poderes. Ponemos al cura en offside y punto. Aquí paz y después gloria. Que sean otros los que chuten a portería vacía y nos metan todos los goles que quieran. ¡Y a aplaudir con las dos orejas! La Congregación para la Doctrina de la Fe puede ya respirar tranquila… ¡En Tarrasa han cumplido!
De momento, el P. Jordi Peña se ha curado en salud llamando a consultas al nuevo vicepresidente del patronato, el laico Mariano Perapoch, designado por el dedo episcopal de D. José Angel sin más mérito que el de ser amiguete del difunto P. Luis Pou y haber puesto de vuelta y media al P. Fuster cuando dimitió de la Junta. El párroco de San Celoni le conminó a recordar que no se representa a sí mismo, sino a la Iglesia Católica, que debe trabajar para que acaben las prácticas inmorales en la institución y que finalmente deberá dar cuentas a Dios el día del juicio por lo que hizo y lo que dejó de hacer. El bueno del P. Peña le leyó la cartilla
El tal Perapoch, que no pisa la parroquia de San Celoni salvo en los entierros y eventos similares, tuvo la desfachatez de afirmar ante el párroco, sin pestañear siquiera, que en el Hospital de San Celoni se hacían tan solo quince esterilizaciones al año y que nunca, nunca habían dado la píldora abortiva en el hospital. Según él, sólo las dispensan en el Centro de Atención Primaria, con el cual compartirían sólo las instalaciones. ¡Pobrecitos! Otra cosa es que los fines de semana el servicio de urgencias del hospital regale las pildoritas asesinas a capazos y ¡eso sí! Eso sí que lo hace el Hospital en el que está representado –ahora directamente- el Obispado de Tarrasa.
Mn. Ignasi Fuster, cuando aún era párroco de Sant Celoni |
Por todo ello, cobra ahora especial fuerza lo que me escribió el P. Ignasi Fuster cuando leyó –uno de los primeros- la respuesta vaticana a la consulta que hizo el Obispo de Tarrasa en 2011sobre los abortos y esterilizaciones en los hospitales de Granollers y San Celoni. Ahí va.
“Custodio, he leído con calma la carta y el “parecer” remitido al Sr. Obispo de Tarrasa.
Mis impresiones: hay una cosa clara y es que la situación insta a la actuación... y esto es bueno: se tiene que mirar de cambiar la situación del hospital. Después propone varias salidas... La dimisión del párroco o incluso el cambio de Estatutos... aunque prefiere no perder la presencia en el Patronato, sobre todo de cara a un futuro mejor, y para evitar males y hacer bien. Deja como varias posibilidades abiertas. Pero lo que está claro es que se tiene que actuar. Insiste en que si uno permanece en el Hospital no supone cooperación formal o material. Ciertamente.
Yo no estoy participando con el mal de forma “próxima”. Pero, según mi parecer, sí de forma “remota”, y tratándose de cuestiones tan graves y desde mi situación en el Hospital, “responsable”. Pienso que se tiene que considerar más explícitamente la gravedad moral de los hechos y la naturaleza de mi participación en el Hospital (soy miembro nato). ¿Cómo puedo estar delante de una institución que realiza estas prácticas contrarias a la moral de la Iglesia? Aunque no exista -por el solo hecho de ser vicepresidente- una cooperación con el mal, sí que no es propio estar ahí, pues supone una escandalosa, inadecuada y contradictoria presencia en connivencia con el mal. Me parece que estamos en otro registro moral: connivencia con el mal. Si tengo “representatividad” en una entidad, tengo “responsabilidad” en su actividad. ¿Qué sentido tiene en concreto mantenerse en el patronato esperando un futuro incierto en la época actual con el aborto como derecho? Ahora bien, según la carta, esta decisión definitiva ya corresponde al Ordinario del lugar. Por lo tanto, Custodio, veo alguna carencia (el problema no sería de cooperación sino de connivencia con el mal) en la respuesta, pero “apunta” en una línea de actuación y objeción de conciencia ante los hechos.”
Hasta aquí las palabras del P. Fuster, que continúan tan actuales como entonces.
Pues bien, el Ordinario del lugar –José Angel Saiz- ha decidido en unos términos más que dudosos cuatro años después. Ya no se puede alegar ignorancia y si no hay objeción de conciencia –y no hay ninguna-, la connivencia con el mal pasa indefectiblemente a convertirse ¡en colaboración! Y es que la sombra del mariscal Pétain –patrono del colaboracionismo- continúa siendo, tanto ayer como hoy, muy, pero que muy alargada.
