Cuando uno está bien conservado y goza de buena presencia física suele preguntar a cualquier interlocutor: “¿Qué edad me echas?” Le divierte que el que pregunta le ponga menos años y que, tras recibir la revelación, conteste asombrado: “Nadie lo diría. Qué bien te conservas”. Cuando uno entra en la llamada tercera edad y su apariencia todavía no refleja ningún rasgo de decrepitud aún es mayor el pavoneo. A más años el presumir se acrecienta en ese grupo de privilegiados. Y privilegiadas. Que las señoras, tan recelosas algunas de confesar su edad, declaran con orgullo el año de su nacimiento, a medida que los lustros se acumulan, sin dejar rasgo que lo delate. Especialmente, si se comparan con algunas de su misma quinta.
En este grupo de afortunados se halla un sacerdote que acaba de cumplir 80 años y guarda un aspecto inmejorable. Y sin necesidad de tinte. Se trata de Mn. Rafael Méndez Hellín, párroco de Nuestra Señora de los Ángeles, que ha entrado en su octogésima con la vitalidad y energía de la que carecen algunos mucho más jóvenes. Porque no solo son los rasgos físicos los que rebajarían su verdadera edad, sino el dinamismo y el vigor que desprende toda su actividad pastoral; no en vano, nos hallamos ante un cura germinante que, por ejemplo, este año tiene más de cincuenta chicos inscritos en catequesis de primera comunión y más de veinte que se preparan para la confirmación. Registros difícilmente alcanzables en esta diócesis. Un sacerdote que suele tener su parroquia llena, que conoce a sus feligreses, que los saluda al final de cada celebración y ellos están orgullosos de él y comparten sus cuitas. Un sacerdote al que siguen muchos fieles que no corresponden a su demarcación parroquial por sus prédicas valientes, rectas y sinceras. Y un detalle muy importante: ni hace política en la iglesia ni discrimina por la lengua, hasta el punto de que más de una familia ha acudido a su templo desde el extrarradio por el hecho de impartir catequesis también en castellano.
Mn. Rafa fue una vocación adulta, tras el desempeño de una fecunda actividad en el ámbito de la educación. Se trata de una persona bien formada, un hombre culto y preparado. Catedrático de microeconomía por la Ramon Llull, fue director del Colegio jesuita San Ignacio de Sarriá así como director general del Institut Català de Noves Professions y, en su juventud, presidente del Movimiento Scout Católico. También fue el verdadero motor de los encuentros del grupo “Fe y Cultura” que el cardenal Carles promocionó en el colegio de las Teresianas de la calle Ganduxer. El propio don Ricardo fue quien le convenció de responder afirmativamente a la vocación sacerdotal y lo ordenó en el año 1994. Tras una primera etapa en Badalona, pasó en 2001 a regir su actual parroquia, donde sustituía a Mn. Rovira Belloso y a su antecesor Mn. Miquel Badosa Fransi, que todavía residió más de ocho años en las viviendas de la rectoría.
Oriolt
¿Fue director de un colegio jesuita siendo laico?
ResponderEliminarLo raro es que fuese un católico dirigiendo un colegio jesuita.
EliminarTengo el honor de conocerlo, es un verdadero sacerdote católico. ¡Felicidades por su ochenta aniversario Mn. Rafael! Muchas gracias por su gran labor pastoral, que el Señor le siga acompañando.
ResponderEliminar"...provocó la ira y la envidia del nacional-progresismo eclesial, que lo distinguió como su particular bicha a la que destinar su odio furibundo al cardenal Carles. Eso eran ataques y no los pellizcos de monja de Germinans. Suerte que era una época pre-digital y los burdos vilipendios no dejaron poso en la red como sucede en este tiempo virtual. El nacional-progresismo eclesial fue languideciendo, pero aún daba sus últimas coces, especialmente cuando nació este portal."
ResponderEliminar...
Los vilipendios contra Carles de los 1990-2004 (ay, 2004, casi llega a lo digital, GG nace el 2007) no habrían pasado por la crítica de la red de hoy en día, porque en aquella época pre-digital se hacían bulos, desprecios y afrentas propios de aquellos tiempos, es decir, de pixarrí, sí, en su mayor parte.
Los nacional-progresistas, en la época de Carles, le sacaban ignominias y oprobios como si salieran de un volcán en erupción, pero eran tan de patitas cortitas que se cazaban con las manos...
Cuando quizás lleguemos al 2030, con permiso de volcanes, virus, asteroides y políticos, y se lean los hasta ahora 4.800 artículos de Germinans, no van a entender eso del nacional-progresismo, porque ya no existirá, será irrelevante, fracasado, olvidado y enterrado.
