El Vaticano, pendiente de nombrar a cuatro obispos en Catalunya

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Este es el titular que podíamos leer este domingo en La Vanguardia, en un escrito que no es propio, sino de la Agencia EFE, que no es precisamente la mejor fuente de información religiosa, además de lo tendenciosa que suele ser, siempre dando la voz a los sectores progresistas eclesiales sin contrastar con otras opiniones, que representan a la Iglesia más dinámica, joven y con perspectivas de futuro, porque el progresismo se muere, y hay que ser muy imparcial para darle siempre la palabra a quienes cada vez son menos y más ancianos.
 
De hecho, en esta ocasión ni siquiera citan el grupo o grupos progresistas de turno, porque la mayoría de ellos están disueltos o en vías de extinción. Se limitan a decir: "Fuentes de un colectivo de feligreses progresistas consultados", vaya que se habrán dirigido a Josep Torrents o a cualquiera de los viejos líderes de aquellos grupúsculos y ellos mismos les habrán dicho que mejor no citar ni grupo ni nombre. Simplemente lanzar la soflama habitual de que no se consulta al laicado, el "secretismo y la opacidad" de los nombramientos y bla, bla, bla...

Pero volviendo al escrito, es evidente que el titular es objetivo, porque hay cuatro obispos pendientes de nombramiento, hemos empezado un año nuevo, y todo sigue igual, está costando una barbaridad tirar adelante estos nombramientos, y eso que el gran muñidor de todas estas mitras no es otro que el cardenal Omella, con vía teóricamente directa en Roma. El problema no recae en el arzobispo barcelonés, sino en la dificultad para encontrar candidatos. Porque se les ha propuesto a unos cuantos, pero la respuesta ha sido hasta ahora negativa, de manera especial en la sucesión de Girona y en la del obispo auxiliar que sustituya al fallecido Antoni Vadell, y que tendría que convivir con el mismo Don Juan José y sus dos actuales auxiliares Gordo y Vilanova.

Dice el artículo que estos son los nombramientos más urgentes, y estoy de acuerdo con ello, el de Girona porque ya hace demasiado tiempo que está vacante desde el fallecimiento de Don Francesc Pardo y no es una diócesis para tanto tiempo de interinidad en la persona del sacerdote Lluís Suñer, que también tendría que estar jubilado y no es ciertamente el candidato para levantar una diócesis que está en situación crítica y necesita de alguien con mucho carácter, personalidad, y carisma para una misión que se antoja muy complicada. La del obispo auxiliar de Barcelona, también es urgente y el mismo Omella no lo oculta, sus múltiples ocupaciones en Madrid y Roma hacen necesario tener ese tercer colaborador episcopal.
 

Pero en ambos casos está costando encontrar a los candidatos primero que quieran aceptar, y segundo que sean del agrado del cardenal y del señor del gran poder, sin olvidarnos de que el Nuncio algo tiene que decir, aunque intenten ningunearlo por todos los medios, en una actitud vergonzosa y bien poco eclesial.

Los otros casos son los de Tortosa y Sant Feliu de Llobregat. El primero por haber sido nombrado su anterior pastor, Enrique Benavent, como arzobispo de Valencia y el segundo, Agustín Cortés, porque ya ha presentado su renuncia y su salud no es precisamente óptima y sería conveniente que no se repitiera lo que ya pasó con Pardo en Girona. Pero es cierto que Tortosa es una diócesis que puede aguantar un poco más con un Administrador Diocesano como es el caso de José Luis Arín, y al de Sant Feliu también parece que le pueden dejar un poco más en el cargo a pesar de su voluntad de que fuera aceptada su renuncia cuanto antes.

Y todo esto sin olvidarnos que este año también le llega la jubilación al obispo de Lleida, Salvador Giménez, y que para la Seu d'Urgell hay que empezar a pensar en la sucesión del copríncipe Vives, con un obispo coadjutor con derecho a sucesión. Ahí sí que podrían entrar en juego algunos de los auxiliares de Barcelona, ya que a Omella a un año vista de su final de etapa al frente de la Conferencia Episcopal Española, le gustaría dejar bien "colocados" a quienes han sido sus principales colaboradores.