Custodio Ballester Bielsa, pbro.
www.sacerdotesporlavida.es
La medicina se ha convertido en un negocio, quizás se debería pensar si la Iglesia debe estar en este negocio.
ResponderEliminarLas éticas teleologistas que rigen en los hospitales son una interpretación del término fin del acto. El criterio de eticidad lo toman de los efectos de las acciones. Sostienen que no hay acciones buenas ni malas. El sujeto autónomo es el que ha de evaluar el balance de estos efectos por cálculo de beneficios e inconvenientes. Si el balance es positivo, la acción es “correcta” (rightness) que no buena (good).
ResponderEliminarBeben del relativismo ambiental. El teleologismo se ha desarrollado a partir de la 2ª GM y encuentran un terreno abonado en el campo del matrimonio y la familia.
Anticonceptivo es bueno si las ventajas son mayores que los inconvenientes / Eutanasia se relaciona con estancia media hospitalaria / etc.
Para hacer frente a esta mentalidad que considera la vida humana desde la utilidad, olvidándose de su dignidad, nació la bioética.
La Evangelium Vitae 20 de San Juan Pablo II dice al final:
ResponderEliminar… Reivindicar el derecho al aborto, al infanticidio, a la eutanasia, y reconocerlo legalmente, significa atribuir a la libertad humana un significado perverso e inicuo: el de un poder absoluto sobre los demás y contra los demás. Pero ésta es la muerte de la verdadera libertad: « En verdad, en verdad os digo: todo el que comete pecado es un esclavo.
Reconocer también incluye, por necesidad lógica, el aplicar la muerte o congelación de los niños no nacidos, tanto por medios quirúrgicos o farmacológicos. La intención de Juan Pablo II es clara: no al reconocimiento legal del aborto, no al ejercicio del aborto.
En el número 57 establece la verdad divinamente revelada de la inmoralidad del aborto, cuya transgresión es herejía y lleva excomunión latae sententiae o automática:
... con la autoridad conferida por Cristo a Pedro y a sus Sucesores, en comunión con los Obispos de la Iglesia católica, confirmo que la eliminación directa y voluntaria de un ser humano inocente es siempre gravemente inmoral. Esta doctrina, fundamentada en aquella ley no escrita que cada hombre, a la luz de la razón, encuentra en el propio corazón, es corroborada por la Sagrada Escritura, transmitida por la Tradición de la Iglesia y enseñada por el Magisterio ordinario y universal.
El número 62 da el juicio más duro posible:
... Ninguna circunstancia, ninguna finalidad, ninguna ley del mundo podrá jamás hacer lícito un acto que es intrínsecamente ilícito, por ser contrario a la Ley de Dios, escrita en el corazón de cada hombre, reconocible por la misma razón, y proclamada por la Iglesia.
En el número 74 no admite la cooperación formal con el aborto:
... los principios generales sobre la cooperación en acciones moralmente malas. Los cristianos, como todos los hombres de buena voluntad, están llamados, por un grave deber de conciencia, a no prestar su colaboración formal a aquellas prácticas que, aun permitidas por la legislación civil, se oponen a la Ley de Dios. En efecto, desde el punto de vista moral, nunca es lícito cooperar formalmente en el mal [del aborto].
Mn. Custodio, gracias por denunciar en su artículo esa situación anómala.
ResponderEliminarYa sabemos que los avances científicos necesitan de un instrumental y aparatos muy eficaces, pero a la vez no están al alcance de todos los Hospitales y por eso se tuvieron que hacer los conciertos con las Administraciones, quedando la Iglesia no como propietaria sino como una "Administración" más.
Me pregunto: ¿Si los católicos apoyáramos más económicamente estas Instituciones, que no necesitáramos de conciertos, no podríamos disponer del personal adecuado?
Digo esto porque es muy bonito "echar piedras" a los demás, sin tener ninguna oportunidad o prácticamente nula a la hora de contratar el personal, que en los casos del aborto,con todos sus eufemismos y la eutanasia, cono los Jefes del Servicio correspondientes no estén a favor de la vida, la Iglesia desgraciadamente queda relegada para la administración de los Sacramentos a quien lo solicite y para que se pueda celebrar la Misa.