Del nacional-progresismo catalán, tanto de obispos como curas y otros pelajes prelados y lacios laicos, se puede predicar estos refranes:
- No te acerques a un cabrón por delante, a un caballo por detrás y a un necio por todos lados
- El sordo escuchó cómo el mudo dijo que el ciego vio cómo un cojo corría más rápido que un galgo.
La nave de la Iglesia zozobra, pero no se hundirá: “fluctuat nec mergitur”, porque la guía el Espíritu Santo a pesar de nuestros impedimentos y estorbos.
La mención a Fe y Cultura y las reuniones en las Teresianas me ha traído a la memoria los extraordinarios ponentes que pasaron por las mismas, con las largas tertulias posteriores en torno a unos canapés preparados por las anfitrionas. Siempre presididas por el cardenal Carles y con mosén Méndez, discreto, en el fondo.
ResponderEliminarRecuerdo dos en particular: la conferencia de monseñor Eugenio Romero Pose, un obispo gallego, auxiliar de Rouco, y extraordinariamente preparado. Dictó una lección magistral sobre san Paciano. Una auténtica lección de teología política fundamentada en la Patrística en el mismo centro del más burdo de los retorcimientos de la doctrina de la Iglesia, ciertos profesores de acá, mitrados incluidos. Lo expuso con el énfasis de quien sabe que está en el cogollo de un secesionismo
antievangélico. Cuánto bien seguiría haciendo a la Iglesia aquel patrólogo venido de Madrid y de Santiago en estos momentos convulsos. No sé si mosén Méndez lo tiene presente. De mi mente no se han borrado las sentencias de san Paciano sobre la ciudadanía cristiana.
Otro momento interesante, por razones opuestas, fue la invitación cursada al Presidente del parlamento de la Ciudadela, Joan Rigol, al que luego otro arzobispo lo hizo presidente del patronato de la Sagrada Familia.
Parece que lo estoy viendo. Sabido es que Jacques Maritain tiene una interpretación personal de la ley natural tomista. Quiso el político apoyarse en el filósofo francés para su disertación, con tam escaso conocimiento y pésima fortuna que, en el momento del ruego de preguntas sentí auténtica pena por su ausencia de preparación, impostada con una palabrería mondain, que diría Ortega. Estaba presente el que dirigía la Sociedad de Médicos Cristianos, quien con la contención obligada le enseñó la verdadera doctrina de la Iglesia sobre el aborto y otras políticas impulsadas por la formación CiU, a la que el sujeto pertenecía. Porque fue Convergencia uno de los adalides del aborto en las Cortes Generales.
Ad multos annos, mosén. Gracias por el post, Oriolt.
Rigol era de Unió, el brazo clerical del pillet Pujol.
EliminarNunca fue de convergencia andorrana, Valderas.
Al P. Méndez lo he podido conocer y no es oro todo lo que reluce... tiene varias caras. Es un hombre de fe, sin duda no es un progresaurio, pero también tiene bastantes aires de grandeza y excesivo clericalismo. A una conocida mía que estaba esperando el octavo hijo en lugar de felicitarla le recriminó que cómo se le ocurría... 'que había que tener cabeza'... vamos, que bien por una parte, porque en comparación con otros pues estupendo, pero salidas de tono y limitaciones también unas cuantas.
ResponderEliminarHombre! Hay un Señor en Roma, que trató de coneja a una buena Católica, por tener familia numerosa.
ResponderEliminarGoyo
ResponderEliminarNo hay nadie perfecto, pero se puede conseguir la perfección actuando siempre con humildad y caridad cristiana.
La humildad es la herramienta que el cristiano ha de usar durante toda su vida. No conozco al P Méndez, pero le deseo muchos años más de vida al servicio de los feligreses.
Cuando desmantelen el monasterio del Valle de "Cuelgamuros" ( Valle de los Caídos ) , dicen que esta al caer, sugiero que los monjes vayan a Montserrat o si son secularizados como en 1836 con la ley liberal de Mendizábal los repartan en las distintas parroquias de Barcelona. Eso sería de gran provecho para la Iglesia catalana
ResponderEliminarLeyendo la historia, el gran mal causado por los liberales de la época, fue de un gran bien para la Iglesia catalana . Muchos religiosos exclaustrados fundaron numerosas congregaciones femeninas en Cataluña, y algunos de han estado canonizados o estan en proceso de ello.
Si hacemos caso del refranero diremos:
- No hay mal que por bien no venga
- Dios escribe recto con los renglones torcidos
No desesperemos hay tiempo para la esperanza . Cantemos con fe el : Rorate caeli desuper.. .Dios proveerá
Buenas tardes,
ResponderEliminarMn Rafael Méndez no es consiliario de Christifideles Laici.
Saludos!
Venía a decir eso mismo. Hace años que no es consiliario. En Germinans deberían cerciorarse de la información que dan, no es la primera vez en artículos recientes que meten la pata en cosas como estas.
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