En cuanto a los candidatos que presenta la agencia EFE, son nombres bastante "quemados", rechazados en otras ternas y quinielas, como Josep MariaTurull, Santiago Bueno, Armand Puig, Norbert Miracle o Agustí Borrell, no parecen los más bien posicionados, pero teniendo en cuenta que tantos buenos candidatos han dicho que no se van a quemar en la difícil misión que se les encomienda, no hay que descartar que se acabe apostando por un candidato que no estaba en la primera lista, pero que se muere de ganas por ser obispo y no va a rechazar una propuesta para él tan apetecible.

Francesco Della Rovere

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20 comentarios

  1. No creo que Omella necesite otro obispo auxiliar para un par de años que le quedan en activo. Como presidente de la CEE le queda poco más de un año. Debería ser su sucesor el que lo solicitara.

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    1. En este caso concreto, estoy por darle la razón. Pero cada día que Girona sigue vacante es un día menos para convertirse en tierra de misión, por desgracia.

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  2. - Parece que en realidad son casi todos los obispos d Cataluña los que han de ser renovados s corto plazo, en 1-2 años...

    2. Otra vez sin sinodalidad en la elección de los obispos, tal como se hacía en la Iglesia del imperio tardío y la temprana edad media, cuando se elegían o bien se consultaba al pleno Pueblo de Dios: diáconos, presbíteros, obispos circundantes, religiosos, laicos santos y destacados y el pueblo laical en general, donde se realizaba una puesta de información transparente, deliberación, debate y votación, tanto de la gestión del obispo anterior como del perfil que debían de reunir los candidatos. En esta supuesta primavera bergogliana todavía sigue el sistema de elección de la monarquía absoluta, y encima aún a pesar de la existencia de un sínodo de la sinodalidad...

    3. A destacar que Bergoglio se encuentra ya en su fase terminal de pontificado un período de pre-emeritaje. El nuevo Papa que inmediatamente vendrá no sólo deberá de solucionar el cisma apostatico de la Iglesia alemana y circundantes del habla germánica, sino que además deberá de afrontar problemas de urgente y necesaria solución inmediata:

    - más de cincuenta órdenes y congregaciones medievales de antiguo abolengo están en tal estado de decadencia que desaparecerán extinguidas en pocos lustros; esto implica que hay que intervenir total y absolutamente los cuadros dirigentes de estas órdenes decadentes, porque no se pueden dejar perder congregaciones que tienen entre 1500 y 500 años de historia, con lo cual habrá que echar a todos los modernistas y progresistas

    - la misma situación acaece en muchísimas diócesis europeas, como es el caso de Gerona donde dentro de pocos años va a desaparecer la íntegra totalidad del clero diocesano y religioso. Por lo tanto el Papa que vendrá no va a hacerse responsable de la desaparición de antiquísimas diócesis y órdenes religiosas por culpa de su omisión en el deber de defender la fe católica, porque a diferencia de Bergoglio con su heretica Amoris laetitia, ahora los cardenales no van a dejar pasar ni una al nuevo Papa, lo que implica que de nuevo va a tener que expulsar a mucho clero progresista y modernista.


    El próximo nuevo Papa va a aplicar la justicia rigurosa y exigente del amor a la verdad y a la fe y del odio a la confusión y al escándalo, derivada de la ley suprema de la Iglesia fundada en la salvación de las almas, y por lo tanto va a venir una etapa más parecida a Juan Pablo II y Benedicto XVI pero con muchísimo más rigor, debido a la situación de perentoria necesidad derivada del instinto de conservación de la misma existencia de la Iglesia: el cachondeo contra la fe, la moral, la liturgia y la eclesiología que hemos vivido desde 1965 con el Concilio Vaticano II ya se va a acabar... Los vientos van a girar súbita y fuertemente...

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  3. Ha aparecido el libro de Ganswein "Nada más que la verdad". Un apartado interesante:

    ... las encíclicas en las que Ratzinger colaboró de manera particular y que le quedaron más cerca del corazón son ciertamente las tres doctrinales:

    - Veritatis splendor (1993)
    - Evangelium vitae (1995)
    - Fides et ratio (1998)

    En todo caso, el prefecto estaba convencido de que todo documento debía ser contextualizado en el momento de su promulgación, ya que el primer fin era dar respuesta a un problema de un momento concreto en la Iglesia, para evitar el riesgo de reducirlo a un mero ejercicio teórico.

    La indicación de Juan Pablo II respecto a la Veritatis splendor fue abordar la crisis interna de la teología moral en la Iglesia, reformulando su perspectiva positiva desde el centro de la fe más que desde una lista de prohibiciones, pero también ampliando la reflexión al debate ético de que se trataba. ya era una cuestión de vida o muerte para la humanidad en ese momento.