Eso por una parte, y por otra basta recordar la frase de Jesús que meditábamos en el Evangelio de ayer jueves: "Amarás a Dios sobre todas las cosas ... y al prójimo como a ti mismo" Este mandamiento del AMOR ya lo dice todo.
En el número 73, en síntesis, permite que un político católico vote una ley del aborto:
ResponderEliminar… Debe de haber un voto parlamentario que sea determinante para favorecer una ley MÁS RESTRICTIVA, es decir, dirigida a restringir el número de abortos autorizados, COMO ALTERNATIVA a otra ley más permisiva ya en vigor o en fase de votación. Si no se puede evitar o abrogar completamente una ley abortista, un parlamentario, cuya absoluta OPOSICIÓN personal al aborto sea clara y notoria a todos, puede lícitamente ofrecer su apoyo a propuestas encaminadas a LIMITAR los daños de esa ley y disminuir así los EFECTOS NEGATIVOS en el ámbito de la cultura y de la moralidad pública. En efecto, obrando de este modo no se presta una colaboración ilícita a una ley injusta; antes bien se realiza un intento LEGÍTIMO y OBLIGADO de LIMITAR sus aspectos inicuos.
Aquí pues, PARECE que se puede extender la doctrina sobre la aprobación de la ley al ámbito de la ejecución de la ley abortista, en el caso de un hospital católico que está realizando abortos de forma consolidada en el tiempo, que tiene un pasado abortista (no en los hospitales católicos creados ex novo desde el 2015).
Según San Juan Pablo II, en mi opinión, sí PODRÍA ser lícita la participación de los católicos en el aborto SÓLO SI LIMITAN EL ABORTO, si se ponen todos los obstáculos lícitos para que de forma real y efectiva se rebaje el número de abortos y de solicitudes de aborto en un hospital católico que, de forma desastrosa, se ha permitido que se practiquen abortos durante años.
Posiblemente se podría establecer un protocolo estricto en todos los ámbitos del aborto: información previa de tipo moral y médica, comprobación del estado de salud de la madre y del feto, ofrecimiento de alternativas como la adopción, poner en contacto a la madre con una Red Madre para que viera los ejemplos de defensa de la vida, dar visita a la asistenta social por si hay problemas socioeconómicos, investigar si hay problemas psicológicos o psiquiátricos. Esto debería de reflejarse en las estadísticas hospitalarias de forma efectiva: el aborto baja realmente.
Y la noticia del P. Ballester contiene unos presuntos hechos inmorales: hacer un estatuto que no limita el aborto, elegir a un representante que no limita el aborto, tener personal médico y técnico que no limitan el aborto.
Toda la noticia daría lugar a una posible inquietante conclusión: en este caso de los hospitales católicos con antecedentes históricos de abortos continuados en el tiempo, al no emprender una actividad tendente a LIMITAR el aborto, estarían ya excomulgados latae sententiae o automáticamente, tanto los obispos, los superiores religiosos, los sacerdotes y los laicos católicos gestores, médicos, enfermeros, farmacéuticos, técnicos y administrativos que participen en el aborto.
En resumen de lo que nos dice San Juan Pablo II, entiendo que si a un parlamentario católico tiene que votar una Ley que provoque menos abortos que la existente, debe hacerlo. De esa forma se producirán menos muertes inocentes e indefensas.
EliminarAhora bien, si la nueva Ley anulara por completo la legalización del aborto debería votar ésta, o sea siempre buscando el mal menor o lo mejor.
Fuster y Peña sí que son dos "personajillos." Me consta que con este párroco mucha gente de Sant Celoni ha dejado de ir a misa en la parroquia y se van a otros lugares. Y es que una cosa es ser carca y otra serlo elevado a la enésima potencia!
ResponderEliminarEl criterio de la fidelidad de un cura no es la cantidad de gente que va a su misa, sino que lo crucifiquen. Y al P. Peña se las han hecho pasar canutas tipos como tú. A ti te da lo mismo lo que suceda en el hospital de San Celoni, mientras te diga misa un cura enrollado. Da lo mismo que sea católico o no.
Eliminar6,57
EliminarSu respuesta tipo “mantra” no corresponde a un sujeto racional, más bien parecieran corresponder a un sujeto emotivista, que razona a partir de su emoción. ¡Argumente!
Perdonen ustedes que entre "a saco" en esta cuestión.Pero es que últimamente, hace algunos años, se ve que a los católicos y ahora a los curas, nos gusta jugar al pim, pam,pum con la Jerarquía y con otros hermanos en la fe.
EliminarAl sacerdote que ha escrito este artículo lo admiro y rezo por él todos los días. Padre Custodio, de verdad, cuente con mis oraciones para que el Señor le de fortaleza en la misión que le ha encomendado.
Pero... dejemos a los Obispos tranquilos en la prensa. Hay Obispos muy malos, hasta hay Cardenales de la Iglesia que se les podría poner cuernos y rabo, pero...
No sería mucho mas efectivo seguir el ejemplo de tantos santos que ante Obispos de Iglesia, que luchan para evangelizar fieles a Cristo, nos dediquemos a rezar mas y mas por ellos??
A lo mejor, nosotros ganábamos en amor de Dios y ellos, si nuestra oración es sincera y con plena confianza en el Señor, recibirían , si cabe, con mejor espíritu nuestras críticas o recomendaciones, incluso las de Dios mismo al abrirles la mente con nuestros rezos.
¡¡Que poco creemos en el poder de la oración!! y así nos va..
No juzguemos tan gratuitamente, ni al Obispo de Terrassa, ni a los sacerdotes que están haciendo su labor.
Cabe preguntarse lo de Jesús: "quien esté libre de pecado que tire la primera piedra"... les aseguro que yo no la puedo tirar.
Gracias por su tiempo y recemos, recemos y recemos por el Papa, nuestros Obispos y por los sacerdotes... lo que necesitan es oración, la pide el Papa continuamente para él.
Que Dios les bendiga a todos.
Ah, una última cosa, en mi familia cuando tenemos un problema, que los hay, no los hacemos públicos... la basura la guardamos en una bolsa y la tiramos al contenedor, no la escampamos por Internet u otros medios. Esto como mínimo es de educación, ya dejo la virtud de la prudencia y la caridad al gusto de cada uno.
Unidos en los Sagrados Corazones de Jesús y María.
No hay que esperar a que Dios haga el milagro de lo que tú mismo puedes prevenir y corregir. Es nuestra tarea ordenar el orden temporal. Lea los documentos del CVII.
EliminarY hay que rezar y mucho y mucho para que podamos hacerlo, pero desde la acción no desde la pasividad.
Se juzga desde lo objetivo. Y con ese fin la Iglesia tiene la doctrina acumulada desde hace 2000 años. Lea las discusiones entre Pedro y Pablo.
El contemplar de forma pasiva lo objetivamente inmoral, y creer que todo vendrá dado por Dios, es espiritualismo, es quietismo. El espiritualismo y el quietismo no son católicos.
"...se ve que a los católicos y ahora a los curas, nos gusta jugar al pim, pam,pum con la Jerarquía y con otros hermanos en la fe..."
Eliminar1. Ello indica que la situación se degrada cada vez más con el tiempo, al haber una omisión disciplinar episcopal masiva y continuada en el tiempo, carente de lógica y explicación alguna
2. Cada vez es más indignante el caso de Sor Forcades: inició su campaña antivacunas gripe A el 2009, y desde entonces, a cargo del presupuesto del Monasterio femenino de San Benito de Montserrat, ha realizado todo tipo de viajes a la Venezuela chavista bolivariana, más todas las estancias y estudios realizados en Europa y América.
Ahora, en plena precampaña política de la Generalidad, prevista para las elecciones de 27 de septiembre, se descoca, cuelga el hábito, se presentará como candidata a la Presidencia de la Generalidad, implantará un programa de diseño satánico de la sociedad que los obispos conocen perfectamente y no han hecho nada, y encima tiene la barra de decir que pedirá un indulto de exclaustración por los años que hagan falta, para que al final, enriquecida por la experiencia, entrará en el monasterio, recogerá la cofia y el hábito, y entrará en su habitación, todo ello porque sí, así como así.
El católico no puede ser raquítico ni atrófico. Tiene que ordenar el orden temporal, particularmente los laicos, según el CVII. Se hace desde la experiencia y ayudados por la gracia. No hay que esperar a que Dios haga el milagro de lo que tú mismo puedes prevenir y corregir. Es nuestra tarea. Hay que infiltrarse en estas estructuras e intentar cambiarlas desde dentro en lo posible. Si no hay ninguna posibilidad de acción en contra desde dentro, el escándalo está servido.