    El cardenal explicó, por tanto, que la imitación de Cristo y el principio del amor habían sido identificados como pautas para organizar los diversos elementos de la doctrina moral, contrastando esa racionalidad positivista incapaz de reconocer el bien como tal.

    La audaz afirmación de un teólogo de que "lo bueno siempre es mejor que..." dio a Ratzinger la clave para subrayar que si el criterio básico pasa a ser el cálculo de las consecuencias y si la moralidad se funda en lo que parece más positivo, teniendo en cuenta las consecuencias previsibles, lo moral se disuelve, ya que el bien como tal no existe, por lo que el cristianismo entendido como "camino" sería un fracaso.

    De acuerdo con el Papa Wojtyla, como explicó el propio prefecto, en ese momento «se dio legitimidad con gran decisión a la perspectiva metafísica, que es sólo una consecuencia de la fe en la creación. Una vez más, partiendo de la fe en la creación, logra conectar y fundir antropocentrismo y teocentrismo:

    “La razón encuentra su verdad y su autoridad en la ley eterna, que no es otra que la misma sabiduría divina. […] En efecto, la ley natural […] no es otra cosa que la luz de la inteligencia infundida en nosotros por Dios” (VS 40).

    Una perla de la encíclica, significativa tanto filosófica como teológicamente, es el gran pasaje sobre el martirio. Si no queda nada por lo que morir, la vida también se vuelve vacía.

    Sólo si existe el bien absoluto, por el que vale la pena morir, y el mal eterno que nunca se convierte en bien, Ratzinger también señaló estos aspectos como fundamentales en la Evangelium vitae, expresión del compromiso apasionado de Juan Pablo II por el respeto absoluto a la dignidad de la vida humana.

    El prefecto explicó:

    - «La vida humana, cuando es tratada como una mera realidad biológica, se convierte en objeto del cálculo de las consecuencias. Pero el Papa, con la fe de la Iglesia, ve la imagen de Dios en el hombre, en cada hombre, pequeño o grande, débil o fuerte, útil o aparentemente inútil. Cristo, el mismo Hijo de Dios hecho hombre, murió por todos los hombres. Esto da a cada hombre un valor infinito, una dignidad absolutamente intocable".

    Para el cardenal también era importante dejar claro que después de todas las crueles experiencias de abuso del hombre, aunque las motivaciones puedan parecer moralmente elevadas, esas palabras eran y son necesarias.

    Es evidente que la fe es la defensa de la humanidad.

    En la situación de ignorancia metafísica en que nos encontramos, y que al mismo tiempo conduce a la atrofia moral, la fe se muestra como lo humano que salva.

    El Pontífice, portavoz de la fe, defiende al hombre de una aparente moralidad que amenaza con aplastarlo.

    ...

    Veritatis splendor define los actos morales intrinsece malum per se semper et pro semper in omnibus locis, como dice la doctrina, son el aborto, la eutanasia, la eugenesia el adulterio, el incesto, la pederastia, el genocidio, la homosexualidad, la transexualidad...

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  4. El Vaticano pendiente de nombrar a 4 "inspectores" eclesiales para Cataluña, queda claro. Se ha vulgarizado tanto el oficio de obispo que se le ha perdido su más intrínseco principio. "Obispo" hoy suena más bien a Mitra, Trono y Diócesis que no a Vigilante Curial (de los curas). Todos los curas son pastores por excelencia, y llamar "pastor" al obispo de turno es una ordinariedad. Solo ya por no caer en ordinariedades escriturísticas ya vale la pena nombrar al obispo "inspector".

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    1. Totalmente de acuerdo con el Sr. Garrell.

      Obispo, traducido del griego antiguo, significa el qué mira por arriba, sinónimo de inspector.

      Se confunde con pastor por llevar el BACULO.

      Un diez por Garrell!!!

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  5. Quién verdaderamente es el muñidor de Obispos para Catalunya es Iceta.
    El político,claro.

    Sin su consentimiento no se nombrará ninguno.

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  6. La unica esperanza para Gerona es traer a un obispo del otro lado de los Pirineos. En Occitania hay obispos buenos y trabajadores, que traerian savia nueva, monjes, Communaute Saint Martin, etc. Ademas serviria como un nuevo comienzo, misionero, fresco y apostolico, sin politiqueo. Alguien puede decirselo al Nuncio por favor?