ResponderEliminarYa al inicio de su pontificado, Francisco dijo “una Iglesia que no sale, a la corta o a la larga, se enferma en la atmósfera viciada de su encierro. Es verdad también que a una Iglesia que sale le puede pasar lo que a cualquier persona que sale a la calle: tener un accidente. Ante esta alternativa, les quiero decir francamente que prefiero mil veces una Iglesia accidentada que una Iglesia enferma”.
el elemento de las 6,57, no me atrevo a llamarle Señor; tengo la impresión por sus calificativos de que no pisa una Iglesia muy a menudo, sus expresiones son muy de "calle" de asistir a entierros o a bautizos o a primeras comuniones meramente expositivas; su practica piadosa es la de circular por los bares y constatar opiniones de los "piadosos" de siempre. Si leyera o tan solo ojeara de vez e cuando algún párrafo del Evangelio se informaria un poquito de las verdades evangélicas. Pero vamos con un individuo así; es mucho pedir.
ResponderEliminarSoy el de las 6:57. Voy a misa cada día anónimo de las 11:38.
EliminarVisito a los enfermos y creo que usted lo está y mucho. Pero me temo que lo suyo no tiene remedio!
Mira, con esa manía beata de tapar las vergüenzas de los obispos y decir que la basura es mejor limpiarla en casa, el escándalo ha sido mayúsculo: abortos en hospitales católicos, pederastia, escándalos económicos, las fornicaciones de la Casa de Santiago, etc. Si no te gusta germinans, no lo leas, pero no sermonees a los que aman a la Iglesia tanto o más que tú. La crítica no es para destruir la autoridad, sino para que ésta mejore. Y Sáiz Meneses peor no ha podido hacerlo...
EliminarAl Anónimo 5 de junio de 2015, 6:57
EliminarHa dado una conclusión sin argumentación (cura carca superlativo).
Sería interesante dar más detalles, pues sería importante conocer los hechos más relevantes para poder comprender esta suya inducción.
Nosotros desconocemos a estos curas, por lo que su conclusión es chocante, al carecer por completo de elementos de la vida cotidiana de estos curas.
Junto con los casos de sor Forcades y sor Caram, éste es otro caso más de desprestigio y desacreditación de las jerarquías de la Conferencia Episcopal Tarraconense.
ResponderEliminarEstán manteniendo unas condiciones permanentes de incompetencia e incapacidad alarmantes en la resolución efectiva y real de los graves problemas eclesiales.
El aborto es un homicidio gravísimo, está con los cuatro grandes graves pecados que claman al cielo: no dar el salario al trabajador, oprimir al pobre, el aborto (asesinato de un inocente) y la homosexualidad (acto contra natura).
El Vaticano y Francisco están demostrando una alarmante falta de resolutividad de problemas muy graves, verdaderos pecados sociales y eclesiales, que duran ya muchos años.
Sólo y sólo si es un mal mediático, como puede ser la corrupción de la banca vaticana o la pederastia sacerdotal, en Roma actúan a) rápido, y b) con tolerancia cero (una injusticia, pues es un trato inequitativo con otros casos graves).
Pero si es un mal gravísimo pero sin repercusión mediática, entonces Roma y esta supuesta renovada Curia actúan como las denostadas anteriores Curias: no hay solución.
Parece posible un pronto colapso vaticano:
- no tienen claro el papel de las mujeres religiosas contemplativas
- vida, familia y matrimonio
- liturgia
- disciplina rápida
Más allá de grandes gestos, discursos y documentos, no hay efectividad en el Vaticano
PAPA Y OBISPOS A LA DERIVA del 5 de junio de 2015, 12:08
EliminarUsted dice: "El aborto es un homicidio gravísimo, está con los cuatro grandes graves pecados que claman al cielo: no dar el salario al trabajador, oprimir al pobre, el aborto (asesinato de un inocente) y la homosexualidad (acto contra natura)"
Esta clasificación supongo que sera suya, porque el Decálogo empieza con los tres primeros mandamientos dedicados a Dios. Creo que el pecado más grave es haber perdido la conciencia de que Dios debe ocupar el primer lugar en todos actos de nuestra vida. (Primer mandamiento). Todo lo demás ya viene por añadidura.
MARPN
ResponderEliminarUna gran parte de la Iglesia católica está llegando al máximo de lo permisible. Ha de llegar una ruptura, espero y ruego a Dios que pacífica, porque hay aspectos que no se pueden consentir. La mayoría de los sacedotes y religios@s inspirados-salvadores, van a su aire sin tener en cuenta para nada lo que dicta el Santo Padre desde siempre. Están apartando a los feligreses de la Iglesia de Cristo, con su manera de hacer, pensar y actuar. Se transforma la Santa Misa en una fiesta que tiene más de pagana que de cristiana. Cantos acompañados de instrumentos muy ruidosos, bailes, palmas, etc. cuando voy a Misa, quiero y necesito estar en silencio para recogerme y sentir en mi interior lo que estoy celebrando. Otras personas si no hay jolgorio, movimiento, parece que no sienten nada. Con todo mi respeto, que prueben de encontrase con Nuestro Padre en el recogimiento del silencio. Ya verán.
Vd. anónimo de las 6:57 y 11:38, sin querer ofenderle ni faltarle el respeto, creo que al decir" Fuster y Peña son dos personajillos" refiriéndose a dos sacerdotes, que para mí son de los que quedan pocos por su entrega, servicio y de cómo celebran los sacramentos, está faltando a la caridad cristiana. Vd y cualquiera es libre de asistir a la Santa Misa allá donde se encuentre mas agusto, aunque siempre es recomendable hacerlo en la parroquia que a uno le corresponde. Siempre he defendido que el cristiano ha de buscar la comunidad en donde se llena de la Gracia de Dios.
Lo de estos hospitales, regentados en parte por la IC, no tiene perdón. Al igual que
lo de las famosas religiosas, los obispos que son los responsables del cuidado y orientación de sun feligreses junto con los sacerdotes, tendrán que dar cuenta a Nuestro Padre Celestial cuando los llame a su presencia. Esperemos en la Misericordia de Dios y se arrepientan cambiando su actitud pasiva y tolerante.
"Una gran parte de la Iglesia católica está llegando al máximo de lo permisible. Ha de llegar una ruptura, espero y ruego a Dios que pacífica, porque hay aspectos que no se pueden consentir."
EliminarTiene razón, por desgracia, y mucho me temo que entre el 2016 y el 2017 se dé la gran apostasía de que habla 2 Tesalonicenses 2.
La abominación de la desolación es la abolición de los sacramentos, y en especial, de la eucaristía, en especial, en la parte del Canon, y en el punto preciso de la consagración, es decir, cambiando las palabras de la misma.
Pero la gran apostasía y la abominación de la desolación no son sólo los sacramentos. Es todo, y cuando venga, vendrá tal como el dragón con sus múltiples cabezas. El cuerpo de dragón es la apostasía. Las múltiples cabezas son la suspensión de los sacramentos, los cambios litúrgicos, la eliminación de devociones, la reforma de los mandamientos y los dogmas, la eclesiología, la demonología, la angeología...
Conozco al SACERDOTE DE CRISTO J.FUSTER y también conozco al obispillo de Terrassa S.Meneses, que PROHÍBE tener directores espirituales a sacerdotes con espiritualidad del OPUS DEI o cercana a esta.
ResponderEliminarLuego no me extrañan sus componendas para seguir con el chollo asesino del hospital de Sant Celoni. No olvidemos al BEATO PAULO VI, el humo de SATANAS esta DENTRO de la Iglesia, la respuesta a la consulta es una prueba de ello.
Gracias a DIOS, UNO y TRINO, que cuida a su Iglesia y que las fuerzas del MAL no prevalecerán en ella.
Después de leer y meditar el articulo del P. Custudio, solo cabe de decir que el actual obispo de Terrassa, est´s excomulgado "latae sententiae".
ResponderEliminarNo olvidemos al gran obispo Monseñor Guerra Campos, y sus claras ideas de qién estaba excomulgado en relación al abvorto. No se cortó un pelo, y según el el Jefe del Estado de el reino estaba excomulgado.
Los obispo lameculos corrieron a llevarle la contraria.... no vaya as ser que se enfadara y les quistase la bicoca económica que percibían.
NO EXISTE EL DERECHO A LA MUERTE, EXISTE EL DERECHO A LA VIDA.
P.D..: Gracias a mis padres, actualmente nonagenarios, por haberme dado la vida a mi y a mis 10 hermanos, sin vuestro AMOR, no habríamos nacidos.
Anónimo,
ResponderEliminarNo solo el de Terrassa....... por desgracia, en Barcelona tenemos la cruz en Sant Pau.
Sres. Anónimos del 6 de junio de 15,16 y de hoy 12.26 h.
Eliminar¿Que fácil es juzgar a los demás y si son Autoridades, mejor? ¿No les parece?