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  7. Por el bien De la Iglesia catalana espero de todo corazón que Josep María Turull, no llegue a ser obispo ni de Barcelona, ni de ninguna diócesis. No tiene lo necesario para ser un buen pastor, ni humanidad, menos aún espiritualidad.

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    1. Si acaba siéndolo de Girona, ya podemos dar esa diócesis por extinta en la práctica.

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  8. Hay problemas con estos nombramientos no por falta de candidatos, sinó por como deben ser.
    Omella - Arana van por un lado.
    El nuncio y parte de la Santa Sede por otro.
    Veremos si ganan unos o los otros en estos nombramientos.
    Es como la pugna entre progresistas (renovadores) y conservadores (que todo siga igual) en la curia vaticana.
    Estos últimos tendrían un plan para presionar al Papa Francisco para que deje el pontificado y sea emérito.
    Ahora sin Benedicto XVI sera según ellos creen más fácil.
    Veremos. Suerte que la Iglesia es humana y divina, sino entre unos y otros la destruirian.

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  9. Si viviera el pare Llimona sería un buen candidato, aunque podría probarse una OBISPA, la monja Lucía Caram por ejemplo

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  10. Muy bueno eso de traer Obispos de "la Catalunya Nord"!
    Se matarían todos los pájaros de un tiro: habría obispo, sería català y, por lo que se ve harían ponerse las pilas a todos, diocesanos y curia.

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  11. No estaría demás que el nuevo obispo de Gerona no sólo conociera la deprimente situación actual, en fase terminal, sino que se adentrara en la historia de la diócesis para ver cómo se logró salir de las crisis y remontar.

    Fijémonos en dos momentos históricos, la situación de la diócesis tras la desamortización y el estado en que quedó tras la guerra del 36-39. En el primer caso, coincidió la apatía general que un falta de formación de las clases populares que empezaban a entrar en la mecanización del trabajo con la introducción de las fábricas textiles en las cuencas fluviales. Los frailes exclaustrados por la desamortización pasaron en su mayoría al clero secular, pero hicieron algo más: fundaron instituciones para elevar el nivel de las niñas su educación al menos primaria. De ese modo mantuvieron una mínima tradición religiosa en el seno de las familias.

    La guerra arrasó templos y centros religiosos, además de su implacable persecución de seminaristas y sacerdotes, seculares y regulares. Cartañá, un obispo muy preparado, vio que para elevar aquel erial no había otra solución que declarar Gerona tierra de misión. Y toda la diócesis empezó a ser objeto de misiones populares, con tres días de intensa educación religiosa y sacramental. De manera complementaria se esforzó por crear un presbiterio intectualmente preparado y moralmente digno. Ese tirón religioso cayó con la llegada de Jubany.

    Hoy, el obispo que llegue tiene que partir también de cero. Y, a la manera de los misioneros de la Casa Misión de Bañolas, formar equipos o estructuras similares. Necesitará de todas la personas de buena voluntad. Pero tiene que perder la vergüenza y el miedo. Si Deus pro nobis, quis contra nos? se lee en el dintel de la iglesia quemada por los seguidores de Companys y que todavía perdura en un pueblecito de la Garrotxa entrañable.

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    1. Valderas, lo veo muy optimista para el futuro de Gerona.


      Ojalá fueran ciertas sus predicciones, pero tal como está el patio en la cúspide de la Iglesia, no veo solución a corto plazo.

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    2. Yo también quiero creerle. Pero me inclino más por la opinión del anónimo de las 22:20.
      Dios quiera que ambos nos equivoquemos.

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  12. Se agradecería saber porqué han secularizado al grandioso Sacerdote pro vida Frank Pavone, por orden directa del alto mando Vaticano, sin poder defenderse de nada.

    Muchas gracias.

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    1. https://www.vidanuevadigital.com/2022/12/19/el-vaticano-retira-la-condicion-sacerdotal-a-frank-pavone-apoyo-clave-de-trump-por-sus-discursos-incendiarios-en-las-redes-sociales/

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    2. Como dijo el Cardenal Muller, esta sanción es una sanción política, y las razones aducidas no se sostienen. Lo que significa que no tiene ningún fundamento jurídico, ya que la reducción al estado laical, solo se aplica en caso de herejía manifiesta o apostasía, cosa que no es el caso.
      Por lo visto, en Roma se pasan por el forro el Derecho Canónico. Por tanto, entiendo que es una sanción nula de pleno derecho.

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  13. Antes de Semana Santa, Turull será el nuevo Obispo de Girona.

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