Si hubiéramos hecho caso al que fue gran Obispo de Cuenca desde el 13 de abril de 1973 al 26 de julio de 1996. Fue un de los 59 procuradores que el 18 de noviembre de 1976 en las Cortes Españolas votaron en contra de la Ley para la Reforma Política que derogaba los Principios Fundamentales del Movimiento, posiblemente hoy no estaríamos hablando ni de progresismo eclesial, etc. etc.
Pero nos han vendido gato por liebre y poco a poco nos lo hemos ido tragando.
En principio daba la sensación de la restauración de la Monarquía y la democracia, serían la panacea. "Nos libramos del GRAN DICTADOR" como si todos los males fueran culpa suya. Los bienes por supuesto no cuentan.
Se empezó a votar una Constitución y con el voto favorable de muchos españoles que hicieron que fuese aprobada, en la que Dios, ya empezaba a volar por los aires.
Si Dios no ocupa el primer lugar de la Sociedad, todo es posible. A partir de ahí, ya fueron viniendo toda una serie de leyes en que Dios, quedaba definitivamente arrinconado, y nosotros cada cuatro años dando el voto al que facilidad de convencer al electorado. ¿Cuánto pecado de omisión ha habido por parte de los católicos para llegar a una situación tan desastrosa como la actual?
Que Dios nos perdone y tenga misericordia de nosotros!!!
No voy a marcar la X a favor de la Iglesia Católica en la declaración de la Renta de este año, ni en todas las que hago (mis padres, mi cuñada, mis amigos...). Con mi dinero no se financian hospitales "católicos" abortistas, ni obispos sin personalidad que mantienen gentecilla en el consejo de administración de esos hospitales. Mi dinero, irá directamente a la parroquia donde asisto, donde hay un cura con sotana que se sienta cada día en el confesionario.
ResponderEliminarLuis Bcn
Si pudiéramos hacer objeción de conciencia, yo haría lo mismo, pero como eso no es posible. Si no marca la "X" el dinero se lo queda el Estado y la Iglesia tiene muchas Instituciones que se benefician de la "X" a la Iglesia Católica, es para el pago de los Sacerdotes diocesanos, los Seminarios, etc. y de la "X" para fines sociales, entre ellos Cáritas, Manos Unidas, Las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, etc.
EliminarComo puede ver no tiene nada que ver con los donativos que usted pueda dar a su Parroquia y usted no tendrá ni un céntimo de descuento por ello
Pues que el dinero se lo quede el Estado o quien quiera. Pero, voluntariamente, no voy a elegir --marcando una X-- a una Iglesia que practica abortos en sus hospitales; obispos mediocres, cobardes y sin personalidad; escuelas "católicas" que son un nido de apostasía y podredumbre moral; medios de comunicación como 13TV o MegastarFM que es un antro asqueroso... en definitiva: una Iglesia que ha perdido el norte, que reniega de Cristo y sirve sólo a los hombres... No con mi dinero.
EliminarLuis BCN
Apreciado Trenchs,
ResponderEliminarCon todo el respeto. Ud. quiere ser la sazón de todos los platos.
Comparto con Luis Bcn, lo de no marcar la X. La verdad, nunca lo he hecho.
Mi padre era comisario de policía y mi tío cura (con cargos en el Obispado), en paz descansen los dos. Se preguntará porque le cuento mi vida.
Mi padre estaba harto de las llamadas de su hermano para que fuera "al rescate" de los curas que montaban pollos en los burdeles del chino.
Mi padre, un día se hartó e hizo pasar a uno una noche en los calabozos. Se armó la de Dios es Cristo.
Monseñor M...., llamó al Gobernador y mi padre acabó expidiendo DNI en la Plaza de España. Tragó quina, mi padre. Mi tío, aun se cebaba con el llamandolo "tonto", el callaba.
Años después mi tio, el cura ejemplar, preñó a una feligresa y colgó los hábitos, el "tonto" de mi padre socorrió a su hermano económicamente. Nunca ,lo entendí. Me enteré que el Obispado había dejado a mi tío con "el culo al aire"
No olvidaré jamás las lagrimas de mi padre el día que mi hermano pequeño dijo en casa que entraba en el Seminario.
Soy católico, apostolico, romano y prácticamente...... pero no "TONTO", que trabajen los obispos y los curas.
G.G., no es resentimiernto, es la verdad que tuve que vivir en casa.